Papaya es nuestro top 1 semanal votada por el público con ‘¡Ay, mujer!’, su estupendo nuevo single, extraído de un 7″ publicado hace unas semanas y avance del disco que tiene programado para el año que viene. El proyecto de Yanara Espinoza nos contesta unas preguntas sobre este tema y alguna sobre el álbum que se avecina, con el que dice que vamos «a flipar» por su variedad de estilos.
Una de las gracias de partida de ‘¡Ay, mujer!’ parece que está cantada por una mujer, cuando este tipo de exclamaciones a lo ‘Chiquilla’ suele estar entonada por un hombre. ¿Lo ves parte de la gracia o crees que tendría la misma cantada por un chico?
La gracia está donde el espectador la quiera ver independientemente de que la cante un hombre o una mujer. No es una canción de amor hacia una mujer, es una canción de amor para mi madre, al menos los estribillos. Además, no creo que eso hoy en día sea relevante ni nadie se fije en eso.
«Ellas (las madres) siempre son más fuertes y se levantan después de caer mientras nosotros nos ahogamos en un vaso de agua»
El tema parece de empoderamiento femenino pero hay partes más opacas o ambiguas, sobre todo en la última estrofa. ¿Se trata algún tema más que no sea tan evidente?
No hay ningún empoderamiento femenino ni nada feminista en esta canción. Lo que sucede es que como está tan de moda pues escucháis la palabra «mujer» y ya enseguida no se os ocurre otra cosa. La mujer es mi madre y va dedicada a ella, fue mi inspiración a la hora de hacerla. Es un piropo optimista para mi madre en forma de metáfora cuando habla de lo de nacer ya que ellas siempre son más fuertes y se levantan después de caer mientras nosotros nos ahogamos en un vaso de agua. En las estrofas no hablo solo de ella, hablo de mi padre también, de cosas familiares y del sitio en el que me crié, de mi pueblo y lo que lo rodea.
La canción se presenta como un homenaje a la figura maternal, pero hay partes que parecen irónicas o por lo menos parecen divertidas, como lo de “No le fíes, dale buen garrafón”. ¿Estamos frente a una ‘Carmina’ como la de Paco León?
Claro que hay partes irónicas, no todo va a ser serio o intenso. Intentar interpretar una canción es casi imposible. En mis canciones hay una inspiración y luego mil cosas de por medio que adornan eso. Para mí lo importante no es darlo todo hecho ni evidente sino más bien expresarme, que suene bien y que le guste a la gente por algún motivo que incluso hasta ellos mismos a veces desconocen. No hay una clave ni un tema en concreto. No lo voy a dar todo mascado, para eso ya tenéis mucha música así ya en España que se encarga de esa misión. Mi madre es guapísima, blanca, rubia, de ojos verdes y pelo ondulado y rubio. Pero vamos, que soy fan de la madre de Paco. Ya podrían poner a mi madre a hacer anuncios y así ganar pasta.
«No lo voy a dar todo mascado, para eso ya tenéis mucha música así ya en España que se encarga de esa misión»
De estas 3 canciones, ¿solo ‘¡Ay, mujer!’ irá en el disco del año que viene o habrá alguna más?
Sí, solo irá ‘¡Ay, mujer!’, ya que la idea de la colección “Singularidades” era hacer algo especial y único. Por ello metimos una versión y una colaboración. No queremos repetirnos tanto. Guardamos las mejores canciones para el disco.
Hay en redacción quien de hecho prefiere ‘No sé nada del amor’ frente a ‘¡Ay, mujer!’. ¿Te lo está diciendo más gente o teníais el single claro? Por cierto, ¿habrá vídeo del tema?
En la redacción y en todos lados hay gente que prefiere una y otra que prefiere otra, de eso se trata, de poder elegir y de que no todo sea una apuesta a una misma canción. De ‘No sé nada del amor’ la melodía y el estribillo los tenía hechos desde hace mucho tiempo y por aprovecharla le dije a Alberto & García que hiciese la letra ya que la consideraba pegadiza y había que aprovecharla. En Spotify las cifras están sobre 26.780 reproducciones ‘Ay, mujer’ y ‘No sé nada del amor’ está en las 3.187. Las cifras, algo dicen, creo yo. Y sí, habrá vídeo del single el próximo año, nos lo está haciendo una gente de Barcelona. Hemos tenido que elegir entre muchas propuestas ya que teníamos muchas ofertas y todas buenas.
No he interpretado ‘No sé nada del amor’ como dúo chico/chica al uso sino más bien como una voz única. ¿Es así?
Supongo que eso sucede por la masculinidad de ambas voces y que esto no es Operación Triunfo. Alberto tiene muchos registros y supongo que de algún modo también intentó acoplarse a mi rollo y darle un rollo homogéneo y oscuro.
«En el disco musicalmente hay de todo, todo lo que me gusta: pop, country, latino, baladas, rock, rap… vais a flipar»
En cualquier caso, el disco o el resto del material que tienes, ¿sigue la línea parecida a la que encontramos en este single?
Ya sabéis que con Papaya no hay mucha línea, más bien hay circuitos entrelazados en caos de varios estilos. En el disco musicalmente hay de todo, todo lo que me gusta: pop, country, latino, baladas, rock, rap… vais a flipar. Lo que hace un hilo común es mi voz y las letras.
¿Consideras entonces que la amalgama de estilos improbables es parte de la gracia de Papaya?
Supongo que sí. Mucha gente está acostumbrada a que sus artistas favoritos hagan lo mismo y siempre les apoyan. En nuestro caso, hago lo que me sale, lo que quiero y lo que me apetece sin importarme nada, creo que me lo puedo permitir. No tengo miedo a nada y me gusta de todo. Quizás es un riesgo pero en este mundo que vivimos tan rápido y que todo nos aburre enseguida y que todo es tan predecible pues no lo considero un handicap. Alguien tiene que traer frescura ante tantas canciones y artistas predecibles y a nosotros nos encanta hacer esa tarea.