En los últimos días se estaba rumoreando que Miley Cyrus se había casado con Liam Hemsworth, actor conocido sobre todo por su papel en ‘Los juegos del hambre’. El rumor procedía de un par de Stories publicados por un amigo de la pareja, Conrad Carr, que los había captado vestidos de novios y a punto de cortar una tarta nupcial. Blanco y en botella, ¿verdad? Estaba bastante claro, pero Cyrus ha decidido publicar un par de instantáneas en Instagram para celebrar su enlace. Aunque la publicación es de hace unas horas, de este miércoles por la tarde, la boda ella misma la ha fechado un día antes de Nochebuena, el pasado domingo día 23 de diciembre.
Miley se comprometió con Liam en 2012, pero después rompieron. Se habían conocido en 2009 durante el rodaje de ‘La última canción’, en la que ambos participaban con 19 y 17 años, y desde entonces lo habían dejado y vuelto varias veces. Entre las canciones de Miley Cyrus que hablan sobre Liam encontramos el tema de desamor ‘Drive’ incluido en ‘Bangerz‘ (2013), pero también el posterior ‘Malibu’, una de las mejores canciones de 2017, en la que celebra su reconciliación con él. En la parte de ruptura en torno a 2013, hay quien dice que incluso ‘Wrecking Ball’ estuvo inspirada por un mal momento entre ellos, pero esto no ha sido confirmado.
Cyrus está siendo noticia por el éxito de su tema junto a Mark Ronson, ‘Nothing Breaks Like a Heart‘, que permanece en el top 10 británico y sube al puesto 56, un nuevo máximo, en Estados Unidos.
Consolidadas como el girl group para toda una generación de británicos tras la desaparición de Girls Aloud o The Saturdays, Little Mix llegan a su quinto álbum de estudio plenamente consolidadas en lo comercial, con una gran base de fans (especialmente en Reino Unido) y una buena colección de éxitos a sus espaldas. El último de ellos, ‘Woman Like Me’, que se quedó a las puertas del número 1 de singles en UK pese a (o gracias a, claro) estar cerca de ser un calco de ‘Side to Side’ de Ariana Grande y Nicki Minaj (contando no sólo con esta última como featuring sino también con Jess Glynne y Ed Sheeran en la nómina de autores).
En realidad este primer single es un buen símil para definir todo lo que contiene ‘LM5’: composiciones, producciones e interpretaciones tan recurrentes que no queda claro dónde termina el homenaje y dónde la copia, pero que no yerran como ejercicios de pop. Con Jade, Leigh-Anne, Jesy y Perry tomando cada vez más responsabilidades como co-autoras y destacadas colaboraciones de Kamille (Camille Purcell es aquí casi un quinto miembro) y MNEK, nadie que haya estado en el mundo en las dos últimas décadas y esté mínimamente familiarizado con las discografías de Spice Girls (‘Told You So’), Destiny’s Child (‘Wasabi’) o Kelis (‘Joan of Arc’) podrá sorprenderse con nada de lo que aquí escuche. Algo menos fuera de su tiempo que ‘Glory Days‘, apenas la coyuntura temática, cargada de empoderamiento, feminismo, sororidad e himnos anti-bodyshaming, hace que entendamos que estamos ante un disco publicado en 2018.
En ese sentido, todo ‘LM5’ resulta harto genérico en el planeta pop-soul-R&B, y temas como ‘Think About Us’, ‘Monster In Me’, ‘Notice’ o ’Love a Girl Right’ (Rihanna, alguien pregunta por ti) parecen versiones que no lo son en realidad. Pero también resulta bastante entretenido gracias a una buena gestión de estilos y, con la excepción de ‘The Cure’ (una gran melodía con un precioso trabajo en el plano vocal para cerrar el disco) lo más destacado del álbum resultan los cortes que más se desmarcan de tópicos. Me refiero a las potentes aproximaciones al hip hop de ‘Strip’, con Sharaya J, y la ya mentada ‘Wasabi’, el divertido dancehall pop de ‘American Boy’ o el sabroso merengue-trap-pop de ‘Motivate’. Son los momentos más disfrutables de un disco que, tras la salida del grupo de Syco –sello de Simon Cowell, que las apadrinó tras su creación en un ‘The X Factor’– anunciada días antes de este lanzamiento, podría marcar un nuevo rumbo para el cuarteto.
Calificación: 5,8/10 Lo mejor: ‘The Cure’, ‘Strip’, ‘Motivate’, ‘Wasabi’ Te gustará si: sueñas con nuevas canciones que podrían cantar Spice Girls o Destiny’s Child. Escúchalo:Spotify
Desde hace unos años, cada Navidad ha sido noticia cómo ‘All I Want for Christmas Is You’ y ‘Last Christmas’ volvían a aparecer primero entre lo más descargado de todo el mundo, y últimamente entre lo más escuchado de las plataformas de streaming. No en vano, en el global de Spotify de Nochebuena, la canción de Mariah Carey aparece en el número 1 global con unos impresionantes 10 millones de streamings a nivel global en tan sólo esas 24 horas, seguido por el villancico de Wham! con 9 millones. ‘Santa Tell Me’ por Ariana Grande se ha incorporado a los favoritos en el último lugar del podio, con 7 millones, tras un año impresionante para la cantante. El top 10 global al completo se compone de villancicos de Brenda Lee, John Lennon o Paul McCartney y hay que bajar hasta el puesto 14 para encontrar el mayor hit pop del momento, ‘thank u, next’ de Ariana Grande.
Un panorama muy parecido encontramos en Reino Unido y Estados Unidos. En Reino Unido todo el top 10 son villancicos, capitaneado por supuesto por ‘All I Want for Christmas Is You’ y ‘Last Christmas’ seguidos por ‘Rockin’ Around the Christmas Tree’ de Brenda Lee, ‘Fairytale of New York’ de The Pogues o ‘Do They Know It’s Christmas?’ de Band Aid 1984. En Estados Unidos sí encontramos alguna canción pop actual, pero también predominan los villancicos. Para empezar, es llamativo que Post Malone haya sacado un single con vídeo animado navideño, un ‘Wow.’ que ha colocado instantáneamente en el número 1. El cantante también aparece en el puesto 7 con el tema de ‘Spider-Man’ y Travis Scott resiste en el puesto 10 con ‘SICKO MODE’. El resto son todo villancicos, lo que supone el 70% o el 80% -según entendamos lo de ‘Wow.’-.
La lista francesa está coronada por Mariah Carey y por Wham!, si bien en este caso solo el 50% del top 10 son villancicos. En Italia domina Mariah Carey, si bien el éxito en este país de Salmo reduce el número de villancicos del top 10 al 40%. Sorprendentemente, Alemania está entregadísima a los villancicos, con la rareza de que en este país tienen mucho más apego a ‘Last Christmas’, que asciende al número 1, y a villancicos pop de Bryan Adams, Miley Cyrus y Britney, que han llegado al top 20, al igual que ‘Feliz Navidad’ de Jose Feliciano. Quizá en relación al éxito de los mercados navideños alemanes, hasta 19 temas del top 20 son villancicos.
En clarísimo contraste encontramos el caso de España, donde permanecemos ultra fieles al ‘Taki Taki’, a ‘Adán y Eva’, a ‘MIA’, a ‘Booty’ y a ‘Vas a quedarte’, es decir a las canciones de moda, incluso el 24 de diciembre. Aunque puede que el día 25, Navidad, avancen los villancicos, es llamativo que incluso en Nochebuena sigamos escuchando a Luis Fonsi y a C. Tangana no matter what y apenas dejemos espacio de nuestro tiempo para los villancicos. Aquí en Nochebuena Mariah Carey solo fue puesto 3, Wham! puesto 12, ‘Jingle Bell Rock’ puesto 14 y los otros 17 puestos del top 20 son canciones de pop actual tipo ‘Malamente’. Es un caso, por tanto, diametralmente opuesto al alemán.
Ciñéndonos a los 15 principales mercados de la industria musical en el mundo (España ocupa el puesto 13), y excluyendo China y Corea del Sur, donde los mercados de descargas y streaming son diferentes y las tradiciones otras, España es el país más desinteresado por los villancicos después de Brasil, mayoritariamente en el hemisferio sur (aunque también lo está Australia, súper entregada al villancico también por su fuerte vinculación cultural a Reino Unido). Suecia y Noruega son grandes consumidoras de villancicos y hasta en Japón Carey es número 1, si bien en este país es cierto que Spotify no es tan relevante.
Entre las razones que podríamos apuntar para esta rareza en un país de tradición católica, el apego por el castellano de nuestra lista de singles, la falta de tradición de sacar discos de villancicos en castellano de las mayores estrellas del pop del país (no hay disco de villancicos de un Alejandro Sanz como sí lo hay de Michael Bublé) y en definitiva la falta de asociación entre villancicos y música pop actual. Parece que en España, como en otras culturas latinas, somos más de cantar villancicos tradicionales con nuestra propia voz que de escuchar las horribles grabaciones populares existentes o de buscar nuestro propio ‘All I Want For Christmas Is You’ actual. ¿Cuándo se animará alguien a intentarlo como lo ha hecho gente tan dispar como She & Him, Sia, Kylie Minogue, Gwen Stefani, Tracey Thorn o Sufjan Stevens?
La eurovisiva Barei publicaba el pasado mes de mayo ‘You Number One‘, su segundo álbum de estudio tras su participación en Eurovisión 2016 con ‘Say Yay!’ (tercero en el total de su carrera). Precedido por singles de clásico dancepop como ‘Worry, Worry’ o ‘I Don’t Need To Be You‘, el disco llegaba al mercado prácticamente coincidiendo con su embarazo de gemelos que la obligó a reducir su actividad física durante algún tiempo y, por tanto, a tomarse la promo del álbum con mucha más calma de lo habitual.
Estos últimos días del año, a punto de salir de cuentas, Barei ha subido algunas imágenes del tamaño de su vientre que, la verdad, resultan bastante impresionantes. Aunque no tanto como un par de vídeos subidos a sus stories de Instagram en los que, pese a su perímetro corporal, se marca unos agitados bailes, al ritmo de ‘Stronger’ de Kelly Clarkson que al de ‘Taki Taki’ de DJ Snake o ‘These Days’ de Rudimental’. Sus danzas, además de hacerse virales y ser TT, han desatado una descojonante ola de memes que nos están haciendo estas últimas horas medio-festivas-medio-no mucho menos aburridas, incluida la propia Barei, que se muestra encantada retuiteando las ocurrencias de los tuiteros.
Aprovechando la ola, hoy mismo ha aprovechado para estrenar el vídeo promocional del medio tiempo ‘Bitter Cold‘, en el que luce su buena barriga en situaciones íntimas, como la cama de un dormitorio o en una bañera.
Estas navidades no han sido todo lo felices que prometían para Ana Belén, que ha sido objeto de una agria polémica con RTVE. La popular cantante y actriz empleaba en las últimas horas su cuenta de Instagram para denunciar que la cadena pública había pospuesto la emisión de un especial musical protagonizado por ella, pese a que, según ella, incluso llegó a ser anunciado por el ente público como el programa estrella de la Nochebuena en La 1.
“Hoy 24 de diciembre, (fun fun fun🎄) tenía que emitirse en TVE el especial “Noche de encuentros” pero sus programadores han considerado que tenía un alto contenido reivindicativo de la Mujer, y lo han relegado a la noche del miércoles a las 00.30. ¡No salgo de mi asombro! Cuando este programa ha sido diseñado y escrito por la propia TVE. Después de hacer ellos mismos promoción para esta noche. ¡¡¡Qué ceguera y qué cobardía!!!” decía en un texto que acompañaba a una imagen suya con Manolo García, uno de los invitados al programa. Ana Torroja, Rozalén, Beatriz Luengo, Orishas, India Martínez, Amaral, Melendi, Pastora Soler y Vanesa Martín son otros de los artistas que participan en un programa que no sólo se nutre de duetos con la intérprete de ‘Derroche’ sino también de charlas con ellos que, al parecer, tratan de cuestiones como el feminismo. No en vano Paco Tomás, guionista del programa, coincidía en el asombro de la artista y aseguraba que, por su temática, propuso el título ‘Mujer es’, que finalmente fue cambiado por ‘Noche de encuenytros’.
TVE emitió finalmente el 24 de diciembre sendos especiales musicales de Manuel Carrasco y Rosana. Vertele ha consultado a la cadena pública sobre la reprogramación de este espacio, y esta asegura que en ningún momento se llegó a confirmar que el programa de Ana Belén se emitiría en Nochebuena. Y que finalmente optaron por los dos programas emitidos porque eran «más festivos» y apropiados para esa jornada, ya que aquel en el que participa Ana Belén, tiene «más partes de diálogo” y «reflexiones». ‘Noche de encuentros’ se emite esta noche del 26 de diciembre, a la conclusión de un especial de Operación Triunfo que reúne a concursantes de las ediciones 2017 y 2018, en la que precisamente veíamos a Ana Belén sustituyendo como jurado a Ana Torroja.
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Ana Belén no sale de su asombro y yo, como guionista del programa, tampoco. De hecho mi propuesta de título era “MUJER ES” y finalmente se titula “NOCHE DE ENCUENTROS”. pic.twitter.com/D1a6iIgBkc
Año agridulce para Billy Corgan, que ha visto cómo su cacareada superreunión con James Iha y Jimmy Chamberlin de la formación original de Smashing Pumpkins se veía ensombrecida por la ausencia de D’Arcy y todos los problemas de comunicación y dimes y diretes que esta provocaba. También por todos esos estadios de Estados Unidos que no han terminado de llenar o aquel momento en que parecía que no iban a visitar Europa aunque muchos intuyeran que, como The Cure, lo que iban a hacer a este lado del Atlántico era festivales el verano que viene.
En cualquier caso, han sacado un disco de media hora y 8 canciones que por su nombre parece la primera parte de algo, aunque no hay quien se fíe de Corgan y sus promesas de EP’s y futuras partes: a esto me remito. ‘Shiny and Oh So Bright, Vol. 1: No Past. No Future. No Sun’ es un disco entretenido y funcional, con momentos claramente pensados para esta gira de reunión, en el que la claridad de sus ganchos contrasta con el mejorable acabado de sus conceptos.
El disco tiene un título luminoso y con una canción luminosa se abre. ‘Knights of Malta‘ es toda una rareza en su discografía tanto por su apego a la americana, también con un coro góspel, como por una letra optimista que emerge incluso a través de figuras siniestras. Hay «culebras para tu puño» y «escarabajos en tu boca» pero lo que se repite hasta la saciedad son frases tan optimistas como «voy a hacer que esto ocurra» y «voy a volar para siempre». La repetición de textos es una de las máximas del disco y ese es el truco principal de ‘Travels’, que termina incorporando unos teclados bastante New Order. Y la electrónica no es ajena a los artífices de ‘Adore’, pero -de nuevo- pocas veces les han hecho sonar tan poco oscuros, tan alegres.
El problema es que otras canciones no siguen esa línea, haciendo que este EP suene algo inconexo, como una colección de viejos descartes con buenas ideas que no se han terminado de llevar al mejor puerto posible. Estamos acostumbrados a escuchar contrastes de rock y baladas en discos de Smashing Pumpkins como sucedía en ‘Siamese Dream’ o «Mellon Collie», pero ya que el grupo acaba de dar un par de pasos adelante en favor de la americana (como en un momento de ‘Alienation’), se habría agradecido que se explotara más esa vía. Al final, ‘Knights of Malta’ no es tan buena intro para el disco porque para cuando han sonado la casi metalera ‘Marchin’ On’ o el single ‘Solara’, más bien te has olvidado de que pertenece a este conjunto de canciones.
Por otro lado, algunas canciones como la misma ‘Solara’ suenan algo forzadas en la búsqueda de ganchos. Incluso por momentos facilonas y holgazanas. Y letras en la estela de «See love, see time / See death, see life», la de ‘Travels’, no es que añadan demasiado. Una pena, porque con otra secuencia o incluso dejando algunas de estas pistas para una parte de todo esto en la que peguen más, podría haber quedado un gran mini LP. ‘Silvery Sometimes/Ghosts’, así llamada en homenaje a The Cure, con su vídeo inspirado en Halloween, es una buena recreación del sonido ‘1979’, y ‘With Sympathy’ un medio tiempo de lo más agradable.
Calificación: 6,5/10 Lo mejor: ‘Silvery Sometimes/Ghosts’, ‘Travels’, ‘Knights of Malta’ Te gustará si consideras: ‘1979’ y «Bullet» sus mejores canciones, pero estás abierto a que hagan otras cosas. Escúchalo:Spotify
La generación X, aquellos nacidos desde 1994 en adelante, está teóricamente caracterizada por haber nacido en la era digital y estar familiarizados desde la cuna con la tecnología. Sin embargo, eso no significa necesariamente que los artistas nacidos en el ocaso del siglo XX y los albores del XXI rechacen necesariamente los modos tradicionales de la cultura popular. Un buen ejemplo es Bea Ledger, una joven londinense que, con apenas 18 años, se está labrando una carrera en la música con canciones esbozadas con una guitarra acústica y su voz dulce, bajo el alias de beabadoobee.
De ascendencia británica y filipina, la relativa popularidad de Ledger llegó de manera casi accidental. En septiembre de 2017 grabó una demo titulada ‘Coffee’ en el dormitorio de su amigo Oscar Lang (que también mantiene su propia carrera bajo el sobrenombre de pig) y la subió a un canal de Youtube con su nombre de usuario (sí, @beabadoobee). Ella creía que sólo interesaría a unos pocos amigos, pero en poco tiempo alcanzó 300.000 visualizaciones y en Spotify llegó a los 800.000 streamings. Una locura que atrajo a varios sellos importantes como Dirty Hit (The 1975, Wolf Alice, Pale Waves), que fue el que finalmente se llevó el gato al agua y publicó su primer EP, ‘Lice’, meses atrás.
Tras algún single suelto como ‘Susie May’, de nuevo producido por su inseparable pig, a principios de este mes de diciembre lanzaba ‘Patched Up’, un nuevo disco corto que ha contado con una grabación más profesional y una mayor profusión de arreglos para su bedroom pop, entre los que se cuentan algunas cuerdas, teclados y cajas de ritmo que dan mayor empaque a su sonido. Aunque, en cualquier caso, sigue basado en sus mimbres básicos, como muestra una de sus mayores cotas, el single ‘Dance With Me’. Esta canción sobre vencer la timidez en una fiesta para aproximarse a la persona que nos hace tilín, arranca con el esqueleto habitual en sus canciones, pero de manera tenue se van sumando capas de arpas, coros, metalófono y cuerdas, que elevan la propuesta instrumental de beabadoobee. Todo un encanto de canción que entronca tanto con coetáneos como Clairo o (Sandy) Alex G como con el espíritu de unos Kings of Convenience o unos Spring.
Que lleve tiempo sin hablar de canciones por aquí no significa que haya dejado de oír música y descubrir temazos, que recopilo en una nueva playlist «Bonjour, les copains!!!«. Fascinada me han dejado Juniore, banda formada en París en 2013 con innegables influencias de los años sesenta. En la voz de su líder, Anna Jean, encontramos a la misma Françoise Hardy. El grado de similitud casi asusta -en el buen sentido- y es fácilmente comprobable desde los primeros versos de ‘La fin du Monde’, la cara A del single que publicaron en octubre. Pop retro a la française delicioso e imprescindible. Tal y como lo es The Rodeo, la aventura de Dorothée Hannequin que con su álbum ‘Thérianthropie Paradis’ nos acerca a nueve temas exquisitos que la convierten en la Margo Guryan del siglo XXI que no paro de recomendar. Hace pocas semanas The Rodeo ha publicado un nuevo single, ‘Désir d’avalanche’, con la colaboración de Cléa Vincent (que también nos trae novedades) y Adrien Samba.
Møna, el proyecto de Montse Álvarez (Nosoträsh) e Ismael Piñeira (Tommy Crimes), acaban de publicar ‘Noviembre’, un single digital de dos temas que sirve de continuación a ‘Junio’, editado este a principios de verano. Saudade y esperanza en ese pop en español que no debería extinguirse jamás. Mi favorita, ‘Amor enfermo’, el arranque de ‘Junio’, es la metáfora perfecta a esas realidades que nos resistimos a cambiar. Y más pop en castellano, con un ‘Un lugar imaginado’, el último trabajo de Neleonard: la banda cumple con las expectativas tras su primer largo, ‘Las causas perdidas’. ‘El mismo’, abriendo el álbum, reúne elementos de unos primeros Tachenko, Camera Obscura o el debut de los entrañables Allo Darlin’.
Molly Burch -muy muy muy arriba en mi lista de fetiches del último año- viene desde Austin y acaba de publicar su segundo largo. Tras el brillante y melancólico primer trabajo, ‘Please Be Mine’, llega ‘First Flower’ cargado de pop atemporal desde el que florece su formación vocal en jazz y al que pocos elementos le faltan para ser casi perfecto. ¡Prueben y oigan! Y no dejemos tan rápido la atemporalidad melódica, que tenemos a Carbon Poppies, una de las bandas que incorporó últimamente Elefant Records a su colección New Adventures In Pop. Desde Louisiana traen un precioso EP con canciones tan melancólicas y poderosas como la recuperada desde 1966 ‘Rain on my Face’ de la formación británica Shape & Sizes. Para morir y resucitar aquí mismo.
El destacable trabajo de la belga Angèle, ‘Brol’, integra hip-hop, pop electrónico y chanson, entre otros estilos, con un talento y desparpajo que hacía tiempo no se veía en la escena francófona. Además, ha conseguido colocar el temazo ‘Jalousie’ en la primera posición de mi “TOP canciones sobre celos” (para mí, un género en sí mismo) reforzado con un clip hipnótico y de resultado exquisito.
Con apenas 17 años la youtuber Adèle Castillon ha creado junto a Matthieu Reynaud Videoclub (en la foto). De momento ya hay un single llamado ‘Amour Plastique’ y al que espero le sucedan nuevos éxitos y el proyecto se convierta en algo más que una aventura adolescente. Otra alianza potente es la creada por el cantautor Ben Mazué y Pomme (nombre artístico de Claire Pommet) que en el último álbum de éste interpretan ‘J’attends’. No perdamos de vista a la joven Pomme que con 22 años ostenta, más allá del pop, una de las voces más versátiles y potentes del panorama musical francés actual. Podéis darle una vuelta a su último álbum, ‘À peu près’.
Algunos lanzamientos me han traído alegría máxima; por un lado Cléa Vincent con las “noches de insomnio” (‘Nuits sans sommeil’) en la nueva entrega de su synth pop melódico o la londinense Nilüfer Yanya con ‘Heavyweight Champion of the Year’, dulce pero intensa como acostumbra. También he celebrado ‘Ce Paradis’ de The Pirouettes, de su álbum ‘Monopolis’, el lanzamiento por parte de Elefant Records del EP ‘Springtime’ del quintento francés Le SuperHomard o ‘Mirror’, de IDER desde Reino Unido, un nuevo adelanto de lo que en 2019 será su álbum debut.
No podía dejar atrás a Feroe, el nuevo proyecto de Myriam Gutiérrez, conocida anteriormente por The Bright. ‘Vapor’ es la única entrega de esta nueva etapa que sirve para imaginarnos qué derroteros seguirán las nuevas canciones de la leonesa. Alondra Bentley regresó en septiembre con nuevo disco producido por Javi Carasueño (conocido por sus proyecto con Tulsa, Nine Stories o Marem Ladson entre otros). ‘Solar System’ se traduce en una entrega de pop de atmósferas oníricas que parece encajar a la perfección y dar continuidad a la carrera de Bentley tras su precioso ‘Resolutions’ (mi disco favorito de 2015).
En las últimas semanas me han acompañado también maravillas como ‘Sparrows’ o ‘Bats’ de Honolulu que hacen que algunos nos entusiasmemos con su dream pop cercano e hipnótico y esperemos con ganas su álbum debut de la mano del sello barcelonés Foehn Records. Los neozelandeses Yumi Zouma han presentado un EP precioso con canciones tan magnéticas como ‘Powder Blue / Cascine Park’ que recomiendo encarecidamente. Los británicos Teleman por su parte han sacado nuevo álbum, ‘Family Of Aliens’ que, tras el luminoso ‘Brilliant Sanity’ (2016), da continuidad a ese pop eléctrico y melódico, “fluent and fluid” cómo ellos lo han denominado, que dan ganas de salir a la pista de baile dejando a un lado todos los complejos.
El artista californiano, Andrew McMahon, líder de las bandas Something Corporate y Jack’s Mannequin presenta su tercer álbum de estudio con su proyecto en solitario, Andrew McMahon in the Wilderness. McMahon además creó la fundación Dear Jack para apoyar a jóvenes con cáncer tras haber superado él mismo una leucemia gracias a un trasplante de médula. ‘Upside Down Flowers’, el recién editado trabajo, recoge doce temas de pop que lo podrían situar a medio camino entre Weezer y Death Cab for Cutie.
Kevin Spacey ha reaparecido en un extraño vídeo de 3 minutos subido a su canal de Youtube en plena Nochebuena en el que realiza un discurso llamado ‘Déjame ser Frank’, haciendo un claro juego de palabras con respecto a su personaje en ‘House of Cards’, serie que tuvo que abandonar tras haber recibido varias acusaciones de abusos.
El vídeo, en el que aparece en una cocina con un delantal lleno de estampados de Papá Noel, se ha publicado poco después de que The Boston Globe haya publicado que la fiscalía de Cape Cod en Massachusetts acusa a Kevin Spacey de haber abusado sexualmente de un joven de 18 años en un bar, hace dos años, tras haberle emborrachado. Kevin Spacey aparece en el vídeo como convertido en el personaje de Frank, diciendo: «Te he contado mis secretos más oscuros, te he enseñado exactamente de lo que es capaz la gente. Te he agitado con mi sinceridad, pero sobre todo te he retado y hecho pensar», «se mueren porque yo declare que todo lo dicho es verdad» o «¿No sería sencillo? Si fuera todo así de simple… Solo tú y yo sabemos que nunca es tan sencillo ni en la política ni en la vida. Pero tú no creerías lo peor sin pruebas, ¿verdad?».
También indica: «si no pagué el precio por las cosas que ambos sabemos que hice, seguro que no pagaré el precio por las cosas que no hice. Por supuesto que van a decir que soy un irrespetuoso por no respetar las normas, pero nunca lo hice y te encantaba». Continúa: «A pesar de todas las tonterías, la animosidad, los titulares, la impugnación sin juicio… A pesar de todo, a pesar incluso de mi propia muerte, me siento sorprendentemente bien. Y mi confianza crece cada día en que muy pronto sabrás toda la verdad». Y concluye en nueva referencia a ‘House of Cards’: «¿Nunca me viste morir, verdad? Las conclusiones pueden ser tan engañosas. ¿Me echas de menos?». Spacey abandona el plano y después cierra el vídeo, visto 4 millones de veces en menos de un día, una música terrorífica.
Tras la aparición de la noticia de que Cardi B estaba pidiendo incluso millones de dólares en plural para actuar, su equipo ha decidido desmentirlo, como recoge Rolling Stone. «El rumor circulando de que ha pedido un millón de dólares y que quiere tener su propio set es falso. Para empezar nunca ha habido una oferta firme para una performance. Ha habido conversaciones, pero no está particularmente interesada en participar a causa de su opinión sobre Colin Kaepernick y todo el movimiento. Pero de nuevo, nunca ha habido una oferta sólida para decir que sí o que no a la Super Bowl. Ella ya ha confirmado una actuación con Bruno Mars ese fin de semana»:
Cardi B ya había mostrado su solidaridad con el jugador Colin Kaepernick, al igual que Rihanna, que habría rechazado también participar en la Super Bowl. Cardi B ha sido noticia recientemente por estrenar vídeo para uno de sus últimos singles sueltos, ‘Money’.
Inna es el nuevo número 1 de JENESAISPOP con la contagiosa ‘Iguana’, mientras Amaia protagoniza la entrada más fuerte directa al top 5 con ‘Un nuevo lugar’, una canción preciosa y muy significativa aunque no sea el single de su próximo disco. Mucho más abajo en la tabla encontramos novedades como Antifán, el tema de Novedades Carminha con Dellafuente, Ms Nina, Avril Lavigne y Mucho. Por el contrario, toca despedirse de Lady Gaga y Bradley Scott, en la mitad baja de la tabla y con más de 10 semanas de permanencia. Ya podéis escuchar nuestra última lista de novedades y votar por todas vuestras canciones favoritas aquí.
Tommy Cash asegura en una entrevista reciente con el artista ruso Slava Mogutin que es “anti-política”, que la política no le interesa y que su trabajo simplemente aborda el “escapismo”. Sin embargo, el rapero estonio se hace llamar a sí mismo “Kanye East”, escribe rimas que buscan claramente emular las de un rapero americano, de hecho hace trap y habla en las entrevistas de su juventud miserable en la periferia de Tallinn, donde crece rodeado de drogadictos, hasta el punto que es capaz de reconocer “de qué van puestos” en cuanto los ve por la calle. Sus vídeos incluso retratan con un punto cómico la desazón de la vida post-soviética en esos mismos barrios pobres en los que vivió. Aunque Cash no toma una postura política concreta (sus declaraciones reflejan a un joven más bien idealista, cuyo mundo perfecto sería apolítico), el artista claramente tiene la mirada puesta en un mundo que no es el que conoce, y al que busca huir desesperadamente por la vía de la música, como de manera divertida retrató, en 2015, en la serie de Youtube “American Russians”, protagonizada por dos “gopniks” con aspiraciones de convertirse en “superestrellas profesionales del gangsta rap”.
En su nueva “mixtape”, ‘¥€$’, Cash rapea sobre ser un “esclavo con una cadena de oro” y sentirse “como Ucrania” y como un “refugiado en casa, pero como un extraño en un avión”, y termina rimando “Dali and Picasso made in Spain” con “Tommy Cash made in pain”. ¿De verdad pasa tanto de la política Tommy Cash?. Producido por el genio de PC Music A.G. Cook (con el que Cash ya había colaborado), ‘Mona Lisa’ eleva a Cash en una nube de sintetizadores radioactivos más próximos a la brasa ácida de Death Grips que a la crudeza brutal de ‘Yeezus’. Sin embargo, sí hay momentos en la canción que recuerdan a Kanye West y a ese disco en concreto y de hecho el tema es una colaboración con el diseñador de moda Rick Owens, al que Cash admira y no solo porque ambos compartan fecha de nacimiento. Cash es “Kanye East” por algo.
A menudo capaz de dejar en sus temas frases bastante malas, como “tu culo es como una cebolla, me hace llorar” (‘HORSEB4PORSCHE’), “Kanye con las palabras, el mejor amigo de tu clítoris” (‘DOSTOIEVSKY) o “le como el coño con parmesano” (‘YES OR NO??’), que en cualquier caso siguen pareciendo inocentes al lado de cupcaKKE, Cash expresa sus rimas absurdas con la confianza de muchos raperos capaces de publicar en sus discos rimas igualmente terribles, entre ellos el propio Kanye West. Pero Cash se preocupa por presentar una propuesta musical bastante más radical que la de muchos, optando por colaborar en este disco con varios productores de PC Music en varios temas, el productor alemán Boys Noize en otros y con el genio experimental Amnesia Scanner en un par, en concreto en la metralleta de ‘Wait a Minute’ (con mención turbia a Mariah Carey) y en la tectónica ‘YES OR NO??’.
Vistos sus colaboradores, ‘¥€$’ podría parecerse en el primer caso a lo que trama Lady Gaga para su próximo trabajo (se sabe que ha trabajado con SOPHIEy Boys Noize), y en el segundo realmente a nada en particular, pero el álbum remite en realidad más que nada al ‘POP 2’ de Charli XCX, en el que Cash participó y quien asoma aquí en el disco para hacer coros en ‘COOL 3D WORLD’. Sin embargo, el mundo creado por Cash está mucho más intoxicado de polvo nuclear y olor a semen y y el single estrella del disco, ‘X RAY’, es abiertamente trance, aunando trap, ritmos tribales a lo Safri Duo y un subidón a lo Pont Aeri para meternos de lleno en el ambiente de los polígonos industriales… o del Berghain de Berlín. En ‘HORSEB4PORSCHE’ rapea sobre tener la piel “blanca como la cocaína” y la cartera llena de “babki” apoyado en un ritmo trap que suena tan caro como sus videoclips, y ‘BRAZIL’ con MC Bin Laden se recrea en el lujo que acompaña a la vida de un traficante de drogas mediante un pegadizo ritmo de funk brasileño que incluye disparos y alarmas y que no desentonaría en el repertorio de Major Lazer o Anitta.
El mundo de Tommy Cash puede sonar peligroso como ‘VEGETARIAN’ o sus brutísimas colaboraciones con Amnesia Scanner, pero también tan cansino y aburrido de sí mismo como ‘BLACK JEANS, WHITE T-SHIRT o ‘NOT CARE’, dos temas olvidables que a duras penas consiguen dejar impronta gracias a su interesante producción. Los videoclips de Cash, tan surrealistas como grotescos, siguen siendo la mejor parte de su propuesta, pero en ‘¥€$’ se nota que el estonio ha hecho un esfuerzo por que su música logre fascinar a la gente casi tanto como su “cabeza-coño”. No hay demasiado que rascar en las habilidades de Cash para el rap; en la mayoría de los casos, el artista imita el lenguaje del rap americano de manera torpe, a menudo quedándose cerca de parecer una parodia (“money in the bank, we going mathematical / we don’t give a f, cos we so radical”), pero la misma existencia de Tommy Cash en el panorama musical y los temas sobre los que decide escribir o retratar en sus videoclips lo convierten en un sujeto necesariamente político -y en su caso fascinante-, por mucho que él lo niegue.
Calificación: 7/10 Lo mejor: ‘MONA LISA’, ‘XRAY’, ‘BRAZIL’, ‘HORSEB4PORSCHE’ Te gustará si te gusta: Charli XCX, Mykki Blanco, Tommy Genesis, Yung Beef, La Zowi Escúchalo:Spotify
Una de las peores noticias musicales de 2018 llegaba en enero cuando se conocía la muerte de Dolores O’Riordan tras ahogarse en la bañera de un hotel de Londres debido a una ingesta excesiva de alcohol. Dave Davies de The Kinks acaba de escribir un nuevo obituario para The Guardian. La reedición del debut de Cranberries con motivo de su 25º aniversario estaba prevista de todas formas y O’Riordan había llegado a trabajar en ella. Este otoño ha llegado al mercado aunque un poco de aquella manera: no ha sido nada fácil hacerse con una copia de la edición súper deluxe. Los extras no están subidos a las plataformas de streaming, quizá por algún problema de derechos con respecto a su EP debut ‘Uncertain’, que no estaban a disposición ni de Island ni del grupo; y en cuanto a la edición física, Hasta 2 meses de espera me ha costado hacerme con una, en medio de unos problemas de distribución evidentes que, al menos, se han resuelto antes de Navidad (disponible en Amazon).
La cajita llega, por tanto, con retrasillo, pero merece mucho la pena. En el libreto encontramos muchas anécdotas desconocidas incluso para el hardcore fan, muchas relacionadas con el primer cantante del grupo, pero también obviamente con la banda, que una vez entró Dolores, jamás cambió de formación. El grupo, Stephen Street o el fotógrafo Andy Earl explican cómo se buscó que la portada pareciera la de un debut, cuánto costó encontrar el tempo adecuado para ‘Linger’, cómo ‘Dreams’ se inspiró en Echo & The Bunnymen y cómo su debut empezó a triunfar cuando ya se había dado al grupo por acabado tras transcurrir 5 meses entre el lanzamiento del promo para prensa y el disco verdadero, entre muchas otras curiosidades. Al final vendió 7 millones de copias.
Se incluyen postales, un póster y por supuesto los 4 discos ya anunciados. La remasterización en Abbey Road del álbum original no aporta demasiado en este caso, pues la producción de Stephen Street era magistral y nítida y no había nada que mejorar, pero sí vuelve a ponerse sobre la mesa que el debut de Cranberries es un álbum precioso y oscuro sobre los primeros sinsabores del amor, que O’Riordan escribió en general a partir de los 4 acordes que se sabía Noel Hogan, con unos 18 años (también escribía temas sola). El productor de Blur y Suede aparece diciendo, entre otras cosas, que no se dio cuenta de lo bueno que era este disco hasta un año después de haberlo grabado.
Por otro lado, llaman la atención lo bien que han envejecido mensajes como los de ‘Pretty’ o ‘Not Sorry’. Aunque O’Riordan mostrara un perfil conservador durante los 90 por sus creencias religiosas y por su opinión contra el aborto, y no fuera por tanto exactamente una riot-grrrl, la cantante denuncia constantemente el abuso en letras como las citadas, ‘Put Me Down’ o la inédita ‘A Fast One’, en la que se rebela contra quien le dice lo que tiene que hacer en lo que parece todo un protohimno contra el «mansplaining». “Me dices que no soy lo suficientemente buena / me dices que soy un aburrimiento / pero no estoy dispuesta a tolerar tus insultos nunca más”, comienza diciendo esta canción sobre un matrimonio a los 16 años que termina mal: “estoy harta de ti / no sé lo que te molesta / pero siempre me estás diciendo lo que tengo qué hacer”. Al final de la letra, se va a vivir sola. Hoy sabemos que Dolores también fue víctima de abusos sexuales de pequeña y algunas de estas canciones adquieren un tono de denuncia y feminista, adelantado a su tiempo. «Esta es una canción sobre las mujeres», reivindica antes de comenzar ‘Pretty’.
En cuanto a los extras, como es habitual en este tipo de discos, la abundancia de directos, maquetas y tomas en la radio, a destacar que Cranberries también llegaron a ser lo suficientemente guays como para tener su sesión con John Peel, puede ser excesiva. No me canso de oír ‘Linger’ en cualquiera de sus versiones, pero el eterno retorno de ‘Wanted’ termina siendo un poco paródico. En cualquier caso, mientras presentaban en directo el primer disco, ya tenían preparado el segundo y por tanto aparecen en estas muestras en directo de su primera gira, todos los hits de lo que iba a ser el segundo. Así, oímos en su versión primigenia ‘Zombie’, ‘Ode to My Family’, ‘I Can’t Be With You’ y ‘Ridiculous Thoughts’, al tiempo que alguna curiosidad como la metedura de pata en vivo como la de un directo de ‘Not Sorry’.
Pero lo mejor, por supuesto, es que este CD ofrece al fin la posibilidad de escuchar oficialmente muchas de las joyas perdidas de sus inicios. Las caras B oficiales (la mítica ‘Liar’ que nunca dejaron de tocar, ‘What You Were’, etc) eran muy accesibles pero no otras cosas: las cuatro canciones de ‘Uncertain’ tanto en estudio como alguna en directo, la mencionada y desafiante ‘A Fast One’, su tema en gaélico ‘Íosa’ sin el insoportable sonido de catacumbas con el que circulaba por internet, la delicada y decepcionada del mundo ‘False’ o su versión de Carpenters. Y, ay, ¿quién nos iba a decir que Dolores iba a terminar exactamente igual de mal que Karen?
‘Que no salga la luna’ tiene una posición privilegiada en la secuencia de ‘El mal querer‘ de Rosalía. Es la pista 2, por lo que suena después de ‘Malamente’, pero no parece haber habido hacia ella tantos halagos como hacia ‘Bagdad’ o ‘De aquí no sales’. No hay una sola mención a ‘Que no salga la luna’ en las valoraciones de Rolling Stone y Pitchfork, The Needle Drop la menciona en su crítica pero no para bien, The Guardian simplemente para elogiar la voz de Rosalía y el tema no aparece entre los destacados por mi compañero Raúl Guillén en su reseña del álbum, aunque sí es uno de los analizados. Por lo menos el público sí parece haberse decantado por ‘Que no salga la luna’ más que por otras canciones del álbum como demuestran sus cifras en Spotify, aunque si los rumores son ciertos, el próximo vídeo de ‘El mal querer’, rodado en los molinos de Campo de Criptana, no será para esta canción sino para ‘De aquí no sales’.
Basada en ‘Mi canto por bulerías’ de La Paquera de Jerez, con Manuel Moreno a la guitarra y los coros y jaleos de Los Mellis, Las Negris más Lin y Nani Cortés, ‘Que no salga la luna’ suena sin embargo como una canción completamente nueva desde el primer segundo al último. En cuanto arrancan los guitarrazos y entra el épico aullido de Rosalía, se postula como la canción más impactante de ‘El mal querer’ con mucha diferencia. Después de ‘Malamente’, que es una canción inspirada por el flamenco, pero no es una canción de flamenco, como ha reconocido la propia Rosalía, ‘Que no salga la luna’ es la canción más “tradicional” de todo el disco, además de la más larga, lo que solo puede entenderse como una declaración de intenciones por parte de la cantante y un aviso de que lo que nos vamos a encontrar en el álbum no va a ser ni mucho menos parecido a ‘Malamente’. De hecho, así ha sido y ‘El mal querer’ ha sorprendido, pese a su carácter experimental y electrónico, por su tradicionalidad.
Como ‘Pienso en tu mirá‘, ‘Que no salga la luna’ está interpretada desde el punto de vista de un hombre maltratador. Es el capítulo de la boda. En la letra, el hombre recuerda el resplandor de los ojos de la novia en su pedida de mano (“como las hojas de un cuchillo, brillaban los sacais suyo’ cuando le di el anillo») y el tema incluye una parte narrada por Rosalía en la que parece escoger una joya de diamantes, eufórica. Sin embargo, la violencia se impone en la historia desde el principio, cuando el novio declara que “si hay alguien que aquí se oponga, que no levante la voz”, al que le responden unos coros llenos de misticismo que susurran “que no lo escuche la novia, que no salga la luna”, pareciendo un hechizo que amenaza a la protagonista de la canción incluso en sus momentos más felices.
Evidentemente, la “tradición” en ‘El mal querer’ está pasada por mil filtros y en sus recientes stories sobre el análisis de Jaime Altozano, Rosalía comparaba la producción de ‘Que no salga la luna’ con la de una canción de electrónica, afirmando que la canción es tan hipnótica porque está basada en un “loop” y que usa un “recurso muy recurrente” en el género, el “hecho de filtrar frecuencias” que hace que a veces la “guitarra esté más escondida y otras no”. Esto da lugar a una composición realmente cinematográfica, en la que la presencia más o menos marcada de los instrumentos parece emular los espacios y escenas diferentes presentes en la letra. De hecho, el guitarrazo que sigue a la parte de “quiera o no quiera, va a estar conmigo hasta que se muera” parece deshacerse de un plumazo de todo lo que ha ocurrido antes en la canción, como si buscara despertarnos de un sueño o de una alucinación.
La portada de ‘Que no salga la luna’, inspirada en el cuadro de Frida Kahlo, ‘Las Dos Fridas’, que la artista mexicana pintó tras su divorcio de Diego Rivera, presenta la canción dentro de un marco de simbolismo fiel a la letra. Ya no son dos Rosalías sino la novia y el novio los que se dan de la mano en esta obra de Filip Cústic que parece representar un matrimonio marcado por la oscuridad, pero de la que quizás siga habiendo tiempo de salir.
Madtown Days by Jim Beam vuelve por séptimo año consecutivo a Madrid. Esta edición del festival comenzará el 25 de enero de la mano de Warcry, la banda asturiana de heavy que hará un repaso a los grandes éxitos de su carrera en La Riviera. Posteriormente, el 15 de febrero, Joy Eslava recibirá a Alice Wonder, la cantante madrileña de indie-folk que presentará su primer disco, ‘Firekid’. Las entradas para los conciertos de MTD by Jim Beam están a la venta en Ticketea y en puntos de venta habituales.
El mes de marzo viene dividido en dos fechas: la primera será el 3 de marzo, día en el que grupo madrileño de electropop Volver (foto) presentará su trabajo ‘Abril’ en Café Berlín; la segunda el 16 de marzo en la Sala Copérnico, la banda madrileña afincada en Brooklyn Gold Lake presentará su disco de 2014 ‘Years’. Les acompañará el también grupo madrileño Una Guapa y un Gualtrapa, autor de singles como ‘Highschool Girl’.
El evento continuará a través del mes del abril, con Siloé y Floriblanca actuando en Joy Eslava el 11 de abril, y Nunatak en la sala BUT de Madrid el 27 de abril. El ciclo finaliza el 30 de mayo con Zoé, que llegará a La Riviera tras finalizar su gira americana. Este concierto formará parte de la gira de presentación de su nuevo disco ‘Aztlan’, que pasará por Madrid, Barcelona y Bilbao.
La victoria de Israel este año en Eurovisión ha sido tan polémica como se esperaba, sobre todo en cuanto a la elección de su sede de 2019, que finalmente será Tel Aviv y no Jerusalén como deseaba el presidente del país Benjamin Netanyahu, evitando así la politización del evento. Abundantes han sido las críticas por blanqueo cultural a Israel, con el que el país buscaría tapar la realidad de Palestina al mundo.
Tres concursantes de Operación Triunfo 2018, estas son, Alba, Natalia y María, parecen enteradas de esta situación y así se lo han hecho saber esta semana a los responsables de TVE durante una charla informativa sobre el festival. Las tres han mostrado su disconformidad por que Eurovisión se celebre en un país que está siendo enormemente cuestionado por sus políticas contra la población palestina, que han sido comparadas con el “apartheid”, siendo Alba la primera en alzar la voz contra la sede del festival y en afirmar que si fuese en otra ciudad como Ámsterdam, sentiría más ilusión por ir. Por otro lado, Natalia ha dicho que si Eurovisión fuera en otro lugar, la “actitud” de los concursantes hacia representar a España en el festival “habría sido bastante más abierta”, y María ha tildado de “desafortunada” la elección de la ciudad anfitriona.
Ante este desánimo, los responsables de TVE han sugerido a Alba, Natalia y María que el escenario de Tel Aviv puede ser un lugar “donde reivindicar vuestras ideas”, ya que además el evento es visto por 200 millones de personas en todo el mundo. De hecho, las tres podrían ir considerando la posibilidad de hacer algún tipo de protesta en Tel Aviv, ya que son las que más posibilidades tienen de ir a Eurovisión, como muestra la gráfica compartida por Vertele.
Monarchy se han salvado por los pelos de ser incluidos en esta lista de 10 artistas que han abortado sus discos en 2018. El dúo británico de electropop había anunciado inicialmente para el pasado verano el disco que diera continuidad a ‘Abnocto’, su álbum de 2015, pero ese lanzamiento sencillamente no se produjo y no había vuelto a saberse nada al respecto.
El pasado viernes por fin Warner ofrecía todos los detalles sobre este nuevo disco. Se titula ‘Mid:Night’ –justo como el single que presentaban el pasado mes de marzo–, contendrá 8 cortes entre los que se incluyen el single homónimo y ‘Hula Hoop 8000’ –cuyo vídeo tuvimos la fortuna de estrenar en JENESAISPOP– y verá la luz el próximo 18 de enero. Su portada, de iconografía retrodigital, ha sido creada por “el artista synthwave” Kidmograph.
El productor Andrew Armstrong y el vocalista Ra Black acompañaban este anuncio con la presentación de una nueva canción titulada ‘Deep Cut’. Introducida por una profunda línea de bajo que parece sintetizar una voz humanoide, la canción supone un nuevo tiro de future funk bailable, marca de la casa, con una melodía superpegadiza –esos «coocoocoo-coo»s son tremebundos– que habla del amor como una profunda zanja en la que permanecer estancado, ajeno al mundo, como reza su estribillo con un humor bastante negro, cegado por la pasión: «estoy idiotizado por el ritmo en tus huesos / deja que tus putos próceres mueran solos / eres la profunda zanja en la que estoy estancado». Un estupendo nuevo avance de uno de los grupos más fiables y personales del nuevo synth pop.
Monarchy han anunciado también una gira europea en 2019 que, por el momento, no tendrá fecha en España. Aunque su predilección por el público español seguro que les traerá por aquí en algún momento futuro.
Tracklist de ‘Mid:Night’:
Back to the Start
Deep Cut
Get Into the Night
Deadset Lust
MidNight
Hula Hoop 8000
Racie´s Cousin
Cumming Coma
Post Malone había anunciado en Twitter que publicaría una canción nueva antes de que acabase el año y ha cumplido con su palabra. Producida por sus colaboradores habituales Louis Bell (‘rockstar’) y Frank Dukes (‘Congratulations’), ‘Wow.’ es la propuesta que Post Malone da a conocer en Nochebuena acompañada de un videoclip de temática navideña.
Repleto de referencias a los coches favoritos de Post Malone, uno de los cuales el rapero conduce “por la nieve de Utah”, así como al jugador de baloncesto Dikembe Mutombo, Dr. Dre o a sí mismo, ‘Wow.’ es otro buen tema del autor de ‘beerbongs & bentleys‘ en el que el artista afirma: “he hecho otro hit porque me he aburrido”. Y si alguien convierte en hits canciones que a priori no lo parecen en absoluto, ese es Malone.
‘Wow.’ pone punto y final a un año movido para Post Malone: el artista ha arrasado y roto récords de streaming con su último disco y con los éxitos ‘rockstar’, ‘Psycho’ y ‘Better Now’, pero también ha protagonizado algún que otro susto: a finales de agosto, su avión privado realizaba un aterrizaje de emergencia en Nueva York, y pocas semanas después el rapero sufría un accidente de coche en Hollywood. Como para decir “wow”.
En años pasados, en JENESAISPOP dedicábamos de cuando en cuando un artículo en estas fechas a destacar Villancicos Alternativos, compuestos o versionados por algunos artistas que habitualmente aparecían en nuestra web. Dada la enorme cantidad canciones ambientadas en la Navidad que numerosos artistas pop de los más diversos estilos y alcance han lanzado este año, hemos decidido recopilarlas todas juntas en una playlist secuenciada que sirva para ambientar tus reuniones familiares… o simplemente para degustarla por curiosidad.
Así, encontramos a alguna canción que ya habíamos presentado en artículos ad-hoc –como aquel ‘Lonely Man of Winter’ que Sufjan Stevens regaló a un fan en 2007 y que se publicaba oficialmente este año– u otros que habíamos destacado entre las novedades semanales de las últimas semanas en nuestra playlist Ready for the Weekend.
Es el caso de los villancicos originales compuestos por los venerables Alphaville, ‘Love Will Find a Way’, o MNEK, ‘Stopped Believing in Santa’. O de versiones de clásicos de la época como ‘Last Christmas’ de Wham! por parte de Allie X (que también incluimos en la reciente revisión de los británicos Pale Waves), ‘Happy Xmas (War Is Over)’ de John Lennon a cargo de su hijo Sean junto a Miley Cyrus y Mark Ronson, la visión del tema de Willie Nelson ‘Pretty Paper’ que hacen The Lumineers o una ensoñadora ‘Winter Wonderland’ a cargo de Goldfrapp.
Junto a estas, divertidas idas de olla como el tema electro del dúo australiano Confidence Man, el antivillancico punk de Las Chillers ‘Pink Xmas’, la visión pseudorapera de ‘Feliz Navidad’ por parte de la boyband Why Don’t We y el “xmas trap” de Rae Sremmurd, o la subjetiva visión de “estas-fechas-tan-señaladas” por parte de Summer Spree (que ha lanzado ‘Centro Magno’, un EP navideño completo) se cruzan con cosas tan bonitas como el tema propio que Salvador Tóxico interpreta con Nos Miran, el original ‘Christmas Song’ de Phoebe Bridgers o la bailable adaptación de Anderson. Paak de una de las canciones del especial navideño de Charlie Brown y Snoopy de 1965. Todo el equipo de JENESAISPOP os desea unas muy Felices Fiestas.
Poly Styrene, cantante de X-Ray Specs, formó parte del primigenio punk inglés con un perfil nada habitual: mujer, medio somalí y menor de edad cuando debutó en 1975 con un single de reggae (‘Silly Billy’) bajo el nombre de Mari Elliott. Tras ver en 1976 uno de los primeros conciertos de los Sex Pistols se convirtió inmediatamente al nuevo sonido y formó los X-Ray Spex. La cruda honestidad de sus letras (“Muchos creen que las chicas deberían ser vistas y no oídas / pero yo pienso «que te den por culo»”) estaba a la altura de su estilazo: ropas fluorescentes, casco de guerra, y prótesis dental. Con tan deslumbrante panorama, no extraña que Karen O, Beth Ditto, Kathleen Hannah o Kim Gordon la reverenciaran, incluso con una discografía tan minúscula en su primera etapa (un único álbum con los X-Ray Specs y otro en solitario).
Tras enredarse a primeros de los 80 en el movimiento Hare Krishna y dedicarse a criar a su hija Celeste, Poly no volvería a interesarse en la música hasta los años 2000, durante los cuales volvió a grabar un disco (‘Flower Aeroplane’, 2004) y también se embarcó en una reunión de su antigua banda. Tras otro paréntesis, en 2010 volvería a grabar un nuevo álbum con la ayuda de Youth (Martin Glover de la banda Killing Joke). Uno de los temas que se grabaron pero que no se incluyeron en el disco era ‘Black Christmas’, canción que reservaron como lanzamiento exclusivamente navideño con vistas a promocionar el retorno de Poly en 2011.
Así, en las semanas previas a la navidad de 2010, apareció modestamente en las redes un vídeo con la canción que hoy nos ocupa. Un tema en el que Poly volvía a reencontrarse con el reggae de sus inicios y que sorprendía por su maravillosa melodía y tono melancólico. La letra hacía referencia a una matanza real en Los Ángeles en la que el asesino se vistió de Santa Claus, imagen que en la canción funciona como símbolo negativo de la navidad, y que yuxtapone con sus propios sentimientos: “Completamente sola, ahogándome en mi pena / La Navidad siempre trae la tristeza de vuelta a casa / Un niño nace el día de Navidad / Pero lo crucificaron de todas formas”. El estribillo, en su simplicidad, no deja dudas del mensaje: “Oh no, I’m not merry, no”… un sentimiento de toda la canción que contrasta con el groove festivo y la bonita melodía, en una agridulce combinación que era sin duda la intención que tenían Poly y su hija Celeste, con la que coescribió y grabó estas “Navidades Negras”:
Cuando a primeros de 2011 se lanzó el álbum ‘Generation Indigo’, Poly confesó en una de las entrevistas que había sufrido cáncer de mama y que éste estaba en estado de metástasis. Pocos meses después, en abril, fallecía a los 53 años. Una tragedia que empañaba el disfrute de un disco final muy notable, y que en sucesivas navidades ha ido tiñendo el recuerdo de su canción navideña de todavía más tristeza. Pero paralelamente ‘Black Christmas’, año tras año, ha ido consolidándose lentamente como una de las mejores nuevas piezas navideñas de la década presente. Este año su reconocimiento ha dado un nuevo paso adelante con la edición de un single de vinilo conmemorativo a cargo del sello noruego Nordpolen Musikklubb. Incluye ‘Black Christmas’ y un tema de ‘Generation Indigo’ en la cara B, y es un tributo merecido a una artista que no abandona del todo el imaginario punk: bandas tan jovencísimas como Amyl and The Sniffers siguen siendo comparadas con su legado por críticos y célebres festivales, y la propia hija de Poly (que capitaneó hace pocos años la banda madrileña Celeste Dos Santos and the Tabloid Queens) prepara una película documental sobre su madre. Feliz Navidad, Poly.
‘Black Christmas’ suena en el Popcasting especial navideño de Jaime Cristóbal, disponible en este enlace.
2018 ha sido un año raro para Azealia Banks. La rapera ha protagonizado varias polémicas, algunas realmente imposibles de creer, pero también ha emprendido una curiosa línea de jabones íntimos que parece irle bien. Además, ha publicado un temazo de la talla de ‘Anna Wintour’, la 17ª mejor canción del año para JENESAISPOP, e incluso ha actuado en España, obrándose el milagro. Aunque ‘Fantasea Two: The Second Wave’ sigue sin salir y no parece que lo vaya a hacer pronto, Banks tiene algo más que ofrecer a sus fans aparte de jabones y doscientas cuentas de Twitter distintas, en este caso un mini EP navideño llamado ‘Icy Colors Change’ compuesto por una canción original -la misma que conocimos hace un año- y dos versiones.
El camino hacia esta nueva referencia de Azealia Banks ha sido arduo. Tras buscar a un ingeniero de sonido desesperadamente en Nueva York debido a problemas con su productor original, la rapera lo ha terminado in extremis con la ayuda del rapero Joe Budden y, de hecho, del tracklist se ha quedado fuera una versión punk de ‘Sleigh Ride’ que, a juzgar por los adelantos que había compartido de ella Banks en Instagram, es mejor no haber conocido. Por suerte, el resto de temas son dignos como mínimo, aunque se queden en anécdota.
Entre el R&B y los ritmos rotos del UK Garage, ‘Icy Colors Change’ no es la mejor canción que podía haberse extraído de una base tan sugerente como ‘Airglow Fires’ de Lone, pero no está mal, su melodía es nostálgica como exige cualquier tonada navideña y su letra bastante poética, con sus menciones a una “luna pálida” o a “flores de hortensia azules que florecen” bajo el “sol de agosto”. Aunque lo mejor de su letra es que es muy jazz, en correspondencia con las versiones incluidas en el disco, y frases como “lover of mine, let’s catch some shade beneath the fading trees” o “of all the seasons jewels, it took one afternoon to fall in love with you” remiten muy claramente al jazz vocal de los 50 y 60 que Banks ha querido emular en el EP, como ella misma reconocía en Instagram hace poco con lágrimas en sus ojos, dedicado a su madre.
Para las versiones de estándares del jazz incluidas en el EP, Banks opta por un sonido más romántico que festivo, convenciendo a medias de sus dotes para la interpretación de este estilo tan exigente en lo vocal. Banks no parece en una gran forma en este aspecto en su cover de ‘What Are You Doing New Year’s Eve’, dejando momentos realmente difíciles de escuchar que pueden recordar a Whitney Houston… pero a la última. La banda de Banks hace un trabajo elegante y es sin duda la mejor parte de esta canción llena de ornamentos y melismas con la que Banks parece buscar realzar su voz más que ofrecer una interpretación dinámica que sirva a la canción.
Sin embargo, Banks sí es capaz de emocionar en su versión de la preciosa ‘Have Yourself a Merry Little Christmas’. La artista podía haber replicado el sonido ufano de la interpretación de Ella Fitzgerald, pero opta por el dolor de la versión de 2000 de Christina Aguilera. Azealia tarda más de dos minutos en aparecer en el tema, dejando el protagonismo a su banda de jazz, pero la espera vale la pena en cuanto empieza a desplegar una actuación llena de angustia, atreviéndose con una nota larguísima hacia el final que da miedo de seguir pero que resulta satisfactoria. Terminan así 19 minutos de un EP en absoluto esencial pero mejor de lo esperado, que con suerte quedará pronto enterrado en el olvido en cuanto salga el próximo álbum de Azealia, en torno a 2050.
Calificación: 5/10 Lo mejor: ‘Icy Colors Change’ Te gustará si te gusta: mucho Azealia Banks Escúchalo:Spotify
Esta Navidad ha traído por adelantado un regalo… aunque para muchos resultará envenenado. El artista puertorriqueño Benito Antonio Martínez Ocasio, conocido mundialmente como Bad Bunny ha publicado por sorpresa su primer álbum de estudio oficial. Advirtiendo apenas horas antes a través de sus redes sociales, el Conejo Malo advertía de que a las 00.00h de este 24 de diciembre, víspera de Navidad, lanzaba ‘X 100PRE‘ –la traslación a slang digital de la expresión «por siempre», si es que hace falta aclararlo–.
Aunque cabría pensar de que un disco largo de estudio simplemente no estaba en los planes de un artista perteneciente a una generación de artistas para la que lo fundamental son los singles, el pasado verano Bad Bunny hablaba con The Fader sobre este álbum, un disco que grabó en un descanso de sus extensas giras por América y Europa y que inicialmente iba a titularse ‘La nueva religión’.
Finalmente se ha dado en llamar ‘X100 PRE’, está producido en su mayoría por sus colaboradores habituales Tainy y La Paciencia y, de la más de una docena de singles lanzados en 2018 en los que ha participado –los cuáles incluyen macroéxitos como el colaborativo ‘Te boté‘ o ‘I Like It‘, de Cardi B y con J Balvin, que le ha convertido en una superestrella internacional de manera incontestable–, sólo ‘Estamos bien’ y los más recientes ‘MIA‘, junto a Drake’, y ‘Solo de mi’ están incluidos–. Además de Drizzy, otros colaboradores destacados en el disco son Diplo, que participa en ‘200 MPH’, y su compatriota Ricky Martin, que presta su voz en la outro de ‘Caro’.
Como harto de que la gente le acuse de machista por la imagen viejuna que ha solido dar de las mujeres en su programa de entrevistas, ‘Mi casa es la tuya’, el cantante y presentador Bertín Osborne ha estrenado un canal de Youtube -lo cual ya es una noticia bizarra per se- dedicado a explicar “cómo se hacen las cosas sencillas de la casa y el día a día” y “hacernos la vida más fácil”.
El primer vídeo de Youtube de Bertín es un tutorial sobre cómo planchar bien una camisa. El autor de ‘Yo debí enamorarme de tu madre‘ dice estar harto de que la gente salga a la calle con la camisa sin planchar y muestra trucos para pasar una camisa con éxito por la plancha como usar dedales o cucharillas para colocarlos encima de los botones y no estropearlos, o planchar el cuello de una camisa doblándolo por la costura. Al final pide a los espectadores que hagan caso a sus consejos y “salgan a la calle decentemente, que da vergüenza veros”.
La idea claramente ha divido a España, como puede observarse en la sección de comentarios del canal de Bertín en Youtube. Algunas personas están encantadas con la idea, comentando cosas como “qué divertido eres”, “qué arte tienes”, “el mejor y más bello del mundo” o “qué risa, la plancha está sucia”. Otros no lo están en absoluto y expresan cosas como “mejor haz tutoriales sobre cosas que domines, como el alzamiento de bienes”, “no ha cogido una plancha en tu vida”, “hostia un facha” o “das pena”.
Este sábado, un tsunami ha impactado en el estrecho de Sonda en Indonesia, alrededor de las 21.30 de la noche, dejando al menos 222 muertos y unos 843 heridos, además de una treintena de desaparecidos. Como informa El País, parece que la causa del maremoto ha sido un alud submarino provocado tras la erupción del volcán Anak Krakatoa.
Entre las personas fallecidas por el tsunami se encuentra un integrante de la banda indonesia Seventeen, el bajista M. Awal Purbani, así como su mánager Oki Wijaya. En un vídeo que está dando la vuelta al mundo puede verse a la banda tocando en una costa de la playa de Tanjung Lesung pocos segundos antes de ser embestida brutalmente por el maremoto, que engulle rápidamente a la banda y el público, dejando una escena terrorífica.
El medio local The Jakarta Post enlaza un vídeo de Instagram subido por el cantante de Seventeen, Ifan, en el que lamenta la pérdida de su banda y la desaparición de su mujer, Dylan Sahara, así como de otros integrantes del grupo y asociados, entre ellos el guitarrista Herman Sikumbang, el batería Andi Windu Darmawan y Ujang, un miembro del equipo.