Si Sam T. Herring lleva toda la vida buscando el amor verdadero y luchando contra sus propios demonios, el nuevo disco de Future Islands transmite que sus guerras internas han terminado o, al menos, se han dado un descanso. ‘As Long as You Are’ se abre con ‘Glada’, una balada cuyo título significa «feliz» en sueco -y también es el nombre de un tipo de pájaro típico del sur de Suecia que en español se conoce como el milano real- porque Sam al fin ha encontrado la felicidad en el mencionado país escandinavo junto a la actriz sueca Julia Ragnarsson (la muchacha pelirroja de ‘Midsommar‘ para más señas), y en la que, con todo el dramatismo de siempre, Sam se pregunta: «¿qué he hecho para merecer el mar otra vez, para finalmente encontrar el amor, después de todo lo que he hecho?».
El nuevo disco de Future Islands no presenta novedades sonoras de ningún tipo, pero sí de «mood» en el sentido de que el estado de ánimo de Samuel T. Herring ha influido en unas composiciones que suenan especialmente contentas consigo mismas, confiadas, sin que esto reste particularidad al sonido de la banda de Baltimore. Siempre han venido a la mente nombres como New Order, Bruce Springsteen, The Killers o OMD a la hora de hablar de la música de Future Islands, pero estos nunca han dejado de caracterizarse por un sonido romántico y apasionado que, sin embargo, siempre ha sonado elegante y compuesto, como una mezcla de calma y tormenta sucediendo al mismo tiempo. ‘As Long as You Are’, un disco producido por ellos mismos pues, como nos ha contado Sam en una entrevista que publicaremos próximamente, «había algo que nos faltaba en ‘Singles’ y en ‘The Far Field’» en tanto que «sentíamos que los productores con los que trabajábamos fallaban en escuchar lo que queríamos», plasma de manera especialmente mágica este equilibrio, aunque las canciones no sean siempre las mejores.
La razón de que ‘As Long as You Are’ suene mágico son sus melodías instrumentales, en concreto las de teclado. ¿Existe alguna banda de pop hoy en día cuyos arreglos de sintetizador suenen tan cálidos y nostálgicos, como si buscaran emular la vaporosidad y belleza de una aurora boreal… y lo consiguieran? En ese sentido, las mejores canciones del disco no son solo tan uptempo como ‘For Sure‘, un single típico de Future Islands -en el buen sentido- que habla sobre «el amor y la confianza porque el uno no puede existir sin el otro»; sino que también pueden ser tan contemplativas como ‘Moonlight’, una canción sobre aceptarse a uno mismo de preciosos adornos electrónicos.
El amor a uno mismo y, por tanto, la capacidad para expresar amor a los demás, es un tema recurrente en ‘As Long as You Are’, de ahí quizás que las canciones reflejen el estilo vespertino y melancólico de su cubierta, yendo de la euforia al intimismo. ‘Plastic Beach’ es otro de esos himnos llenaestadios que hacen sonar a Future Islands como The Killers, y en el que Sam aboga por «aprender a quererte a ti mismo sin importar lo que hayas hecho en el pasado, o precisamente por esa razón», mientras ‘City’s Face’ es calma ante todo gracias a una base de teclado que no puede sonar más meditativa a pesar de que la canción hable sobre «estar lleno de paranoia» y sobre «perder el orgullo». Una de las pistas más interesantes del álbum es ‘The Painter’, que utiliza un ritmo próximo a la música disco para seguir indagando en el crecimiento personal de Sam: «el miedo te ha dejado vacío, y esconderte es tu tumba» es una de sus sentencias. Sin embargo, la canción se queda a medio gas y no puedo dejar de pensar en que alguien como Porches habría hecho algo mucho más atractivo con ella, mucho más memorable.
Y ese es el problema de ‘As Long as You Are’: muy temprano las canciones pasan a ser indistinguibles unas de otras, sobre todo en la segunda mitad. ‘Waking’ busca ser tan «radio-friendly» como el momento más comercial del Boss, pero no deja de ser una variación de otras cosas, y ‘Hit the Coast’ no puede cerrar el largo de manera más redundante. Y es cierto que los teclados de ‘Thrill’ son una maravilla, pero a pesar de lo relevante que suena esta composición que habla sobre la necesidad de expresar nuestros problemas, y de la condena para la salud mental que dejar de hacer eso puede suponer, la canción nunca despega. El disco sí deja dos buenos temas en su primera mitad como ‘Born in a War’, un enérgico corte en el que Sam recuerda que nació en un pueblo «donde puedes comprar pistolas en cualquier parte» pero «no aprendes mucho en las escuelas públicas» y cuya melodía de teclado parece dejar un rastro fluorescente en el cielo, y la bonita ‘I Knew You’. Son dos momentos de gloria en un trabajo de Future Islands que se deja escuchar, pero en el que ha primado demasiado precisamente el «mood», no tanto el ánimo de trascender.
Calificación: 6,5/10
Lo mejor: ‘For Sure’, ‘Born in a War’, ‘I Knew You’, ‘Moonlight’
Te gustará si te gusta: New Order, The Killers, Twin Shadow
Youtube: vídeo de ‘For Sure’