Los responsables de ‘Algo que celebrar’, la nueva supuesta comedia de Antena 3, se han cubierto de gloria promocionando la serie, comparando su producto con ‘Modern Family’ o atacando el tipo de humor de ‘La que se avecina’ o ‘Aída’ frente al suyo, supuestamente «más sofisticado, elaborado, menos de chiste de diálogo y más de situación».

Lo que nos hemos encontrado, en cambio, en ‘Algo que celebrar’, es lo que esperábamos antes de esta contraproducente campaña: una serie familiar con humor zafio de eructos, comentarios misóginos tipo «pobrecita, no tiene cara, tiene una cruz» y gags repetidos en la línea de beber alcohol para superar una situación difícil o ese hueso de aceituna arrojado contra el ojo de uno de los protagonistas… que se ha convertido en el corcho de una botella arrojado contra el ojo de otro protagonista sólo un minuto después.

La serie orquestada en torno a bodas, comuniones, funerales, cumpleaños y demás eventos de la familia Navarro, es predecible y tiene muy poca gracia. No sólo porque recurre al humor cien veces visto en el género sin aportar la más mínima frescura u ocurrencia (se puede tratar por enésima vez el gag de abandonar a alguien en el altar, pero si se reinventa, no si se le dedican dos minutos de mala manera). También porque su introducción del drama es penosa y carente de interés. Es difícil que el público joven empatice en pleno siglo XXI con la subtrama de un matrimonio fracasado después de 43 años, con una infidelidad de por medio que deja en muy mal lugar a la madre de familia, y que ni siquiera está planteada de manera esperpéntica a lo ‘La que se avecina’, sino totalmente en serio.

Con todo ese minutaje dedicado a si los padres de los novios vuelven o él se va con la amante, se consolida la teoría de que crear una nueva ‘Aquí no hay quien viva’ o su secuela es muy difícil, por no hablar de lo lejanas que quedan otras referencias como ‘4 bodas y un funeral’, ‘La boda de mi mejor amiga’ o ‘Tres bodas de más‘. Porque el intento de equiparar ‘Carrie’ de Europe a ‘Bailar pegados’ de Sergio Dalma parece un guiño a esta última, pero nada que ver. Donde una buena comedia puede alternar lo chabacano, lo soez y lo ñoño con lo irreverente y lo ingenioso, ‘Algo que celebrar’ se queda, siendo muy generoso, en lo primero.

Calificación: 2/10
Destacamos: Alejo Sauras sigue sin envejecer y se llama Santi, como en ‘Alsa’
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Predictor: mientras ‘Tres bodas de más’ permanezca incomprendida, nos esperamos cualquier cosa.