Nuevo capítulo en la historia del día, la de la batalla de Kanye West y Kim Kardashian contra Taylor Swift. Anoche, Kardashian publicó un vídeo que mostraba la conversación telefónica mantenida por Kanye y Taylor durante el proceso de composición de ‘The Life of Pablo‘, el último disco del rapero, en el que este pedía aprobación a la cantante para usar la frase «puede que Taylor y yo tengamos sexo» en su canción ‘Famous’. Kardashian publicaba esta grabación para probar que Swift dio el visto bueno a la canción, sin embargo, Swift defiende que jamás aprobó la verdadera frase de la polémica («yo hice famosa a esa zorra»), frase que, para defensa de Swift, no aparece en la grabación filtrada por Kardashian.
En un comunicado publicado en Twitter, Swift mostraba su sorpresa ante el aterrizaje de esta conversación privada ayer en internet, sin embargo, es posible que ya se lo viera venir. TMZ ha confirmado hoy que Swift amenazó a Kanye West y a Kim Kardashian con una demanda por haber grabado esta conversación el pasado mes de febrero, lo que indica que la autora de ‘1989‘ era consciente de la existencia de esta grabación telefónica antes de que esta llegara a la red anoche. El fragmento del texto publicado por TMZ lee: «por medio de la presente se solicita que todas las grabaciones mencionadas sean destruidas de inmediato, que se nos proporcione la garantía de que esto se ha hecho y que se nos garantice que las grabaciones no han sido diseminadas con antelación».
TMZ confirma también que grabar conversaciones teléfonicas es delito en California y que la conversación de Kanye con Swift tuvo lugar en un estudio de Los Ángeles, por lo que es posible que Swift se plante ante los juzgados pronto para poner una demanda a la pareja. En una entrevista con GQ, dehecho, Kardashian confirmó la existencia de esta grabación, así como de la amenaza legal de Swift. En definitiva, tanto West como Kardashian y Swift vieron inflarse esta burbuja… hasta que ha explotado. To be continued…