Run the Jewels ha publicado el primer disco protesta de la era Trump. Y este ni siquiera ha asumido todavía la presidencia de Estados Unidos (lo hará el 20 de enero). En ‘RTJ3’, Killer Mike y El-P afilan su verso y desarrollan sus producciones nucleares, que el dúo esculpía con maestría en el disco anterior pero potencia aquí, para que su mensaje suene más alto, más claro y más fuerte que nunca. Todo el álbum es una llamada a la revolución, la de las «clases sin clase» a las que el dúo evoca en ‘Hey Kids’, contra los poderes opresores de la élite capitalista actual. Y funciona.

Al margen de los textos, no obstante algo brutos, ‘RTJ3’ es una lección de producción sonora en hip-hop que sonrojaría al mismísimo Kanye West. El barniz fluorescente de ‘RTJ3’ ilumina canciones como ‘Talk to Me’, donde Killer Mike burla a Trump rodeado de rayos láser, o en la delirante ‘Call Ticketron’, mientras ‘Legend Has It’ abrasa y ‘Thieves’ con Tunde Adebimpe samplea a Martin Luther King y contiene una tensión que se cala en los huesos. Por otro lado, el dúo se supera en canciones como en la gloriosa ‘2100’, donde El-P eleva sus líneas con especial gracia y poderío; ‘Oh Mama’, que fusiona sonidos industriales con vientos metal y coros, o la exuberante ‘Stay Gold’.

Pero ‘RTJ3’ no solo carga contra Trump, que no es aquí sino el enésimo representante de un problema mayor, que es la tiranía del poder contra la clase oprimida. En la última canción del disco, ‘A Report to the Shareholders’, Killer Mike y El-P demuestran que su inquietud revolucionaria trasciende las políticas de identidad que practican otros de sus compañeros de profesión, pues como clama el grupo en ‘A Report to the Shareholders’, Barack Obama ha sido un presidente de «palabras amables» pero también un villano que «bombardea hospitales» (como sabe ANOHNI) y Run the Jewels se atreve a expresar esta realidad sin miedo a las represalias.

Así y gracias a un disco valiente y libre, Killer Mike puede revisar sus entrevistas con Bernie Sanders con orgullo y El-P decir que un día logró reflejar con enorme visión el sonido de un mundo siniestro que, como el propio dúo ha asegurado en alguna entrevista, ya no es distópico sino una pesadilla real y presente. Pero Run the Jewels siempre ha demostrado ser valiente, de ahí que se autoedite como haría cualquier periódico independiente con ganas de decir la verdad, y que encima tenga el detalle de regalar sus discos. Por suerte para su público (que ya es masivo), estos suelen ser tan buenos como este.

Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Legend Has It’, ‘2100’, ‘Call Ticketron’, ‘Stay Gold’, ‘A Report to the Shareholders’
Te gustará si te gusta: Kanye West, Death Grips, Flying Lotus, Shabazz Palaces
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