Algún que otro miembro de Jenesaispop empezó a interesarse por el trabajo de Juan Flahn no a raíz de la fiesta En Plan Travesti, sino a raíz de ser coguionista de esa serie que nos encandiló a muchos (pese a que la pasaban por La 2) titulada ‘Mujeres’. La serie, con un tono costumbrista, relataba la historia de cuatro mujeres de una familia humilde que regentaba una panadería, todo con muchísima gracia y con un regusto almodovariano que funcionaba muy bien.
Es por esto que muchos nos esperábamos que la primera película de Juan Flahn, ‘Chuecatown’, fuese del estilo, pero nos confundíamos. Intentando ser una comedia de enredo con suspense (aunque lo único que tenga sea enredo, porque lo que viene siendo suspense…), ‘Chuecatown’ deja al público como a medias. Por empezar con algo, hablemos del guión, al que le falta un poco de ritmo y que tiene algunos aspectos metidos con calzador: la fiesta de perfumes a la que acude el asesino, puesta por ahí en medio solo para satisfacer el ego de cuatro mamarrachas habituales de los círculos de supuesto moderneo y que aparecen en la pantalla encantadas de conocerse; la aparición de Pedro Veral, que ni se sabe a cuento de qué viene ni tiene sentido ninguno; y así con el 75% de las escenas, que están en la película dejando que sea demasiado evidente que Juan Flahn quería sacar a sus amigos (La Prohibida, Poppy Blasco, Carlos Díez…)
Por otro lado están los actores. Carlos Fuentes está fenomenal (qué fuerte, cómo ha engordado para la peli…) y tiene una cara de oso que ni se la cree; Pepón Nieto no termina de convencer pero no horroriza; Rosa Mª Sardá podría haber estado mejor, aunque tampoco lo hace mal, muy en su línea; Eduardo Soto está graciosísimo, sobre todo cuando sale del armario; Concha Velasco lo borda en su papel de suegra insoportable que no acepta hacerse vieja y Pablo Puyol podría ver reducido su papel a salir de espaldas y que todo el mundo viese su pene colgando por ahí, porque la verdad es que el resto está mal actuado, pero mal actuado de verdad.
Sin embargo, no todo es negativo en el filme. Hay que reconocer que la película está plagada de gags con muchísima gracia que pueden llegar a hacer que se te salten las lágrimas, sobre todo si conoces un poco de cerca el mundillo underground en el que se mueve el director. La imitación de Ana Botella por parte de La Prohibida o algunos de los diálogos entre Concha Velasco y Pepón Nieto son verdaderamente hilarantes, al igual que los fastuosos ropajes de Eduardo Soto cuando sale del armario. Mención aparte tiene la banda sonora, en la que suenan algunos temazos del año como ‘Bomba latina’ (a Rose Manfredi pudimos verla en el estreno, habida cuenta de que Juan Flahn hace la voz de Marieli -entre otras- en ‘Cuatro en Alicante’) o ‘Disfraz de tigre’. 5.



Chromeo, el dúo árabe-judío afincado en Montreal y Nueva York, publica su segundo disco. Descubiertos por Tiga, forman parte de esa corriente electro-funky que en los últimos años ha dado discos tan apañados al mundo de la electrónica, como el de 
Publicado por primera vez por Norma Editorial y Muchnik Editores en 1989, Planeta hizo lo propio en 2001 incluyendo las dos partes en las que se dividía la obra en un solo volumen. Este pasado mes fue Reservoir Books (de Random House Mondadori) el que se llevó el gato -nunca mejor dicho- al agua y acaban de publicar de nuevo esta verdadera obra maestra de la novela gráfica, una indiscutible pieza imprescindible en cualquier biblioteca que se precie. 

A Miqui Puig muchos le conocen por su papel de showman como jurado en Factor X. Unos cuantos se acuerdan de él por sus éxitos al frente de Los Sencillos. Y algunos le admiramos desde que descubrimos, casi por casualidad, su brillante primer disco en solitario. Tras una larga espera, Sinnamon edita ‘Miope’, un Cd+dvd en directo que, además de una celebración de sus 20 años sobre los escenarios, supone el paso previo de su próximo álbum de estudio. Miqui nos atendió amablemente (vía telefónica) para revelarnos algunos detalles acerca de su personaje en el concurso de Cuatro y ahondar en las aristas de un tipo muy especial que lejos de querer ser famoso, sólo desea llevar una vida tranquila y poder seguir haciendo discos bonitos. 


Desde hace un par de años, en el mundo de la moda se habla mucho de un tal 



Con todas las pestes que he echado de Maroon 5 y aquí estoy, enganchadísimo a su último single. ‘Makes me wonder’ tiene un punto funky-disco que es 


Sólo incluimos actos de Madrid. Si quieres recomendar algún evento de otra ciudad, te invitamos a hacerlo en los comentarios.
Pastora ha hecho un single muy chulo de nuevo. Después del fracaso de ‘Desolado’ (y eso que llegó a ser una de las canciones más radiadas de España), el grupo edita sencillo a través de Internet. El título parece un anuncio de Tele-5 (‘Cuánta Vida’), pero está fenomenal, lo podéis ver en 

Dos de los discos de música electrónica más esperados de la temporada son el de Justice y el de Simian Mobile Disco. ¿La razón? El tema 


Alisador de uñas Astor. Cuando te pintas las uñas, rara vez te quedan como una limpia superficie lisa porque resulta que el cuerpo no es perfecto y que tiene relieve, como las uñas en sí. Además de limártelas delicadamente con un pulidor, este alisador de Astor va fenomenal porque, además, endurece y fija el color. Con una capa de este producto, otra de esmalte de color y otra de brillo, garantizo una manicura divina, duradera y, sobre todo, lisa.
Release the stars (2007): Con un sonido más ecléctico que de costumbre, Rufus presenta el quinto disco de su carrera, una especie de amalgama entre el sonido de todos sus discos. Vuelve un poco a ‘Want One’, pero sin olvidar sus solos al piano y sus orígenes, como muestra fielmente ‘Going to a town’, una canción muy sencillita en cuanto a melodía, pero increíblemente efectista para todos los fans de Rufus. ‘Release the stars’ también incluye algunos coros, que es una cosa muy vistosa, pero que hace que el resultado final sea -cuanto menos- recargado. Eso sí, en algunos temas quedan perfectamente, y me estoy refiriendo a la deliciosa ‘Release the stars’. Pero (porque siempre hay un pero), también encontramos algún que otro bluff, como ‘Tulsa’, o el que podría ser el próximo single de James Blunt, ‘Nobody’s off the hook’. Este nuevo álbum, profundamente marcado por su experiencia europea (como bien demuestran ‘Leaving for Paris’ y ‘Sansoucci’) no refleja la genialidad de este maestro de la música que es el neoyorquino, pero le ha quedado bonito. No es su mejor grabación, pero ni desentona ni desengaña.

Viniendo de quien viene, es normal que el que se meta en un cine a ver ‘Zodiac’ se imagine que va a proyectarse algo así como ‘Seven 2’. Mal. Error. El que espere la segunda parte de una de las mejores cintas del cine de los noventa mejor se queda en casa viendo lo de siempre en ‘CSI’ y se ahorra una decepción. Al resto, a esos que no os asusta ver una cinta pausadita y algo larga, comprad la entrada sin miedo que no os arrepentiréis.
Plastic Operator, el dúo formado por el canadiense Mathieu Gendreau y el belga Pieter Van Dessel, está aliviando la espera de los fans de Postal Service. Citan entre sus influencias a Jean Michel Jarre, Vangelis, Boards of Canada y Pet Shop Boys, aunque a quien recuerdan inmediatamente es a la ola de proyectos electropop fino tipo Erlend Oye, The Notwist o Bauer. Por parecerse a los de Ben Gibbard y Jimmy Tamborello, hasta reconocen que para componer se comunican a través de Internet.
Al final Jenesaispop no se pudo colar (desgraciadamente, y por unos problemillas acaecidos que no vienen al caso) en el concierto de Rufus Wainwright, así que nos fuimos al de Miqui Puig, que no es lo mismo pero nos hizo el apaño. Ayer, que era el día de la música (por cierto, que Jenesaispop hace suya la reivindicación de reducir el IVA de los discos), la Fnac había preparado en la plaza de Vázquez de Mella -y como aperitivo a las fiestas del Orgullo Gay- una serie de conciertos entre los que destacaban Mastretta, Miqui Puig y Fundación Tony Manero.
No era de extrañar que ‘Favourite Worst Nightmare’, el segundo LP de Arctic Monkeys, se vendiera bien nada más salir a la calle sin apenas promoción. Y es que estos inglesitos tienen gancho y resulta que no lo hacen del todo mal. El rock será rock toda la vida y a esto es a lo que se dedican los Arctic Monkeys, no hay más misterio. Pero el rock bien hecho, con la inevitable evocación a los clásicos (que a mí me encanta), si además se cuenta con una mijita de salero y actitud idónea, se convierte en algo vital para cuerpos y almas.