En pocos momentos históricos se han publicado tantas canciones sobre Madrid como en este. Solo esta semana se han lanzado al menos dos adaptaciones del chotis: ‘Madrileña’ de La La Love You y ‘Madrid, Madrid, Madrid’ de MARLENA. Estas han llegado con motivo de San Isidro, que en la ciudad celebramos hoy.
Hemos disfrutado ‘Madrid City‘ de Ana Mena, y por supuesto recordamos clásicos de Sabina, Loquillo o ‘Todos los paletos fuera de Madrid’ de Séptimo Sello. Pero la verdadera noticia trasciende los fastos locales, la nostalgia o el hedonismo para plantear una pregunta: ¿qué está pasando en esta ciudad?
En general, las últimas letras que nos hablan de Madrid nos hablan de gentrificación, de desencanto social, de precariedad, de la imposibilidad de acceder a una vivienda digna ante la inacción de ayuntamiento y comunidad, y finalmente de abandonar la ciudad de facto en busca de un destino mejor. En este artículo, repasamos algunos de los casos.
Yo solo quería escribir una canción de amor, Zahara
«Que se muera Madrid, que arda en el infierno» es una de las canciones más coreadas de los conciertos de Zahara, como sabéis todos los que hayáis pasado recientemente por alguno de sus conciertos. La cantante ha cambiado la ciudad por el campo, en parte porque no podía seguir costeándose su piso en la capital, y así lo ha expresado en esta entrega a la naturaleza.
Contaba en una entrevista reciente: «Cuando vivía en Granada o en Barcelona, parecía que todo pasaba en Madrid, que en Madrid iba a encontrar todo: el amor, mi trabajo, mi banda, mi profesión… Y es verdad que he encontrado todo eso, pero la ciudad me ha echado. Mi propia ciudad, donde he tenido a mi hijo, donde he montado mi empresa y donde he sido feliz, me está mandando a la mierda. No puedo pagar la casa en la que vivía. No poder pasear por tu ciudad me parece asfixiante, la contaminación es asquerosa, salir y no fijarte en nada, la prisa, no querer mirar nada porque todo es horrible…»
Esta ciudad, Javiera Mena
Exactamente en los mismos términos se expresaba Javiera Mena hablando de un tema de su último disco, ‘Inmersión’. Dice la letra: «Esta ciudad me mira llorar / Me ofrece un abrazo pero no es de amiga». Y al final: «En esta ciudad te sientes bien / Cuando tienes en el bolso un billete de 100».
Javiera confirmaba que la ciudad de la que se ha ido es Madrid, aunque no se menciona en el tema: «Madrid de repente se transformó en Nueva York, en algo muy caro, y todos desesperados buscando los espacios. Yo creo que habla de eso, de buscar un espacio, buscar profundidad dentro de una gran ciudad como Madrid. Habla de sentirte desolado dentro».
‘¡Ay, Madrid!’, Vetusta Morla
El último disco de Vetusta Morla, ‘Figurantes‘, también tenía una canción sobre Madrid, en concreto, entre exclamaciones. El texto hace un juego de palabras con un eslogan del Metro («Me dejé las alas en el metro y no sé seguir»). Y es pesimista sobre el futuro: «Ni con un beso / Habrá un final feliz», hablando incluso de un «entierro». ¿A quién podrá referirse «la bestia de ojos muertos» que «pasará»?
Decían en entrevista: «Madrid, como la canción relata, es una ciudad excitante, pero también es un lugar que puede convertirse en algo muy hostil. A veces tienes la sensación de que te echa de sus fronteras, que te empuja fuera de sus límites. La canción no deja de ser una llamada a permanecer en ese lugar, a hacerlo habitable y humano, y a no escapar (…) Hay determinadas personas e intereses y hasta diría que empresas que, de manera premeditada y con la intención de sacar un beneficio económico, convierten Madrid en un lugar hostil. Eso es así».
‘Madrid’, Caliza
La situación que ha llevado a Madrid a ser un lugar hostil para sus propios habitantes no es nueva. Ya en 2015 Caliza incluía un tema llamado como la ciudad en su disco ‘Medianoche / Mediodía’. Este no necesita ninguna aclaración:
«Me pregunto por qué
te resistes a mí
Por qué no me pertenece
el lugar en que nací.
Madrid,
no me voy a marchar
Pero déjame ir
Líbrame de todo el peso
Que has cargado sobre mí».
‘Madrid nos pertenece’, Biznaga
Biznaga han hecho recientemente el álbum definitivo sobre la imposibilidad de costear una vivienda. Se llama ‘¡Ahora!‘ y apareció en todas las listas de mejores discos de 2024. Pero antes de canciones como ‘El Entusiasmo’ o ‘Espejos de caos’, esta última sobre esa pareja que no se soporta pero tiene que convivir para poder pagar el alquiler, tenían una canción incluso más explícita sobre Madrid. ‘Madrid nos pertenece’, además de contener un dardo a Carolina Durante para empujarles a la acción social, se sabía «harta», muy harta:
«Hartos de la mierda que ven
Así les luce el pelo a los chavales
De Hortaleza a Carabanchel
Algunos saben cómo organizarse».
‘Tempo 2’, Carolina Durante
Tras haber actuado frente a 60.000 personas en las Fiestas del 2 de Mayo, Carolina Durante no pueden faltar en este especial. Son los autores de ‘Cayetano’ y pocas canciones hablan más de Madrid que ‘Cayetano’. Su tercer disco -y otros momentos de su carrera- está plagado de referencias a la ciudad, como el bar ‘Tempo 2’ o ‘Normal’, donde suben la misma calle, «San Bernardo».
El tono festivo de todo esto es una fachada tras la que se esconde una clara angustia, a menudo camuflada de intoxicación etílica, como en esta canción o en títulos tan ilustrativos como ‘Joderse la vida’. Por si alguien no se dio cuenta, repito: la palabra «suicidio» aparece en ‘Elige tu propia aventura‘ tantas veces como en ‘Nevermind‘.
‘Bravo Murillo’, La Paloma
La Paloma, que acaban de anunciar su fichaje por Universal, publicarán nueva música a lo largo de este año. El single con el que los conocimos no puede faltar en el listado por lo que tiene de gráfico: «en una terraza de Bravo Murillo, espero la muerte». En este caso estamos ante una canción de amor, pero no es que la ciudad ofrezca ningún consuelo. «He perdido la paciencia / He perdido el interés / Se ha esfumado la esperanza / De que vuelvas», dice el estribillo, tan desencantado y asqueado de la vida como otro de sus hits, ‘La edad que tengo’.
‘Estrecho/Alvarado’, C. Tangana
‘Estrecho/Alvarado’ es una canción bastante vieja de C. Tangana que en 2023 se incluyó en una reedición de su mixtape ‘Avida Dollars’. Co-producida por pablopablo, recuerda sus inicios, y en concreto el barrio en el que vivió antes de hacerse famoso. Allí nos consta que viven muchos otros músicos, pasando dificultades, a pesar de no ser precisamente uno de los lugares más lujosos de la capital:
«Podría volver al punto cero
y escuchar a mi casero
pelear por su dinero
en la escalera.
Dentro de mi piso,
30 metros cuadra’os,
entre Estrecho y Alvara’o
escribiría otro poеma».
‘El techno cura’ (de Madrid), Delaporte
Delaporte suelen aparecer en este tipo de especiales con una versión de ‘Madrid’ tipo chotis, pero hay una historia más pertinente.
Hace un par de temporadas, Sandra Delaporte decidía abandonar la ciudad para cambiarla por la montaña. En su caso, para ella la ciudad representaba todas las presiones de la industria musical o de las redes sociales: «Necesitaba parar. Ahora estoy intentando hacer las paces con Madrid, porque me recuerda a algo traumático, a mi crisis de ansiedad. Coincidió con una crisis muy dura en la post-pandemia. Teníamos que hacer todos los festivales del mundo por los que habías firmado en 2019, por movidas de booking. Y llegó el punto de decir «no quiero dedicarme de la música, paso». Le dije a mi mánager: «Me voy de Madrid». A Sergio le dije: «No sé si me quiero dedicar a esto porque no estoy bien de la cabeza. Yo no quiero ser famosa, yo no quiero nada más que estar bien conmigo misma. Lo demás me la bufa. En ese momento decidí quitarme la culpabilidad del «tengo que», del wannabe. Yo tenía una pedrada fuerte, de compararme [con los demás] en redes sociales. Dije «me voy, no quiero redes sociales»». Después, encontró la paz en un pequeño pueblo y sin consumir alcohol ni drogas.
‘La calle Elfo’, Alcalá Norte
Terminamos, como no podía ser de otra manera, con Alcalá Norte, el grupo que recibe su nombre de un grisáceo centro comercial situado en un barrio obrero. La calle Elfo, cercana a este sitio, no tiene nada de especial; todo lo contrario que esta agridulce melodía, que puede resultar alegre, pero esconde también cierta frustración en su refugio en el alcohol, así como cierta intención social. O como poco, cierta ambigüedad:
«¿Cuánto cuesta un segundo de todo el mundo?
Quiero tres minutos y medio
Y estar ebrio para siempre
como premio por ser justo todo el tiempo
¿Qué dios ofrece eso?
Es la casa del pobre la más cara de limpiar
Es Stalin tu padre y el de todos los demás
Es el amor de madre una cuestión social
Son esos ojos negros los que aprendieron a odiar».
Bonus: ‘A Madrid’, Gata Cattana
Tres meses antes de morir, Gata Cattana escribió un poema llamado ‘A Madrid’ en el que hablaba sobre cómo se sentía una persona de fuera (un pueblo de Córdoba) en la ciudad. En él se enfrenta a la ciudad con el amor/odio que rezuman todas las canciones de este artículo, además de tocar tangencialmente temas como la contaminación. En un momento, impresionante en el recitado, se encara:
«Eres tan cínica,
eres tan jodidamente cínica,
hija de puta, que pareces el mismo Dios
te crees el mismo Dios, ¿verdad?
Pues he venido a darte de tu propia medicina.
Te crees que tú administras
y repartes, y partes la pana
pero se nota que no tenías ni idea
de quién era yo antes de traerme,
y eres tú la que se parece a mí,
la que ya quisieras parecerte
un poco a mí,
ya quisieras».