La cantante supo separar el peso emotivo de sus baladas de sí misma, alternando la sobriedad de las mismas con interacciones con el público divertidas y, a menudo, incluso vulgares.
El dúo noruego ofreció anoche un concierto especial en promoción de la nueva retrospectiva sobre su álbum debut, 'Quiet Is the New Loud'. Pero el show fue más que eso.