La industria no se cansa de otorgar discos de oro y de platino a álbumes que todavía no han conseguido los méritos suficientes. Esta práctica del pasado, que consistía en conceder el certificado por copias distribuidas en tienda en lugar de por copias vendidas debería haber desaparecido ahora que casi no quedan tiendas de discos y que las que quedan presentan espacios tan reducidos. Pero por alguna razón (¿promoción extra? ¿exigencias de los departamentos internacionales?) se sigue haciendo.
El ejemplo más sonrojante de la actualidad es el de Sam Smith. Tras la victoria del artista en los Grammy, ‘In the Lonely Hour‘ ha subido al top 20 en nuestro país y su sello, Universal, ha aprovechado para otorgarle el disco de oro por la distribución de 20.000 unidades en España. Desconocemos en qué grandes almacenes estarán metidas todas esas copias, pero según un famoso «insider» de los foros de UK Mix, el disco en realidad ha vendido 4.000 copias en nuestro país, esto es, sólo una quinta parte de lo que necesitaría para el certificado. Es habitual que un disco que ha vendido -pongamos- un 80% de lo necesario (16.000 copias en este caso) sea certificado, pero esta diferencia es excesiva.
Y aunque nos olvidemos de esta filtración, por si fuera falsa, no hay que ser ningún lince para darse cuenta de que Sam Smith no ha vendido 20.000 copias en España: el paso por la lista de nuestro país de su disco es penoso. Principalmente ha rondado la parte bajísima de la tabla durante semanas (esa en la que bastan 75 copias vendidas para posicionarse) y únicamente acaba de subir al top 12 tras los Grammys en la época del año en que menos unidades se mueven. Sólo hace falta una buena calculadora para darse cuenta de que aquí hay gato encerrado. Aunque en realidad no hace falta ni siquiera una calculadora: Vetusta Morla necesitaron más de medio año en la mitad alta de la tabla con ‘La deriva’ (y ser top 1) para alcanzar las 20.000 unidades. ¿Acaso de repente cuenta el streaming en la lista de álbumes española y nadie nos ha avisado?
Lo peor es que ni siquiera el disco de oro de Sam Smith vestiría mínimamente de gala sus cifras por aquí: el disco ha vendido 4 millones de unidades en todo el mundo y sólo entre 4.000 y 20.000 corresponden a nuestro país. ¿Os acordáis de cuando España era el 7º mercado más importante del mundo? Entre que la piratería ha calado aquí más que en ningún sitio, lo que nos cuesta aceptar a un artista novel y lo que nos cuesta aceptar a un artista novel internacional, todo eso parece que se acabó.
Pero bueno, terminaremos con una buena noticia para Sam: si ‘Stay With Me’ y ‘I’m not the Only One’ siguen radiándose a este ritmo, quizá para la Navidad de 2015 se habrán vendido esas copias distribuidas. La paciencia fue la virtud de Adele.