Manic Street Preachers están de actualidad gracias a un nuevo álbum, ‘Futurology‘, que llega tras ‘Rewind The Film’ el pasado año. El nuevo trabajo los traerá este fin de semana al FIB y por ello tuvimos la oportunidad de charlar un rato vía telefónica con Sean Moore, batería de la formación galesa. No hubo mucho tiempo para conversar, pero dio de sí para hablar sobre su visita a Cuba en 2001, sobre Richey James y sobre la influencia kraut en el nuevo álbum, entre otras cosas.
«No queríamos volver a sacar un disco tan confuso como ‘Know Your Enemy'»
Es bastante atípico hoy en día que una banda saque dos discos en tan poco tiempo (salvo si eres Robert Pollard, claro). ¿Por qué no sacar un solo álbum mezclando temas de ‘Rewind The Film’ y de ‘Futurology’ en vez de dos discos tan distintos entre sí?
Ahora que tenemos nuestro propio estudio es muy fácil grabar toda la música que nos apetece y por otro lado no queríamos volver a sacar un disco tan confuso como ‘Know Your Enemy’. Lo que pasó con aquel álbum fue que las canciones que contiene estaban concebidas para formar parte de dos álbumes distintos y acabamos haciendo lo que acabas de sugerirme, con un resultado un tanto extraño. Con estos dos últimos discos ha pasado algo distinto: nos pusimos a escribir canciones y a las seis semanas o así nos dimos cuenta de que las canciones estaban tomando dos direcciones distintas, o sea que el hecho de haber sacado dos álbumes no fue algo intencionado en un principio. No es algo extraño que nos pasen estas cosas, somos bastante eclécticos y esquizofrénicos, tenemos influencias muy diversas.
¿Y le pareció bien al sello?
Sí, les gustó nuestra idea, aunque en un principio dudaron de si habría suficientes canciones como para hacer dos discos y que además estuvieran bien y no hubiera temas de relleno, pero con el tiempo se dieron cuenta de que los dos álbumes iban a ser lo suficientemente potentes como para publicarlos.
Para la canción ‘Europa Geht Durch Mich’, habéis colaborado con Nina Hoss, una actriz. ¿Cómo salió adelante esta colaboración? ¿Por qué una actriz y no una cantante?
Da la casualidad de que Alex Silva, quien trabajó como ingeniero de sonido en ‘The Holy Bible’, se fue a vivir a Berlín y es pareja de Nina Hoss. Estábamos buscando a un alemán que hablara inglés para esta canción, así que gracias a Alex conectamos con Nina, quien tiene un enorme talento y nada más probar con ella vimos que funcionaba a la perfección.
¿Qué le pareció a ella la propuesta?
Le encantó, a ella le gusta hacer cosas distintas a actuar, le interesan distintos tipos de proyectos. Para ella fue un reto interesante.
Y hablando de esta misma canción, creo que la influencia germana en ‘Futurology’ no termina ahí, ya que hay canciones como ‘The Next Jet To Leave Moscow’ en las que se nota una influencia del kraut-rock, especialmente en el ritmo de la batería, muy del tipo motorik. ¿Es una coincidencia o fue la idea principal?
Fue totalmente la idea. Siempre nos han gustado bandas como Neu! y Can y otros grupos que descubrimos gracias a ‘Heroes’ a principios de los 80. Aunque el álbum de Bowie salió años antes, fue cuando lo descubrimos, al menos yo mismo. Estaba en una tienda de discos en Gales y lo vendían barato, y vi esa portada y esas fotos en blanco y negro y decidí darle una oportunidad. Esas cosas se quedan y cuando empezamos la banda nos llevamos todas esas influencias y las metimos en nuestra música.
También quería preguntarte algo más sobre esta misma canción (‘The Next Jet To Leave Moscow’): la letra es una constante referencia a cuando tocasteis en Cuba, allá por el 2001, desde una perspectiva bastante amarga. ¿Os criticaron mucho por haber tocado allí?
Nos criticaron mucho, sí. Lo que queríamos hacer era sacar a la luz la hipocresía de la mayoría de la sociedad frente a Cuba y la batalla de David vs. Goliat que hay entre América y Cuba. Por un lado están todas las sanciones económicas que les imponen y todas las críticas al gobierno castrista, pero por otro lado aquí en Reino Unido, por ejemplo, se hablaba maravillas de Cuba en cuanto a que es un destino turístico asequible. Queríamos mostrarnos contrarios a todo aquello y haciéndolo, nos implicamos políticamente y eso tuvo sus consecuencias. Hay gente que prefiere que la música sea algo superficial y por hacer lo que hicimos nos llovieron las críticas. De todos modos, sabíamos lo que podía pasar.
De todos modos, siempre os habéis implicado políticamente. Al ver la temática europea de ‘Futurology’, se me ocurre que tal vez esté influido por las elecciones europeas y sus consecuencias en el panorama político actual. ¿Es así?
No exactamente, pero siempre hemos sido muy pro-europeos. Ya mostrábamos una bandera europea en la portada de nuestro EP ‘New Art Riot’. Hemos vivido cómo desaparecía el control de pasaporte y hemos podido disfrutar de la libertad de movimiento por los países de la Unión. Al mismo tiempo que celebramos una identidad, entendemos los problemas y la sensación de inseguridad que pueda tener la gente de cada país, pero nuestra filosofía siempre ha estado a favor de trascender fronteras. Al margen de que en Europa puedan surgir sentimientos independentistas, nosotros siempre hemos sido más expansivos que todo eso, sobre todas las cosas siempre hemos estado a favor de los derechos sociales más allá de las fronteras que pueda haber entre unos países y otros.»
«A veces me pregunto la razón por la que la gente tiene en tanta estima a ‘The Holy Bible’, porque no fue revolucionario ni musicalmente ni en cuanto a las letras, las letras eran muy introspectivas en todo caso, tal vez demasiado vanidosas incluso»
A finales del mes que viene hará veinte años de la salida de ‘The Holy Bible’. ¿Cómo recuerdas ese disco con el paso del tiempo?
Fue un punto álgido para nuestra carrera y de hecho mucha gente lo ve como nuestro cénit creativo, nuestro álbum más importante, pero para nosotros todos los álbumes que hemos hecho son importantes porque han representado un punto en nuestra carrera y el momento en el que nos sentíamos tanto personalmente como dentro del grupo. A veces me pregunto la razón por la que la gente tiene en tanta estima a ‘The Holy Bible’, porque no fue revolucionario ni musicalmente ni en cuanto a las letras, las letras eran muy introspectivas en todo caso, tal vez demasiado vanidosas incluso. Tal vez guste tanto por lo brutalmente honesto que es, pero siempre hemos intentado ser así. Me alegro de poder celebrar que seguimos en activo veinte años después de aquello. Parte de lo que éramos como banda por aquel entonces no ha cambiado con el paso del tiempo, de eso estoy bien seguro.
Preguntarte acerca de ‘The Holy Bible’ irremediablemente me lleva a preguntarte por Richey James. ¿Cómo ves la evolución de vuestra carrera desde su desaparición?
Todos los discos que hemos hecho tanto antes como después de su marcha han tenido más o menos las mismas influencias musicales, eso no podríamos ocultarlo. En cuanto al éxito que ha podido haber, nunca ha sido algo en lo que hayamos pensado demasiado, siempre hemos ido hacia delante sin miedo a lo que el destino nos deparase, hemos seguido nuestro instinto. En ese sentido el éxito ha sido algo accidental, como lo ha podido ser el fracaso. Simplemente hemos hecho lo que queríamos y en lo que creíamos, no podríamos hacer las cosas de otro modo.
En ‘Journal For Plague Lovers’ había letras de Richey que habíais recuperado, algo que fue toda una sorpresa. ¿Queda algo por publicar que tenga su firma?
No. Eso fue todo, el gran punto y final. Lo hicimos para aclarar cualquier especulación sobre si quedaba algo más o no. Ahí acabó todo, no queda nada más.
Vi vuestro concierto en Glastonbury y a juzgar por el setlist, no sois una banda que huya de sus grandes éxitos. Aun así y todo, ¿hay algún tema que os dé pereza tocar?
Personalmente, no me importa tocar ninguna canción de las que hemos publicado. Siempre que tengamos tiempo para ensayarlas, por mí tocaría cualquiera de nuestras canciones. Cuando terminemos el circuito de festivales queremos sentarnos a hablar de los futuros sets, porque tal vez estaría bien tocar más canciones de ‘The Holy Bible’ junto con las de ‘Futurology’. Nunca nos ponemos límites en ese aspecto.
¿Os veremos girar por nuestro país fuera del circuito festivalero?
Nos encantaría, pero con la actual crisis en Europa los promotores ya no tienen tantas ganas de contratarnos como antes. Por nuestra parte estamos totalmente dispuestos, España es un lugar maravilloso y además tengo muchas ganas de tocar en Benicàssim.