Ya son pocas las compañías internacionales que siguen operando en Rusia con normalidad, y el sector del entretenimiento es uno de los que en mayor medida ha castigado al país abandonando sus oficinas o bloqueando el acceso de los habitantes a sus plataformas. En un plan que ha redactado el Kremlin para hacer frente a todas estas sanciones, una de las medidas que apunta de frente a la música es la legalización de la piratería en todo el territorio ruso.
El documento se llama ‘Plan de acción prioritario para garantizar el desarrollo de la economía rusa en condiciones de presión de sanciones externas’, y acaba de un plumazo con los derechos de marca, autor y patente de empresas que provengan de países contrarios al Kremlin. El documento especifica que cualquier persona que piratee el software de estas compañías estará libre de responsabilidad civil y penal siempre y cuando sigan existiendo las sanciones contra Rusia.
En el sector musical, las empresas que han suspendido relaciones y operaciones en el país son, hasta la fecha: Sony Music Group, Warner Music Group, SoundExchange, Kobalt, Fuga, Downtown, Universal Music Group, Live Nation y Oak View Group. Además, las plataformas TikTok, Spotify y YouTube van detrás de cualquier forma de propaganda del Kremlin. Youtube ha bloqueado los medios financiados por el país en todo el mundo, TikTok ha prohibido subir contenido en territorio ruso para proteger a sus usuarios de posibles penas y Spotify, además de abandonar sus oficinas rusas, también ha eliminado todo el contenido de RT y Sputnik.