Chico y Chica, autores en la década pasada de hits como ‘Tú lo que tienes que hacer’, ‘Supervaga’ o ‘Vaquero’, así como de la divertidísima radionovela por capítulos 4 en Alicante, retoman hoy su actividad discográfica con un nuevo single llamado ‘Un, dos, tres, orgasmo’. Austrohúngaro edita un 7″ dentro de su colección Golden Greats en lo que supone la séptima referencia. La canción tiene un marcado aire de bolero a lo ‘Sabor a mí’ y de spoken word, estando cantada desde dentro de un orgasmo, durante «el momento». Para Alicia y José Luis, «el orgasmo en esta canción representa la idea de presente, algo que está ocurriendo en ese momento. Un silencio, un paréntesis que alargamos durante toda la canción. (Es una canción) con cadencia lenta y moderna, para poder bailarla sola, con pasos a lo tango y brazos en alto», pero también indican que se puede bailar en pareja, «y que cada cual tenga su orgasmo. Aquí nadie ha dicho que haya que sincronizar los orgasmos». Añaden que se la imaginan bailando a Emmanuelle Seigner y Kristin Scott Thomas en ‘Lunas de Hiel’, otra de las películas sobre el amor enfermizo de Roman Polanski.
Según la nota de prensa, «José Luis Rebollo (aka Madelman) ha construido un ritmo automático a partir de diferentes patrones de la clásica caja de ritmos Roland CR78, secuencias sintéticas y filigranas analógicas que parecen salidas de una manga pastelera. «El caso era dejar de lado la maraca, los bongos y el saxo reventón, para no pasarnos de decadentes ni reminiscentes. Así que nos ha quedado una canción con dos temperaturas que se hacen un favor la una a la otra. Porque ni el tecno es tan frío ni la voz va de sexy».
La cara B es una adaptación de Battiato, en concreto de ‘Chan-son Egocentrique’, mucho más bailable, rollo Eva Nasarre o Stereo Total. Indican: «Hay otras canciones de Battiato que nos gustan más, pero esta nos parecía más abordable, más fácil de hincarle el diente y jugar con ella. Tiene una melodía muy segura de sí, asertiva o idealista. Cuando la cantas parece que estás diciendo verdades universales válidas para el resto de los terráqueos». Además, no han querido usar la adaptación existente al castellano, sino combinar el inglés, el francés, el italiano y el alemán. «Desistimos de utilizar la adaptación oficial al castellano porque no acabábamos de entenderla. Con la letra original nos sentíamos más libres. Es como cuando viajas a un lugar donde nadie te conoce».