David Bowie es evidentemente nuestro primer protagonista en positivo de Hits & Flops en 2016. ‘Blackstar‘ ha sido su primer número 1 en Estados Unidos y España, además del noveno en Reino Unido. Aunque desconocemos las cifras españolas, en todos los países en que se han publicado (EE UU, Reino Unido, Francia) son bastante altas, ya rebasando el disco de oro o garantizando que se llegará a él.
Según Mediatraffic se han vendido 636.000 unidades en la primera semana, que habrían sido más de no ser por los problemas de stock (el vinilo está agotado o a precios desorbitados en todo el mundo).
David Bowie mantiene el top 1 en Reino Unido en su segunda semana con otras 80.000 unidades y bajará sólo al top 3 en Estados Unidos con otras 80.000 copias vendidas, lo que significa que probablemente se rondará ya el millón de copias a nivel global. Teniendo en cuenta las buenas críticas, la alta demanda, el acertado diseño de CD y LP, el cariño del público, las listas de lo mejor del año, lo que vendió ‘The Next Day’ en las primeras dos semanas (algo más de la mitad) y lo que terminó vendiendo (más de 1 millón)… nos aventuramos: ‘Blackstar’ venderá 2 millones de copias y será uno de los discos más vendidos de 2016; mirando las cifras de 2015, quizá top 10 o incluso top 5 del año.
El caso de Enya es muy parecido al de Madonna o Shakira cuando las incluimos en los «flops» de la semana. Sus ventas están OK, cercanas al millón de copias, pero se esperaba mucho más. ‘Amarantine’ vendía 6 millones de copias en 2005, siendo disco de platino en Estados Unidos. ‘And Winter Came…’ vendía 3 millones en 2008, acercándose también al millón en Estados Unidos; y siete años después, ‘Dark Sky Island‘ se ha quedado muy lejos de estas cifras.
De hecho, el disco ha pasado tan desapercibidillo que alguno de nuestros foreros más lozanos, no se puede creer que un día la artista fuera superventas, pero sí: ‘Watermark’, ‘Shepherd Moons’ y ‘The Memory of Trees’ superaban los 10 millones de copias y ‘A Day Without Rain’, recuperado como un emblema post 11-S, incluso sobrepasaba los 15 millones.
Este nuevo álbum sí ha sido top 10 en los mercados importantes, y no se ha hundido en Navidad, pero tampoco ha destacado, vendiendo en Reino Unido mucho menos que Jeff Lynne, por ejemplo; o que Pentatonix en Estados Unidos. Ni ha llegado al top 40 de los más vendidos del año como siempre había logrado.
No ha sido el disco favorito de la Navidad y al fin de esta evidentemente desciende en las listas. Ya sólo es top 175 en Estados Unidos y top 52 en UK, bajando catorce puestos. Sin gira ni singles a la vista, es difícil averiguar qué podría transformar sus 750.000 copias vendidas en 1 millón, no ya en 2 millones.