Cuando te llamas Denis Villeneuve y en los últimos años has entregado seguidos tres peliculones como ‘Incendies’, ‘Prisioners’ y ‘Enemy‘, hay errores que no te puedes permitir. Al menos no uno tan grande como descuidar el guión en una película en la que todo lo demás se mantiene a la altura de sus precedentes. Son tantos los agujeros en la trama de ‘Sicario’ que resulta imposible entender qué se le pasó por la cabeza al canadiense a la hora de aceptar rodar esta cinta.
Cabe la posibilidad de que se trate del típico blockbuster por encargo que aceptas a cambio de que después el estudio en cuestión te dé luz verde para rodar una rareza de las tuyas. Si es así, tampoco es necesario cabrearse demasiado. Sobre todo porque comparado con la media de filmes que fueron paridos bajo estos términos, el resultado está muy por encima de la media. Especialmente en la ejecución de escenas de acción como la que implica la incursión de varias furgonetas estadounidenses en la mexicana Ciudad Juárez. Ya quisieran para sí el 90 por ciento de los títulos de acción que llegan a la cartelera ese manejo del ritmo y esa tensión provocada. El que lo lleva, lo lleva.
Pero no es el buen oficio del que está detrás de la cámara lo único que te deja pegado a la butaca. El trío de actores protagonistas también pone su granito de arena para entregarnos una interpretación lo más digna posible dadas las circunstancias. De hecho, Benicio del Toro y Josh Brolin ya tenían experiencia en esto de dar vida a tipos obligados a lidiar con la violencia narco, por lo que era de esperar su efectividad y su, en ocasiones, actuación con el piloto de modo automático puesto. La que sí roba todas las secuencias en las que aparece es Emily Blunt, que con su interpretación de joven agente del FBI obligada a sobrevivir y hacerse valer en un mundo de hombres, recuerda mucho a la Jessica Chastain de ‘La noche más oscura‘.
Tampoco es casualidad. Son muchos los motivos los que nos hacen creer que aquel filme que narraba cómo se mató a Bin Laden ha sido la principal inspiración de Villeneuve a la hora de rodar esta historia. Cambian escenarios y cambian personajes, pero en esencia, es lo mismo. Pero como decía, mientras que aquella película de Kathryn Bigelow se sustentaba en un guión lo suficientemente sólido como para ganar puntos cuanto más la pensabas; con el de ‘Sicario’ ocurre justo lo contrario, que cuanto más tiempo pasa, más se le ven las costuras. Y las incongruencias. Y sobre todo los truquitos para hacer avanzar una historia que no justifica el comportamiento de los personajes bajo ninguna circunstancia.
Que insisto, si habláramos de algo dirigido por Michael Bay estaríamos hablando de su obra maestra. Pero tratándose de Villeneuve es obligatorio pedirle más. Mucho más. 6.