Estábamos del todo confundidos al pensar que Marika Hackman era ooootra cantautora de pop-de-inspiración-folkie más en la superpoblada lista que encabeza Laura Marling. Es decir, lo era (o lo parecía) en su debut ‘We Slept At Last‘ (2015) y no es que haya dejado de serlo en ‘I’m Not Your Man’, o al menos no del todo. Pero ahora eso ha pasado a ser una cuestión menor, porque lo que importa es que Marika se niega a figurar como otra joven apocada y melancólica con sueños románticos y una mueca de dolor sentimental.
Así que cambió radicalmente de actitud, abandonó la modestia y se armó de confianza, la necesaria para cantar en sus canciones sobre ser una rompebragas que se enrolla con chicas a sabiendas de que luego volverán con sus novios (‘Boyfriend’), unos novios con ridículos patrones de superioridad machista que ella expondrá despiadadamente en sus canciones –el pepino cortado en rodajas que aparece en su portada es toda una declaración de intenciones–. O para dedicar un tema a describir minuciosamente su pasión por la boca de su ex (‘Violet’). O para definir la delgada y complicada línea entre el rollo-de-una-noche y el inicio de una relación (‘My Lover Cindy’). O asumir que es el momento de marcharse cuando tienes la certeza de que la otra persona ya no te ama (‘Eastbound Train’ –con su aire a lo ‘Polly’–). O para decirle, desde las entrañas, cuánto asco ha llegado a darte (‘I’d Rather Be With Them’).
Desde luego, parece que adquirir el valor de exponer su homosexualidad y su postura donjuanesca es un pilar en su nueva postura, nunca más con la cabeza gacha, sino altiva y desafiante: ese “No soy tu hombre” de su título cumple un doble papel de autoafirmación femenina y de rechazo de roles atávicos en las relaciones. También parece haber sido básica para ella la alianza con The Big Moon. El joven cuarteto londinense parece haber entendido perfectamente las intenciones de Marika y la interacción del quinteto es total. Jules, Celia, Soph y Fern han dotado a su música, como banda de apoyo, de una efervescencia y una energía contagiosas. Es patente en los singles ‘Boyfriend’ y ‘My Lover Cindy’, y también en las cuasi grunge ‘Time’s Been Reckless’ y ‘Good Intentions’ –recordando a Juliana Hatfield o Liz Phair– o en la insinuante, casi funk, ‘So Long’. Y no solo en lo instrumental: sus coros, traviesos, divertidos, suponen un ingrediente muy jugoso en esta ensalada.
La variedad es otro de los alicientes que hacen de ‘I’m Not Your Man’ un disco especial y muy disfrutable, yendo de un palo a otro, dinamizando su escucha, aunque por momentos parezca encallarse un poco en el registro más relajado. Porque, como decía al principio, Hackman no ha abandonado del todo el corte de pop folk intimista: ahí están ‘Gina’s World’ (tierna letra dedicada a su mejor amiga), ‘Apple Tree’ o la dramática y cohenesca ‘Cigarette’ (que habla de sexo enrabietado post-discusión). Pero lo hacen con una perspectiva interesante, servida en casi todos los casos por la interesante producción de Charlie Andrew: el colaborador de alt-J (recordemos que la voz de Marika está presente tanto en ‘relaxer‘ como en ‘This Is All Yours‘) dota a las canciones de una extraordinaria riqueza en los arreglos, dotándolas de atractivo casi por sí mismos. Los efluvios de western a lo Morricone en ‘Apple Tree’ o la montaña rusa de cuerdas y coros proto-soul en ‘Blahblahblah’ las salvan de una probable indiferencia.
Aunque ya hemos hablado de la honesta temática de estas canciones, cabe destacar también el aspecto formal de sus letras. Cargadas de humor, el tipo de humor que simplemente se sirve de mostrar la realidad en primer plano, y verdad, el tipo de verdad que duele oír pero que con el tiempo se agradece haber oído, la artista londinense sobresale en líneas facsinantes como “no te retendré porque sé que estás enamorada, y ya no es de mí, y no es tu culpa” (‘Eastbound Train’); “dices “mira a la gente, arrastrándose como insectos por la acera” y yo preferiría estar con ellos porque odio esta habitación, que huele a ti” (‘I’d Rather Be With Them’); “viniste a mi por entropía y te di toda la que tuve / él es mejor hombre que yo, así que no se sentirá mal / está bien, porque yo solo soy una chica, “no cuenta” / él sabe que una mujer necesita a un hombre para hacerla gritar” (‘Boyfriend’); “intenté retener mi lengua, pero tú la arrancaste de su cubículo / la bañaste en petróleo, encendiste un cigarro y le diste un beso” (‘Cigarette’). Desde su preciosa portada, un cuadro hiperrealista a cargo del pintor Tristan Pigott que envuelve a su amiga Marika y las Big Moon en la iconografía que enmarca el álbum (símbolos fálicos y vaginales, guiños a las letras del álbum), ya queda claro que ‘I’m Not Your Man’ no es un disco cualquiera y está destinado a sacar a Marika de esa lista random que citábamos al principio. Y para siempre.
Marika Hackman actúa el sábado, 15 de julio, en el Festival de Benicàssim 2017.
Calificación: 7,8/10
Lo mejor: ‘Boyfriend’, ‘My Lover Cindy’, ‘Cigarette’, ‘I’d Rather Be Them’
Te gustará si te gustan: Liz Phair, Waxahatchee, The Big Moon.
Escúchalo: Spotify