Un funeral de estado para una puta. Esa es la provocativa idea que articula el último videoclip de Stromae. Dirigido por Henry Scholfield, autor habitual de los clips de Dua Lipa o del ‘Di mi nombre’ de Rosalía, ‘Fils de joie’ juega con la caligrafía visual televisiva de este tipo de eventos –mucho plano general, cenital, composiciones geométricas- para hacer un irreverente homenaje a las “sex worker”, como reza un rótulo al principio.
Rodado en Bruselas, la ciudad natal de Stromae -aunque, como aparece también al principio, situado en un “país imaginario”-, el vídeo muestra una gran plaza rodeada de severos edificios de estilo neoclásico que recuerdan a la retórica arquitectónica de los estados totalitarios. El cantante, vestido con el traje y el sombrero con el que aparece en la portada de ‘Multitude’, preside la ceremonia hablando como si fuera un cliente de la prostituta fallecida.
La ceremonia es digna de una reina: desfiles militares con coreografías de ceremonia olímpica (o norcoreana), exhibiciones aéreas, presencia de autoridades internacionales y multitud de curiosos al borde de la lágrima. Conforme avanza el vídeo, esta solemnidad se irá agujereando por medio de pequeños gestos irónicos: de los pases de baile de las tropas a la provocadora vestimenta ad hoc del cortejo fúnebre. Al final, el féretro será depositado en un mausoleo que es una réplica del Arco de la Reunificación de Pionyang.