«Marina Diamandis nunca lo ha ocultado. Quiere ser famosa, quiere tener éxito y quiere, en definitiva, hacer canciones pop con todas las consecuencias. Si bien los destellos dance de la anodina ‘Radioactive’ ya indicaban un acercamiento al mainstream actual, es en esta pegadiza -y de apropiadísima temática- ‘Primadonna’ donde Marina da en la diana y logra más claramente su objetivo.
Tan solo con el gancho de unas acertadas y sencillas líneas melódicas, su versátil voz -siempre llena de matices- y una producción tan machacona como resolutiva consigue construir un incontestable hit, simple y memorable. Que se preparen los monitores de spinning, los publicistas y hasta los Baseballs: ‘Primadonna’ es su particular ‘Hot ‘n Cold'». Carlos Úbeda.
«De todos es conocida la frustración que sufrió Marina Diamandis cuando su debut no obtuvo el éxito comercial que ella esperaba. Y, pese a que algo como un hit no siempre se puede calcular, en su caso parece que el trabajo, la fe y la ilusión podrían funcionar como fórmula. Porque si ‘Primadonna’ no triunfa en radios y pistas de todo el mundo no será porque no tiene suficientes condiciones para ello. La canción es un buen ejemplo de esa perseguida y no siempre atinada conjunción entre pop comercial y calidad musical. Si Marina no consigue cumplir su sueño de ser una verdadera pop-star con ‘Primadonna’, al menos puede descartar como uno de sus handicaps la composición. Y si vienen mal dadas, siempre podría ganarse la vida escribiendo para Katy Perry». Raúl Guillén.
«Espantosa bajada de pantalones en busca del éxito comercial que en lugar de resultar adictiva y divertida como un single de Rihanna, suena tan rocambolesca, ridícula y desesperada como Ke$ha o Britney Spears. Si triunfa, me alegraré por la autora de canciones con tanto gancho como ‘Mowgli’s Road’, pero en cuanto a composición, desde luego no se ha crecido como Kate Nash en ‘My Best Friend Is You‘». Sebas.
«Como diría Diva Fatale, Marina Diamandis “se viene con todo”. ‘Primadonna’ no es su mejor canción, pero están claras las intenciones de la cantante. Nombrar a Dr. Luke como productor del tema es nombrar al hombre responsable de los últimos éxitos de Britney o Katy Perry, que es precisamente a lo que suena este adelanto. La sensación final es la de una voz prodigiosa perdida en una producción del montón». ACM.
«Si para intentar ser algo hoy en el mundo del pop hay que hacer un Florence meets Katy Perry, que paren el carro ya, que me bajo, o que no lo paren, pero me tiro. Esto es un auténtico bodrio de canción, con un estribillo tan simple que las capacidades vocales de Marina quedan fuera de lugar. No creo que engañe ni a la adolescente unineuronal a la que va dirigida». iko.