Janelle Monaé ha publicado este mes de abril su tercer disco, ‘Dirty Computer‘, un trabajo complejo, pero a la vez muy pop, en el que Monáe reflexiona sobre su identidad como “mujer negra queer” en Estados Unidos hablando de sexualidad, identidad y hedonismo, a la vez que deja multitud de referencias al contexto social y político actual de manera similar a lo que han hecho recientemente Beyoncé, Kendrick Lamar o Solange.

Una canción que resume las intenciones de ‘Dirty Computer’ es ‘Screwed’, una de las pistas más accesibles y queridas por el público. ‘Screwed’, en la que colabora Zoë Kravitz como artista invitada, es una divertida canción pop con ecos a los ochenta de Cyndi Lauper, Bananarama (esos punteos tan ‘Cruel Summer’) y, por supuesto, Prince, pero también es un corte abiertamente político (como todos los de ‘Dirty Computer’) en cuya letra caben referencias a un “mundo que está jodido” y, de manera más directa, a Donald Trump, las “fake news”, la brecha salarial o las armas.

‘Screwed’ plantea un escenario de revolución a través del hedonismo y de la libertad sexual, y el mensaje del tema está en el carácter polisémico de la palabra “screwed”: si el mundo está “jodido”, más nos vale “follar” o salir de fiesta hasta caernos muertos, como hacen Monáe y sus colegas en el videoclip de la canción presente en la película ‘Dirty Computer’ (minuto 14.55). Como el resto de temas del disco, ‘Screwed’ aúna política con una sensación irrefrenable de pasarlo bien, y es enormemente representativa del disco en su reflexión última de que pasarlo bien también es política.