2002. Habían transcurrido 5 años desde la edición de ‘Portishead’, y el grupo de Bristol se encontraba en un hiato indefinido (11 años, 11, transcurrieron hasta su siguente álbum, ‘Third‘). Entonces, un día 28 de octubre, apareció una absoluta maravilla que complementaba y engrandecía el universo del grupo: ‘Out of Season’, un disco fantástico en el que la quejumbrosa voz de Beth Gibbons flotaba en fantasmagóricos ambientes de folk, soul y jazz tejidos junto a Paul Webb, bajo el alias Rustin Man.
Webb, amigo de la adolescencia de Lee Harris, fundó como bajista junto a él y Mark Hollis uno de los grupos cruciales de los años 80, Talk Talk. Formó parte del grupo en su época de mayor éxito, dejándolo justo después de la que se considera su obra cumbre, ‘Spirit of Eden’, publicada en 1988. Después de probar suerte junto a Harris en el proyecto experimental O’rang, poco se supo de la actividad de Webb hasta su fulgurante aparición en ‘Out of Season’. Tras producir algunos discos (‘The Year of the Leopard’ de James Yorkston –2006– es quizá el más relevante), Rustin Man reaparecía hace pocas semanas de nuevo, esta vez sin Beth Gibbons.
El sello británico Domino ha anunciado la publicación el próximo 1 de febrero de 2019 de ‘Drift Code’, un nuevo trabajo de Paul Webb grabado en su casa de Essex –un granero a 3 millas de la población más próxima–, en el que su amigo Lee ha grabado las baterías y él todo el resto de instrumentos y arreglos. “Llamé al álbum ‘Drift Code’ como un oxímoron: un código es algo fijado, pero nuestro instinto es vagar, ira a la deriva. Me gusta la idea de que la vida es un acertijo que no podemos resolver porque la respuesta está cambiando constantemente», dice Webb sobre el disco.
Cuando decimos que Webb se ha encargado de todo el resto de instrumentación también se incluyen las partes vocales. Al menos así se deduce de ‘Vanishing Heart’, el primer avance de ese álbum. Una canción que, aún sin contar con la voz de Gibbons, resulta igualmente fascinante gracias a una instrumentación exquisita y una composición que nos recuerda al último Bowie (su timbre vocal resulta sorprendentemente similar, por no hablar de esas voces dobladas) y también al Nick Cave más sigiloso. Una auténtica delicia de la que ya se conocen también su portada (la que veis encabezando este texto) y su tracklist completo:
Tracklist de ‘Drift Code’:
1. Vanishing Heart
2. Judgement Train
3. Brings Me Joy
4. Our Tomorrow
5. Euphonium Dream
6. The World’s In Town
7. Light The Light
8. Martian Garden
9. All Summer