María Talaverano, Paola Rivero y Alicia Ros dejan de lado el tontipop de sus dos primeros y exitosos discos, ‘Movidas’ (2018) y ‘CARIÑO’ (2022), en su nuevo trabajo. Producido por El Malamía y Luis Lamadrid, ‘TANTO POR HACER’ es un disco puramente pop. A secas. Lejos de la divertida inmediatez de sus dos anteriores lanzamientos, Cariño por fin se atreven con las baladas en su disco más… no maduro. Honesto.
Me encuentro con las tres artistas a las 18 de la tarde, después de un intenso día de promoción que comienza a las 10 de la mañana. Una entrevista detrás de otra. Aun así, no dejan que se les note. Hablamos con Cariño sobre el lado malo de tener una banda de éxito, salir de su zona de confort y desquiciarse en el proceso, un nuevo sonido y lo difícil que es poner un buen título a un disco.
¿Qué tal estáis? Imagino que estáis supercansadas.
Alicia: Sí, pero bien. Cansadas pero bien.
Paola: Yo en este punto no estoy cansada, estoy loca. Es como que ahora vuelvo a tener energía.
¿Cómo os sentís los días antes de lanzar un disco?
A: Muy nerviosas.
P: Además, siempre solemos estar haciendo como muchas cosas. Es un poco como la sensación antes de salir a un concierto.
Además, lo primero que hemos visto del disco es ‘Nada Importa Tanto’. En el vídeo salís buscando sustitutas para la banda. ¿De dónde viene esta idea?
A: Lo estuvimos hablando con Celia Giraldo, que es la que ha hecho los tres videoclips. Para nosotras, tener un grupo tiene cosas buenas y tiene cosas muy malas y queríamos comunicar que no tenemos las expectativas en parecernos al artista ideal ni ser las mejores. Simplemente queremos hacer lo que nos gusta y ya. Que se pongan otras en vez de nosotras.
P: Como que se idealiza mucho al artista, ¿no? Era recordar que simplemente somos personas normales. Como todos los artistas, pero nosotras también.
¿Cuándo os disteis cuenta de que había cosas buenas y malas a partes iguales en la industria?
María: No muy tarde.
A: Muy al principio, sí. Ha sido un viaje muy intenso desde el principio. Siempre haciendo mucho. Y en ese mucho había de todo, bueno y malo.
P: En general, no se suele hablar en redes sociales de las cosas malas. Simplemente, se hace énfasis en lo bueno y lo otro se tapa. Como artistas, también tenemos la responsabilidad de hablar las cosas con claridad.
Siempre se dice que es el mejor trabajo del mundo.
A: Este año, yo estuve trabajando en nuestro sello, en la oficina, porque me apetecía tener un trabajo normal, pero sin cobrar ni nada. Me encantó, la verdad. Me ordenó mucho la cabeza. Tener una rutina me sentó genial. Y sí, que este trabajo está genial, pero también tiene sus cosas malas.
P: Es un trabajo muy divertido, pero también tiene la cosa de que estás 24/7 en esto. No es una cosa que tenga horarios, como puede ser una oficina.
M: Es autocontrol.
P: Sí, pero por mucho que tú quieras, tú no puedes controlar que cuando te estés durmiendo te venga una idea de una canción o que cuando te estés duchando estés pensando en un videoclip y salgas corriendo a apuntar cosas… Son cosas guays, pero es como un motor que nunca para. Tú eres tu jefa. Al final, somos privilegiadas por tener este trabajo y lo agradecemos todos los días, la verdad.
«Tener una banda te desliga mucho de tus círculos íntimos. Es bastante doloroso»
¿Qué es lo peor de tener una banda de éxito?
A: No tienes tiempo para dárselo a los demás. A tu familia, a tus amigos… Pierdes mucha relación con ellos, te pierdes un montón de planes que podrías estar compartiendo y te desligas mucho de tus círculos íntimos. Es bastante doloroso.
P: Eso es justo de lo que habla ‘Nada Importa Tanto’. Por eso fue el primer single de este álbum. Sentíamos que era muy importante empezar a hablar de este álbum desde ese punto, desde que lo importante para nosotras son las personas y no tanto los hitos o los éxitos. Por mucho dinero que tengas, si no tienes con quien compartirlo…
¿Y cómo mantenéis la cordura?
M: Yo siempre he estado loca.
A: Yo también he estado un poco loquilla. No sé, creo que es la edad. A mí me da un poco de tierra. Me siento más dueña de lo que hago.
P: Somos tres personas bastante loquitas. Yo creo que en el mundo creativo las cabezas funcionan a otro ritmo, a otra movida.
A: Lo bueno es que cada una es loquita con su cosa.
P: Pero con mucha terapia.
¿Cómo se os ocurrió lo de representar lo bueno y lo malo con el meme del autobús?
A: Pues se me ocurrió a mí. Era encontrar un sentido a esa dualidad. No sé, empecé a pensar en imágenes que pudiesen representar el equilibrio entre lo bueno y lo malo, y creo que el meme era muy divertido.
P: Es que esta chica tiene unas ideas…
A: Y le faltaba un poco de humor al disco. Siento que tiene un peso muy serio.
Sí que hay mucho desamor en las letras. ¿Tiene que ver también con hacerse mayor?
A: Son experiencias.
M: Cuanto mayor eres, más desamores acumulas. Y más amores, claro. Todo lo que duele, es porque lo amaste.
P: Nos preguntaban si habíamos pensado en hacer canciones reivindicativas, porque siempre tratamos el amor y tal. Y sentimos que este disco es una reivindicación al amor, pero no tanto como al amor romántico, sino al amor desde otros puntos. El amor adolescente e intenso, hacia los amigos o hacia uno mismo.
Leí que ibais a sacar este disco en enero de 2023.
P: Es que siempre nos pasa lo mismo. Habíamos empezado el disco y cuando nos juntamos con Lucas Malamía y Luis Lamadrid, los productores, de repente empezamos a hacer otro. Nos ayudaron a repensar un poco el concepto y empezamos a escribir canciones de cero otra vez. De ahí salieron ‘Nada Importa Tanto’ y otras que no entraron en el álbum.
A: Hay canciones que se han recuperado y que se pueden aún recuperar para el futuro.
‘Nada Importa Tanto’ también muestra un sonido más orgánico. ¿Esto es cosa de los productores?
A: Nos salía de forma natural que fuese así, porque ahora vamos con banda y sabíamos que podíamos abarcar muchos más sonidos orgánicos que antes, que íbamos solo las tres. Entonces, ya de primeras queríamos que sonase más orgánico. Además, ellos tenían la capacidad de traducir muchas ideas rápidamente en canciones.
M: Yo diría que la guitarra está muy baja. Cada vez me raya más.
A: Yo lo he dicho siempre.
P: Al margen de eso, ha sido muy bueno trabajar con ellos.
¿Diríais que habéis salido de vuestra zona de confort mientras grababais el disco?
P: Yo casi me arranco los pelos.
A: A veces era muy ‘challenging’. ¿Cómo se dice eso?
P: Era un reto. Además, ellos intentaban que fuésemos hasta los límites y que experimentásemos. Entonces, quieras o no, era siempre una experimentación en el estudio, probando cosas y eso. Cualquier disco que requiera una búsqueda creativa es eso. Es desquiciarte y es encontrar sitios en los que no, encontrar sitios en los que sí y ya está. Es nuestro ejercicio: el desquicio.
«Nosotras tres solo sabemos hacer música alegre. Las letras pueden ser tristes o no, pero música alegre es lo que sabemos hacer»
Para este disco habéis cambiado una de vuestras insignias, por así decirlo, que es hacer música alegre y letras tristes. Aquí habéis querido seguir el rumbo de la música, por así decirlo.
P: Ese fue uno de los primeros retos, ¿no?
A: Nosotras tres solo sabemos hacer música alegre. Las letras pueden ser tristes o no, pero música alegre es lo que sabemos hacer. El cuerpo nos pedía hacer alguna balada, y en los directos habíamos intentado convertir alguna canción en eso. Nos pedía el cuerpo intentar hacer música más calmada, a ver qué pasaba. Sobre todo, no nos veíamos con esa energía tan fugaz desde el principio.
Una de mis favoritas es ‘Hay magia’. Me parece que es justo de lo que estamos hablando. Me gusta que se muestre… es que no me gusta decir la palabra madurez.
A: Hay que buscar un sinónimo.
P: Sinónimo de madurez… (buscando en Google) Experiencia, sensatez, florecimiento.
Es vuestro disco con más sensatez.
M: Es nuestro disco con más años. Somos más jóvenes que muchos viejos.
«Nos gustaban los grupos de tontipop de Elefant. Es un halago que nos metieran ahí. Ahora estamos en otro momento vital»
¿A vosotras os gustaba el término tontipop o pasabais de ello?
A: No nos autoproclamábamos tontipop, pero sí. Es que nos gustaban un montón de grupos de tontipop de Elefant y por eso empezamos a hacer música.
M: Al final, también es un halago que nos lo dijera la gente, yo qué sé.
P: No renegamos de eso, simplemente estamos en otro momento musical y en otro momento vital. Y ahora mismo a lo mejor lo que estamos haciendo sentimos que es más pop, a secas, que ‘Movidas’, que sí es un disco de tontipop.
A: Es lo que hemos hecho, pero no hemos cerrado la puerta del tontipop.
Os habéis centrado en otro sonido, pero teníais que seguir sonando a Cariño. ¿Eso ha sido difícil?
P: Sí. Teníamos miedo de que sonase a una cosa como que no era nosotras. Esa siempre ha sido una de las cosas que nos rayaba muchísimo.
A: También hemos trabajado con dos personas extra a nivel de composición y eso nunca lo habíamos hecho. Y con mucha idea y mucho conocimiento de la música. Entonces, nos daba mucho miedo.
P: Siento también que cuando nos juntamos las tres en el estudio, inherentemente, incluso por las decisiones que tomamos, está ahí Cariño. Es raro. Es una especie de espiritualidad rara.
¿Por qué os parecía apropiado el título de ‘TANTO POR HACER’?
P: Lo vamos a cambiar.
¿El título del disco?
P: Es broma, no lo vamos a cambiar, pero nos hemos dado cuenta de que ‘Nada Importa Tanto’ nos parece un título mejor.
A: Más adecuado para lo que queríamos comunicar, pero bueno, ‘TANTO POR HACER’ también está muy bien. Habla de esa dualidad de las cosas buenas y malas, y de que siempre vas a tener camino por delante.
P: Habla también de los posibles. Cuando te enfrentas a una vida, a un disco, hay muchas posibilidades de afrontar las movidas, y en esa parte está lo bueno y lo malo.
M: Si no te queda nada por hacer, estás en el hoyo.
P: Se va a quedar así, ya está impreso.
Dijisteis en una entrevista, cuando hablabais de tocar en Coachella, que como compositoras os respetaban mucho más en México que aquí.
P: ¿Pero quién dijo eso?
A: Eso lo ha debido de decir María.
M: Es que es verdad. Allí es como: «Hostia, de Cariño, tal». Siento que hay más respeto en general. Aquí no sé, es diferente.
¿Os sentís menos respetadas aquí??
M: No es menos respetada pero, en general, con menos fuerza. No es que no nos respeten.
Le pasa a muchos artistas españoles.
A: Sí, mira La Quinta Estación. Creo que en México también se respeta más la música española. Eso también es verdad.
M: Simplemente es una crítica a las oportunidades de composición en España y fuera.