Corinne Day ha muerto en su casa este fin de semana después de que el año pasado le diagnosticaran un tumor cerebral. La fotógrafa era conocida sobre todo por haber fotografiado a Kate Moss en los inicios de su carrera como modelo, en 1990 para The Face, cuando aún era menor. Trabajó para varias ediciones internacionales de Vogue y participó en exposiciones en la National Portrait Gallery y la Tate Modern de Londres.

Su portada de Kate Moss para Vogue (en la imagen) está considerada una de sus más célebres fotografías al presentar a la modelo tal cual casi sin maquillar, en sintonía con la era grunge. Más tarde su obra, a veces pervertida, asociada a la generación ‘Trainspotting’, sirve como ejemplo de una nueva estética que mostraría a la modernidad lejos de su mejor momento, relacionada con el consumo de drogas o con la anorexia. Su estilo fue conocido como «heroin chic».