JADE protagoniza la entrada más fuerte de la semana en JNSP, llegando directa al número 3 con ‘IT girl’. Es el mismo puesto que alcanzó ‘Fantasy’, mientras que ‘Angel of My Dreams’ consiguió ser número 1. En la cima se mantiene Juanjo Bona con ‘Moncayo’.
Otras entradas en el top 10 son las de Carolina Durante y Bad Bunny, y a las puertas quedaron Japanese Breakfast y Selena Gomez. SPELLLING y 070 Shake producen las entradas más underground en la parte baja de la tabla.
En 2024 se estrenaron casi mil películas en España. De ellas (se incluyen también cortos, reposiciones…), la mitad tuvieron un estreno comercial normal, con pases diarios en salas de cine. Ante esta avalancha, es inevitable que muchos títulos hayan pasado completamente desapercibidos o tenido un recorrido comercial mucho menor del esperado dada su calidad. Aprovechamos que muchas de estas películas ya están disponibles en plataformas para recomendar algunas de las más destacadas.
Kneecap (Rich Peppiatt)
Ni la colección de premios y nominaciones (con los Oscar en el horizonte), ni la presencia de una estrella como Michael Fassbender, lograron llevar gente a las salas. ‘Kneecap’ la vieron la friolera de 3.307 espectadores (datos del Ministerio de Cultura). El debut del británico Rich Peppiatt es una de las mejores películas sobre música estrenadas el año pasado. ‘Kneecap’ narra el inesperado salto a la fama del trio de raperos del mismo nombre, naturales de Belfast y activistas de la protección de la lengua gaélica en Irlanda del Norte. Lo curioso de la propuesta es que son los propios miembros del grupo –dos canis y un profe de música- quienes se interpretan –y muy bien- a sí mismos. Una estimulante mezcla entre realidad y ficción que alimenta un relato declinado en clave de comedia juvenil gamberra y que esconde interesantísimas reflexiones sobre el conflicto irlandés, las políticas lingüísticas y los choques ideológicos entre generaciones. Un sorpresón. 8’5.
Disponible: Filmin
El clan de hierro (Sean Durkin)
Esfuerzo individual, familia tradicional (patriarcal) y Dios (bendiga América). Estos tres pilares de los Estados Unidos de la era Reagan, los cimientos de la patraña del “sueño americano”, tienen su contraejemplo en la historia real de la familia Von Erich, cuatro hermanos luchadores de wrestling, muy esforzados, muy cristianos y muy obedientes con su padre, luchador frustrado, que vivieron una auténtica “pesadilla americana”. Sean Durkin (‘Martha Marcy May Marlene’, ‘The Nest’) consigue trascender los tópicos del biopic deportivo y el dramón familiar de peli de tarde, centrándose más en la lucha interior que viven los personajes (estupendos Zac Efron, Jeremy Allen White, Harris Dickinson y Holt McCallany) que en la que se desarrolla en el ring, en el drama íntimo, articulado a través de acertadísimas elipsis, que en el espectáculo de mamporros, drogas y peinados imposibles. 7’7.
Disponible: Movistar+
Sangre en los labios (Rose Glass)
Si hay un valor seguro en el universo de la prescripción cinematográfica, ese es John Waters. Su top anual debería ser de obligada lectura y visionado para cualquier cinéfilo inquieto, en particular para aquellos que viven atrapados en las redes algorítmicas o para los adoradores del gusto mayoritario que no ven una película a no ser que tenga más de un 6 de media, cuatro estrellitas o un tomate rojo en las webs de reseñas. La magnífica ‘Sangre en los labios’ encabeza su lista de 2024. Tras su prometedor debut en la siniestra ‘Saint Maud’ (2019), Rose Glass confirma su talento con este musculado y muy pulp neo-noir, anabolizado hasta el extremo, que se va transformando poco a poco como el cuerpo de una culturista. La mezcla es loquísima: thriller de venganza, drama familiar, erotismo queer, acción macarra, comedia negra, monster movie… Pero funciona sorprendentemente bien, como si “Russ Meyer hubiera sido una intelectual lesbiana adicta a los esteroides”. 8’3.
Disponible: Filmin
El último verano (Catherine Breillat)
Otro de los títulos favoritos de John Waters (lo eligió en su lista de 2023). Remake de la excelente película danesa ‘Reina de corazones’ (2019) a cargo de la reina francesa de la transgresión: Catherine Breillat (‘Romance X’, ‘Una chica de verdad’). Lo primero que sorprende de esta nueva versión –viniendo de quien viene- es que es mucho menos explícita sexualmente que el filme original, es más sensual que sexual. Lo segundo, que es una película más lograda en su reflexión sobre la mentira y la manipulación en las relaciones de pareja que en la mostración del deseo femenino y el tabú del sexo con adolescentes, al que le falta algo de fuerza y capacidad de transgresión. Lo que no sorprende es la interpretación de Lea Drucker (‘Custodia compartida’, ‘Close’), convertida en una de las actrices más en forma del cine francés actual. 7’5.
Disponible: Movistar+
Casa en flames (Dani de la Orden)
Ha sido la octava película española más taquillera de 2024. Entonces, ¿por qué la incluimos en esta selección? Por dos razones: 1) fuera de Cataluña y el resto de provincias catalanoparlantes -donde ha sido un bombazo- no fue casi nadie a verla; y 2) el público general la está descubriendo a través de Netflix… en su versión doblada. Si hay una película en la que el doblaje tenga menos sentido sería esta. De nuevo, por dos razones: 1) el filme está hablado en catalán y castellano, reflejando la realidad lingüística de Cataluña; y 2) porque el uso de cada lengua tiene un sentido dramático, sirve para caracterizar a los distintos personajes. Más allá de esta polémica (los actores se negaron en un principio a doblarla), ‘Casa en flames’ merece la pena por el fabuloso guion de Eduard Sola, un elenco de intérpretes excepcional y una narración a fuego lento que estallará en flames en un final explosivo. ¿Dará la sorpresa en los Goya? 8’2.
Disponible: Netflix
Nina (Andrea Jaurrieta)
En el anuario de 2024 me preguntaba, a propósito de cierta uniformidad en el cine de autor femenino en España, dónde estaban las Coralie Fargeat (‘La sustancia’), Julia Ducournau (‘Titane’), Justine Triet (‘Anatomía de una caída’) o Rose Glass (‘Sangre en los labios’), por citar solo a directoras europeas, del cine español. Proponía un nombre: Andrea Jaurrieta. Su thriller ‘Nina’, aunque algo irregular, me parece la película española con un trabajo de puesta en escena más inspirado y singular del año pasado. Una personalísima y muy estilizada relectura del subgénero rape and revenge, que evoca tanto los códigos del western como las formas estilísticas del cine de Hitchcock y Almodóvar. Solo por secuencias como la persecución por las callejuelas del pueblo, en el que se mezcla pasado y presente, y la procesión, merece la pena esta película que se vio poquísimo en su estreno (no está ni entre las 50 españolas más vistas). 7’9.
Disponible: Filmin, Movistar+
Bikeriders. La ley del asfalto (Jeff Nichols)
Hay directores que, a pesar de su talento y vocación comercial, no terminan de asentase en Hollywood ni obtener el favor del público. Es el caso de Jeff Nichols. ‘Take Shelter’ (2011), ‘Mud’ (2012), ‘Midnight Special’ (2016), ‘Loving’ (2016)… Son películas estupendas, protagonizadas por actores de renombre, estrenadas en Cannes, pero que, aun así, pasaron demasiado desapercibidas. Con ‘Bikeriders. La ley del asfalto’ ha ocurrido algo parecido. Una película de moteros llena de estilo (está basada en el clásico libro de fotografías de Danny Lyon), con un reparto fabuloso (Austin Butler, Jodie Comer, Tom Hardy, Michael Shannon), en la que se narra muy bien el auge de un club de motoristas de los años 60 y su posterior caída por culpa de la llegada de mafiosos, criminales y hippies zumbados veteranos de la guerra de Vietnam. Por lo que sea, el público no ha querido verla. 7’8.
Disponible: Filmin, Rakuten, Prime, Apple
El cielo rojo (Christian Petzold)
La nueva película del siempre interesante Christian Petzold (premiada en la Berlinale) es una estupenda comedia veraniega protagonizada por un personaje insoportable: un joven escritor (fabuloso Thomas Schubert, nominado a los Premios del Cine Europeo) pagado de sí mismo, incapaz de ver más allá de su ombligo. Con un protagonista tan desagradable, un tipo egoísta, soberbio y gruñón, el director alemán ha realizado una película que es todo lo contrario: divertida, luminosa y llena de profundidad psicológica y emocional. Un delicado cuento de verano rohmeriano a orillas del Báltico que, poco a poco, como el fuego que se vislumbra a lo lejos (de ahí el título), se va transformando en algo mucho más dramático. A destacar también la actuación de Paula Beer, quien parece haber sustituido a Nina Hoss como actriz fetiche de Petzold. 8’1.
Disponible: Filmin
Descansa en paz (Thea Hvistendahl) ‘Longlegs’, ‘Piscina infinita’, ‘Immaculate’… Las películas de terror que lleva Neon (la compañía rival de A24) siempre hay que tenerlas en cuenta. ‘Descansa en paz’, debut en el largometraje de Thea Hvistendahl, es una adaptación de la novela homónima de John Ajvide Lindqvist (Espasa, 2010), un especialista en este tipo de híbridos genéricos como se puede ver en otras adaptaciones de sus obras como ‘Déjame entrar’ (2008) y ‘Border’ (2018). Protagonizada por dos de las estrellas actuales del cine noruego, Renate Reinsve y Anders Danielsen Lie (conocidos por ‘La peor persona del mundo’), la película es un melancólico relato sobre la pérdida y el duelo, que se vuelve terrorífico por las implicaciones emocionales que tiene la idea que subyace en la premisa argumental: mejor tener un ser querido zombi que uno muerto. Y es que, como reza la acertada frase promocional, “el dolor no se puede enterrar”. 8.
Disponible: Filmin
Dream Scenario (Kristoffer Borgli)
Terminamos con otro prometedor cineasta noruego. Hace dos años, Kristoffer Borgli dejó a medio Cannes con el culo torcido con la negrísima ‘Sick of Myself’. Uno de ellos fue Ari Aster. El director de ‘Beau tiene miedo’ lo apadrinó como productor en su aterrizaje en A24. El resultado ha sido tan satisfactorio que este año repetirá con la productora en ‘The Drama’, con unos protagonistas de lujo: Zendaya y Robert Pattinson. ‘Dream Scenario’ parte de una idea brillante, tan surrealista que la podía haber firmado el propio Charlie Kaufman: un anodino profesor universitario (brillante Nicolas Cage) comienza a aparecer en los sueños de millones de personas. A partir de esa premisa se desarrolla una pesadilla que funciona extraordinariamente bien en su dimensión existencial, kafkiana, y algo peor como alegoría de la cultura de la cancelación. Lo dicho, un director y guionista a seguir muy muy de cerca. 7’5.
Disponible: Movistar+
Bad Bunny vuelve a arrasar. Las entradas de su residencia ‘No Me Quiero Ir De Aquí’ en Puerto Rico, en honor a los temas que trata ‘Debí Tirar Más Fotos’, se han agotado en tan solo cuatro horas. Los 400.000 boletos se vendieron tanto de forma online como en persona, para los residentes de la isla.
Los primeros nueve conciertos, exclusivos para residentes de Puerto Rico, salieron a la venta este miércoles, agotándose ese mismo día. Bad Bunny entonces añadió otras nueve citas, llegando a un total de 30 conciertos en El Choli. De esta manera, las 400.000 entradas disponibles para las 21 fechas restantes salieron ayer a la venta y no duraron más de cuatro horas.
En un comunicado emitido por el equipo del artista, estos declaran que más de 2 millones y medio de personas se registraron para la preventa online. Sin embargo, tuvieron que trabajar «con diligencia» para evitar que 1,8 millones de especuladores y bots arruinasen la fiesta a los «fans leales» de Benito.
Ya en 2022, Bad Bunny engrosó una suma de 314,1 millones de dólares tras vender 1,9 millones de entradas con la gira ‘World’s Hottest Tour’, en la que presentaba ‘Un Verano Sin Ti’. Ya por aquel entonces rompió el record a la gira latina más grande de la historia.
‘La juventud‘, el último disco de Kokoshca, ha venido presentado por singles como ‘Huella de ti’ o ‘Parkour’. Pero también tiene gemas perdidas como ‘Es una suerte’, la preciosa composición de amor que lo cierra y que hoy escogemos como Canción del Día. La propia Amaia Tirapu nos cuenta los entresijos de este maravilloso medio tiempo próximo al dream pop, con un final emocionantísimo: «veo mis sueños arder / se esfuma mi juventud / no temo envejecer / temo que no estés tú».
Kokoshca actúan hoy 18 de enero en la Sala Changó de Madrid. Después aguardan Granada, Sevilla, Lleida, Barcelona, Pamplona, Bilbao, Murcia o Ebrovisión. Consulta su página web.
Explica Amaia: «Hay como un hilo conductor en muchas canciones de Kokoshca. Una de las temáticas siempre es el amor y el desamor, esa cosa de un amor pasado que te deja mucha huella, o algo así. Puede que los personajes de ‘Es una suerte’ sean los mismos personajes de ‘Regresando a la ciudad’. O los de ‘Huella de ti’. Pero algo mayores. Están muy convencidos de que el uno esté en la vida del otro. Tienen cierta nostalgia, y esta vez se añade algo más: el miedo a que uno de los dos muera».
Sobre la voz de Pepe Mújica, quien precisamente está a punto de morir, nos dice: «Nos venía muy bien el discurso de Pepe Mújica, porque empezamos el disco con él. Y es una manera muy guay de acabarlo también, diciendo que lo mejor es tener poco equipaje en la vida, pero tener personas alrededor que te quieran y estén ahí siempre».
Respecto a la producción, cita los referentes que les inspiraron, no tan habituales en su repertorio: «Queríamos darle rollo en las texturas a lo Battiato, jugar con cosas más electrónicas, tipo Chromatics. Ya lo hicimos en ‘Amor adolescente’, un single que sacamos. Aquí nos quedó con un toque vintage que nos ha molado un montón. Tiene mucho de Lynch también, que acaba de morir. Es una canción que nos encanta. A veces dudamos si tenía que haber sido single».
La última polémica absurda salida de las redes sociales viene de que Rosalía no esté acreditada apropiadamente en ‘Normal’ de Carolina Durante. En una entrevista de Gabriel Cárcoba para Fleek Magazine, ha preguntado a la banda por qué el tema no fue un single de su nuevo álbum ‘Elige tu propia aventura‘, y el grupo ha respondido que no quería que se eclipsara el resto del disco. De hecho, se mantuvo esta colaboración en secreto hasta el último minuto.
Explican Carolina Durante: «Estamos sacando nuestro disco, es un trabajo largo y sabíamos que podía eclipsar mucho curro. Creo que era lo más justo para nosotros, para ella y para todo (…) Le enseño el disco a Rosalía y ella nos hace el favor de subirse a la canción. Yo hice el tema pensando en que entrara una voz femenina. Lo habíamos intentado con Alicia Ros de Cariño, que acabó grabándose un par de adlibs, pero no se pudo porque la canción no estaba en su registro. Estábamos a contrarreloj porque había que entregar el máster y todo… Y de ahí que nos dijese que se subía. Lo hizo a la primera, o sea que tampoco hubo mucha movida». El vídeo ha petado en TikTok y no ha sentado muy bien a algunos fans de Rosalía.
Lo primero que hay que recordar es que son los artistas quienes acuerdan el modo en que se acredita o no se acredita un «featuring». Hay muy diversas formas de etiquetar en plataformas de streaming -puedes hacerlo del todo, a medias y para nada- y son los propios creadores los que lógicamente autorizan la manera en que se hace. Rosalía y Diego de Carolina Durante además son o han sido cuñados, pues se ha relacionado a este con la hermana de Vila, Pilar, y es mucho suponer que haya podido haber algún tipo de malentendido a este respecto, cuando los tres seguramente estén en contacto permanente. Diego y Rosalía cantaron juntos el tema en Nochevieja, hace 16 días, y se les veía muy satisfechos con sus tags.
¿Cuáles son las diversas formas de etiquetar una colaboración? Si os fijáis en ‘Con altura’, uno de los mayores hits de Rosalía, veréis que J Balvin y El Guincho aparecen como «invitados», pero El Guincho realmente no está «tagueado» apropiadamente. Por la razón que ellos consideraran, cuando visitas el perfil de El Guincho, no aparece ‘Con altura’ con sus 1.000 millones de escuchas. Ese tema no cuenta para las estadísticas de El Guincho.
De manera similar, Rosalía aparece como «invitada» en ‘Antes de morirme’ de C. Tangana, pero esta canción hace mucho que desapareció de su perfil. Canta una estrofa entera y el estribillo, pero seguramente no la considere parte de su repertorio: hoy es ya solo una canción de C. Tangana. Hablando de este, jamás estuvo acreditado en ningún tema de ‘El mal querer’. Co-escribió muchos cortes y escuchamos claramente su voz, pero nunca apareció como «feat». Tampoco Rossy de Palma está acreditada en ‘PRESO’ aunque la recitara entera.
Las razones que pueden llevar a un artista a etiquetarse en un tema, etiquetarse un poco o a desetiquetarse pueden ser muy variadas. Y no solo han de conllevar enemistades, malentendidos o rupturas. Pueden obedecer a momentos artísticos o estratégicos. También se conocen casos de artistas que se etiquetan y se desetiquetan de temas colaborativos, según sus intereses en cada momento. Rosalía ha grabado ‘Normal’ abiertamente como un «favor», de manera casual, y desde luego no forma parte de su estrategia 2025, cuando todo el mundo espera su 4º álbum. Sabemos que no sonará a ‘Normal’ porque ella no ha escrito la canción: simplemente pasaba por allí y decidió añadir unas voces. De hecho, en el vídeo de Nochevieja en casa de Los Javis, es visible que no se sabe la letra… porque la canción no es suya.
Que un artista haya escrito el tema o solo haga unos coros es muchas veces determinante para etiquetarse o no. No es lo mismo quedar para componer una canción juntas, como Lola Indigo y La Zowi hicieron para ‘Yo tengo un novio’, por poner un ejemplo, que grabar unas voces -o incluso una estrofa- por accidente, como es el caso, porque pillabas a mano. Beyoncé no está acreditada como corista en ‘Pink + White’, uno de los mayores hits de Frank Ocean, aunque su voz es muy perceptible. Kate Bush no está acreditada en ‘Games Without Frontiers’ de Peter Gabriel. Ni Robyn en ‘Piece of Me’ de Britney Spears. A veces ni habiendo co-escrito el tema se han acreditado unos coros: Chris Brown no está acreditado en ‘Disturbia’ de Rihanna, ni Charli xcx en ‘Same Old Love’ de Selena Gomez, ni Lenny Kravitz en ‘Justify My Love’ de Madonna.
Es verdad que a Rosalía se la oye mucho, muchísimo en ‘Normal’. Si a Lana del Rey se la acreditó en la primera versión de ‘Snow on the Beach’ de Taylor Swift, ¿por qué no a ella? Eso sí, se nos ocurren casos más extremos: Maggie Reilly no está acreditada en ‘Moonlight Shadow’, cuando la canta entera y en solitario. Sintiéndolo mucho, es una canción de Mike Oldfield.
Puede que Carolina Durante se hayan hecho un poco de lío con el dilema de si ir a por todas con esto de contar con una superestrella, o todo lo contrario. También es verdad que si hubieran anunciado una colaboración con Rosalía a bombo y platillo, se los hubieran comido igual. Al final apostaron por el factor sorpresa. Y eso también tiene un valor. ¿Es que no recordáis la emoción que fue escuchar a David Bowie en ‘Reflektor’ de Arcade Fire, sin que se hubiera anunciado? ¿Pero quién necesita los tags con subidones como ese?
Ela Minus ha gestado su segundo álbum en un periodo inmediatamente pospandémico. Esos tiempos de incertidumbre y desesperanza impregnaron ‘DÍA’, un trabajo donde la artista colombiana mira hacia dentro en busca de su propia verdad. Tras haber pasado por una frustrante crisis creativa, llegó un momento en el que creía tener el disco finalizado. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que las letras eran demasiado distantes, por lo que volvió a sentarse a reescribirlas hasta lograr que reflejaran con mayor concisión su personalidad y el momento vital en el que se encontraba.
El álbum comienza con ‘ABRIR MONTE’, una sugerente pieza electrónica de 5 minutos en la que se puede apreciar una voluntad de empezar de cero. Un nuevo amanecer se alza lento pero constante ante el oyente con una fuerza cegadora. Con sonidos centelleantes y una misteriosa línea de sintetizador, el camino se va esclareciendo con la aparición de elementos que emulan los sonidos de la naturaleza, sobre un beat que va progresivamente energizándose.
Como si este fuera un río, su corriente desemboca en ‘BROKEN’, un mar burbujeante de house progresivo. “I’ve been a fool, acting all cool and now I’m broken” [He sido una tonta, actuando como si no pasara nada y ahora estoy destrozada] confiesa Minus en su adictivo estribillo. Una frase simple, quizá hasta naíf sacada de contexto, que funciona como lamento de los errores del pasado, pero también como aceptación de ellos para salir adelante.
El electropop oscuro de ‘IDOLS’ se relaciona directamente con esto plasmando una imagen sangrienta. La narradora recibe un golpe en la cara que le hace perder el conocimiento por unos segundos. Cuando despierta, lo primero que ve es gente a su alrededor riéndose. Ella no puede defenderse, acepta el golpe y continúa su camino. La metáfora es clara: a veces los momentos más dolorosos nos sirven para aprender una lección sobre nosotros mismos.
El álbum entero se mueve en esos términos, reincidiendo en la idea de que aunque atravesemos situaciones difíciles, las respuestas siempre están primero en nuestro interior antes que en nadie más. El perfecto resumen de esto llega de la mano de uno de los beats más contagiosos del proyecto: en ‘UPWARDS’, Minus canta “I’d love to save you but you’ve got to save yourself / I’d love to save you but I’ve got to save myself first” [Me encantaría salvarte pero tienes que salvarte tú / Me encantaría salvarte pero tengo que salvarme a mí primero].
Cada canción de ‘DIA’ está plagada de multitud de elementos emitidos por una gran variedad sintetizadores creados por la propia artista, que transitan tanto por zonas industriales (la excelente ‘ONWARDS’) como por paisajes bucólicos (‘ABRIR MONTE’). Sea cual sea el caso, todo siempre parece estar ambientado en un mundo al borde del apocalipsis. El sonido futurista y los desamparados versos sobre el final de los tiempos no impiden al álbum encontrar momentos de pura euforia. Con una mezcla explosiva entre techno y pop, temas como ‘QQQQ’, nos llevan directamente a la pista de baile -o más bien a una rave clandestina- y nos invitan a bailar como si el mundo fuera a acabarse. ‘I WANT TO BE BETTER’ recicla la onomatopeya de esa canción, añadiéndola a su recargada producción y logrando un efecto irresistible.
El atardecer llega con ‘COMBAT’, una de las composiciones más bellas que ha firmado la artista. Comienza como una épica aventura ambient y termina convertida en un poderoso himno de autoafirmación. Por primera vez en todo el álbum, Ela Minus habla en plural con un precioso mensaje que incita a romper jaulas y tumbar paredes. A no parar hasta quemarlo todo.
El elenco de artistas que actuarán en el acto inaugural de Donald Trump en la Casa Blanca incluye a gente como Billy Ray Cyrus (padre de Miley Cyrus), Jason Aldean, Rascal Flatts, Snoop Dogg, Gavin DeGraw o Lee Greenwood, como informa Forbes.
El listado es una rareza, pues las noticias musicales que solía dejar el líder de los conservadores es que los artistas le pedían que no usara sus canciones en sus mítines. Sucedió con Jack White y Foo Fighters. También es cierto que hubo quien le apoyó, como Anuel AA.
Cuando se conoce la noticia de que había pruebas para condenar a Trump por tratar de subvertir las elecciones de 2020 y es oficialmente, el primer presidente delincuente; varios artistas han respondido el teléfono. Entre los artistas que actuarán para él, por su carácter internacional, destacan Village People y una mujer, Carrie Underwood. Ambos han tenido que justificar su presencia en el acto.
Carrie Underwood ha declarado: «Amo nuestro país y es un honor que me hayan pedido cantar en esta inauguración y ser una pequeña parte de este evento histórico. Me llena de humildad responder la petición en un momento en el que todos debemos estar juntos por la unidad y mirando al futuro».
Algo parecido han dicho Village People en Facebook: «Sabemos que esto no hará felices a algunos de vosotros, pero creemos que la música está para sonar sin prestar atención a la política. Nuestra canción ‘YMCA’ es un himno global que esperamos una al país después de una campaña tumultuosa y divisoria, en la que nuestra opción preferida para ganar las elecciones, perdió».
Decía David Lynch, el mayor experto en lo onírico desde Freud, que los «sueños importantes son los que tienes cuando estás despierto». También solía decir que las películas que le gustaban eran las que «dejaban al espectador un espacio para soñar». Mientras varias generaciones crecían teorizando sobre el significado de sus obras maestras en el cine, como ‘Mulholland Drive‘ o ‘Carretera perdida’, él aseguraba que la comprensión del conjunto no tenía más importancia que la habilidad de bucear en cada escena por separado.
David Lynch nos hizo soñar despiertos como nadie más. Esas cortinas rojas y largos pasillos que has visto por todas partes -del Telediario a Instagram- desde que este jueves se conociera su muerte, son los espacios que recorrimos con él, felices de adentrarnos en terrenos desconocidos e inquietantes del mundo, de nuestra propia psique. Lugares abstractos que encontrábamos confortables sin que lo fueran y sin comprender por qué. La etiqueta de «cine de autor» quedaba muy pequeña para alguien que nos hacía descubrir tanto sobre nosotros mismos.
‘Una historia verdadera’ probó que David Lynch podía hacer películas «normales», pero sin duda será recordado por idas de olla como ‘Inland Empire’, su largometraje final, estrenado hace casi 20 años, y para el que el adjetivo «surrealista» no bastaba. No hay más que comprobar cuántas entradas nos presenta la red para la palabra «lynchiano». Más allá aún, cuando las series de televisión se han convertido en la moda de los tiempos que corren, hay que recordar de qué modo el director y guionista revolucionó el género con ‘Twin Peaks’ a finales de los años 80. Solo entonces descubrimos que una serie podía ser una obra de arte mayor que una película.
Para empezar, logró introducir la incógnita de «¿Quién mató a Laura Palmer?» en el vocabulario mundial, tras presentar en aquel capítulo piloto inmenso, digno de ver en bucle, a la protagonista «muerta, envuelta en un plástico». De manera arriesgada hasta lo inverosímil, la serie rehuyó después de ser un «whodunit» al uso, entregándose cada vez más al componente mágico, perdiendo audiencia pero ganando culto. Su base era un guión ambicioso, desafiante e impredecible, así como un elenco colosal de secundarios, tan seductores como grotescos. Soy incapaz de hacer la casa sin recordar a la loca de las cortinas. Pocas series han propiciado que la muerte de hasta su apuntador fuera noticia: hay una página en IMDB que explica cuáles son las 60 personas vinculadas con ‘Twin Peaks’ que ya han fallecido, lo que incluye a Lady Leño, David Bowie, y finalmente al autor de su exitosa banda sonora, Angelo Badalamenti, y de la cantante del Roadhouse, Julee Cruise.
La muerte del maestro de todos es ya demasiado para aquellos que descubrimos la perversión a través de ‘Terciopelo azul’. El consuelo es que su última obra fue de lo más esquinada y enriquecedora. Un triunfo absoluto de la independencia y de la libertad creativa. En un momento en el que las series sobrevivían a base de «cliffhangers», él ofreció una última temporada de ‘Twin Peaks’ inasible, extrañísima, con personajes descolgados como el de Sky Ferreira, al que el espectador estaba invitado a dar significado si lo necesitaba. Pero con tramas potentes, viajes fascinantes entre submundos y capítulos inolvidables como «Part 8» o el final. Obviamente no tuvo el impacto de su primera temporada; tampoco lo buscaba. En su desestructura, es una obra que se puede revisitar en dos o tres vidas venideras. No harás lo mismo con ninguna otra serie que conozcas.
No podemos pasar por alto el valor de la música en sus series. Contrató a Angelo Badalamenti porque tuvo que renunciar a que Cocteau Twins aparecieran en ‘Terciopelo azul’. Había llegado a ellos ahondando en el catálogo de 4AD porque la versión de This Mortal Coil del ‘Song to the Siren’ de Tim Buckley le había dejado boquiabierto. El carismático Ivo pidió demasiado dinero por los derechos de reproducción, pero la elección por la banda de Liz Fraser ya denotaba un gusto exquisito. A David le encantaba el dream pop porque tal género podría haber sido bautizado tras sus películas, y como en lo meramente estético, en lo musical los años 50 también fueron su devoción. Él y muchos de sus personajes parecían Elvis; estos casi siempre se llamaban cosas tan pop como Shelly, Donna, Audrey o Bobby.
Además de descubrirnos a Julee Cruise; David Lynch fue el letrista de las canciones de ‘Twin Peaks’, y después sacó sus propios discos. Era evidente la implicación de su propia mano. He sentido tantas veces a David Lynch en los grupos del siglo XXI que a veces he llegado a pensar que sus bandas sonoras estaban siendo más influyentes en nuestros tiempos que los Beatles. Que se lo pregunten a Lana del Rey, The Weeknd, Beach House, Cigarettes After Sex, Lykke Li, Johnny Jewel, Chairlift, Eartheater o a todo el trip-hop, solo por mencionar a algunos. Su impronta está incluso donde no la notas, de Billy Corgan a Nine Inch Nails, como han reconocido ellos mismos. Trent Reznor contó que algunos de sus conciertos a principios de los 90 empezaron tarde, única y exclusivamente para poder ver ‘Twin Peaks’ en directo. En todos los premios que está recibiendo por su trabajo en cine, hay un pedacito de David Lynch.
Siendo así de melómano, como muestra de su humor rehuyendo de aburridas intelectualidades, su personaje en ‘Twin Peaks’, jefazo en el FBI, estaba sordo como una tapia, y gritaba como un gorrino.
Los últimos días de David Lynch serán recordados por esos vídeos absurdos -como no podía ser de otra manera- en que daba el tiempo desde Los Ángeles, subidos a Youtube. Estaba tan enfermo que apenas podía salir a la calle. Ahora esperemos que esté soñando, como a él le gustaba, entregado a un mundo completamente abstracto. Por si David no está en ningún sitio, no olvidéis que no hay nada, de todas formas, como estar soñando despierto.
Hoy 17 de enero se publican los nuevos álbumes de Ela Minus (nuestro Disco de la Semana), Sila Lua, Alpaca Sports, David Gray, The Weather Station, Sophie Jamieson y jasmine.4.t. ‘Balloonerism’ es el disco póstumo de Mac Miller. De todos ellos podéis escuchar un tema en nuestra playlist de novedades Ready for the Weekend, que cuenta con más de 6.600 suscritos.
También hay novedades de artistas de primera línea, como Bad Gyal (con otra superestrella, el argentino Trueno), Zahara, Leiva o La Bien Querida. Lola Indigo publica remix de ‘La Reina’ junto a María Becerra y Villano Antillano. La Plata, Alice Wonder, Cala Vento, Sexy Zebras, shego, Liz Forte, Jordana B… están también entre los artistas nacionales que sacan tema.
En el plano alternativo internacional, tenemos novedades de The Horrors, CocoRosie (que han anunciado fechas en nuestro país), Skunk Anansie, Rialto, My Morning Jacket, Mumford & Sons… Como hemos venido contando durante los últimos días, Perfume Genius y Lucy Dacus han anunciado álbum.
Hace unos días se anunció que el 30 de enero se celebraría un concierto en California en beneficio de las víctimas de los incendios. Al menos 25 personas han muerto y más de 200.000 han tenido que ser evacuadas de sus casas.
Se acaba de anunciar el cartel y está lleno de superestrellas de hoy, como Billie Eilish, Gracie Abrams, Lil Baby y Tate McRae; más veteranas como Lady Gaga, Katy Perry, Gwen Stefani y P!nk; y más veteranas aún como Sting o las mismísimas Stevie Nicks y Joni Mitchell. Grupos de rock no faltarán tampoco, y en el cartel vemos a Green Day y Red Hot Chili Peppers.
El evento se podrá ver a través de plataformas como Youtube, Apple TV, Paramount+, Netflix, Prime Video, Spotify o Soundcloud, entre muchas otras. Como podéis comprobar, la idea es que sea accesible para todo el mundo. Las entradas para el show salen el día 22 de enero, pero como se espera que las entradas vuelen, los espectadores podrán donar.
Los incendios han provocado que varios artistas cancelen conciertos, como The Weeknd; anuncios y comunicados, como NIN y Beyoncé; y que algunos eventos se hayan pospuesto, como la lectura de nominados a los Oscar.
Quevedo saca disco y España se divide. Están los que van a defenderlo a capa y espada independientemente de cómo suene y los que no se van a acercar a él ni locos. Como en todo, la realidad está en el medio. Hay canciones decentes, pero ‘BUENAS NOCHES’ sufre los mismos problemas que muchos otros proyectos de esta índole: demasiado largo, demasiado genérico… Un «hit or miss» que es más «miss» que «hit» (artísticamente hablando, porque el disco es un éxito comercial).
El sonido se aleja de ‘DONDE QUIERO ESTAR’ y tira por una vertiente Y2K muy tocha que se nota sobre todo en los sintes y las baterías. Hay hasta un tema con el puto Pitbull, con su icónica traducción simultánea: «Ella me mira, she’s looking at me», rapea en ‘MR. MOONDIAL’.
Esta decisión funciona en algunas canciones, como en ‘NOEMÚ’, pero no tanto en otras, como en la desfasada percusión de ’14 FEBREROS’. Si encima la letra da cringe, pues no hay por donde cogerlo: «Quizás hoy por fin será el día que entre en ese agujero», canta Quevedo en lo alto del estribillo. Es comedia involuntaria. Ni la sorprendente colabo de Sin Nombre puede salvar el tema.
Aun así, la producción resulta ser de lo mejor del disco, gracias a figuras como GARABATTO, Gio Producer, KIDDO o BlueFire. A destacar, los sintes de ‘KASSANDRA’, el anti estribillo de ‘EL ESTRIBILLO’, toda ‘GRAN VÍA’ (con Aitana) o las contramelodías de ‘DURO’, que suena bien dura. Sin duda, lo más irregular y random de ‘BUENAS NOCHES’ son las letras de Quevedo.
El disco empieza muy sólido con ‘KASSANDRA’, que cuenta la historia de una chica acostumbrada a la vida en el spotlight y su conexión con un Quevedo que acaba de descubrir la fama: «Tú eres diferente, estar aquí también te pone triste», canta el canario. A partir de aquí, lo que sale de su boca es impredecible.
‘CHAPIADORA.COM’ trata con detalle el dilema de Quevedo con correrse dentro o no («Si lo llego a saber, te lo juro, lo dejo dentro») y deja frases tan icónicas como aquella del «amigo gay» que «resultó que no era gay». ‘POR ATRÁS’ es un ejemplo de sutileza por parte del cantante de 23 años: «Cuando se duerman voy a entrar por atrás y una vez dentro te voy a entrar por atrás».
La guinda del pastel es ‘IGUALES’, en la que Quevedo afirma que todo lo que quieren los hombres es «dinero, mujeres y abdominales» y que, efectivamente, «somos todos iguales». Se pone en la piel de un auténtico gilipollas que siempre anda «de cacería» y que ni se acuerda del nombre de la chica. No se alarmen, porque en su entrevista con Aimar Bretos aclara que es una canción irónica. Eso sí, si piensas que es un «himno para los hombres», pues bien también: «Lo guay es eso, que cada uno se lo tome como se lo quiera tomar». Entonces, ¿es un «puto heterobásico» o no?
‘QUE ASCO DE TODO’ y ‘BUENAS NOCHES’ son, por otro lado, los toques personales que se echan más en falta en el disco. De hecho, la primera de estas explica indirectamente por qué hay tan poco de esto: «Otra letra que me sale del pecho, sabiendo que si me sale del pecho no va a sonar en la radio». Sus dudas se confirman, al ser la canción menos escuchada. Pues qué triste.
David Lynch, uno de los directores más influyentes de la historia del cine gracias a películas como ‘Terciopelo azul’, ‘Mulholland Drive’ y series como ‘Twin Peaks’, ha fallecido a los 78 años. Así lo ha anunciado su familia en Facebook:
“Con profundo pesar, nosotros, su familia, anunciamos el fallecimiento del hombre y artista David Lynch. Agradeceríamos un poco de privacidad en este momento. Hay un gran agujero en el mundo ahora que ya no está con nosotros. Pero, como él decía, ‘Mantén la vista en la rosquilla y no en el agujero’. Es un hermoso día con un sol dorado y cielos azules todo el camino”.
El año pasado, Lynch fue diagnosticado con un enfisema pulmonar, lo que le obligaba a quedarse en casa de forma indefinida por riesgo a contraer cualquier tipo de infección, ya que podría resultar fatal. El aclamado director achacó el diagnóstico al hábito de fumar que había mantenido durante la mayor parte de su vida. «Sería muy malo para mí ponerme enfermo, aunque sea un resfriado», declaraba por aquel entonces.
Lynch no se sentaba en la silla de director desde 2017, cuando retomó una de sus creaciones más importantes, ‘Twin Peaks’, 27 años después de la primera temporada. Las inquietudes del evocador artista también incluían el campo de la música, lanzando tres álbumes de estudio: ‘BlueBOB’ (2001), ‘Crazy Clown Time’ (2011) y ‘The Big Dream’ (2013). Además, trabajó en tres discos colaborativos, seis bandas sonoras, dos álbumes de spoken word, un EP y 20 sencillos.
shego presentan el cuarto single de su próximo disco con una declaración de intenciones: «Hoy me he levantado y he elegido violencia». ‘Curso Avanzado de Perra’ es el último adelanto de ‘No lo volveré a hacer’, disponible el próximo 6 de febrero.
Maite, Raquel y Charlotte se inspiran en el poemario homónimo de la escritora Carolina Otero Belmar para crear un tema que abraza todo lo que nos hace imperfectos y, a la vez, humanos. Entre el indie, en su inquietante estribillo a tres voces, y el punk, en sus afilados versos, ‘Curso Avanzado de Perra’ se ríe de la rectitud: «Ni miedo, ni vergüenza, ni culpa, ni dinero en el banco / La culpa es de tus padres, del colegio, del Estado español».
El tema también viene con su propio decálogo. El undécimo mandamiento está en la propia letra: «Nada va a dolerte / Nadie te va a destruir». Estas son las reglas para ser fiel a la orden de shego:
1. Te amarás a ti misma sobre todas las cosas.
2. “Me cago en Dios” estará en tu vocabulario de forma mandatoria.
3. Santificarás “La Fiesta”.
4. La culpa siempre será de tu padre y de tu madre.
5. No Matarás (o sí).
6. Te creerás invencible a pesar de que no aguanta ni Dios.
7. Robarás a las multinacionales y apoyarás el comercio local.
8. Mentirás siempre que sea necesario.
9. No querás follar o solo querrás follar o te querrás ir.
10. Dirás que no lo volverás hacer (pero lo harás otra vez).
Además de ‘Curso Avanzado de Perra’, ‘La fiesta’, ‘arghHhh!’ y ‘Aunque duela’ tampoco faltarán en el tour Girando por Salas de shego:
22 de febrero – CASTELLÓN – Sala La Bohemia
15 de marzo – TOLEDO – Sala Círculo de Arte
5 de abril – GRANADA – Escenario Aliatar
12 de abril – VALLADOLID – Sala Cientocero
25 de abril – SALAMANCA – Sala La Chica de Ayer
9 de mayo – ALMERÍA – Sala Berlín Social Club
23 de mayo – BILBAO – Sala Santana 27
Al margen de GPS, shego están listas para recorrerse España con decenas de fechas. Puedes consultarlas en su Instagram.
Esta noche, coincidiendo con su cumpleaños, se publica el segundo disco de la gallega asentada en Madrid Sila Lua. Tras la historia conceptual de ‘Rompe‘, inspirada en sus abuelos y en un viaje marino, este viernes llega ‘Danzas de amor y veneno’. Además, Sila Lua lo estará presentando el mismo día, 17 de enero, en la Sala El Sol de la capital, como parte de la programación de Inverfest.
El disco ha venido presentado por 5 adelantos, entre los que hemos destacado ‘Brasil’ y también merece la pena hablar del medio tiempo un tanto Sade, precioso, ‘Yerbabuena’. Otro de los singles, ‘Plan B’, es nuestra Canción del Día hoy.
El tema une dos de las cosas que más interesan a Sila Lua en cuanto a producción: el house primigenio de Chicago en los años 80, y la música latina. De lo primero ha tomado el ritmo, y de lo segundo, percusiones grabadas en directo. En cuanto a la letra, la propia artista explica que ha querido hablar de los claroscuros de haber hecho de la música, es decir su mayor pasión, su profesión.
Indica: «En este nuevo disco he querido mostrar algo más de mis inseguridades, incoherencias y sueños oscuros y alejarme un poco de la retórica más aspiracional que pienso que utilicé en mi primer álbum. En contraste y sorprendentemente, creo que ha quedado un trabajo más luminoso y quizás menos “serio” que el anterior y que he conseguido hablar de cosas que para mí son tristes, con algo más de ligereza».
El tema, producido junto al catalán Pau Aymí y el jerezano Sherry Fino, habla sin duda de su carrera, con frases como «estoy preparada para hacerlo brillar», «sintiendo un placer que no puedo ni explicar» o ese «salir a matar». Entre beats que sí proceden del house más oscuro, emerge un «drop» más preciosista de piano y guitarra. Es en esos momentos íntimos -como sucede con ‘Yerbabuena’ o la inminente ‘Ojos’- cuando Sila Lua deja claro que no, que no necesitará ningún «plan B» en absoluto.
El segundo disco de Rigoberta Bandini, cuyo título ya se había desvelado, ‘Jesucrista Superstar’, será doble. Saldrá el próximo 21 de marzo. Hoy se revela el tracklist, en el que observamos que los dos singles principales, ‘Si muriera mañana‘ y ‘Pamela Anderson‘, aparecen en el primer CD. También hay títulos tan prometedores como ‘Los milagros nunca ocurren al salir de un after’, ‘Todas tienen ganas de jaleo’, ‘JAJAJA’ o ‘CXT (Club Xavalas Tristes)’. ‘Soy mayor’ puede ser un contrapunto a todo ello (o no).
Los «featurings» están encabezados por Luz Casal, como ya se había dejado caer en redes. Los otros invitados son la argentina Juliana Gattas, que acaba de colaborar con Papa Topo; el desconocido artista francés asentado en Barcelona Rémi Fa; y Carmen Lancho, una cantante de jazz que a día de hoy cuenta con 127 oyentes mensuales en Spotify.
Os recordamos que ya hay una gira anunciada de Rigoberta Bandini. La artista presentará ‘Jesucrista Superstar’ el 31 de mayo en Sevilla en el Icónica Santalucía Sevilla Fest, el 6 de junio en Bilbao en el Bizkaia Arena – BEC!, el 7 de junio en Pamplona en el Navarra Arena, el 20 de junio en Zaragoza en el Pabellón Príncipe Felipe, el 21 de junio en A Coruña en el Coliseum, el 28 de junio en Barcelona en el Palau Sant Jordi, el 4 de julio en Murcia en el Espacio Norte, el 5 de julio en Valencia en el Estadio Ciutat de València, el 16 de julio en Madrid en el WiZink Center y el 18 de julio en Málaga en el Selvatic Málaga Fest.
Bajo estas líneas podéis encontrar el tracklist y vídeos de temas de los invitados.
Disco 1:
1.-Star
2.-Simpática pero problemática
3.-Enamorados
4.-Pamela Anderson
5.-Busco un centro de gravedad permanente
6.-Canciones alegres para días triste :):, con Luz Casal
7.-Si muriera mañana
8.-VuelaaAAaa
9.-Amore Amore Amore
10.-KAIMAN
11.-Aprenderás, con Carmen Lancho
Disco 2:
1.-La pulga en el sofá
2.-Soy mayor
3.-JAJAJA
4.-CXT (Club Xavalas Tristes)
5.-Spaguettis al sol
6.-Todas tienen ganas de jaleo, con Juliana Gattas
7.-Mi niña
8.-Los milagros nunca ocurren al salir de un after
9.-Brindis!!!
10.-Cada día de la semana, con Rémi Fa
11.-Abraxas
Ela Minus fue uno de los nombres revelación del 2020 con su disco ‘Acts of Rebellion’. Ahora, su segundo trabajo aterriza en un mundo muy distinto al que lo hizo su debut. Tampoco ella es la misma artista. La colombiana presenta ‘DÍA’ con nuevas lecciones vitales aprendidas y habiéndose enfrentado a una crisis creativa marcada por la presión de las expectativas.
En JENESAISPOP tuvimos el placer de reunirnos en Madrid hace unas semanas con ella para conversar sobre este proyecto bello y luminoso que debería dar mucho que hablar en los próximos meses. ‘DÍA’ es nuestro Disco de la Semana.
Ya han pasado como cuatro años desde tu debut ‘Acts of Rebellion’. ¿Qué has estado haciendo en ese tiempo? ¿Cómo de largo ha sido el proceso de crear ‘DÍA’?
Siento que he estado haciendo de todo. No sé si tú te sientes parecido, pero desde la pandemia ha sido como una combinación entre que sientes que el 2020 fue ayer y al mismo tiempo han pasado como tres vidas enteras. Me he movido mucho físicamente de lugares. Con ‘DÍA’ estuve como dos años y medio intentando hacer un disco y todo me parecía horrible. Fue difícil, la verdad. Siento que pasé la mayoría del tiempo de estos cuatro años como intentando limpiarme, tal vez… No sé de qué, pero como que tuve que hacer mucha música muy mala hasta llegar a ‘DÍA’. Fue como de película: encontré la progresión que abre el disco de los acordes y ahí fue como que vi la puerta de lo que iba a ser el álbum. De ese momento hasta que lo acabé fueron dos meses…
Se abrió monte…
[Risas] Exactamente, pero llegar a esa puertica de abrir monte fue… Sentí que no lo iba a lograr, la verdad.
¿Crees que se debe a que sentiste cierta presión tras darte a conocer con tu debut?
Sí, sí, total. Siento que justo cuando digo lo de limpiarme es eso… Todo con el primer disco fue la primera vez. Obviamente nunca había hecho tanta prensa. Entonces, como que recibes mucha información y mucho feedback. Y creo que cuando me senté después de eso a hacer música otra vez, sentía como que tenía todo eso, todas esas descripciones de mi música dentro de mi cabeza y sentía mucha presión. Y lo del tiempo también, como que todo el mundo [me decía], bueno, ya han pasado dos años, ya pasaron tres años, ¿cuándo vas a sacar el otro?
Es que ahora va todo muy deprisa, ¿no? Parece que hay que sacar música todo el rato. Para mí merece la pena esperar cuatro años y escuchar un disco que de verdad sea de calidad.
Sí, estoy de acuerdo totalmente.
Volviendo a lo de antes, decías que las críticas positivas también te afectan a la hora de crear… ¿Te afectan mucho las opiniones externas?
Es raro porque yo pensaba que no. Digamos que cuando lo estoy viviendo, siento que no me afectan y a mí me ha parecido algo muy bonito e interesante hablar con personas y escuchar lo que ellos sienten de mi música, porque yo todo lo hago muy intuitivamente. Entonces es muy raro porque casi que todo lo que me avisan o todo lo que escriben es nuevo para mí. Es como «ah, sí, yo tenía esta idea de esa canción y lo entendiste así, wow, nunca había pensado en eso». Pero justo cuando empecé a escribir, sí fue como, uf, esto está súper adentro, o sea, toda esa información se queda. Ahí me di cuenta de que sí me afectó al momento de escribir, en realidad.
«En el momento siento que no me afectan las críticas, pero toda esa información se queda, está súper adentro»
Sobre el título ‘DÍA’, ¿qué me puedes decir? Yo lo entiendo de una manera, pero quiero oírte a ti.
¡Me da curiosidad tu opinión! ¿Quién primero? ¡Venga, tú primero!
Me da la sensación de que el disco es circular. Empieza con el ambient de ‘Abrir monte’, luego deriva en una cosa como más de club y luego regresa el ambient al final con ‘Combat’. Es circular, como un día… ¿no?
¡Me encanta! Sí, pues justo por ahí empezó. Cuando acabé, con la secuencia y todo, no tenía nombre. Y comparando con [como fue con] ‘Acts of Rebellion’, este no se lo mostré a nadie, ni amigos ni nada hasta que lo acabé. Cuando lo tuve con la secuencia pues ya se lo empecé a mostrar a amigos, a gente con que trabajo, y mucha gente me decía eso. Yo no lo había pensado. Me decían muchos “parece un círculo”, “empieza con un amanecer”. De ‘Abrir Monte’ me dijo alguien que sentía que era como cuando te despiertas, y tus ojos se van acostumbrando a la luz, como que empiezas a ver cada vez más y me pareció precioso. Yo ya tenía la palabra “día” como una opción de nombre porque me encanta cómo se ve y, bueno, no solo visualmente. Me lo dijo mucha gente y dije «de pronto hay algo aquí», y ya me puse yo a pensar cuál era la definición de “día” y pensé que es un periodo de tiempo definido por la presencia de la luz. ¿Sabes cuándo ves algo y haces clic? Yo vi eso y dije «este es el disco que hice».
Me parece un álbum de contrastes. Las letras son a menudo muy existencialistas, pero luego las canciones también son muy himnos. Igual no empiezan eufóricas, pero te llevan a un cierto estado de euforia muchas de ellas. ¿Es este contraste deliberado?
Surgieron así totalmente. Ni siquiera lo había pensado hasta que empecé a hablar con otras personas. Fue completamente sin intención, pero siento que hay algo como constante de contrastes en mi música, supongo.
Me gusta mucho ‘Onwards’. Se siente como un momento de realización personal, ¿qué significa esta canción para ti?
Qué bonito. A mí esa también me gusta mucho. Tenía el track sin letra, fue como al principio del disco, estaba todavía en Coachella en ese momento, donde te tienes que quedar dos fines de semana y pasas la semana ahí. Tenía el beat y lo había tocado en el primer fin de semana de Coachella y siento que eso fue como la cima de la presión. De estar tocando ese festival, de sentirme como observada, como un poquito medida. De pronto estaba en mi cabeza que me estaban midiendo todo el tiempo, viendo que tanta gente había llegado al concierto… Creo que esa canción salió de ahí un poco, como de esa rabia cuando sientes que alguien no confía en ti y te está observando a ver si cometes algún error. Esa sensación y esa experiencia me hicieron conocerme mucho y entender cómo reacciono bajo presión. Y [la canción] se volvió un poquito como un manifiesto de lo que yo quiero hacer, por lo menos en este momento en mi carrera, que es como un poco cambiar las reglas, obviamente no de una manera tan literal o radical.
Por ejemplo, la frase con la que empieza [Today is the first day of my life / I threw the match set it all alight], no sé cómo traducirla ahora pero es como la de metáfora de cuando te metes un autogol aposta. Todo el mundo me decía “te estás demorando mucho” y era como «no, me estoy demorando en tus términos, pues prefiero perder el juego y hacerlo en los míos».
Creo que esto de “hacerlo en tus términos” se ve claro en el disco. ‘Acts of Rebellion’ era más político, ‘DÍA’ es mucho más introspectivo. Me parece interesante esa mirada hacia dentro.
Justo. Creo que este disco es completamente para dentro y sacar un poco ese fuego para seguir adelante.
Dentro de ese viaje de autoconocerse a uno mismo que es el disco, también hay momentos pesimistas…
Realistas, diría yo [risas]
Sí, realistas mejor. Te quería preguntar por la frase de ‘QQQQ’ donde dices “últimamente siento que todos estamos de acuerdo que este es el fin de los tiempos”, ¿qué tenías en mente cuando escribiste esto?
Pero es que es así, ¿no? [risas]. Hubo muchas conversaciones que tenía con amigos. Como que cualquier evento que pasaba en el mundo, veías una noticia y hablabas con alguien, tipo una amiga o un amigo y todos eran como “pues sí, es que ya. Ya todo se fue a la mierda”. Sentí como que todos estábamos en la misma página, de que todo se estaba yendo a mierda en todos los sentidos y todos estamos de acuerdo. Yo no hablaba con nadie que fuera como “no, en realidad eso no está tan mal”, o sea, como que todo el mundo ya estaba entregado a eso. También fue algo muy de los años después de la pandemia. No sé si te sentiste así, pero yo sentí en la pandemia que había más o menos dos opciones de volver al mundo: o vamos a cambiar mucho como humanidad o todo se va a poner peor. Y siento que se puso peor. Era muy evidente para mí en los festivales, en una fiesta o en un concierto, la gente estaba como si no les importara morir ahí, como que estaban dejando todo ir…
Yo noto, no sé si estás de acuerdo, como que nos hemos vuelto más individualistas y egocéntricos. Solo pensamos en lo que pasa en nuestro teléfono. Quizá por pasar tanto tiempo solos en la pandemia…
Total. Como súper individualistas así como súper hedonistas también. Tipo “lo único que importa es mi placer y yo estar bien y es mi vida…” Justo. Entonces viene de ahí un poco. Yo sentí un poco como rendición, como que ya nos reunimos todos acá, hay que protegernos cada vez más, cada vez en un espacio más pequeño y ya.
En ‘Idols’ dices “It’s a shame that it takes pain to know who you are” [Es una pena que haga falta el dolor para saber quién eres]. Me parece muy bonito y a la vez muy triste.
¡Total! Estoy de acuerdo.
Es algo muy cierto. Esta canción me la imaginé un poco cuando estás creciendo o eres adolescente, y te das cuenta de que a lo mejor no encajas con lo que supuestamente tienes que ser. Y hay un momento como de abrazar el dolor y pensar, lo acepto porque en el fondo sé que esto va a ser lo mejor para mí. No sé si era algo así lo que buscabas con esta canción…
Me encanta esta perspectiva. No lo pensé así, sinceramente, pero eso está precioso y creo que está ligado a mi intención. Mi intención era un poco como lo de la otra vez. Siento que muchas de las letras de este disco no son ni pesimistas ni optimistas sino realidad, como sin juicio, ¿no? Observación. Creo que esa frase justo la pensé porque me he dado cuenta con la edad y con el tiempo que en verdad, es un poco lo que acabas de decir. Todos tenemos una imagen de quienes somos y quienes creemos que somos y quienes creemos que son las personas que tenemos alrededor. Pero en realidad, hasta que no hay una crisis, hasta que no nos enfrentamos a algo muy doloroso no entiendes quién eres. Cómo reaccionas también al dolor, qué te hace sentir de ahí en adelante. Si algo te duele, ¿te haces más chiquito y te escondes y te alejas de lo que te hizo sentir dolor? O al revés como dices tú, ¿aceptas ese dolor y lo haces parte de ti? Y justo esa reacción también es lo que siento que define un poco quiénes somos. Viene de ahí, en verdad, pero está precioso. También creo que eso es mucho del disco. Es aceptar dolores e incertidumbres y preguntas sin respuesta, y abrazarlas y encontrar paz de alguna manera en estos lugares incómodos.
«El disco es aceptar dolores e incertidumbres y preguntas sin respuesta, y abrazarlas y encontrar paz de alguna manera en estos lugares incómodos»
Hablando más de lo técnico, tú normalmente produces todas tus canciones sola, pero en este disco hay una canción (‘IDK’) co-producida junto a Katie O’Neil, ¿cómo surgió esto?
Katie es una chica increíble, que de alguna manera u otra siempre ha estado cerca de mí en el trabajo. Es muy cercana a Domino, como en la parte más de industria, pero siempre ha sido de las personas más cercanas y confío mucho en su gusto. Tenía ‘IDK’ en otra versión, producida de una manera distinta y no me gustaba. Me parecía muy incómoda y no la quería poner en el disco.
Ya tenía el disco acabado y yo sentía que hacía falta algo. Tenía una carpeta llena de otras canciones que había sacado porque sentía que no encajaban en la secuencia, y ahí estaba ‘IDK’. Se las mostré a Katie y me dijo que esa canción tenía que estar en el disco, entendía por qué se me hacía incómoda pero tenía que estar. Entonces le hice caso, le di otra vuelta y empecé a producirla y en un momento me dijo “estoy en el estudio de un amigo, por qué no me la mandas, que tengo una idea”. Su idea era que su amigo grabara un bajo, porque era una balada solo con sintes y la voz. Grabó ese bajo y me lo mandó y dije «nomás es una mierda, o sea es gracioso pero no lo voy a usar. Bye».
Un par de días después estaba dándole vueltas todavía a la canción y tenía el track así del bajo que me mandó, y oí algo. Como que, no sé, algo me inspiró y empecé a editar. O sea, ves el track del bajo y está muy, muy adentrado, y le puse una distorsión gigante y como que encajó la canción perfecta.
Entonces le di créditos de coproducción. Le hice el chiste como de «es completamente irreconocible pero la idea de haber grabado un bajo y de que me haya mandado el stem, hizo la canción lo que es en realidad». Me pareció super bonito. Yo siempre he querido coproducirle a otro artista. Me parece muy interesante como desde una perspectiva casi como de terapia. A veces no tienes tanto que meterte en el compu y tú producir, sino más bien escuchar una canción, conocer a un artista y decir “esta canción es importante para tu disco porque habla de esto, ¿cómo le damos la vuelta musical?”. O ¿cómo le das tú la vuelta musicalmente? Y darte las herramientas para que no lo hagas solo. Eso me parece súper bonito y siento que fue lo que hizo ella en la canción.
¿Cuando produces música manejas referencias sonoras?
No, me parece muy difícil eso. Siempre quisiera tener, pero no tenía [para ‘DÍA’]. Estaba oyendo sobre todo ambient cuando lo estaba haciendo porque estaba viajando mucho, y siento que solo necesitaba como música que se sintiera reconfortante. No tenía muchas referencias pero como que quisiera tener porque sería más fácil. ¿A ti te suena a algo?
Pues quizá te resulta una tontería, pero en algunos momentos, la manera en la que suena tu voz dentro de las producciones me ha recordado al ‘Homogenic’ de Björk.
Divino. No me parece bobo. ¡Me gusta la referencia! No fue con culpa pero la oigo, tienes razón.
«Estoy intentando volver a oír más música no ambient y cada vez que lo intento es como, pff… No sé qué pasa»
Este disco lo has grabado en muchos sitios distintos, ¿cómo de importante son los lugares para la música?
Otra vez siento que, en perspectiva mucho, pero en el momento en el que lo estaba haciendo, te hubiera dicho que nada. Si me hubieras preguntado esto mientras estaba en los lugares era como «pues no». Estaba sola, todo era como súper para adentro, pero ahora oigo el disco y siento que en cada canción casi que puedo escuchar el lugar en el que la hice. ‘Abrir monte’ la hice en el campo, en una montaña y siento que suena a naturaleza. ‘Onwards’ suena así como desesperación, a ciudad… Siento que hay algo de cada lugar en el que estaba. Se impregnaron, pero es como muy subconsciente todo. Lo veo ahora en retrospectiva.
Volviendo un poco a tu respuesta anterior, que decías que estabas escuchando mucho ambient, ¿qué artistas escuchabas haciendo el disco?
Estaba oyendo mucho Huerco S. Tengo una playlist gigante de ambient, como de veinte horas. Cada canción que me gusta la voy poniendo. Hay un disco que se llama ‘The Rules of Another Small World’ de M. Ostermeier, creo que es el que más he oído estos años. Mucho Huerco S, mucho Brian Eno. También un artista canadiense que se llama Khotin, su canción que más me gusta es ‘Dwellberry’. Estoy intentando volver a oír más música no ambient y cada vez que lo intento es como, pff… No sé qué pasa [risas]
¿Qué es lo que te gustaría que la gente sintiera cuando escucha ‘DÍA’?
Qué difícil pregunta. No estoy segura de si es un sentimiento, pero tal vez como un poco de catarsis. ¿Sabes cuando después de pasar por muchas cosas difíciles, todavía no estás del todo bien, pero ya estás empezando a ver la luz del otro lado y te sientes más fuerte? Como que hay un día en un momento en el que dices “acabo de sobrevivir muchas cosas y estoy bien” y como que tienes este momento de darte cuenta de que eres un individuo fuerte y puedes hacer lo que tú quieras y, al mismo tiempo, acabas de pasar por algo que te hizo crecer 50 años de vida. Es un momento en el que es como, acabo de sobrevivir todo esto, sigo vivo, estoy bien y tengo toda una vida por delante. Es como un poder.
Porridge Radio han anunciado que se separarán tras la conclusión de su actual gira, que por cierto va a traerles a 4 ciudades españolas. En concreto estarán el 17 de marzo en Razzmatazz 2, Barcelona; el 18 de marzo en la Sala López, Zaragoza; el 19 de marzo en Copérnico, Madrid; y el 23 de marzo en el Dababada de Donosti. Las entradas para Madrid y Barcelona están disponibles en la web de Primavera Sound. El resto, en Dice y WeGow.
El grupo publicaba el año pasado un disco notable llamado ‘Clouds in the Sky They Will Always Be There For Me‘, en el que sobre todo destacaba su pista final, ‘Sick of the Blues’. En total, han publicado cuatro álbumes, destacando la buena prensa que tuvo en medios anglosajones el segundo, ‘Every Bad‘, y el top 40 que lograba en Reino Unido el tercero, ‘Waterslide, Diving Board, Ladder to the Sky’.
Este nuevo álbum ha sido bien acogido entre sus fans: 3 meses después de su lanzamiento, casi todo su top 10 en Spotify siguen siendo canciones recientes, no glorias pasadas. El grupo suma 140.000 oyentes mensuales en dicha plataforma, a día de hoy.
Hoy Porridge Radio anuncian un nuevo EP llamado ‘The Machine Starts to Sing’. Dicen que para ellos es tan importante como las 11 canciones de ‘Clouds in the Sky They Will Always Be There For Me’. Serán 4 canciones, el EP saldrá el 21 de febrero, y desde hoy puede escucharse la pista 3, ‘Don’t Want to Dance’.
Sin embargo, al mismo tiempo Porridge Radio han comunicado en los Stories de Instagram y en X su separación. «Este grupo ha sido nuestra vida, ahora somos familia. Esta gira será la última, muchas gracias por escuchar. Con amor, Dana, Georgie, Sam y Dan».
Bad Bunny está dándolo todo con la promoción de ‘Debí tirar más fotos‘, ya claramente uno de los discos más exitosos de 2025. Ahí va un dato: 10 días después de su edición, hasta 6 de sus canciones permanecen en el top 10 del Global de Spotify, encabezadas por el viral ‘DtMF’.
‘Debí tirar más fotos’ es el disco número 1 en España y lo será durante varias semanas, pero de momento el número 1 del Billboard 200 se le ha resistido a Benito, a diferencia de lo ocurrido con ‘El Último Tour del Mundo’, ‘Un verano sin ti’ y ‘Nadie Sabe Lo Que Va a Pasar Mañana’. Dos nombres han interferido en su camino.
En primer lugar, el trapero Lil Baby con su disco ‘WHAM’, es el actual número 1 del Billboard 200 al sumar lo equivalente a 140.000 unidades en su primera semana.
Además, varias canciones de su disco han llegado al Billboard Hot 100, encabezadas por ‘Dum, Dumb, And Dumber’ con Young Thug & Future, que aparece en el puesto 16; ‘By Myself’, con Rylo Rodriguez y Rod Wave, que aparece en el 44; y ‘Outfit’ con 21Savage, que aparece en el puesto 50.
Hay que recordar que el disco de Bad Bunny no salió en viernes, por lo que hubo de conformarse con el puesto 2 y 122.000 unidades. En su segunda semana, la primera completa, HDD predijo que Bad Bunny iba a ascender al puesto 1 con 150.000 copias ayudado por los virales, la promo en Jimmy Fallon y, en resumen, el buen funcionamiento orgánico del álbum. Pero ahora Taylor Swift ha decidido mover ficha.
La autora de ‘1989’, con un directo de la era ‘Lover’, puede ser el próximo número 1 del Billboard 200. La cuestión es que se ha vuelto a distribuir «Live In Paris» en directo, que previamente había sido una exclusiva del Record Store Day. Con forma de corazón, se estaba vendiendo en Discogs por 600 dólares. La nueva edición se prevé que alcance 158.000 unidades, 8.000 más que Bad Bunny. Veremos qué ocurre al final y si hay más suerte para el puertorriqueño en semanas venideras.
Terminados los primeros 25 años del siglo (las décadas en lo musical suelen empezar en año 0, no en el año 1), Rolling Stone también se anima con lista recopilatoria. Su especial de 250 mejores álbumes de 2000 a 2024 es, en líneas generales, una buena lista en la que perderse. Beyoncé corona la tabla con ‘Lemonade‘ para indignación de algunos, cuando todos sabemos que nadie como ella ha trabajado el formato álbum, especialmente desde su disco homónimo de 2013.
En cualquier caso, el gusto en casi toda la tabla es exquisito y solo caben buenas palabras para casi todo lo que encontramos en los primeros puestos: ‘Kid A’ de Radiohead, ‘Blonde’ de Frank Ocean’, ‘My Beautiful Dark Twisted Fantasy’ de Kanye West, ‘Is This It?’ de los Strokes…
A partir de ahí hay un debate infinito sobre lo bajo que encontramos ‘Illinois’ de Sufjan Stevens, que aparece en un humillante número 133, o lo alto que aparece ‘Fever to Tell’ de Yeah Yeah Yeahs (puesto 27), cuando muchos coetáneos, por ejemplo Franz Ferdinand, ni aparecen en el top 250. Cada uno añadirá sus matices. En este artículo analizamos algunas cosas que no habíamos visto venir, casi siempre siguiendo el criterio de Rolling Stone, más que el propio.
Sorpresa: Bad Bunny, top 10
Rolling Stone se sube al carro de la música latina a lo grande, situando ‘Un verano sin ti’ de Bad Bunny en el puesto 9, y ‘YHLQMDLG’ en el puesto 34. En cuanto a J Balvin, se han decantado por ‘Energía’ (número 96) y no por ‘Vibras’, y además aparecen otros artistas latinos en el top 250, como el pionero Daddy Yankee, Karol G, Julieta Venegas o Jenni Rivera.
Sorpresa:Rosalía, dos veces y muy arriba
Este interés por lo latino salpica a artistas españoles. Habríamos esperado a Rosalía en alguna posición simbólica, pero aparece muy arriba y por dos veces: ‘El mal querer‘ está en el puesto 22, dentro de un sándwich formado por Drake y Rihanna; y ‘Motomami’ lo hace en el puesto 78. La revista elogia el trabajo de fin de carrera que representó el segundo disco de Rosalía, destacando la consecución de un «sonido único» a partir de «bulerías, palmas y beats hip hop».
Sorpresa: C. Tangana
En ese puesto simbólico en que esperábamos encontrar a Rosalía está C. Tangana, el número 234. Recordemos que ‘El Madrileño‘ es un álbum que no tuvo un recorrido comercial por Estados Unidos al margen de los Grammys latinos, que muchos medios no lo reseñaron y que no se presentó en festivales de este país, ni grandes ni pequeños. Aun así, Rolling Stone sitúa a Pucho como «visionario» y «maximalista», considera ‘Demasiadas mujeres’ «erótica» y ‘Hong-Kong’, un «post-rock» integrado en un álbum eminentemente latino.
Sorpresa: Chappell Roan, top 50
Una de las cosas más divertidas de una lista de este tipo es comprobar en qué lugar queda la música más nueva. Rolling Stone ha apuntado alto con ‘BRAT’ (puesto 35) y también de manera más sorprendente con el debut de Chappell Roan. ‘The Rise and Fall of a Midwestern Princess‘ aparece en el puesto 41, esto es, muy por encima de Harry Styles (67), Ariana Grande (61), Katy Perry (134) o Madonna, de la que se ha escogido ‘Music’ (88) y no ‘Confessions on a Dance Floor’. Un poco más, y Chappell supera a quien parece su principal referente: Lady Gaga, que aparece en el puesto 20 con ‘The Fame: Monster’ y en el 82 con ‘Born this Way’.
Sorpresa: SOPHIE
La lista de Rolling Stone no es muy rica en electrónica. Sí está Burial exactamente en el número 100 con ‘Untrue’, pero no Jon Hopkins, ni Caribou, ni James Blake, por mencionar algunos. Por eso no estábamos seguros de si encontraríamos a SOPHIE. No está Arca, no están The Knife, pero sí SOPHIE con ‘Oil of Every Pearl’s Un-Insides’ en el puesto 185, 12 por debajo de ‘Rounds’ de Four Tet.
Ausencia rara: Coldplay
De todas las personas a las que pueda afectar una lista de Rolling Stone, creo que quien peor lo puede estar pasando en estos momentos es Chris Martin. Coldplay han desarrollado toda su carrera desde el año 2000, y ninguno de sus discos, ni superventas como ‘Parachutes’ o ‘Viva la Vida’, ni joyas perdidas como ‘Ghost Stories‘, han merecido la atención de la revista. Un dato curioso: sus paisanos de Arctic Monkeys aparecen en el puesto 57 tras haber logrado convertir en un clásico absoluto ‘AM’, y hasta U2 llegan al puesto 160 con ‘All That You Can’t Leave Behind’. U2 han pintado más que Coldplay, en el siglo XXI, para Rolling Stone.
Ausencia rara: The xx
No me voy a centrar demasiado en hablar de grandes ausencias británicas, porque la revista Rolling Stone es, insisto, estadounidense, y en Estados Unidos está su público objetivo. No voy a hablar de la ausencia de ‘Third’ de Portishead, que es una banda que además se fundó en los 90; no voy a pedir por tanto tampoco por Slowdive, ni por My Bloody Valentine, ni por Morrissey. Ciñéndonos a bandas del siglo XX, la ausencia más lamentable parece la de The xx. Su debut fue número 9 del año para la misma Rolling Stone, pero parece que se arrepienten, y no precisamente de verlo tan abajo. De manera extraña, ‘In Colour’ de Jamie xx es puesto 187. En el texto, se elogia por dos veces la voz de Romy Madley Croft, no el pseudo-instrumental ‘Gosh’ (?).
Ausencia rara: Beach House
Pasando a Estados Unidos, se pueden apuntar muchos nombres ausentes. Rolling Stone puede ser muy indie para reinvidicar a Fiona Apple (puesto 13), pero luego no saber quién es Julia Holter, ni Angel Olsen, ni ANOHNI and the Johnsons, ni Deerhunter, ni Fleet Foxes, ni Destroyer, ni MGMT. Por la inmensidad de su trayectoria, con innumerables discazos como ‘Teen Dream’, ‘Bloom’, el exitoso ‘Depression Cherry‘ o ‘Once Twice Melody’, hay que destacar la ausencia de Beach House. No me creo que Victoria y Alex estén mejor considerados en TikTok que en Rolling Stone. ¿Qué habrán logrado Alvvays (puesto 190) que no hayan logrado Beach House?
Ausencia rara: Grimes
No sé si esperaba ver en esta lista al francés Christine and the Queens, tampoco a la irlandesa Róisín Murphy, no sabía que esperar de FKA twigs, y como esta, al fin y al cabo Florence + the Machine es británica. Cancelada -supongo- Azealia Banks, la ausencia más destacada en cuanto a solistas femeninas o LGTBITQ+ es Grimes. ‘Art Angels‘ pareció definir el mismísimo siglo XXI, y aunque ni su vinculación con Elon Musk ni su música posterior ni sus posts en redes sociales le han hecho ningún bien, tampoco es que hayamos asistido a tantísimas propuestas artísticas interesantes como la suya de 2015.
Ausencia rara: Bruno Mars
No puedo evitar volver a hablar de mainstream para cerrar, porque el mainstream bien hecho es el fuerte de Rolling Stone. En ese sentido hay tres grandes ausencias en esta lista de 250 discos. Uno es Ed Sheeran (su amiga Taylor Swift ha metido 4 discos en la lista, él ninguno); otro es Justin Bieber, cuya deriva tras ‘Purpose’ sí que ha sido un tanto errática; y el más llamativo es el caso de Bruno Mars. Tanto ‘Unorthodox Jukebox’ como ’24K Magic’ han terminado siendo discos multiplatino muy celebrados por el público de Rolling Stone, y el cantante ha sabido mantenerse colaborando con gente tan dispar como Anderson .Paak y Lady Gaga. Yo no sé, si esto no es la línea editorial de Rolling Stone, cuál es la línea editorial de Rolling Stone…
Lucy Dacus ha anunciado su cuarto disco de estudio, ‘Forever Is A Feeling’, disponible el próximo 28 de marzo. La noticia llega con dos nuevos singles, la brillante ‘Ankles’ y la delicada ‘Limerence’. ‘Ankles’ es la Canción del Día para este viernes.
Según las propias palabras de la artista, ‘Ankles’ es su tema más sexy. Si el arreglo de cuerda empuja a pensar en el pequeño «Viva la Vida» de Lucy Dacus, la letra es abiertamente sexual pese a un inicio titubeante («¿y si no nos tocamos? ¿Y si solo hablamos de lo que queremos y no podemos tener?»). Pero más tarde pasa a la acción («muérdeme en el hombo, tírame del pelo y déjame tocarte donde quiera»).
El estribillo, con sus «no voy a detenerte», confirma algo que ha explicado en Dazed Magazine: «es sobre algo que no puedes tener, en particular alguien que no puedes tener (…) Sobre esa fase en que te vuelves loca imaginando cosas, pero intentas autocontrolarte. Es mucho más sexy de lo que suelo hacer, pero es un pequeño bop muy divertido».
Lucy Dacus ha tenido ocasión de llevar este tema a la tele, nada menos que al programa de Jimmy Fallon.
La artista de 29 años ha revelado los detalles del que será el sucesor del aclamado ‘Home Video’ (2021). Entremedias, Dacus ha ganado ni nada más ni nada menos que tres premios Grammy por su trabajo con boygenius en ‘the record’. De hecho, Phoebe Bridgers y Julien Baker también estarán en ‘Forever Is A Feeling’.
Además de las cantautoras, Hozier, Blake Mills, Bartees Strange, Madison Cunningham, Collin Pastore, Jake Finch y Melina Duterte de Jay Som también han colaborado en el disco. En la portada de este podemos ver a la cantante pintada en el estilo de una obra renacentista gracias al artista Will St. John.
Un buen día, paseando por el centro de Madrid, ciudad en la que vive desde hace 20 años, Ibon Errazkin quedó prendado del jardín vertical del CaixaForum. Al que es uno de los grandes músicos de culto de nuestro país tras su paso por Aventuras de Kirlian, Le Mans y Single, le encandiló la percepción de que en tal jardín vertical «no hay orden» y de que sus elementos «no conducen a ningún sitio». Desde entonces, siempre se detiene a contemplarlo.
Una idea parecida ha inspirado el jardín que encontramos en la portada de su nuevo disco en solitario, ‘Claros del bosque’, de la que se ha encargado una vez más su colega Javier Aramburu. Bajo la premisa de que estas 10 canciones, como siempre instrumentales, sean «jardines por donde pasear», divagaciones sin orden que «no conducen a ningún sitio», la única forma que alcanzan es la del rostro del propio Ibon.
El álbum original que hizo en principio Errazkin era una pieza de una hora de duración. Se publicará en febrero bajo un nombre parecido, ‘Nubes y claros’. Este ‘Claros del bosque’, editado a finales de 2024, puede considerarse un anticipo de ese otro álbum que será más largo, pues incluye fragmentos de la misma música, junto a dos piezas que no estarán en ‘Nubes y claros’: ‘El río’ y ‘La vía láctea’.
En general, Ibon ha querido que las 8 piezas que se verán reproducidas en el siguiente álbum floten aquí sin rumbo, «como un pensamiento». Se han grabado sin claqueta, evitando estrofas, estribillos y todo leit motiv. Las canciones van de un lado a otro sin miedo a resultar obtusas, quizá porque ‘Claros del bosque’ toma su nombre de un denso ensayo filosófico de María Zambrano, que el mismo Ibon Errazkin a ratos no entiende muy bien, aunque sí incluye pasajes que le fascinan. Como ese en el que se habla de un «claro del bosque» como «un lugar intacto que parece haberse abierto en ese solo instante y que nunca más se dará así». Algo parecido sucede con esta obra.
Evitando repeticiones, disfrutando de los silencios, sin ningún tipo de percusión a la que agarrarse -al igual que el último disco hasta la fecha de Single-, las canciones, si se identifican, es por un arreglo de melódica puntual, como ‘Telón’; o de piano. En cuanto a este último instrumento, ‘Sonetos del amor oscuro’ de Amancio Prada ha sido la referencia; mientras que en cuanto a guitarras, las de Maurice Deebank para el segundo disco de Felt han servido de inspiración. De ‘A Preacher in New England’ a ‘Lamento’.
‘El río’ y ‘La vía láctea’ sí se han grabado con claqueta, con una intencionalidad ligeramente más pop: la segunda podría haber sido una melodía de Magnetic Fields. En el minuto 1.23 encontramos uno de los pasajes más recordables de un disco que no teme ser olvidado. Más bien quiere representar un refugio en el que perderte del griterío que nos rodea, cuando lo necesites. Satisfecho con su trabajo de traductor, pues pocos se atreven a preguntarle por Single, y ahora Errazkin vive de traducir libros de gente como Lawrence -menuda fantasía-, Ibon hace los discos que le apetece, por verdadero amor al arte. En los videoclips grabados en Tánger por el director Antonio Morales, inspirados en el cineasta malayo Tsai Ming-Liang, Errazkin se desplaza a cámara lenta, mucho más despacio que el resto de la ciudad. 100% a su ritmo. No quedan muchos ejemplos.
Perfume Genius vuelve con el anuncio de su nuevo disco. ‘Glory’ estará disponible a partir del próximo 28 de marzo y se convertirá en el sucesor de ‘Ugly Season’. Además, Mike Hadreas -de nombre real- también ha lanzado el primer single del proyecto, la folky ‘It’s A Mirror’.
El proyecto está producido por Blake Mills y, según un comunicado de prensa, lidia con las «idas y venidas entre lo interno y lo externo». El single lanzado, por ejemplo, trata sobre sentirse abrumado y atrapado en un bucle. Hadreas también ha comentado que se despierta «abrumado incluso cuando no está pasando nada»: «Me paso el resto del día intentando regular, lo cual prefiero hacer en mi casa, solo con mis pensamientos».
El artista de 43 años también saldrá de gira este año, durante los meses de mayo y junio, alrededor de los Estados Unidos. ‘Glory’ se trata del séptimo álbum de Perfume Genius.
Tracklist:
1. ‘It’s a Mirror’
2. ‘No Front Teeth’ (feat. Aldous Harding)
3. ‘Clean Heart’
4. ‘Me & Angel’
5. ‘Left For Tomorrow’
6. ‘Full On’
7. ‘Capezio’
8. ‘Dion’
9. ‘In a Row’
10. ‘Hanging Out’
11. ‘Glory
Lucinda Williams, icónica cantautora y ganadora de tres premios Grammy, ha anunciado tres fechas en España este 2025. De esta manera, la autora de ‘Car Wheels On A Gravel Road’ desgranará su carrera de tres décadas en Madrid, Barcelona y el Azkena Rock Festival del País Vasco.
Es uno de los nombres más respetados en el folk, country y blues estadounidense, mezclando la melancolía típica de la zona sureña de Estados Unidos con un fuerte contenido social y emocional. El disco ‘Car Wheels On A Gravel Road’ es su trabajo más aclamado y ganó el Grammy a Mejor Disco de Folk Contemporáneo en 1999. Su último lanzamiento, ‘Lucinda Williams Sings The Beatles From Abbey Road’, salió el pasado 6 de diciembre.
En cuanto a salas se refiere, Williams estará el 19 de junio en la Sala Apolo de Barcelona y el 21 de junio en La Riviera de Madrid. Las entradas estarán disponibles a partir del viernes 17 de enero, a las 11h, en Last Tour. Las entradas para Azkena Rock Festival ya están disponibles en la web del evento.
Naiara continúa su carrera fuera de la Academia de OT con otra colaboración. De esta forma, la artista zaragozana se junta con Natos en ‘Veneno’, un tema que respeta el estilo de ambos artistas pero que, como ya ocurría con ‘Tienes Que Saber’, no ofrece nada nuevo.
Producida por Pablo Gareta, ‘Veneno’ surge de un «boceto» de Natos y Waor que Naiara ha redondeado hasta convertirse en una canción. Así lo explica el rapero en un comentario de Instagram. Una información que cuadra perfectamente con lo que escuchamos, entre lo urbano y el electropop, y similar a canciones como ‘Sudores fríos’.
‘Tienes Que Saber’, con Abraham Mateo, es el mayor éxito de Naiara fuera de OT y ‘Veneno’ sigue los mismos pasos que este. Quiere muy fuerte ser un hit. Podría ser, porque se trata de una canción pegadiza, ligera, inofensiva, y que puede sonar en cualquier discoteca del país sin apenas sobresaltos. Cuidado, porque la indiferencia es muy peligrosa. Hasta el título recuerda a otros temas.
La letra, insulsa en su mayoría, habla de no poder «parar de bailar», de «esos ojitos de gata» y de un «culito que mata». Tanto Naiara como Natos tienen partes diferenciadas, hasta juntarse en el estribillo, y cada uno actúa de sí mismo. Natos con frases como «tú tan bonita y yo tan cabrón», y Naiara con líneas algo más trabajadas: «Si yo soy tu droga, que Dios me guarde / Cuando nos juntamos no hay nadie que nos pare».