TMZ informa de la separación entre Angelina Jolie y Brad Pitt, más conocidos como Brangelina. Según este medio, Angelina Jolie ha solicitado el divorcio este 15 de septiembre después de 2 años de matrimonio pero 12 de noviazgo. Angelina habría pedido la custodia de los 6 hijos que tienen en común, pues según las fuentes de este medio, no le gusta que Brad Pitt críe a los niños rodeado de “marihuana, alcohol y su problema de mal humor”. No hay comunicado oficial ni amistoso ni todo lo contrario, como sí hacían Chris Martin de Coldplay y Gwyneth Paltrow. Sin embargo, el abogado de Angelina ha confirmado la noticia del divorcio, como informa El País.

La separación de Brangelina se produce tan solo unos meses después del estreno de uno de los mayores fiascos de los últimos tiempos: la última obra como directora de Angelina Jolie, ‘Frente al mar’, que hablando precisamente sobre un matrimonio burgués en crisis recaudaba 3 millones de dólares tras haber costado 10. Así la valoraba nuestro crítico de cine, Joric:

«‘Frente al mar’ quizá sea, junto a ‘La chica danesa’, la película reciente en la que la brecha entre pretensiones y resultados es más ancha. Pretensión: un estilizado y evocador drama de inspiración europea (Godard, Antonioni, canciones de Gainsbourg) sobre un matrimonio burgués en crisis. Una película llena de misterio, melancolía, erotismo y tensión emocional que encumbrara definitivamente a Jolie Pitt como directora y guionista. Una interpretación de Oscar, su tour de force como actriz dramática y, por qué no, el de su marido. Un éxito, una película de prestigio, “artística”, protagonizada por la pareja más famosa del cine actual.

Resultado: el ‘Barridos por la marea’ de Angelina y Pitt. Un drama tedioso y pretencioso, rebozado en referentes cultos y estilosos, que pone de manifiesto varias cosas:
1) las limitaciones de Angelina como directora; su incapacidad para narrar una historia en imágenes sin tener que recurrir a verbalizarla (como hace el personaje de Brad Pitt constantemente) y su torpeza a la hora de insuflarle algo de ese misterio y emoción que pretende.
2) las (enormes) limitaciones de Angelina como escritora. Los diálogos, situaciones y el sorprendente (por grotesco) desenlace final llevan implícita su propia parodia.
3) las (gigantescas, colosales, ciclópeas) limitaciones de Angelina como actriz. La forma que tiene de expresar toda la angustia existencial que devora y paraliza a su personaje llega al espectador en forma de pregunta: “¿qué le pasa a esta mujer: está lela o catatónica?”».

Probablemente haya que revisitarla a sabiendas de lo que se cocía durante su rodaje…