Puede que no sea la mejor canción del cuarto disco de Vetusta Morla, mérito que seguiría recayendo en el single ‘Te lo digo a ti’, pero sí es una de las más curiosas y llamativas. ‘Palmeras en La Mancha’ se abre con un boletín que habla de un «falso gurú que subía fotos a Instagram de pies que no eran suyos». ¿Verdad, broma u obra de El Mundo Today?
La tercera canción del notable ‘Mismo sitio, distinto lugar’, presenta situaciones costumbristas con un punto de humor, encabezadas por esa «mamá» que se fuga con la «novia de papá» y por esa «serie que acabó sin su actor principal», todo un precedente de lo que ha pasado con ‘House of Cards’ aunque aquí el asunto termine por otros derroteros. Pucho, cantante del grupo, nos recuerda en una entrevista que publicaremos próximamente que Vetusta ya habían explorado antes ese punto costumbrista. «En ‘Cenas ajenas’, del primer disco, hay un pavo mirando por la ventana a sus vecinos de enfrente, rollo voyeur. También ‘Tour de Francia’ del último disco, que es estar viendo la tele en verano en tu casa tocándote los huevos». Pero Guille Galván, uno de los dos principales autores de la banda, coincide en que nunca habían llegado tan lejos como en esta canción: «Es verdad que este disco es más descarado, tocamos muchos palos, y hay un palo que es la sátira y la ironía como salida ante una situación tan dramática como la que estamos viendo como sociedad. Es necesaria. Dijimos: «vamos a atrevernos a hacer una canción con otro código», mantenemos una manera de escribir, pero cambiando el punto de vista».
El boletín es un choque frente a la solemnidad y la épica que ha dominado gran parte de la discografía de Vetusta Morla. Y de hecho existe una versión de ‘Palmeras en La Mancha’ sin boletín por si se arrepentían de su inclusión. Al final se han atrevido, para alegría del ilustre mezclador del disco Dave Fridmann (Flaming Lips, Mercury Rev), que pidió una traducción de todas las letras para acceder a trabajar con Vetusta. Cuenta el grupo: «le tuvimos que explicar lo que era El Mundo Today, que era una gente que hacía sátira, y con un programa de radio. Hicimos dos versiones por si nos echábamos atrás, una con el boletín y otra sin él. Ya nos hemos hecho, pero al principio era bastante desconcertante que apareciera un boletín. Cuando (Dave Fridmann) escuchó el disco, nos dijo «me gusta esto, me gusta lo otro», pero también: «¡Qué bien que los chicos de las noticias siguen en el disco!».
El resultado es una canción divertida («¡su mujer llevaba la misma doble vida que él!»), combativa en gran medida, autoparódica en su puente latino, quizá algo raruna en la repetición de los pugilísticos «1-2, 1-2» (justificados porque «denuncian agresión durante un combate de boxeo»), pero indiscutible en su estribillo: el «podría ser yo» constituye el mejor de todo el álbum. Carne de directo que seguro es un triunfo de la inminente gira que prepara el grupo.