El 3D, ese gran invento que supone toda una esperanza para que no cierren las salas de cine sino que incluso abran más, busca su sitio en el cine de terror. ‘Scar’, en realidad de la temporada 2007/2008 pero estrenada hoy en España después de varios retrasos, fue rodada íntegramente en 3D de alta definición, siendo pionera en su género. Sentirte dentro de una fiesta de adolescentes en la que evidentemente van a caer todos como moscas tiene gracia, que la típica protagonista que se desteta te acerque a tu mismísima cara el sostén desabrochado, también. El problema es que se quede ahí la cosa.
La película de Jed Weintrob protagonizada por Angela Bettis, conocida por su papel protagonista en ‘Carrie’, aunque no por supuesto en la versión de Brian de Palma, nos muestra el presente y el pasado de una mujer seducida y perseguida por un asesino en serie guapísimo. Un argumento ante el cual se rendirá todo fan del género que por tragarse se haya tragado con gusto hasta ‘Harper’s Island‘ y todas las películas que La 1 emite habitualmente los domingos después de la medianoche, con especial mención a la que nos tocó la semana pasada, la imprescindible ‘La plaga’.
Sin embargo, ‘Scar’ parece severamente perjudicada por su megapromoción como «primera película de acción real (no animación) rodada íntegramente en 3D». Algo falla cuando, por muchas cámaras que haya puesto Antena 3 en el cine durante el pase de prensa y muchas caras de ascazo que haya filmado, resulta que la mitad de los asesinatos están elípticos. ¿A qué fan del gore se le podría ocurrir algo así? A pesar de un par de escenas de comentario imprescindible a la salida, una relacionada con una lengua, el terror psicológico se reduce a unos pocos minutos, teniendo en cuenta que la historia del pasado se sabe desde el principio cómo acaba, y a la larga seguiremos recordando más la historia de ‘Hostel’, lo cual tiene delito porque esta la vimos sin gafitas. 5.