Durante los próximos días, comentaremos algunas de las ediciones físicas de los mejores discos de 2019 en esta sección llamada «El físico importa», por la que ya han pasado algunos lanzamientos de este año como el de Billie Eilish. Comenzamos el repaso navideño con la recomendable edición en vinilo del último disco de The Divine Comedy. El álbum se inspira en la vida cotidiana de oficina, cuestionando cómo las nuevas formas de capitalismo y las nuevas tecnologías están destruyendo empleos, todo ello a través de personajes como el trepa, el jefe chapado a la antigua, y el patetismo de la «fiesta navideña», entre otros en los que ya ahondó mi compañero Raúl Guillén en la crítica del álbum ‘Office Politics’.
Como ya contaba él, el disco funciona como un musical, por lo que en este caso es imprescindible que incluya las letras, cosa que por supuesto sucede, añadiendo además detalles que no encontraréis en Genius: todo el diseño está supeditado al concepto del álbum, y si la portada y la contraportada se unen para dar una visión panorámica de estos personajes, la tipografía de letras y créditos es de máquina de escribir. Además, las fundas interiores aparecen convenientemente salpicadas de manchas de té o café, con subrayados en rotulador fluorescente e incluso alguna corrección en boli rojo.
Aparece en los créditos el nombre de una cantidad considerable de músicos, aunque no el ansiado distintivo «masterizado para vinilo» que tanto se echa de menos en la era digital. Pese a ello, el sonido no parece excesivamente comprimido, dejando respirar un mínimo los múltiples arreglos del álbum, y la estructura en doble disco realza algunos de los hightlights del álbum: ‘Infernal Machines’ parece una canción de Depeche Mode o Marilyn Manson abriendo la cara B, haciéndote pensar que esto en los 80 habría sido un hit; mientras que ‘The Life and Soul of the Party’ es un poquito más «hit disco» abriendo la cara C… ¿que puede cerrarse con una canción más adecuada que ‘Dark Days Are Here Again’? El doble vinilo está disponible en Amazon a unos 28 euros (no confundir con la carísima edición deluxe de vinilo azul, en esta que comentamos ambos son negros), y en tu tienda de barrio favorita.