Tal y como había especulado ya en alguna ocasión, y pese a que más tarde descartara hacerlo ahora y proyectarse a 2024, Kanye West acaba de anunciar hace un par de horas que se presentará como candidato a la presidencia de EEUU en las elecciones del próximo mes de noviembre. En un tuit el artista, casi avanzado su programa de gobierno, dice «Debemos llevar a cabo la promesa de América confiando en Dios, unificando nuestra visión y construyendo nuestro futuro. ¡Me presento a presidente de Estados Unidos!», acompañado del hashtag #2020VISION, que (todavía) no sabemos qué quiere decir.
Para más inri, el magnate de la tecnología Elon Musk ha respondido a su tuit diciendo que «tiene su total apoyo» en esa empresa. Algo que podría sonar a chanza si no fuera porque Ye publicó hace días una foto de ambos juntos en la casa de aquel –de hecho, ya hay quien ha observado que en el reflejo del cristal se vislumbra a Grimes tomando la instantánea–. Es decir, todo esto podría estar planeado. Ahora bien, ¿va en serio Kanye? ¿Tiene alguna posibilidad real de ser presidente de los Estados Unidos de América?
Kanye West anunció durante un laaaargo discurso en la gala de los premios MTV VMA’s 2015 que quería presentarse a presidente en 2020. Todo el mundo lo tomó a broma (aún no tenemos claro que no lo sea) se tomó a broma el anuncio. Incluso Hillary Clinton, por entonces pre-candidata, que entendía que, de suceder, sería bajo las alas del Partido Demócrata, considerando la cercanía con Barack Obama que había mostrado West durante su mandato. El giro de guión llegaría tras las elecciones de 2016, en las que Donald Trump derrotó contra todo pronóstico a Clinton. A partir de ahí, West inició un acercamiento a los postulados de Trump y le visitó varias veces en la Casa Blanca, alabando su figura y sus políticas, generando una considerable controversia.
Pero, ¿va en serio? Lo cierto es que por el momento no se conocen detalles de su candidatura: ¿se presentará a las primarias del partida Republicano o lo hará de forma independiente? Lo último parece improbable, porque supondría una inversión descomunal para afrontar una derrota casi segura –desde el siglo XIX, no ha habido ningún presidente en USA que no perteneciera a los dos partidos principales–. Más posibilidades tendría si formara parte del Partido Demócrata: ha demostrado que sus ideales están más cercanos al extremo conservador y del fundamentalismo religioso que representa Trump y, aunque obviamente no se impondría a él, sí tendría posibilidades de formar parte de su gabinete.
De hecho, no sería tan delirante pensar que todo esto sea una maquinación para, en una pirueta loca, captar el voto de las minorías étnicas del país, que en los últimos meses se han manifestado contra la violencia policial y su racismo. O como poco, arrebatar a Joe Biden, candidato demócrata, el voto de los indecisos aunque solo sea para echarse unas risas. Así que no, quizá no veamos a Kim Kardashian como primera dama (como algunos temen), pero que Kanye vaya esta vez en serio puede ser verdad. En un país en el que una actor de westerns gobernó durante 8 años y con West por medio, todo puede ser, literalmente. Y a todo esto, le vendrá de perlas para promocionar ese anunciado nuevo disco, ‘God’s Country’.
We must now realize the promise of America by trusting God, unifying our vision and building our future. I am running for president of the United States 🇺🇸! #2020VISION
— ye (@kanyewest) July 5, 2020
You have my full support!
— Elon Musk (@elonmusk) July 5, 2020