‘Sweetener’ ha logrado consolidar a Ariana Grande como una estrella internacional. Es su cuarto álbum y el primero ya fue top 1 en Estados Unidos, pero ningún otro álbum suyo había sido número 1 en tantos países como este nuevo. ‘Sweetener’ ha sido top 1, además de en Estados Unidos, en España, Australia, Reino Unido, Canadá, Suecia, Noruega, Nueva Zelanda, Italia, Irlanda, Finlandia, Holanda o las dos listas oficiales de Bélgica. Casi terminamos antes diciendo dónde NO ha sido número 1: Francia, donde ha sido top 2; Alemania, donde ha sido top 3; y Japón, donde ha sido número 5.
Además, lo que es más importante: el disco ha conseguido espectaculares cifras de streaming dentro y fuera de Estados Unidos. En este lugar, las cifras de venta tradicional han sido unas dignas 127.000 unidades que se ven aumentadas hasta los 231.000 puntos. En Reino Unido, se han producido 27.000 ventas tradicionales, que ascienden hasta los 45.000 puntos sumando streaming.
Es fácil adivinar por qué Ariana Grande está en el mejor momento comercial de su carrera. En primer lugar, viene de una era en que cada single fue más exitoso que el anterior: ‘Side to Side’ con Nicki Minaj tuvo más éxito que ‘Into You’, que a su vez tuvo más éxito que la a su vez exitosa balada ‘Dangerous Woman’. En segundo, los singles nuevos han calado: ‘No Tears Left to Cry’, un muy sutil homenaje a las víctimas del atentado de Manchester tras un concierto de la propia Ariana Grande, es una de las mejores canciones de 2018; y ‘God Is A Woman’, una gran sucesión sobre sororidad y empoderamiento. En tercero, el álbum ha sido bien planificado y nunca retrasado o mareado (saludos, Nicki Minaj). Y en cuarto, Grande lo ha promocionado con elegancia y sin polémicas, recordando que lo que vende a la larga son las canciones y no los titulares. Larga vida a ’Sweetener’, pues pese a algunas composiciones-bache, tiene aún mucho que decir: ‘God Is a Woman’ no ha tocado techo y la recepción en torno a otras canciones como ‘breathin’, la titular o ‘everytime’ está siendo estupenda. Si ‘Dangerous Woman’ sumó 2 millones vendidos, no nos sorprendería que este álbum terminara superando esa cifra si continúa jugando bien sus cartas.
Jay-Z y Beyoncé también vienen de dos eras muy exitosas, las de ‘4.44’ y ‘Lemonade’, y de hecho han tenido una de las pocas giras de macroestadios para 50.000 personas que se han visto este año. Por eso sorprende que las cifras de su disco conjunto ‘Everything Is Love‘ sean tan modestas. El álbum no fue top 1 en un solo país de todo el mundo, sí ha superado lo equivalente a medio millón de unidades a nivel global según Mediatraffic, pero parece muerto en las listas tan solo 2 meses después de su lanzamiento.
Su bastión es por supuesto Estados Unidos, donde el disco resiste en el top 30, con el single ‘Apeshit’ aún en el puesto 41 del Billboard Hot 100. Pero la influencia del álbum en Europa no puede calificarse sino como decepcionante. Es muy llamativo que ‘Everything Is Love’ solo haya durado 8 semanas en el top 75 británico; 3 semanas en el top 50 alemán; o 5 tristes semanas en el top 100 streaming español.
Porque esa es otra: sus streamings son bajos, máxime considerando que el álbum es corto y las críticas han sido muy buenas, exactamente igual que las de Ariana (80/100 en Metacritic). Por eso extrañan más aún sus cifras pese a su polémico añadido de última hora a Spotify durante la semana de salida. Si bien el single ‘Apeshit’ supera los 75 millones de reproducciones (no es que sean cifras de macrohit pero tampoco está mal), las otras ocho pistas rondan tan solo los 8-15 millones de reproducciones. Atentos: son las mismas cifras en 2 meses que Ariana ha conseguido en 10 días.
Cabe preguntarse qué pasa a Beyoncé y Jay-Z por la cabeza: por qué no incorporan más temas de este álbum a su repertorio, por qué no sacan más vídeos tan icónicos como el de ‘Apeshit’, si este disco ha sido un divertimento medio improvisado, por qué no reaccionan a la buena recepción crítica, si se arrepienten de haberlo firmado como «The Carters»… pero si no hacen algo, es difícil que vayamos a encontrar ‘Everything Is Love’ entre los 40 álbumes más vendidos o reproducidos de 2018, y para tratarse de ellos, no es algo que hubiéramos adivinado hace 3 meses.