Cuando Odio París participaron en el homenaje a Los Planetas ‘De Viaje por Los Planetas‘ (Ondas del Espacio, 2013) revisitando, y en mi opinión hasta mejorando, ‘De Viaje‘, haciéndola todavía más hipnótica si cabe, el temor a que los autores de ‘Cuando Nadie Pone un Disco’ se marcaran un Black Kids y nunca viésemos una continuación a su álbum debut se hizo patente.
El grupo barcelonés, a diferencia del de Florida, ha decidido dejar de jugar con nuestros sentimientos y lanzar, por fin, se segundo trabajo ‘Cenizas y flores’. Un álbum con el que no sólo superan a su antecesor sino que, además, nos regalan unos cuantos hits que esperemos sirvan para que no tarden otros cinco años en volver a entrar en un estudio de grabación.
‘Camposanto’, que fue nº1 en el top semanal de esta web, y, sobre todo, ‘Geometría Coaxial’, con una línea de sinte espectacular, dejaron bien claro que el muro de sonido se ha perfeccionado tanto -la labor de Hans Kruger es digna de premio- que las trilladas referencias a Los Planetas o My Bloody Valentine se quedan cortas para explicar las virtudes de ‘Cenizas y Flores’.
Es casi un prodigio construir una melodía como la de ‘El Último Deshielo’ -¿soy yo el único que se imagina a Jeanette cantando «Qué penoso es / Verte así otra vez / Prefiero estar por ti / Verte sonreír»?- y que ésta consiga sobresalir por encima del reverb, el ambiente denso y los teclados de la forma en la que lo hace. Igual de prodigioso, o más, es verter todo lo mejor del pop en una cubeta shoegazer y obtener un pepino como ‘En junio’. Suponemos que cierto sector de fans de Los Planetas tiene que estar tirándose de los pelos.
Se trata, en definitiva de 41 minutos divididos en 10 canciones, a cada cual más disfrutable, que en conjunto superan a los dos singles de presentación aunque se alejen de su vertiente más pop. ‘Destellos de Ingravidez’ o ‘Rendición’, por ejemplo, ni desentonan ni rompen la dinámica del tracklist. Hasta ‘Voy a Salir’, cuyo principio recuerda al Nacho Cano más experimental, se lleva por delante cualquier peligro de ahogarse en las referencias y no crear un disco con la personalidad suficiente como para que estemos deseando que Odio París tenga una trayectoria lo más larga posible. A ser posible sin tener que esperar otro lustro para la siguiente entrega.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘El Último Deshielo’, ‘Geometría Coaxial’, ‘En junio’ y ‘Destellos de Ingravidez’.
Te gustará si te gusta: Los Planetas, My Bloody Valentine, The Pains of Being Pure at Heart, etc.
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