Ingredientes (para 10 personas apróximadamente):
1 pavo (5-6 kilos)
Aceite de oliva
Mantequilla
Sal
Tomillo
3 dientes de ajo
1 Pastilla de caldo de carne
Ingredientes para el relleno:
250 g. de bacon
3 manzanas
4 salchichas blancas
150 g. de orejones
50 g. de dátiles
200 g. de piñones
150 g. de pasas
100 g. de nueces
150 g. de carne picada
El zumo de media naranja exprimida
Una cebolla
Para acompañar:
Mermelada de arándanos
Una aguja larga (de uno 5 cm. está guay)
Hilo fuerte
Lo primero, una recomendación muy importante: cuando vayáis a comprar el pavazo, decidle al señor de la tienda que, por favor, es para hacerlo relleno y os lo dé bien limpito por dentro y que le corte la cabeza; esto es muy importante porque no es muy agradable tener que hacerlo en casa y con el pavo mirando.
Bien, coged el pavo y lavadlo en el fregradero. Barnizadlo con aceite de oliva por fuera y echadle sal. Ahora, vais a formar el relleno. En una sartén (grande) con un poco de aceite y a fuego lento, poned a dorar la cebolla. A continuación, echad la manzana cortada en rodajas y cuando ésta esté blandita, rehogad la carne picada junto a lo anterior, añadid el bacon y las salchichas y removed. Echad también los frutos secos (acordaos de quitar el hueso a los dátiles) y dejadlo reposar a fuego lento durante unos 20 minutos. Mientras, podéis remover de vez en cuando y exprimir la media naranja. Coged un cacharro bastante amplio para poder batir, ya que vais a triturar el relleno (si no queréis, pues nada, podéis rellenar el pavo igualmente sin pasar por la batidora), y echad el mejunje junto con el zumo de naranja. Batid hasta que más o menos no queden grumos gordos. Podéis dejar enfriar o utilizar unos guantes para la operación siguiente.
Con la ayuda de un cucharón, id rellenando el interior del pavo, presionando para que quede bien prieto. Cuando lo tengáis listo, cosedlo con la aguja e hilo. El horno, ponedlo a unos 180º y meted el pavo. La regla para calcular el tiempo de coción es de una hora por kilo de pavo menos 1 (ej.: si el pavo pesa 6 kilos, pues tiene que estar 5 horas en el horno), aunque con un poco menos, vale.
Picad el ajo junto con algo de tomillo y mezcladlo con una pastilla de caldo disuelta en un vaso grande de agua. Bañad el pavo con esto dos veces durante el «momento horno». Si veis que se seca mucho, podéis echar un poco más de este líquido. Cuando ya esté doradito y en su punto, servidlo con un poco de mermelada de arándanos. Ya, lo más, sería currarse una deliciosa salsa con arándanos de verdad, pero lo hemos probado con mermelada y está muy bueno también.
Este plato os quitará un poquito de vuestro tiempo pero el resultado valdrá la pena. Ideal para una celebración de amigos con comida o menú para las fiestas navideñas. Os recomiendo que si lo intentáis, no lo hagáis solos, en compañía es mucho más divertido y mucha suerte para que os salga sabrosón.