El pasado viernes se publicaba oficialmente el tráiler de ’England Is Mine’, el biopic de Morrissey, no autorizado, sin música ni frases conocidas del artista, que retrata su vida justo antes de que los Smiths publicasen su primer disco. La cinta se centra, por tanto, en los años entre 1976 y 1982. La reacción de sus seguidores ante el primer tráiler fue buena y el sentir de las decenas y decenas de comentarios de su web de fans Morrissey-Solo era positivo: “me lo esperaba peor”, “Jack Lowden ha trabajado duro en lograr una voz parecida a la de Morrissey al hablar” y por supuesto recibió elogios ese momento situado estratégicamente al final del tráiler, que muestra a Johnny Marr llamando al timbre de Morrissey.
Sin embargo, la cinta dirigida por Mark Gill ha pasado este fin de semana por el Festival de Cine de Edimburgo y acumula sobre todo críticas encontradas de 3 estrellas sobre 5, con alguna de 4 y alguna de 2. La más significativa es la de The Hollywood Reporter, que habla largo y tendido sobre cómo los años elegidos no son los más significativos de Morrissey, se queja del poco protagonismo de Johnny Marr, de cómo el guión se centra en la relación de Morrissey con las mujeres y “parece más preocupado por evitar baches y comparaciones inevitables que de crear su propio camino creativo”. Esta crítica tiene buenas palabras para la interpretación de Lowden o el modo en que se ha resuelto lo musical, pero cree que la sombra de ‘Control’, el biopic de Ian Curtis, con quien comparte productor (Orian Williams), es alargada.
The Fan Carpet, el medio que le ha dado 4 estrellas, elogia también el uso de música y literatura en la cinta como forma de situar a Morrissey, que compara con ‘Nowhere Boy’, así como de nuevo la labor del actor protagonista. En cambio, The List, el medio que suspende la cinta, cree que «la ausencia de música (de los Smiths) y sustancia hará desesperar a sus fans».
Por su parte, James Maker, autor de ‘AutoFellation’ y amigo de Morrissey en los años referidos, ha tenido unas palabras muy duras contra el film en Facebook tildándolo de “ficción”. Cree que el genio de Morrissey no aparece por ningún lado, asegurando que solo la madre de Morrissey ya debería demandarlos “por la malinterpretación que hace hasta de las cortinas”. “La premisa de que si Morrissey ha podido ser cantante, podrá serlo cualquiera, es un insulto al artista”, dice además de recordar que el cantante tenía muy pocos amigos en la época y que por tanto los personajes que vemos están “inventados”. «El hecho es que este no es Morrissey» es su declaración más sonora.