Julia Michaels es una de las compositoras de pop más influyentes del último lustro por su trabajo para Selena Gomez o Justin Bieber, que la ha llevado a trabajar con multitud de artistas; y este año ha metido mano en la mejor canción de ‘Future Nostalgia‘ de Dua Lipa, el álbum pop que ha marcado el principio de década, y en el single político de Demi Lovato. Tanto tiempo se lleva hablando de Michaels que parece mentira la artista todavía no haya publicado un álbum largo como tal. En los últimos años ha editado tres epés, ha arrasado con singles como ‘Issues’, aparecido en multitud de temas de más o menos éxito como artista invitada, y hasta a tenido tiempo de demostrar que su estilo puede ser mucho más interesante de lo que parece, con temas como el glam ‘Uh Huh’ o el bizarro ‘Pink’.
El debut largo de Julia Michaels existe, no tiene fecha de edición, pero existe, y la artista ha declarado que será un trabajo centrado en el amor y en «estar enamorado» en lugar de sumergido en una relación tóxica. Julia sale con el cantante JP Saxe a partir de que ella escribe su éxito ‘If the World was Ending’, y el primer adelanto del álbum está inspirado en esta relación. Producida por unos The Monsters & Strangerz que recientemente has escuchado en ‘Liar’ de Camila Cabello, varios temas del disco de Lauv (ex de Julia) o ‘Break My Heart‘ de Dua Lipa, ‘Lie Like This’ acerca a la cantante y compositora a la pista de baile para hablarnos de una sensación típica en el amor, la de sentir que no puedes despegarte de persona que te llena aunque estés «emocionalmente jodida».
Y no, la pista de baile que busca Julia en ‘Lie Like This’ no es la misma que este año han visitado Dua, Kylie o Jessie Ware, y ni siquiera puede hablarse de una aproximación a la discoteca como tal. La influencia del piano-house es perceptible en el arreglo musical de la canción, pero donde este año ‘Chromatica‘ y ‘Róisín Machine‘ nos han sumergido en esos mundos de manera profunda, ‘Lie Like This’ no deja de ser una grabación pop ante todo, confeccionada para la radiofórmula, pulida al máximo e inofensiva desde el punto de vista de la producción. Sin embargo, la voz rota de Julia aporta una personalidad inconfundible mientras la melodía de la canción atrapa tanto como esa relación irresistible que relata su letra, especialmente la de un estribillo que engancha dentro de que busca cierta linealidad.