La lesión de Dave Grohl tras caerse durante un concierto en Suecia, que terminó como pudo con ayuda de unas simpáticas muletas, es grave. Foo Fighters han tenido que seguir suspendiendo conciertos de su gira europea. Tras cancelar los primeros de esta semana tendrán que suspender también la gira británica, que incluía nada menos que dos fechas en el Wembley Stadium y un concierto en letras grandes en el Festival de Glastonbury. Un gran varapalo para ellos.

Con humor, han escrito en su página web que van a dejar que Kanye West gane esta vez, porque ahora sí que todas las miradas de Glasto estarán puestas en él. El comunicado oficial indica que después de operarse el lunes, la total recuperación de Dave todavía está por determinar. La larguísima carta de Dave indica que tiene que mantener la pierna elevada para evitar infecciones y complicaciones en el largo plazo. Como curiosidad, para llegar a ella tienes que hacer «clic» en el corazón roto del juego ‘Operando’.

Foo Fighters visitan Barcelona, pero a finales de año. Si Grohl se cuida, esta fecha no debería peligrar.