Este fin de semana se han celebrado las fiestas de San Isidro en Madrid. Unos fastos que incluían una programación cultural muy interesante, que incluía actuaciones tan diversas como las de Pional, Maria Arnal i Marcel Bagés (presentando el reciente y excelente ’45 cerebros y un corazón’) o la que posiblemente fue la gran cita indie-pop-rock de la semana: las actuaciones del domingo 14 al atardecer que reunieron a Rusos Blancos, Triángulo de Amor Bizarro, Surfin Bichos (en su primer concierto en una década, celebrando los 25 años del icónico ‘Hermanos carnales’) y una Javiera Mena que cerró el evento con una de las mejores actuaciones que le recordamos. Solo estas actuaciones lograron reunir a unas 8.000 personas en el escenario Puerta del Ángel, poca broma.
Hubo muchos más eventos interesantes, como uno que hoy también es noticia, por razones menos felices, y más bien preocupantes. El rapero tarraconense Émbolo acudía a su perfil de Facebook para subir un escrito denunciando haber sufrido presiones de la Policía Municipal que él ha interpretado como un claro acto de censura. Él, junto a su productor Doblezé, hacen un rap con fuerte influencia de músicas africana y latinoamericana y letras que no dudan en atacar a la Casa Real o a las grandes multinacionales de la energía. Ambos actuaron el sábado 13 en una fiesta organizada por el medio cooperativo El Salto (vinculado al periódico Diagonal), donde también participaron otros artistas como Pedro Ladrxga, Error Humano o Chico Trópico.
Según el texto titulado “LA POLICIA DE MADRID CENSURA LA ACTUACIÓN DE ÉMBOLO”, los artistas pudieron ver desde el escenario como “ a un grupo de policías poniéndose cada vez más nerviosos”, unos 20 policías locales que al terminar su actuación les miraban “con actitud totalmente amenazadora e intimidatoria”. Al llegar a camerinos, la coordinadora del evento les confirmó que “a la policía no les ha gustado la actuación e incluso les han dicho: “No queremos otros titiriteros””, en referencia a la detención de los dos actores de Títeres desde Abajo que fueron detenidos en el Carnaval 2016 de Madrid por una obra en la que aparecía un cartel con el lema “Gora Alka-ETA”. Un caso que acabó con el sobreseimiento de ambos, un año después.
Luego Émbolo explica que más tarde el cantante fue abordado por “seis policías secretas le arrinconaron y le pidieron identificarse”, comunicándole que va a ser denunciado por “ofensas a la autoridad”. Consultado por Público, el grupo dice que el policía no supo decirle exactamente cuál era la ofensa: ”Yo le dije al secreta que era una obra artística, que cómo se podía evaluar la ofensa. Me dijo explícitamente que nos iban a denunciar por ofensa a la autoridad pero no supo especificar por qué parte concreta de las letras”. Émbolo tienen canciones como ‘Borbón mongo’, donde hablan de “la Reina, el Rey, la tonta de su hermana, ley mordaza, ley de seguridad ciudadana” o “España puta, demócrata tongo”. Según su propio texto en Facebook, Émbolo están a la espera de recibir esa supuesta denuncia no sin antes sentenciar “Es muy ridículo que en 2017 tenga que haber unos agentes escuchando y juzgando el contenido de una representación artística. Consideramos que es un hecho de máxima gravedad y que representa un atentado contra la libertad de expresión, la cultura y el sentido común”.