En todo caso, parece que el documental no está destinado únicamente a ensalzar a la diva («¡Wow! ¿Quién es esa bitch?», recuerda haber pensado de ella Gloria Trevi), sino también a mostrar partes menos cómodas, como su infelicidad durante años, que la llevaron a no querer cantar (como ya había explicado
). O su complicada relación con la industria musical: no solo el presidente de Sony Music España Josep Maria Barbat reconoce no haber sabido entenderla siempre y habla de «rupturas» entre ellos, sino que también en un fragmento, la propia Naranjo habla de los ejecutivos: «hay una cosa que me revienta en este negocio: «tienes que hacerlo porque es bueno para tu carrera». No, no es bueno para mi carrera. Es bueno para TU carrera. A TI te conviene que lo haga». Todo ello entre ensayos, preparativos y después desarrollo de su último y exitoso tour y disco, ‘Renaissance‘.Un nombre –también de una caja recopilatoria– que explicita el «renacer» que Mónica Naranjo está viviendo, tanto renacer personal como profesionalmente. Comenzó dando un vuelco a su figura pública, primero con su papel de jurado en Operación Triunfo 2017 y siguiendo con la presentación del docu-reality sobre su persona ‘Mónica y el sexo‘ y, después, con su presencia como conductora del exitoso reality ‘La Isla de las Tentaciones‘ para Telecinco. Y después volvió a subirse a los escenarios en esa gira que plasma la película, repasando los mayores éxitos de su carrera con arreglos orquestales, corales, electrónica, metal… Básicamente todo. Así es ella. Pero además en el último año se ha mostrado además en forma en su faceta creativa, con los EPs ‘Mes Excentricités’. Ambos han incluido temas tan interesantes y potentes como ‘Doble corazón‘ –en el primer volumen– o su personalísima y divertidísima adaptación de un tema de Kim Wilde rebautizado como ‘¡Hoy no!‘ –en el segundo–.