Como si de un revulsivo se tratase, la adopción del catalán por parte de Pastora parece haberles devuelto la frescura, la originalidad y la sencillez que -en algún momento- muchos temimos que habían perdido. Desde su primer disco, los catalanes demostraban que, con muy poquito, podían hacer grandes temas. Pues bien, cabe destacar, aparte de la obvia noticia del cambio ¿definitivo? de idioma, que con esta vuelta a sus raíces, Dolo, Pauet y Caïm se han marcado un disco de lo más interesante. Borrón y cuenta nueva: nuevo idioma, nueva vida.

Muchos encontrarán muchísimas referencias a su primer álbum, del que hace hoy casi diez años (2003). ‘Una altra galàxia’ mezcla de nuevo canciones melódicas y electrónicas en un mismo espacio, sin que el conjunto se resienta en absoluto. Son doce temas (de los que ya conocíamos dos, ‘Planetes marins’ y ‘Dolços somnis’) que pasan en un suspiro y algunos de ellos incluso llegan a generar con el oyente una conexión infantil, casi primaria, que los convierte en clásicos instantáneos (como es el caso del corte que da título al álbum).

Pero también hay otros ejercicios interesantes, como esa canción a lo Manel (‘Quan la Mercè esta contenta’), esa balada tan bien resuelta que es ‘Cuand es faci fosc’ (con Gerard Quintana) o la onírica ‘Em vindras a buscar’, en la que es fácil reconocer la melodía del ‘Wonderful Life’ de Black.

Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Una àltra galaxia’, ‘Penso en tu’, ‘Caricies’
Te gustará si te gusta: el primer disco de Pastora.
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