La prensa británica, que se empalma viva poniendo etiquetas, clasifica a The xx como «New Grave». ¿Lo pilláis? New Grave/New Rave… Flúor/Oscuridad… (Risas) Se trata de un jovencisísimo cuarteto de Londres, compuesto por dos chicos y dos chicas. Su juventud contrasta con su visión del pop, sorprendentemente sosegada y alejada de la estridencia que se le presupone a un post-adolescente, sin que eso implique lentitud y pesadez. Su música presume de un minimalismo en el que a menudo apenas suena una guitarra o un bajo tras las voces de Oliver Sim y/o Romy Croft, con apariciones esporádicas de la caja de ritmos. ¿Qué mejor ejemplo que ‘Crystalized’, su primer single?
Ese gusto por lo mínimo recuerda en cierto modo, y que nadie se rasgue las vestiduras, a sus excelencias Young Marble Giants, aunque para ser exactos diremos que son más bien algo así como unos Cocteau Twins menos etéreos. Su segundo single, ‘Basic Space’, es mucho más melódico que ‘Crystalized’ y apunta a que estos chicos educados en la misma escuela de música que Hot Chip, Burial o Four Tet no son tan duros o estirados como puedan aparentar.
Como casi siempre, está por ver cómo funcionará el resto de su álbum de debut, que publica Young Turks/XL la próxima semana y que, por cierto, acaban de colgar en libre streaming en We7. Más vale que sea bueno, porque guapos, lo que se dice guapos, no son. Aunque, eso sí, van a la última moda: este otoño-invierno ir vestido de negro será lo más.
