Durante el largo periodo que une el primer single de Sky Ferreira con su esperado debut ‘Night Time, My Time’ han pasado tantas cosas que parece mentira que la misma chica que lucía tipo y melenaza en el videoclip de ‘One’ sea la misma que la actual, la que podéis ver en la cubierta de su primer disco en bolas y con rostro apesadumbrado. Es una portada entre lo enternecedor y lo espeluznante que refleja con precisión lo insoportables que han sido para Sky los últimos cinco años de su vida, marcados por la indecisión de su discográfica a publicarle el disco y, últimamente, por aquel desafortunado arresto por posesión de drogas junto a su novio Zachary Cole Smith, que nos ha dejado otra ficha policial protagonizada por una estrella del pop para la posteridad.
Pero sería un aburrimiento centrarse en eso. El trabajo de Sky con Bloodshy & Avant, por ejemplo, ya es pasado, y la que es de momento su mejor canción, la maravillosa ‘Everything Is Embarrassing’, no está incluida en este disco. ‘Night Time, My Time’, por lo tanto, nos presenta a una Sky completamente renovada que ha encontrado en el rock alternativo de los setenta y noventa, pero también en el synth-pop más sucio, sus aliados para expresar todo tipo de frustraciones (‘Nobody Asked Me (If I Was Okay); ‘I Blame Myself’) y deseos post-adolescentes (‘Boys’, ‘Love In Stereo’) y que, curiosamente, se percibe como el sonido perfecto para la Sky actual, la que hace unos días publicaba cabreada en Twitter que el disco no iba a salir en vinilo a tiempo por culpa de su discográfica.
Y es que Sky ha estado durante tanto tiempo tan harta de Capitol que el hecho de que ‘Night Time, My Time’ sea una realidad y, sobre todo, que suene como suena, tan alejado de lo que en un principio se suponía que iba a ser Sky (sus mensajes en Facebook tipo “Britney Spears es Dios” nos dan una idea) solo se puede entender como que la cantante, al fin, ha podido salirse con la suya. Sin embargo Sky sí se encontraba cómoda con su estatus de it-Girl hace años y de hecho últimamente la hemos conocido posando en pasarelas para marcas importantes. Esto significa que tome la imagen que tome, siempre es honesta consigo misma y este disco no es ninguna excepción: ‘Night Time’, My Time’ la representa a ella en este preciso momento, furiosa pero, a su vez, joven, insegura y también juguetona, como sugiere la divertida ‘Kristine’.
Por este motivo resulta tan acertado que Sky haya escogido enfundar sus canciones en estética lo-fi y en suciedad, ayudada, eso sí, por sus productores, Ariel Rechtshaid y Justin Raisen. Los sintetizadores suenan deliberadamente pasados de moda y las guitarras distorsionadas por momentos recuerdan a The Jesus & Mary Chain o por supuesto a Garbage, de quienes Sky se declara fan. ¿Tendrá algo que ver en este cambio de sonido su novio DIIV? ¿Quién hubiera pensado que terminaríamos relacionando a Sky con Beach Fossils? Y lo mejor de todo es que Sky tiene talento para las melodías. ‘Ain’t Your Right’, ‘24 Hours’, ‘You’re Not the One’ y la mejor de todas, ‘I Blame Myself’, que recupera esa sensación de anhelo presente en ‘Everything Is Embarrassing’, ofrecen grandes y memorables estribillos.
‘I Blame Myself’, la joya del álbum, nos presenta a una Sky vulnerable capaz de reconocer sus errores. “Me culpo por mi reputación”, canta. Es un instante conmovedor dentro de un disco que, como en ‘Omanko’, a veces parece no tomarse demasiado en serio. Pero la honestidad con la que Sky interpreta esas palabras deja huella porque además melódicamente el tema es magnífico. Puede que algunas letras sean predecibles o que con este disco no quede muy claro a qué suena Sky exactamente después de aquel EP del año pasado, pero en la puesta en escena de sus defectos vemos que Sky ha hecho un disco tan honesto que llega a doler. Con 21 años pocos y pocas pueden decir eso, polémicas aparte.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘You’re Not The One’, ‘24 Hours’, ‘I Blame Myself’
Te gustará si te gusta: Garbage, Jesus & the Mary Chain, Charli XCX
Escúchalo: ‘You’re Not the One’