En plena crisis del coronavirus, son muchos los artistas que han decidido retrasar sus discos sine die. No ha sido el caso de The Weeknd, que se ha lanzado a la piscina con ‘After Hours‘ pese a que las tiendas de soporte físico están cerradas en medio mundo. Abel Tesfaye no es un artista que dependa tanto del soporte físico y lo cierto es que la jugada le ha salido bien. Su nuevo álbum es número 1 en Estados Unidos, como era de esperar, pues estamos hablando de una de las mayores superestrellas del mundo, y además en un estado de forma estupendo; pero la noticia es que lo ha logrado con cifras espectaculares.
En plena crisis mundial por el COVID-19, The Weeknd alcanza la estratosférica cifra de 444.000 discos vendidos durante su primera semana tan solo en Estados Unidos. De ellos, 275.000 han sido ventas relativamente tradicionales: el 80% procede de un «ticket bundle» con una gira que empezaría en junio y con hasta 80 «items» a la venta a través de su web, lo que incluye llaveros, camisetas y un largo etcétera, todos ellos incluyendo una descarga digital del largo. ¿Te parece que hay trampa? Calma: los 221 millones de reproducciones de las canciones de ‘After Hours’, aún solo dentro de Estados Unidos, habrían valido para darle número 1 del Billboard 200 igualmente, aunque hubiera vendido 0 unidades, informa Billboard.
Fuera de Estados Unidos, las cifras son menos espectaculares ya sin «ticket bundle», pero el disco ha podido apuntarse el número 1 en Canadá, Reino Unido, Australia, y mercados tan variados como Holanda, Irlanda, Italia, Noruega y Suecia: además del número 2 en Francia y el 5 en Alemania. Dado el éxito de ‘Blinding Lights’, que continúa en el número 1 de Spotify a nivel global, y la buena aceptación de ‘In Your Eyes’, que se mantiene en el top 15 de la misma lista, The Weeknd tiene el equivalente a los 2 millones de copias asegurados, y después ya se comprobará cuál es la longevidad del proyecto. Lo seguro es que desde ya es uno de los álbumes del año.
En la otra cara de la moneda, el último trabajo de Green Day, ‘Father of All Motherfuckers‘, que puede ser el mayor fracaso comercial de su trayectoria, el primero de sus álbumes que no logra ni una certificación de oro o platino desde su debut en 1990. Con unas escasas 200.000 copias despachadas en todo el mundo a nivel mundial, según las estimaciones de Mediatraffic, parece haber sido víctima de que las tiendas estén cerradas, pero no: salió en febrero.
El grupo autor de ‘Dookie’ (20 millones de copias vendidas desde 1994), y ‘American Idiot’, uno de los álbumes más vendidos del siglo XXI (14 millones de copias desde 2004), ya venía unos años presentando un perfil más bajo. Pero ‘Father of All Motherfuckers’ no ha podido repetir el número 1 en el Billboard 200 que sí conseguía en 2016 ‘Revolution Radio’, quedando en el top 4; y bajando hasta un humillante puesto 111 en su segunda semana.
En Reino Unido el álbum sí alcanzaba el número 1, pero solo para caer al puesto 17 en la segunda semana, y desaparecer de todo el top 100 tan solo después de 4 semanas. Una tendencia que se repite en otros países como Alemania, Italia o Australia. ¿Será cierto que con este disco querían acabar su contrato con Warner y que por tanto tan poco se han esmerado?