El Templo del Gato ha informado esta semana de su cierre definitivo por problemas con las licencias del Ayuntamiento. El local fue una cuna del grunge y el rock en la ciudad, contando en su historial con un concierto de The Offspring… como teloneros de NOFX, y con el lujazo de haber servido de escenario de rodaje para películas como ‘La vida alegre’ de Fernando Colomo, ‘Historias del Kronen’ de Moncho Armendáriz o ‘Sufre mamón’ de Hombres G.
Desde el año 2000 no podían ofrecer conciertos, pero ahora, ante la imposibilidad de poner música con un 68% de insonorización en lugar de un 75%, como se les exigía según una normativa promovida por Ana Botella en 2011, han de cerrar definitivamente. El Español publica un reportaje sobre el local en el que se recuerda cómo abrió tras el cierre de Rock-ola (ahora reabierto), cómo Arturo Cobas -ya de 70 años y ciego desde hace 15 según sus propias palabras- lo fundó junto al fallecido Fernando Mouro, aprovechando cinco años de empaparse de cultura americana en Los Ángeles. También se habla de cómo Álex de la Iglesia o Poli Díaz frecuentaban el local, este último acompañado «del hijo de Felipe González y sus escoltas», con el único objetivo de ver la pitón de dos metros que había en el Templo del Gato, y a la que Arturo alimentaba con «ratas blancas y pollos». Todo muy de coger un bidón de palomitas y leer. Es aquí.
Este es su mensaje de despedida, escrito en Halloween:
«Hoy 31 de octubre del año que disfrutamos, celebramos nuestro XXXII Halloween Party.
Quiere decir que 32 años atrás, año 85 iniciamos esta tradición en la ciudad que se mantiene hasta el día de hoy.
Aunque parece ser que a partir de ahora se llamara Holy-Halloween o algo así, en honor de San Timorato por si acaso, en fin, Sign of The Times.
Y no queremos pasar de fecha porque en el día de hoy, en este día tan señalado, nos ha llegado un aviso del Ayuntamiento que a través de su Agencia de Medio-Ambiente especializada en crear ambiente donde nadie se lo solicita, dice más o menos textualmente que queda Desestimado el recurso de reposición que presentamos por si acaso nos levantaban la prohibición de utilizar el equipo de sonido musical, ya que en caso contrario nos precintaban el santuario.
Así que ante esta perspectiva, NOS VAMOS, porque vamos a ver, – el que pueda verlo, claro-
¿Qué es un Templo con su Santo dentro, bailando con Dios todo el rato, sin su Música de acompañamiento Rockero?
Pues eso, un Fantasma sin Datos
Un Halloween-Perpetuo
Y Tampoco es eso…
Así que nos quiten lo bailao!
Y si por si acaso volvemos a celebrarlo a todo trapo dentro de unos Años, vamos a numerarlo
Happy Happy XXXII-Siempre en Romanos- Halloween-Party 2016.
Un Abrazo
Desde el Templo del Gato seguiremos informando…
Del Gato-Escaldado, aunque, la verdad no tanto».