Puede que Pipiolas sean las más listas de todos, casi tan listas como los colaboradores de Sálvame, porque como ellas mismas se describen: “monetizamos el trauma”. A eso se le llama explotar recursos eficaz y eficientemente. De momento, solo han tenido la oportunidad de monetizar esos traumas en sus primeras tres canciones, pero las jóvenes Paula y Adriana acaban de fichar por Elefant Records, así que a Pipiolas les espera un futuro emocionante.
Paula y Adriana se conocieron en la RESAD, donde estudiaron interpretación. Sin embargo, sus caminos no se vuelven a cruzar hasta que a Paula le rompen el corazón y siente la necesidad de comenzar a escribir canciones. Es entonces cuando se acuerda de Adriana y de que la gente decía que se parecían. Que sus voces son de tesituras similares. Así comenzó esta aventura.
La música de Pipiolas son subidas y bajadas. Acelerones, frenazos. Melancolía que se convierte en euforia. Bedroom pop que sin darte cuenta es repentinamente algo mucho más guitarrero, pero sin olvidarse pasar por el house y el punk. Y todo consiguiendo que no te entren ganas de cambiar la canción con lo que podría ser un mareo.
En ‘Narcisos’, su primer single, dejan la marca de estos cambios de ritmo y estilo, pero en ‘Club de los 27’ se le suma una ingeniosa y divertida letra que podría pertenecer a Mecano perfectamente. “En el club de los 27 ya no están todos los de siempre, porque se ha morido la gente, cuerpos fríos son suficientes”. Aunque esta frase compite por el título con las nada desdeñables “¿Y ahora qué hacemos con la modernez? ¿Y ahora qué hacemos con lo que mola?” o “Te vi escuchando Wonderwall (Va, que sí, que eres el más moderno)”.
Finalmente, su último single ‘Un poco triste :(‘ es el más bedroom pop de todos. Un desamor en inglés, ritmos para escuchar en soledad tumbado en la cama o en momentos de bajón que contrastan con imágenes veraniegas. Al final de la canción, sorprende una corta frase en castellano que devuelve la sonrisa a quien la escucha y le saca del universo ‘Un poco triste :(‘ de un plumazo.