Rebecca y Fiona son dos jóvenes DJs suecas que pasaron de la cabina de los clubs más populares de Estocolmo a convertirse en celebrities gracias a un reality que protagonizaron en la web de la televisión nacional sueca, en el que simplemente explicaban en doce episodios cómo era su vida. De ahí, pasaron a hacer el warm-up en muchos conciertos de la gira europea de Robyn y ahora ya pinchan en el circuito internacional con regularidad. Sin ir más lejos, este mismo verano han estado en reputadas cabinas de Barcelona e Ibiza.
Aunque sea verdad en parte, no solo se trata de dos monadas que le echan cara al asunto (dicen que hay quien las recuerda como las dos tipas borrachas que ponían canciones para Robyn). Resulta que Rebecca es hija de Staffan Scheja, uno de los pianistas clásicos más importantes de su país, y Fiona lo es de Greg Fitzpatrick, compositor muy popular en Suecia en los 80, pionero en el uso de sintetizadores en el pop. Esto es, las chicas tienen un background musical y no solo saben posar, llevar ropa cara y dar saltitos en sus sesiones, sino que demuestran una notable habilidad compositiva en tres singles publicados en los últimos meses (todos disponibles en Spotify).
A finales de 2010 vio la luz ‘Luminary Ones’, un certero corte electropop entre Ladytron y Pet Shop Boys; meses después llegó ‘Bullets‘, en el que incluían unas guitarras eléctricas que recuerdan a los mejores Digitalism y que llegó al número 2 de la lista de singles de iTunes Suecia y al número 6 en la lista nacional; y antes del verano han editado ‘If She Was Away‘ con ‘Hard’ como doble cara A. La primera pone en contacto el chill de las bandas de sellos como Sincerely Yours con la pista de baile actual, mientras que la segunda suena un poco a los Crystal Castles más deudores The KLF.
Sumadas a su imagen y actitud, son razones suficientes para pensar que podrían llegar a tener un éxito a nivel mundial, aunque también podrían, simplemente, quedarse en otro dúo de nórdicas que hacen pop para enteradillos.