Cuando Lady Gaga decidía adelantar su single ‘Applause’ debido a una filtración de parte de la canción, coincidiendo entonces en lanzamiento con ‘Roar‘ de Katy Perry, éramos muchos los que suponíamos que Gaga vendería mucho más por contar, aparentemente, con una base de fans mucho mayor y más fiel. Pero en absoluto. En ningún momento ‘Applause’ logró acercarse a ‘Roar’ en iTunes y como consecuencia, Katy Perry ha ganado la batalla en el país más importante por ser en el que más copias se venden, Estados Unidos.

Katy Perry ha vendido 557.000 copias de ‘Roar’ en una semana en este país, una de las más altas de la historia digital para un single, y duplicando ampliamente lo que ha vendido ‘Applause’ de Lady Gaga, 218.000 copias. Este dato logrado en seis días por Germanotta supone un importantísimo varapalo en ventas para la cantante que despachara más de 448.000 copias del tema ‘Born This Way’ en tres días en 2011. Una decepción que se suma a los discretos datos obtenidos en UK. Pero antes de analizar por qué cientos de miles de «little monsters» se han quedado por el camino, hay que dejar a la canción respirar: su vídeo ha sido bien acogido y el tema ha remontado algo en iTunes en las últimas horas.

Después de varios días de angustia y miles de horas pasadas mirando las barritas de iTunes, como en realidad era de prever, ninguna de las dos canciones llega al top 1 del Billboard Hot 100 debido a la enorme fuerza en radios de ‘Blurred Lines’ de Robin Thicke, con audiencia récord desde que existe Nielsen en 1990 (230 millones de impresiones), lo cual computa en la mencionada clasificación por razones que nadie acierta a comprender. Katy Perry se ha quedado muy, muy cerca de superarle y es top 2. Gaga aparece algo más abajo, en el top 6, igualando el puesto conseguido con ‘Paparazzi’ y ‘Yoü and I’ (sic). De momento, España puede servirle de consuelo.