Gran cita con la buena música en castellano este fin de semana en Madrid. Este viernes 13 de mayo actúan en OchoyMedio Kokoshca, que acaban de editar nuevo single; Pablo und Destruktion, el año pasado nominado al Premio Ruido a disco del año por ‘Vigorexia emocional‘; y Juventud Juché, presentando el estupendo ‘Movimientos‘. Un firme paso adelante frente a su debut en el que destacan canciones con la pegada de ‘Fuera’, ‘Niebla’ o ‘Pasos’. Hablamos con Javier Molina (voz y guitarra), Luis Fernández (bajo, también bajista en Punsetes y empleado del sello Music As Usual) y Arturo Hernández (batería) sobre el largo, la línea monocorde de los festivales españoles o el cambio generacional.
¿De quién fue la idea de montar este concierto con tres artistas?
Luis: «OchoyMedio nos dio libertad y somos amigos de (la productora) Intromúsica. Kokoshca son amigos y con Pablo queríamos reunir tres grupos de la misma generación».
¿Algún artista que no haya podido ir?
L: «Yung Beef, pero me dijo David (Intromúsica) que no podía porque tenía una exclusividad para lo del Perreo en La Riviera o algo así».
Arturo: «Pensamos también Triángulo de amor bizarro».
Javier: «Pero a eso ya no llegábamos».
L: «Luego ya entendimos por qué esa fecha estaba tan libre. Era San Isidro, el puente, los conciertos de la pradera… pero bueno».
¿Cuántos conciertos habéis hecho?
J: «Doscientos, por ahí. Los primeros uno o dos años tocábamos un par de veces al mes en Madrid. Al final acabamos siendo unos pesaos».
A: «Pero nos vino bien. Así hicimos algo de rodaje».
J: «Ahora hemos relajado un poco, igual demasiado, porque hace seis o siete meses que no tocamos».
L: «Queríamos hacer algo más grande esta vez».
¿Recordáis algún punto de inflexión para bien en el rodaje del grupo?
J: «La fiesta de Sonido Muchacho en Rock Palace, y la de La Fonoteca en Siroco poco después (NdE: verano de 2013)».
Os vi en el FIB, lloviendo, y me gustó mucho. Me di cuenta de que el punto de inflexión me lo había perdido.
L: «Fue guay y a buena hora».
J: «Además diluvió. Los de antes cancelaron».
«Podemos estar contentos de no estar solo enfocados al rollo viejuno. Sí que hay gente joven a la que le interesa esto»
¿Qué tipo de público tenéis? Me da la sensación de que ahora hay una generación a la que Los Planetas y el indie de los 90 le dan igual, y creo que vosotros estáis a medio camino de las dos cosas.
A: «En su mayoría es más treintañero».
J: «Yo creo que no hay público joven en los conciertos, no es porque seamos una cosa más pureta. Desde que llegué a Madrid veo a la misma gente en los conciertos. Es verdad que a veces también veo gente nueva, podemos estar contentos de no estar solo enfocados al rollo viejuno. Sí que hay gente joven a la que le interesa esto».
L: «Hinds, Parrots… igual es esa brecha a la que te referías en la pregunta».
Exacto.
L: «Por asociación muchos medios nos han metido con ellos. Algo de trasvase de público sí hay».
Es que igual sí que hay público joven, pero para el rollo PXXR GVNG o para Hinds…
J: «Bueno, eso claro. El otro día con Cecilio G el público era súper joven».
También lo que vosotros hacéis es atemporal, es algo que siempre ha tenido su público…
J: «Es el intento, supongo».
L: «No nos regimos por ningún tipo de moda, supongo que estará ligado a eso».
«No nos regimos por ningún tipo de moda»
¿Qué tal os ha ido en el SXSW? Ahí supongo que encajasteis perfectamente.
L: «Es que ese festival es una cosa muy rara. Más que un festival es una feria de muestras. Tú vas a tocar y puede que te toque en un restaurante tipo Foster Hollywood. Tú tienes que traer a la gente para que te vea. Tocamos en una cafetería que pensamos que íbamos a echar al público en el primer acorde, la gente estaba comiendo a un metro. Y no, se levantaron y tal. Es algo cultural».
A: «También por eso. No está centrado en un estilo, hay desde señores de country hasta rap. Es tan variopinto que todo entra bien».
Se veía en el diario que nos escribiste, ¿no, Javier?
J: «Era muy extraño. La mayoría de conciertos es con gente que se los encontraba. Era todo improvisado y casual. Una cosa muy rara».
¿Qué imagen se os ha quedado?
(resoplan)
A: «Días muy largos en que hacemos muchas cosas».
L: «Entras en un bucle de 5 o 6 días. La imagen que tengo es de bucle, como si todo hubiera sido el mismo día. Miles de conciertos pero en el bucle. Y cerveza mala».
Alguien: «Y cara».
J: «Todo el día andando y no ver nada».
¿Pero os ha gustado un mínimo girar, por si os surge algo por Europa o Latinoamérica?
A: «Viajar siempre mola».
L: «Yo ya había ido al SXSW con Disco Las Palmeras. Merece la pena ir, me lo pasé muy bien, pero la sensación es de estar en el mismo sitio haciendo lo mismo todo el tiempo».
El nuevo disco es muy variado, ¿lo percibís así?
J: «La mayoría de la gente nos dice que es demasiado distinto al anterior. La gente más del punk y el garaje. A mí me parece distinto pero tampoco es un volantazo tremendo. Hemos llevado a cabo un montón de cosas que no habíamos sido capaces de hacer bien. Son las ideas que teníamos en el primero pero bien hechas. Ahora no tenemos miedo a desarrollar una canción, la desarrollamos en lugar de dejarla en esbozo porque no tenemos manera de tirar de ella».
¿Y por qué crees que es?
J: «Por el tiempo que llevamos haciendo cosas. Aprendes a hacer canciones haciéndolas. Vas teniendo más recursos».
L: «El primero me gusta mucho pero es más deslavazado. Bernardo (Calvo, productor) hizo un poco lo que quiso con los elementos, la guitarra suena prácticamente por línea. Queríamos que se pareciera a la pegada del directo. Aunque luego Ian Crause hizo otra cosa, pero es lo que queríamos al principio».
‘Todo el rato’ tiene tantos elementos que me daría miedo mandarla a producir o masterizar fuera, como habéis hecho, por lo que pudiera pasar. ¿No teníais ese miedo?
J: «Todo eso es Ian. En ese tema es todo lo contrario. Le mandamos una cosa que él mejoró mucho».
L: «La íbamos a descartar y él la produjo, la rellenó mucho».
J: «A mí es de las que más me gustan».
¿Y algo que no os guste como ha quedado en la mezcla?
A: «La verdad es que pensamos que ha quedado bastante redondo».
J: «Hubo una canción que descartamos».
L: «Queríamos que el disco no fuese muy largo».
«Un disco de más de 40 minutos, salvo contadas excepciones, me parece un aburrimiento»
Sois de disco corto. Eso en realidad es muy popero. ¿Os consideráis pop?
L: «Javi siempre lo decía en las entrevistas del primer disco».
J: «Un disco de más de 40 minutos, salvo contadas excepciones, me parece un aburrimiento. No me interesa eso. Hacemos canciones y hacer canciones es pop. Para mí es así de sencillo».
Esta vez habéis incluido las letras, ¿había una intención o ha sido sólo cuestión de presupuesto?
L: «Las letras son más cosa de Javi, pero había una intención. Las letras es lo que más ha evolucionado, para mí son mejores. Era una obviedad que esta vez tenían que estar. Luego, Ian ha puesto la voz en primer plano, sin entender las letras».
J: «El otro día escuché el primero y casi doy gracias de que no estén impresas. Son mejores ahora».
¿Y serán mejores en el futuro? ¿Tienes esa inquietud? Quiero decir que vuestras letras tienen un estilo particular. Es un retrato de una persona alienada que quiere salir, luchar… pero hasta ahora me parecía que las letras no importaban en Juventud Juché pero por lo que veo sí tienes esa inquietud.
J: «Jamás había hecho letras, he aprendido a hacerlas con las canciones. Como público siempre les he dado importancia y ahora lo tengo en cuenta. Del tema que se ha quedado fuera, la letra me parecía una puta mierda. Las letras del disco es algo bastante cerrado y esta canción se salía de eso».
¿De qué iba? También percibo en las letras una llamada a la acción, no necesariamente política. ¿Igual se salía de eso?
J: «Si te digo la verdad, no me acuerdo. Recuerdo escucharla y pensar «qué me estás contando». Era más pachanguera, estilísticamente. Luego la recuperaremos y diremos que cómo mola…»
Si es pachanguera pasádsela a Los Sobraos…
J: «Estaría guay».
Me mola mucho el tema ‘Pasos’, sobre todo la batería, y el final es una locura.. ¿Cómo habéis llegado hasta ella?
A: «Esa era de las canciones que pedían ser arregladas».
L: «¿Cuál es ‘Pasos’?
J: «‘Africana’. Usamos los nombres de las demos».
A: «Cuando las hacemos les ponemos un nombre y luego lo cambiamos.
¿Qué más títulos han cambiado?
J: ‘Fuera’ era ‘Miedo o casi’ porque se parecía a ‘Miedo’. ‘Parecer’ era ‘Pirañas’ porque se parecía a Los Pirañas».
A: «‘Todo el rato’ era ‘La bajona’ porque era la más lenta».
J: «Niebla era ‘Liquid Liquid’ porque se parecía a Liquid Liquid. ‘Bien’ era ‘Brian Eno’…»
La persona que redactó la crítica de vuestro disco para nosotros observó la de veces que aparece la palabra «nada». ¿Os habíais dado cuenta?
J: «No, pero sí de que hay cosas que uso demasiado».
Bueno, es una palabra de uso común, no es «geometría polisentimental»… Creo que es significativo que la uséis (y no necesariamente malo).
J: «Es seco y algo que puedes gritar muy rápido».
¿Nunca habéis pensado en cantar en inglés?
Todos: «No».
Lo digo porque siempre se dice que en inglés todo suena mejor.
J: «Es verdad. Echo de menos monosílabos. Para hacer punk o algo seco vienen muy bien. Al principio nos costaba encontrar referencias de cantantes letristas en español que pudiesen valer para esto. Sí es complicado».
¿Cómo clasificaríais estilísticamente ‘Fuera’, tiene una parte que me recuerda a una parte de ‘Cómo encontró a la Diosa’ de «Triángulo», aunque ambas canciones se grabaron el año pasado probablemente a la vez. El caso es que un colega dice que esta es un boogie, pero yo no lo veo.
(…)
J: «Para mí es la canción tipo de Wire. No se me ocurre otro nombre».
Tiene claramente dos partes, ¿surgieron a la vez?
J: «Ha sido siempre así, desde el principio, pero los arreglos de Ian en la parte del final han sido alucinantes».
L: «Aunque ha respetado mucho esa canción».
Enseguida se corrió la voz de que erais muy buenos en directo. ¿Ha sido una inquietud captar la energía del directo? Como parece que ya sólo cuentan los directos porque es donde está la pasta…
A: «La idea era que se pareciera al directo, pero también queríamos cambiar. Queríamos algo más producido, más acabado».
L: «Al escoger a este hombre sabíamos que no iba a ser como el directo. Queríamos una cosa muy elaborada».
L: «Teníamos claro que conceptualmente es muy distinto un directo a hacer un disco. Un productor es como un miembro del grupo. Incluso en el primer disco pasaba eso. Bernardo hizo lo que le dio la gana y ahí está. Respetamos mucho a la cuarta persona y su compromiso con el disco».
¿Leéis las críticas? He leído comparaciones que me han descolocado, en Mondosonoro… incluso en JENESAISPOP. No veo lo de Primal Scream…
J: «Me llamó más la atención El Columpio Asesino y León Benavente».
L: «La gente tiene referencias diferentes. Al hablar de grupos nacionales, estilísticamente pillas de lo que hay».
J: «Fue un poco gratuito, no sé de dónde salió, pero bueno».
Supongo que os sentís más cerca de Triángulo, o por campos semánticos de nudozurdo o Parálisis Permanente. Y que quizá vuestro techo en popularidad sería el de Triángulo…
J: «Un poco más cerca que de León Benavente, sí (risas)».
L: «Siempre que sale este tema hemos señalado a Triángulo».
¿Y les gusta lo que hacéis?
L: «A Rodrigo le gustó el primer disco y sé que es fan de Ian Crause».
¿Hay algún fan famoso que os haya sorprendido que le gustéis?
J: «Nunca le pregunto a la gente (se ríe). Me parece violento».
«Mi familia va a entender menos lo que hago, que cualquier otro».
¿Y a vuestra familia?
J: «Mi familia va a entender menos lo que hago, que cualquier otro».
L: «Yo pregunto en general».
Supongo que también por trabajar en Sonido Muchacho y Music As Usual y por haber trabajado en Universal… ¿Toda esa información que tienes, Luis, os ha servido para algo en el grupo?
J: «Yo creo que sí».
L: «Sonido Muchacho es paralelo a todo el trabajo que tengo. Yo creo que sí ha servido. A veces digo «escucha esto y también Juventud»».
Aparte de en Universal, ¿has trabajado en algún otro sitio?
L: «No. Sonido Muchacho lo montamos en la universidad y de ahí enganché con esto».
J: «Yo creo que por ejemplo tenemos un contacto más directo con gente que organiza conciertos».
L: «Al final es que no hay mucha gente. Es la misma en todos lados, tú lo sabrás bien».
Yo preguntaba también artísticamente. Hay cosas bien cerradas en Juventud Juché: el disco tiene 10 canciones, es corto, las dos portadas están muy relacionadas. No sois el típico grupo maquetero que se te presenta con 22 canciones.
L: «Pero eso es una cosa que ha salido muy natural. Teníamos muy claro lo de las portadas. Las hizo Coque (Álvaro Plaza) que es un compañero de ellos dos de Almería. Pensamos que si ha hecho una portada, ya tiene que hacer todas».
¿Cuánto tiempo lleváis en Madrid ya?
A: «Nueve años. Vinimos a estudiar en la universidad. Yo Publicidad y Javi Informática. En la universidad conocimos a Luis».
¿Barajáis vivir de la música? Ahora mismo, con tanto festival…
Todos: «No».
L: «El grupo perdería sentido y tendríamos que ganar mucho dinero. Nos acabaríamos matando seguro, y tendríamos que pasar por hacer ciertas cosas que no hacemos, y supongo que tocar mucho más de lo que nos apetece. Toco en Punsetes. Pagamos por el local como por un piso. Es una entelequia».
Por ejemplo Klaus & Kinski recuerdo que nos contaban que con lo que ganaban en festivales podían vivir 4 meses, pero se preguntaban qué hacer luego.
J: «Pues imagínate nosotros, nos tendrían que llamar de 10 festivales en 4 meses».
L: «En España hay una burbuja de vivir de festivales. Nosotros somos felices en el grupo si cada uno se dedica a su cosa y luego hacemos esto».
J: «En Madrid han salido 40 festivales nuevos que a saber lo que duran».
«Parece que para tocar en un festival ahora tienes que sonar de una manera. Hay un estándar de letras, música, producción, hasta de cómo están los instrumentos mezclados, cómo está metido el bajo… y ya entras en un festival. Veo una primera línea muy clónica»
¿Qué os parece la línea editorial de los festivales españoles? ¿No es un poco monocorde?
J: «Joder y tanto que es monocorde».
L: «Lo de este viernes lo montamos con grupos que han hecho lo que han querido a nivel de concepto. Es que parece que para tocar en un festival ahora tienes que sonar de una manera. Hay un estándar de letras, música, producción, hasta de cómo están los instrumentos mezclados, cómo está metido el bajo… y ya entras en un festival. Veo una primera línea muy clónica, que se ha adaptado a los festivales. Que es una burbuja porque luego tocas en una sala y tocas para 50 personas».
Bueno, no os referiréis a Izal…
L: «Izal sí llena un Palacio de los Deportes, pero luego hay una serie de grupos que sí tienen esa referencia. O el promotor coge dos cosas en la línea».
¿Y vosotros lo vivís con frustración, indiferencia…?
J: «Lo veo como que no va con nosotros. Nosotros, si nos llaman, genial. Es otra liga».
L: «Es un orgullo que te llamen para festivales, pero no aspiramos a eso. Tienes que entrar en una sonoridad, un juego… que nadie en el grupo quiere».
Entonces habéis llamado a Kokoshca y Pablo und Destruktion porque se sale de eso.
L: «No con esa premisa, pero luego pensándolo… Son gente que hace lo que le da la gana, no tiene una carrera delimitada. Si nos dice un amigo que vayamos a tocar a Galicia, vamos».
Eso me recuerda a Pablo und Destruktion. Él sí tiene claro que quiere vivir de la música y toca en todas partes.
L: «Lo respeto un montón. Ha elegido vivir de esto y con lo que le da la gana».
¿Preparáis algún tipo de vídeo, un 7″, una colaboración?
A: «Vídeo sí e igual algún remix con algún grupo».
L: «La idea es hacer un EP de remixes».
¿De qué tema haréis vídeo?
Todos: «Ni idea».
Seguro que al final no hacéis vídeo.
L: «No, no, esta vez sí, hay que empezar a pensarlo ya».
J: «»Hay que empezar a pensarlo ya», cuando ya lleva el disco como un año terminado…» (se ríe)
En cuanto a remixes, ¿estáis pensando algo tipo lo que ha hecho La Bien Querida?
J: «Es una idea guay lo que ha hecho ella».
L: Está muy en el aire, hay que buscar gente que nos guste y que haga lo que quiera».