Hayas entendido en él un bonito y divertido álbum de música americana o un álbum más que nada extraño y mal acabado, si de algo tiene que servir ‘Joanne’ a Lady Gaga es para distanciarla de una vez y para siempre de otros y otras cantantes de música pop, pues el sonido que presenta no tiene absolutamente nada que ver con el oído en las radiofórmulas en los últimos tiempos. Ni siquiera la vena acústica de ‘Million Reasons’ suena en la estela lo-fi de ‘FourFiveSeconds’ de Rihanna o ‘Love Yourself‘ de Justin Bieber. Ni recordando que BloodPop estuvo en algunos temas del último de Bieber y co-produce todo este álbum haríamos la asociación: uno es un tema acústico con la marca del británico Ed Sheeran por todas partes, y el otro es mucho más americano.

‘Joanne’ ha contado también con Mark Ronson, Florence + the Machine, Beck, Father John Misty y Kevin Parker de Tame Impala, pero lo verdaderamente sorprendente es que no recuerda en nada de nada al trabajo de ninguno de ellos. Ni siquiera a ‘Sea Change’ de Beck. Dejando de lado el ramalazo reggae de ‘Dancin’ in Circles’, muy Gwen Stefani y también un poquito Ace of Base; y el funky suave de ‘Hey Girl’, un pelín más Prince; ‘Joanne’ tiende a explorar géneros como el rock’n roll, el soft-rock y el folk. Os dejamos con algunos discos que, independientemente de haber sido inspiración para la artista o no, de ser obras maestras u obras más modestas, nos han venido a la mente durante la escucha de este álbum.

Bruce Springsteen / Greetings from Asbury Park, N.J. (1973)

En muchos sentidos ‘Joanne’ es un punto de partida para Lady Gaga. No es tan fácil imaginar a su millonaria base de fans, la que veneraba ‘Poker Face’ y ‘Just Dance’, y al público generalista calzándose las botas de cowboy en pleno 2016. Por eso hemos querido vincular este álbum con el debut del que tenemos claro que ha sido siempre una de sus mayores influencias, Bruce Springsteen, algo muy palpable sobre todo desde ‘Born this Way’, donde incluso tocaba Clarence Clemons.

‘Greetings from Asbury Park, N.J.’ alternaba baladas tan bonitas e intimistas como ‘The Angel’ y ‘Mary Queen of Arkansas’ con canciones tan influidas por el rock’n roll como ‘It’s Hard to Be a Saint in the City’. Había un poso soul y country en muchas de aquellas composiciones, lo que sin duda ha inspirado más a Lady Gaga en esta ocasión que el listado de lo más escuchado en Spotify en estos momentos.

Stevie Nicks / Bella Donna (1981)

Fleetwood Mac habían vendido millones jugando las raíces de la música americana durante los 70, pero es el primer disco en solitario de Stevie Nicks el que mejor conecta con ‘Joanne’. Contó con un músico de la E-Street Band, además de con Tom Petty y Don Henley (preciosa ‘Leather & Lace’), e incluía canciones de poso country entre piano y guitarra como ‘After the Glitter Fades’ o ‘How Still My Love’. Pero lo que es más interesante, incluso antes de la edición de ‘Mirage’, se notaba de alguna manera que ya estábamos en los años 80 y este álbum contenía también algún resto de soul e incluso bailable que podemos vincular con el ligerísimo toque de modernidad que Mark Ronson ha dado a algunas de las nuevas canciones de Lady Gaga. Atentos a ‘Edge of Seventeen’: ¡versión ya!

Bon Jovi / Keep the Faith (1992)

Bon Jovi siempre me ha parecido una influencia mucho más clara que Madonna en la música de Lady Gaga. Si ‘Born this Way‘ era bastante ‘Slippery When Wet’ y ‘Applause’ era un poquito ‘Runaway’ sobre todo en el uso de los teclados, este disco sería más Bon Jovi en los años 90, más ‘Blaze of Glory’ y sobre todo más ‘Keep the Faith’. No cuesta mucho imaginar versiones del tema titular, ‘In These Arms’ o ‘Bed of Roses’ en el repertorio actual de Lady Gaga. De hecho esta última sentaría como un guante a su chorrazo de voz.

Dolly Parton / Jolene (1974)

¿Lady Gaga se va a Nashville y saca un disco llamado ‘Joanne’? Es inevitable hacer mención del álbum que Dolly Parton editaba en 1974. Es, además, el largo que incluía la versión original de ‘I Will Always Love You’: recordemos que Gaga apuntó a Whitney Houston como influencia de ‘Born This Way’. ¿Cuánto le pega la parte «spoken word» de esta versión original? Otros highlights de este álbum incluyen ‘Highlight of My Life’, ‘When Someone Wants to Leave’ y la propia ‘Jolene’.

The Killers / Sam’s Town (2006)

¿Qué grupo dejó de lado las pistas de baile, los toques modernos y la electrónica para adentrarse en el cancionero americano, recibiendo críticas encontradas, comparaciones despectivas con el Boss, decepcionando en lo comercial, pero a la larga convenciendo lo suficiente como para montar una edición 10º aniversario? Es pronto para saber si habrá edición aniversario de ‘Joanne’ si no la hay antes de ‘The Fame Monster’, pero pase lo que pase, el disco contiene ese tipo de canciones personales y ajenas a las modas que construyen los álbumes favoritos de los fans, al margen de su calidad o éxito comercial.

Neil Young / Harvest (1972)

Entre las influencias que Lady Gaga ha citado expresamente para este disco están Garth Brooks (en concreto ‘I’ve Got Friends In Low Places’ (sic)) y Neil Young. Entre ambos, nos vamos a quedar con el segundo aunque la conexión con Gaga venga más pillada por los pelos que Kevin Parker a la batería en el vídeo de ‘Perfect Illusion‘. Lady Gaga ha versionado recientemente ‘Old Man’, uno de los mayores hitos de este disco, y aunque ‘Joanne’ tampoco sea un disco de armónica y hoguera ni de grandes cuerdas a lo ‘A Man Needs a Maid’ o ‘There’s a World’, siempre es buena ocasión para recordar la que es una de las grandes obras maestras de Young, que también incluía nada menos que ‘Heart of Gold’.

The Cardigans / Super Extra Gravity (2005)

Otro grupo que, como Gaga, colgó los hábitos del pop para entregarse a las músicas campestres fueron los Cardigans. Preciosistas y delicados en ‘Long Gone Before Daylight’ (2003), dieron al que ha sido su último álbum un punto de desgarro que conecta con los momentos que Ronson, Gaga y compañía parecen haber querido dejar sin pulir. ‘Drip Drop Teardrop’, ‘Godspell’ y ‘Little Black Cloud’ conectan con los momentos más fieros de ‘Joanne’, mientras «Diamonds» lo haría con los más intimistas. Como curiosidad, había en este álbum una (gran) canción llamada… ¡¡’Good Morning, Joan’!! Reescuchado este disco después de ‘Joanne’, Tore Johansson suena como un excelente productor para lo que Gaga ha querido transmitir. Más incluso que el propio Ronson.

Doro / Doro (1989)

La producción de Lady Gaga fue más cruda en muchos sentidos en ‘Born This Way’, pero aún llama la atención el sonido basto y brutote en algunos momentos del disco. Su poso rockero al cubo en la grabación de guitarras y sobre todo baterías, y también los campos semánticos usados en algunas de las letras beben más del jevi que todos los citados en esta lista con la excepción de Bon Jovi. Aunque tenga gusto por el alemán y haya presentado un disco en Berghain, parece poco probable que Lady Gaga conozca a Doro Pesch y mucho menos su álbum homónimo, el más pop de su carrera, pero la fuerza de la voz de la de Düsseldorf, algunos títulos como ‘Rare Diamond’, la aproximación al rock clásico por la vía de Queen de ‘Rock On’, y pelotazos como ‘Broken’ y ‘Something Wicked This Way Comes’ alternados con la obligada balada, podrían conectar también con ‘Joanne’.