No contento con haber situado su nuevo disco ‘Justice’ y su single ‘Peaches’ en el número 1 de discos y sencillos en Estados Unidos, y con mantenerse en el puesto 2 de las listas británicas con el álbum en su segunda semana; no contento con haber sorprendido con la edición de unas canciones extra de ‘Justice’ hace tan sólo unos días; Justin Bieber publica más nueva música todavía, tan sólo 15 días después de ‘Justice’.
Con motivo de la Semana Santa, y en concreto con motivo del Domingo de Resurrección, ha aparecido en las plataformas de streaming un EP de 6 canciones llamado ‘Freedom.’, cuya portada da buena cuenta de hasta qué punto y a qué horas del día se ha improvisado. ‘Freedom.’ no se compone de descartes de ‘Justice’ sino de unas canciones que se han trabajado estos días y que Justin Bieber ha querido compartir con el mundo. Y sorprendentemente, son relevantes.
Una de las críticas más recurrentes que está recibiendo ‘Justice’, pese a su evidente éxito comercial, es que no contiene nada de «justicia», salvo un interludio con Martin Luther King que suena tan desubicado en la secuencia que ha tenido que ser explicado; y casi nada espiritual, pues lo que ocupa el disco es casi siempre el encuentro con el amor de Justin Bieber. Así que ‘Freedom.’ parece una respuesta a todas esas críticas.
‘Freedom.’ nos llega embadurnado de una mayor influencia gospel y jazz, es decir, ligeramente más cercano al entorno sonoro de Kendrick Lamar y el último Kanye West, en ambos casos, salvando las distancias, pues realmente es muy evidente que se han improvisado estas grabaciones de 20 minutillos de grabación. ‘Freedom.’ no será mejor que ‘Justice’ ni mucho menos alcanzará su impacto comercial. Y sin embargo, hay más chicha en muchos de sus textos que en todos los de ‘Changes’ y ‘Justice’. Las melodías son más sentidas y espontáneas, como sucede en ‘Where Do I Fit In’, con las bonitas voces de Chandler Moore y Tori Kelly acompañando; y los textos no dejan lugar a error: la Semana Santa ha inspirado a Bieber su disco definitivamente espiritual y religioso.
La canción titular, ‘Freedom’, nos habla sobre «ver al Mesías», en ‘All She Wrote’ Brandon Love nos habla de «los besos de Judas», de «perdón», del «sistema penitenciario», de «rezar por Dios y de rezar por lo que deseamos». Y ‘We’re In This Together’ es una de las canciones más confesionales que jamás haya grabado Justin Bieber: «no fue fácil, a los 17 las mujeres se me lanzaban a los brazos, lo que provocó que me volviera imbécil. En la superficie, me sentía como un hombre, pero por dentro me sentía como una lata vacía (…) Hacía cosas estúpidas para gustar a la gente».
Por si no estuviera claro que estamos ante un disco de redención y misericordia, Justin Bieber cierra todo esto con una canción llamada ‘Afraid to Say’ a la guitarra en la que canta emocionado contra la cultura de la cancelación, sobre el derecho a cometer errores: «¿Qué hemos hecho con la sociedad? ¿Por qué todo el mundo está siendo cancelado? ¿No puede haber espacio para la madurez? Dar por perdida a la gente no es la respuesta». Aderezado con discursos leídos, de nuevo, el EP puede que no sea mucho mejor que ‘Justice’ y desde luego nada aquí va a interrumpir el espectacular curso comercial del single ‘Peaches’; pero desde luego en este disco sí prima esa sensación de «JUSTICIA» que en absoluto contenía, en ningún momento, el disco original.