El Festival de Eurovisión es un concurso bastante injusto. Sí, puede ganar tu favorita o la más llamativa pero cuando se ve la tabla completa, es normal llevarse las manos a la cabeza con algunos sacrilegios cometidos por el público y el jurado europeos. ¿Se merecía la diva chipriota Ivi Adamou y su ‘La la love’ quedar decimosexta en 2012? Su directo fue lamentable pero era un temazo. ¿Era lógico que Barei quedase en vigésimo segunda posición a pesar de haber llevado una de las mejores propuestas españolas de la última década?
Tras hablar de las principales favoritas, en este artículo repasamos las propuestas más interesantes de Eurovisión 2018 que quizás no sean las más llamativas pero merece la pena escuchar.
Portugal
A pesar de que esta edición del Festival de Eurovisión se celebra “en casa”, los anfitriones portugueses no están levantando demasiadas pasiones o al menos expectación con ‘O jardim’, el corte que defenderá Cláudia Pascoal en la final del 12 de mayo. A pesar de ello, esta balada intimista de pop folk deja un buenísimo sabor de boca y seguramente un buen recuerdo de parte del país luso a lo largo de los años.
Ucrania
Dos años después de ganar el certamen con Jamala y su ‘1944’ y un año después de organizar el festival en Kiev en 2017, Ucrania estará representada con ‘Under The Ladder’ por Mélovin, un jovencísimo artista de Odessa con bastante repercusión tras coronarse como ganador en el X Factor de su país con tan solo 18 años. El chico tiene bastantes tablas (ha hecho cursos, que diría Paquita Salas) y su canción es un tema pop que podría sonar en cualquier radio europea. Con todos estos datos, llama la atención que este país no se mantenga en los primeros puestos de las apuestas.
Austria
El país alpino llega a Eurovisión 2018 con Cesár Sampson y ‘Nobody But You’, una canción R&B con toques gospel compuesta por los mismos autores que las dos últimas propuestas búlgaras (4º y 2º puesto respectivamente). El tema suena de algún modo elegante y promete llevar esa misma sensación al escenario del festival, con lo que parece ser una puesta en escena simple pero efectista.
FYR Macedonia
‘Lost & Found’ es la propuesta de Eye Cue para la antigua república yugoslava de Macedonia. Este país busca casi de manera desesperada un pase a la final puesto que solamente han logrado clasificarse una única vez (2012) en los últimos 11 años. Tras intentarlo con ‘Dance Alone’, un temazo electropop de Jana Burceska, este año apuestan por otro buen tema pop que puede dar la sorpresa. Aunque la polémica está servida y unas declaraciones bastante desafortunadas afirmando que Alfred & Amaia no se relacionan con el resto de participantes han puesto a este dúo en el punto de mira de los eurofans españoles.
Reino Unido
¿Cómo un país tan musical como Reino Unido está (salvo contadas excepciones) tan perdido en Eurovisión? Es frustrante, en serio. Los británicos podían haber escogido el temazo de Asanda llamado ‘Legends’ que se quedó en su preselección, y con el que seguramente ahora estarían peleando por un Top 10, pero la verdadera representante británica es SuRie con ‘Storm’. No os equivoquéis, ‘Storm’ es un buen tema pop, agradable de escuchar, que podría sonar en radios de toda Europa y cuyo estribillo se te pega en la cabeza durante horas, pero eso no parece ser suficiente para destacar en esta edición. Además, rima «together» con «forever», el cliché más cliché del festival.
Hungría
Eurovisión no es Eurovisión sin una canción de rock. El país centroeuropeo presenta a AWS con ‘Viszlát nyár’, un tema que, siendo estrictos con los géneros, es más hardcore que rock. Ver una propuesta como la húngara en Eurovisión llamará y mucho la atención en el festival, por lo que quizás estaríamos ante uno de los denominados black horse de la edición.
Lituania
Ieva Zasimauskaité es la representante de Lituania con una balada muy intimista de pop/folk llamada ‘When We’re Old’, consistente en su frágil voz, un piano, una guitarra a lo lejos y unos ecos en el estribillo. Nada más. Sí, es una canción muy bonita pero su pase a la final puede peligrar puesto que actúa entre República Checa e Israel (dos de los principales favoritos de la edición) y la gran mayoría puede dormirse con algo tan tranquilo entre esos dos gigantes.
Países Bajos
Otra interesante propuesta de country rock al más puro estilo Jack White nos llega desde los Países Bajos con Waylon y ‘Outlaw In ‘Em’. Es un cambio de registro bastante diferente del que Waylon mostró en 2014 junto a Ilse De Lange en el dúo The Common Linnets, cuando quedaron segundos tras Conchita Wurst con ‘Calm after the storm’. Actúa en la semifinal más floja por lo que no sería raro verle en la final.
Azerbaiyán
Lejos quedan ya los años en los que Azerbaiyán se esforzaba al máximo para ganar el festival. Una vez conseguido (lograron el triunfo en 2011 con una canción bastante insulsa, todo sea dicho), la delegación azerí se ha relajado bastante aunque ha seguido presentando propuestas más o menos interesantes. Es el caso de ‘X My Heart’, interpretada por Aisel. Un tema completamente pop, bastante pegadizo, y que en algunos momentos puede recordar a ‘Contigo’ de la eterna candidata española Mirela.
Bielorrusia
Alekseev defenderá al país soviético con ‘Forever’, la típica canción de amor en la que se dice “sé que vas a ser mía para siempre”. Adorable. Musicalmente hablando, se trata de otro tema pop fácil de recordar con un artista más o menos atractivo, por lo que su clasificación es más que probable pero hasta ahora no ha levantado demasiadas pasiones. ¿Tendrá que ver los pobres resultados del país en los últimos años?