El comunicado que anunciaba la muerte de David Bowie indicaba que el artista había muerto de cáncer tras 18 meses luchando contra la enfermedad, pero no se especificaba de qué tipo era esta. Según el director de ‘Lazarus’, Ivo van Hove, la obra con la que comparte un tema su último disco ‘★’, el cáncer era de hígado y van Hove sabía que la padecía «desde hace un año aproximadamente».
Estas han sido sus palabras en The Independent: «empezamos a colaborar en nuestra obra ‘Lazarus’ y en un momento me llevó a un lado para decirme que no siempre podría estar ahí debido a su enfermedad. Me dijo que sufría cáncer, cáncer de hígado. Los actores nunca lo supieron y sospecho que los músicos con los que ha grabado ‘Blackstar’ tampoco lo sabían, hizo todo el esfuerzo posible para completar estos dos proyectos a tiempo y no dejar ganar a la enfermedad». El NME añade que Wendy Leigh, quien ha escrito un libro sobre Bowie, ha declarado en la BBC que además de haber sufrido cáncer, sabe por una fuente cercana que el artista había sufrido seis ataques al corazón en los años recientes.