Cada año que pasa es más inverosímil que REYKO fueran número 1 de Los Principales, y cada año tiene más mérito que continúen con su carrera en la más estricta independencia, sin ningún interés en replicar el éxito de ‘Spinning Over You’. ‘Irrational’ es su cuarto álbum ya, que publican una vez el dúo español que-se-conoció-en-Londres-hablando-por-accidente-en-inglés, se ha mudado a Barcelona.
Si el anterior ‘Fantasía’ presentaba una amalgama de estilos que consentía retazos underground a lo Velvet, bossa y también canciones bailables, ‘Irrational’ se reboza en casi idéntica versatilidad. El álbum empieza con los sonidos etéreos de ‘All the Time’, el tema que decidieron llevar al Late Xou de Marc Giró, y que luego se entrega al dub. La canción, que habla sobre beneficiarse de alguien está obsesionado contigo, podría haber ejercido de buena banda sonora para ‘Mi reno de peluche‘, la gran obra maestra de Netflix. Sobre todo teniendo en cuenta lo que a REYKO les ha gustado siempre sonar en una serie de televisión.
Otro tema que muta poco después de sus primeros acordes es ‘Dancing On My Own’, que no tiene nada que ver con el hit de Robyn y que nace con un punteo post-punk para después transformarse en un electropop.
Las inquietudes e inseguridades de Soleil son el leit motiv de un álbum que incluye un tema en castellano, el uptempo ‘Nada que perder’; otro en Spanglish que llegaron a presentar a Benidorm Fest, ‘Run With You’; y otro que funcionaría en cualquier idioma. ‘Never Let Me Go’ está inspirado en la liberación que sientes al salir de un día horrible de trabajo, es decir, de alguna forma es un videoclip en sí mismo. Tiene una melodía tan buena como las de Erasure circa ‘A Little Respect’, y a la vez la euforia de ‘Love Is In the Air’. Es la mejor canción de ‘Irrational’.
Llegados a un cuarto álbum, a REYKO no les vendría mal un volantazo que animara su carrera. Eso o alguien que, en esa estricta autoedición, les ayude a mejorar interludios y hits en potencia. Lo que sí mantienen en ‘Irrational’ Igor y Soleil, es cierta sensación de misterio, sobre todo gracias a la voz de esta. Muchas de sus canciones presentan una oscuridad intrigante, que puede manifestarse a través de la melodía (‘Contradiction’), de la letra (‘By Your Side’, sobre el envejecer de nuestros mayores) o de ambas (‘Breaking Apart’ habla de no tener miedo a encarar lo desconocido).
SPELLLING ha publicado recientemente su nuevo disco, ‘Portrait of My Heart’, un trabajo muy diferente a ‘The Turning Wheel‘ (2021) y al anterior ‘Mazy Fly’ (2019): lejos de los embrujos art-pop, barrocos y soul de aquellos dos brillantes álbumes, Chrystia Cabral se entrega en ‘Portrait of My Heart’ completamente a las guitarras. En las entrevistas, la de California cuenta que ‘Toxicity’ (2001) de System of a Down es el disco de su vida y recuerda que pasó la adolescencia escuchando Radiohead sin parar. Era inevitable por tanto que terminara escribiendo un disco como este. JENESAISPOP pudo hablar con SPELLLING hace poco vía Zoom para comentar el contenido de este nuevo proyecto.
¿Qué música escuchabas de pequeña?
Cuando era niña escuchaba a Otis Redding, Curtis Mayfield, Donny Hathaway y soul pop como Erykah Badu, D’Angelo… Mis padres escuchaban rock clásico, pero en casa había música de todo tipo. Desde pequeña escuchaba cosas poco convencionales. Ya de adolescente era una alt kid, y mis amigos me descubrieron a System of a Down: fue mi primer grupo favorito, me volví loca con ellos. También me encantaban Muse, Radiohead, sobre todo ‘In Rainbows‘, que lo escuché sin parar; Blonde Redhead… Ese tipo de art rock que mezcla géneros.
¿El sonido rock del disco responde a que las letras son más directas que nunca?
Sí. Después de ‘The Turning Wheel’ tuve una crisis existencial. Mis ambiciones estaban demasiado atadas a lo que hago, y viví como una especie de nacimiento de una nueva identidad. Durante la adolescencia, muchas veces sentí que no encajaba. Cuando me mudé a Berkeley, por primera vez sentí que pertenecía a un lugar. Pero al empezar a navegar la industria musical, tuve una tercera crisis de identidad. Siento que encajo… pero no sé exactamente dónde. Creo en mí misma, pero no sé si el lugar que ocupo en la industria es el que realmente quiero.
¿Percibes que la industria es competitiva?
La estructura de la industria es así. Hay oportunidades, pero hasta cierto punto. Es muy fácil cuestionar constantemente tu mérito y tu valía. Yo me he comparado mucho con otros artistas, y me he preguntado si, al no tener lo mismo que ellos, es porque no soy lo suficientemente buena. Las letras de ‘Portrait of My Heart reflejan lo que escribo en mi diario, hablan de mecanismos que no funcionan, de estrategias que no sirven. Sé que mi camino no es el convencional, que mi destino no está en seguir ese molde, y cuanto más consciente soy de eso, más valoro mi arte. Estoy muy agradecida a mis fans: algunos son muy devotos y leales, y sé que escuchan mi música porque realmente les importa.
La industria ahora mismo premia el nicho, ¿no? Pienso en Ethel Cain, por ejemplo.
Ethel Cain tiene la fortaleza de ser auténtica consigo misma y con lo que hace, sin intentar complacer para ser más popular. Está usando ese crossover de una manera muy interesante. En su último álbum no jugó según las reglas del manual: es una artista de verdad, no solo una entertainer. Y es importante hacer la distinción, porque no son la misma cosa.
«Siento que encajo… pero no sé exactamente dónde. Creo en mí misma, pero no sé si el lugar que ocupo en la industria es el que quiero»
Cuéntame sobre ‘Alibi’. Te inspiraste en Liz Phair.
A veces escribo canciones pensando que las estoy escribiendo para otra gente. Y esta pensé que la estaba escribiendo para Liz Phair. La compuse al piano, pero cuando la pasé a guitarra empezó a sonar muy agresiva, y me la imaginé a ella interpretándola, porque tiene esa actitud hostil, pero con humor. Tiene ese tono sarcástico, como si la broma fuera sobre todos nosotros. Creo que el humor forma parte de mi vida diaria. Soy una persona bastante goofy, y creo que eso se nota en mi música y en las fotos (ríe). En la vida real me encanta el humor. Me gusta escuchar monólogos, porque con una broma puedes mostrar una verdad que no podrías decir de otra forma. Las letras de Liz Phair son así: poéticas y directas. Quería hacer una canción de ese estilo. Rollo pop punk, Paramore…
¿Cómo introduces el humor en tu música?
En ‘The Turning Wheel’ hay campiness, teatralidad… porque algunas canciones son ridículas y dramáticas a propósito. ‘Boy in School’ dura como ocho minutos, es casi masoquista. Cuando la escribí pensé “¿Por qué me hago esto? ¿Y por qué se lo hago a la gente?” (ríe). Me gusta recurrir al humor, pero a veces me pregunto si ese humor se entiende o si pasa desapercibido. ‘Emperor with an Egg’, para mí, es un auténtico cachondeo.
En ‘Portrait of My Heart’ cantas «I don’t belong here». ¿Es tu ‘Creep’?
No lo busqué específicamente, pero estoy segura de que ‘Creep’ ha sido una influencia, aunque no haya sido intencionado. Pero me gusta que sea así. En el instituto escuchaba Radiohead todo el tiempo, y es inevitable que esa influencia se note en mis canciones.
Creo que las canciones dialogan entre ellas.
¡Absolutamente!
Toro y Moi está en el disco, en ‘Mount Analogue’. ¿Cómo os conocisteis?
Vive en Bay Area, como yo. Su estudio está a dos pasos de mi casa. Su música me ha obsesionado durante años. Antes de dedicarme a la música, sobre el año 2012, cuando era universitaria, trabajaba de recepcionista en el Museo de Arte de Berkeley, y Chaz (Bear) frecuentaba la cafetería. Recuerdo verle una vez y volverme loca (ríe). Escuchaba ‘Underneath the Pine‘ todo el rato, era mi banda sonora de la época. Una vez entró a la cafetería y le saludé. Dudo que se acuerde.
Y de ahí os hicisteis colegas.
Me inspira su capacidad para conseguir que los instrumentos suenen orgánicos y artificiales al mismo tiempo. Después de ‘The Turning Wheel’ él y yo conectamos por redes sociales y ambos coincidimos en el parque canino paseando a nuestros perros. Esa fue la primera vez que hablamos realmente en persona. Le conté que estaba trabajando en nueva música y le propuse colaborar en una canción, y así pasó. Fui a su estudio, me enseñó su último disco antes de que saliera, yo le mostré el mío, nos dimos feedback mutuo. Fue un sueño hecho realidad.
¿Realmente este disco iba a ser doble?
No sé si puedo penetrar la audiencia mainstream con la música que hago. No sé ni siquiera si es lo que quiero, o si es mi destino. Pero sé que muchos artistas a los que admiro me dicen que escuchan mi música. Eso me hace sentir muy validada. Con Chaz me pasó. Brandon de Turnstile dijo en una entrevista que escuchaba ‘Little Deer’ y después el grupo me propuso girar con ellos. Pat McCrory de Turnstile toca la guitarra en ‘Alibi’. Yo nunca iría tan lejos de decir a un artista que escucho su música si no lo hago, ¿sabes? Después, el éxito de mi colaboración con show me the body, ‘Magnum’ me hizo plantearme cosas. Pensé que hacer un disco de colaboraciones era un paso natural, pero al final no se ha dado.
Anthony Fantano de The Needle Drop le plantó un 10 sobre 10 a ‘The Turning Wheel’. No pasa muchas veces. ¿Te impactó de alguna manera?
No sabía que eso iba a pasar, recuerdo despertarme después de que publicara el vídeo y que empezaran a seguirme miles personas de golpe. Empecé a recibir cientos de notificaciones en el móvil y me asusté, pensé que algo malo había pasado (ríe) No sabía la influencia que tenía Anthony Fantano hasta ese momento. Croe que Anthony hace un buen trabajo honorando sus opiniones y poniendo el foco en los artistas de la manera adecuada. Su fanbase es interesante, en los conciertos sé cuando un fan viene de Anthony Fantano. Lo veo en sus ojos (ríe) Hacen muchas preguntas, algunas muy específicas. Aprecio mucho que vengan.
Mucha gente de su fanbase es muy joven, probablemente chicos adolescentes. Da la impresión de que le admiran.
Es como una figura paterna.
Cuco está en su mejor momento. Sobrio, inspirado y preparado para entregar ‘Ridin’, su nuevo disco, el próximo 9 de mayo, el artista de 26 años (sí, todavía es así de joven) se aleja del bedroom pop narcótico que siempre le ha caracterizado para recorrer caminos más orgánicos. ‘My 45’ es uno de los mejores singles de su carrera y la Canción del Día de hoy.
Omar Banos lanzó su primer disco con 18 años y realmente no ha pasado por grandes cambios artísticos durante su trayectoria. En parte, porque la fórmula de canciones como ‘Lo Que Siento’ o ‘Do Better’ es súper efectiva. En ‘Fantasy Getaway’ (2022), sus composiciones cobraban más complejidad, pero seguía atado fuertemente a su psicodélico estilo.
Todo cambia con la llegada de ‘ICNBY’, ‘My 45’ y ‘Phases’, los geniales adelantos del quinto y próximo disco de Cuco. Este mantiene su gusto por las melodías de la escuela del doo wop y el soul, a la vez que sustituye todo tipo de secuencias o sonidos digitales por instrumentos reales, casi de una manera orquestal, para sonar más fresco que nunca.
Con las geniales trompetas que adornan los tres temas, es imposible no pensar en la herencia musical mexicana del joven artista. Justamente son estas las que dan la bienvenida al oyente en ‘My 45’, el más inmediato de los singles. Cuco le dedica la canción a su pareja, a quien identifica como una pistola: «Sabes que es peleona / Por mí mataría a alguien», canta en el primer verso.
Este tema también marca el regreso de Jean Carter, que regala en esta ocasión un juguetón verso. Este aparecía en ‘Bossa No Sé’, una de las canciones más celebradas del universo Cuco. De hecho, llegó a ser una de las influencias de C. Tangana para crear el sonido fusión de ‘El Madrileño’. Él mismo la incluyó en la playlist que acompañó la salida del disco en su momento.
Chris Martin, vocalista de Coldplay, ha anunciado que padece depresión y ha compartido una serie de recomendaciones para ayudar a quienes también enfrentan esta enfermedad a aliviar sus síntomas. Entre ellas, Martin sugiere escuchar la música de Jon Hopkins, que le parece «psicodélica e increíble». Hopkins colabora con Coldplay desde hace años.
«Últimamente he notado que algunas personas, incluyéndome a mí, están lidiando con la depresión», comunica Martin en un vídeo publicado en Instagram. A continuación, Martin comparte las acciones que él toma durante la gira de Coldplay para sobrellevar la enfermedad.
Además de escuchar música, Martin recomienda practicar la «escritura libre», que consiste en que «escribas todos tus pensamientos durante 12 minutos y después los quemes y los tires», y recomienda ejercitar la «meditación trascendental». Además, aconseja probar la propiocepción, que es «una especie de movimiento corporal que ayuda a equilibrar el cerebro». Cuenta que existe «un método llamado Costello, que es muy útil especialmente para jóvenes con TDHA, autismo y cosas así».
Martin, además, recomienda dos obras de literatura y cine, el libro ‘El enfoque del oxígeno’ de Patrick McKeown, que explora las técnicas de respiración del Método Buteyko, y la película ‘Sing: ¡ven y canta!’.
Las sugerencias de Martin pueden servir de ayuda para todo aquel que padezca depresión. Hopkins, por cierto, participa en el último álbum de Coldplay, ‘Moon Music‘.
Dos meses después de la muerte de Michelle Trachtenberg, se ha confirmado que la actriz falleció por causas naturales, debido a complicaciones de diabetes mellitus, según ha informado este miércoles un portavoz de la oficina del médico forense de Nueva York a CNN.
La muerte de Trachtenberg conmocionó al mundo debido a su juventud, pues la actriz estadounidense tenía 39 años. Trachtenberg, conocida por sus papeles en ‘Harriet la Espía’, ‘Buffy la Cazavampiros’ y ‘Gossip Girl’, murió el pasado 26 de febrero en su apartamento de Manhattan.
En un primer momento, la causa de muerte de Trachtenberg se consideró «indeterminada», ya que su familia rechazó la realización de una autopsia por razones religiosas. Dado que no se consideraba sospechosa su muerte, la oficina del médico forense respetó la solicitud de la familia.
Bobby Brown ha enfadado a los seguidores de Britney Spears después de afirmar que Spears «destrozó» su éxito de 1988 ‘My Prerogative’ en su versión de 2004.
Brown ha sido franco hablando con el periodista Shannon Sharpe en el podcast Club Shay Shay: «Britney Spears destrozó la canción. Yo no podía soportarlo», ha declarado usando en inglés el verbo «butcher». Sharpe responde a Brown que él mismo «aprobó» la versión y Brown contesta que lo hizo sin escucharla primero porque «era Britney Spears» y esperaba que Spears le impresionaría.
Brown asegura que aprendió una lección al escuchar el cover de Spears, que «tengo que escuchar la versión antes de aprobarla». Y da a entender que se arrepiente de que ‘My Prerogative’ sea una canción asociada a Britney Spears: «No sabes qué cosas dicen los chavales hoy en día. Algunos dicen unas chorradas… y es mejor que tu canción se mantenga al margen».
Brown también dice que Teddy Riley, con el que ha trabajado en el pasado, produjo la versión de ‘My Prerogative’ de Spears, pero en realidad firmaron la producción los suecos Bloodshy & Avant, artífices de ‘Toxic’.
La versión de ‘My Prerogative’ de Spears fue un éxito en Europa y llegó al puesto 2 en España, una de sus mayores posiciones. La original fue número 1 en Estados Unidos y es una de las producciones pioneras del new jack swing. Es el mayor éxito de toda la carrera de Bobby Brown.
Como era de esperar, el fandom de Britney Spears ha contraatacado acusando a Brown de usar a Spears para mantener su relevancia.
Lorde está dando señales de vida. La artista neozelandesa ha anunciado oficialmente la salida del primer sencillo del que será su esperado cuarto disco. La canción se titula ‘What Was That’ y todavía no tiene fecha de salida, solo un «pronto».
La autora de ‘Melodrama’ ya inauguró hace una semana su cuenta de TikTok con el primer fragmento musical de su nueva era. Todo apunta a que Lorde volverá al pop electrónico en su cuarto disco, sucesor de ‘Solar Power’. En el clip, Lorde aparece grabándose a sí misma mientras camina por las calles de Nueva York escuchando ‘What Was That’, que dice así:
“Since I was 17, I gave you everything / Now we wake from a dream, well baby, what was that? / What was that?”, canta la artista de 28 años.
La revista TIME ha lanzado su selección de las personas más influyentes de 2025. La lista está dividida en seis categorías (artistas, iconos, líderes, titanes, pioneros e innovadores) e incluye los nombres de Demi Moore, Ed Sheeran, Serena Williams o… ¿Snoop Dogg?
No todos los artistas musicales incluidos en la lista se encuentran en la misma categoría. Llama la atención que Ed Sheeran y Hozier sean los únicos que se enmarcan en la categoría de «artistas». Chris Hemsworth está detrás del texto de Sheeran, a quien describe como «una de las personas más bondadosas y con los pies en la tierra que he conocido», además de alabar sus habilidades musicales.
En la categoría de «pioneros» aparecen ROSÉ, integrante de BLACKPINK, y Myles Smith, artista británico que lleva en alza desde el lanzamiento de ‘Stargazing’ en 2024. Shaboozey asegura que Smith es la prueba de que «la música de cantautor sigue viva en la era del Top 40».
También sorprenden las inclusiones de Snoop Dogg, que aparece en la sección de «innovadores», y de Donald Trump, Elon Musk o Milei en la de «líderes». Sin embargo, lo más surrealista en este caso es ver estos tres nombres al lado del de Teresa Ribera, vicepresidenta primera y comisaria de Competencia de la Comisión Europea. A continuación, la lista completa de TIME que nombra a las personas más influyentes de 2025:
Artistas
Ed Sheeran
Scarlett Johansson
Daniel Dae Kim
Kristen Bell
Adam Scott
Rashida Jones
Diego Luna
Nicole Scherzinger
Kristen Wiig
Willy Chavarria
Danielle Deadwyler
Hozier
Miranda July
Branden Jacobs-Jenkins
Mohammad Rasoulof
Annabelle Selldorf
Yoshitomo Nara
Iconos
Demi Moore
Jalen Hurts
Adrien Brody
Gisèle Pelicot
Hiroyuki Sanada
Angeline Murimirwa
David Muir
Raquel Willis
Bobbi Brown
Anthony D. Romero
Yoshiki
Amy Griffin
Léon Marchand
Fatou Baldeh
Líderes
Keir Starmer
Claudia Sheinbaum
Donald Trump
María Corina Machado
Elon Musk
Muhammad Yunus
Howard Lutnick
Tedros Adhanom Ghebreyesus
J.D. Vance
Reshma Kewalramani
Friedrich Merz
Megyn Kelly
Lee Jae-myung
Teresa Ribera
Robert F. Kennedy Jr.
Andrea Vidaurre
Duma Boko
Russell Vought
Javier Milei
Noa Argamani
Mo Abudu
Ahmed al-Sharaa
Titanes
Serena Williams
Ed Bastian
Blake Lively
Lorne Michaels
Simone Biles
Doug McMillon
Miuccia Prada
Percival Everett
Ted Sarandos
Joe Rogan
Lisa Su
Mark Zuckerberg
Bonnie Y Chan
Alex Karp
Jonathan Greenblatt
Stephen J. Squeri
Pioneros
Demis Hassabis
Rosé
Andrew Forrest
Robert Montgomery
Breanna Stewart and Napheesa Collier
Robin Wall Kimmerer
Dario Amodei
Myles Smith
Cordelia Bähr
Julie Burkhart
Liang Wenfeng
Allison Sesso
Tomas Cihlar and Wesley Sundquist
Innovadores
Snoop Dogg
Nikki Glaser
Ma Yansong
Larry Fink
Kwame Onwuachi
Sandra Díaz
Mickalene Thomas
Jon M. Chu
Wendy Freedman
Josh Koskoff
Chutatip “Nok” Suntaranon
Christian Happi
Ismahane Elouafi
Skye Perryman
Tim Cadogan
Richard Thompson
Ni siquiera la versión Premium de Spotify te salva de una caída de la plataforma. Desde hace unas horas, el servicio de streaming por excelencia ha empezado a funcionar de forma defectuosa en todo el mundo. Esto es lo que se sabe hasta ahora.
Hacia las 15:15h de la tarde, más de 40.000 usuarios ya habían plasmado sus quejas en la web Downdetector, indicando una serie de problemas tanto en la app móvil y en la de escritorio como en la página web. Estos problemas afectaban a usuarios de varios países, como España, Brasil, Estados Unidos, Canadá, México, Italia o Alemania.
Lo que encuentran los usuarios al intentar escuchar música es una carga excesiva de los contenidos, derivada de una serie de problemas de conexión al servidor. Según ha indicado la propia compañía, están enterados de lo que ocurre. Así lo han hecho saber en X: «Estamos al tanto de los problemas que hay ahora mismo y los estamos investigando», han tuiteado. Sin embargo, no han revelado la causa de la caída.
We’re aware of some issues right now and are checking them out!
El mar y sus misterios han inspirado numerosas obras musicales de lo más obvio (‘blue‘ de iamamiwhoami) a lo menos (‘Vivian & Ondine’ de William Basinski), de lo más conceptual (‘Sinking of the Titanic’ de Gavin Bryars) a lo más cool (‘Sea is a Lady’ de Toshiki Kadomatsu). En su cuarto álbum, la cantante y ex-estrella de Youtube estadounidense Chloe Moriondo entrega su propia versión del álbum de pop acuático, inspirándose en una dolorosa ruptura.
Dentro de una carrera musical que ha recorrido estilos muy diferentes, del folk (‘Rabbit Hearted’) al pop-punk (‘Blood Bunny’), ‘Oyster’ se afilia a sonidos de club, hyperpop y electrónicos. El tema central, ‘shoreline‘, expone la soledad de la ruptura con sintetizadores muy Robyn y evocadores. Después, los beats pueden acelerarse en la espídica ‘Sinking’, producida por la estrella del internet music Tomcbumpz, autor de la maravillosa ‘c u never‘; o flotar como en esa fantasía al vocoder que es ‘Pond’, puro Imogen Heap.
Por el camino -o la travesía-, ‘Oyster’ cuida su faceta conceptual tanto desde el aspecto musical como del narrativo. Las letras hablan del agua, el poder del mar, el océano azul, de «flotar debajo de la presión», de surcar los «siete mares» o de «congelarse» con una sola mirada. A veces la recurrencia del léxico marino suena forzada, pero el sentimiento de Moriondo prevalece. Y los sintetizadores pueden sonar tan cálidos y envolventes como sumergirse en un baño caliente, o tan fríos y paralizantes como congelarse en el mar o a la intemperie marina.
Sobre todo, desde esta «ostra» se abre paso una compositora sorprendentemente hábil para escribir ganchos de pop y moverse con soltura por diferentes estilos. También se nota que ha estudiado a sus ídolos pero que no busca imitarlos. Puede parecer calculado el paso de un estilo a otro, como si buscara el apoyo de distintas playlists; y al repertorio le falta algún single deslumbrante más, pero tampoco se hunde nunca como el Titanic. Además, Chloe Moriondo cuida con esmero cada composición pasando del hyperpop al pop-punk y de ahí a la balada electropop, mientras emocionalmente se abre en canal.
El disco deja un reguero de buenos temas. ‘Abyss’ es un más que digno «momento a lo Dua Lipa«, como ha reconocido ella misma, por su estilo disco-pop; ‘Weak’ demuestra la influencia de Tinashe, que ya tenía un disco llamado ‘Aquarius‘ (2014), en la música de Chloe Moriondo; ‘Raw’ pasa cómodamente por el breakbeat, ‘Oyster’ es un caramelo pop-punk de los que tan bien se le dan y la vengativa ‘Hate It’ es un temazo electro-grunge que debería viralizarse.
La propuesta de Chloe Moriondo puede no ser la más rompedora de todas dentro del profundo océano del pop hecho en internet, pero sí es una de las más asequibles. Que -por ejemplo- Oklou sea una visionaria musical no resta mérito ni mucho menos potencial comercial a la música de Chloe Moriondo, que en ‘Oyster’ sirve de punto de unión entre el pop narrativo de Taylor Swift y Olivia Rodrigo, los futurismos hyperpop de Charli xcx y PinkPantheress y las guitarras que ella misma ha reivindicado a lo largo de su carrera.
Cuando Delaporte visitaron el podcast REVELACIÓN O TIMO con motivo de su disco anterior, ‘Aquí y ahora’, mantuvimos una charla que tuvo mucho de terapéutica. Sandra se sinceró sobre sus problemas de salud mental y los motivos que la llevaron a cambiar Madrid por el monte. Aquella charla, junto a otras entrevistas anteriores, creo que produce en este nuevo encuentro un clima de confianza que hace al dúo deslenguarse sobre su evolución. Tiene sentido porque la salud mental está orquestando la deriva artística de Delaporte, cuyo disco ‘DÉJATE CAER’ es tan bailable como espiritual. El dúo bromea con el uso de palabras como «hierbada» o «yogui», pero está claro que se encuentra en otro lugar en el que no estaba antes. Esta es, pues, la entrevista más «hierbas» jamás publicada por JENESAISPOP, pero todos aquellos que estéis en un proceso o en un viaje hacia vuestro interior, encontraréis algo que os sea de utilidad.
Delaporte actúan esta semana en Benicàssim dentro de la programación de SanSan, exactamente les toca el sábado 19 de abril, día de Amaia, Franz Ferdinand, Lori Meyers o Alcalá Norte. También tienen una fecha que siempre es importante para ellos: el 21 de noviembre en La Riviera de Madrid. Resto de festis y recorridos, en su web.
Este último disco, ‘Déjate caer’, yo lo he entendido como una segunda parte del anterior, ‘Aquí y ahora’. ¿Es así?
Sergio: «Al principio, efectivamente, iba a ser un «Aquí y ahora, volumen 2″. La idea era sacar una versión extendida con algunos temas que se habían quedado en el cajón, pero luego acabamos teniendo muchos temas totalmente nuevos y hubo un desacuerdo».
Sandra: «Yo estaba enfadada, no podía ser ‘Aquí y ahora 2’. Las canciones no estaban compuestas de antes, excepto ‘Happy Meal’, que yo me enfadé mucho porque querría haberla sacado en cuanto la terminé…»
¿Cuál sería la diferencia entre los dos discos?
Sergio: «El punto vital en el que estamos no es el mismo. En ‘Aquí y ahora’ estábamos empezando a encontrar, vamos a decirlo así, «el mundo espiritual». Cuando empiezas a encontrarte con la espiritualidad, te construyes un discurso mental, que es muy válido, pero que sigue siendo mental. Luego llega un momento en que te das cuenta y te dices: «cuidado, que eso es el mismo ego de antes, solo que ahora disfrazado de gurú».
Sandra: «Sigues siendo igual de estúpido. Con las mismas taras (risas)».
Sergio: «Entonces, dices: «realmente lo que tengo que hacer es aceptar todo lo malo, todo el miedo, la vulnerabilidad y las cosas a las que no me quiero enfrentar». Yo llevaba como un año intentando trascender el ego, superar el ego, y me he dado cuenta de que en realidad tengo que usar el ego, aceptar todo lo que es nuestra identidad para poderla trascender».
Sandra: «‘Aquí y ahora’ era más la celebración de la vida, salir de un proceso muy oscuro, y era muy luminoso. Pero no era realista porque había lucha con esas partes de mí que no me gustaban, que no quería ver, que decía «esto es feo», la híper exigencia. Me hago sufrir un montón y quiero llegar a todo y ser perfecta para todas y para todes y como que no llego, no llego, no llego… Y eso me genera mucha lucha, mucha frustración, mucha rigidez. Me lo ha generado toda mi vida el intentar ser perfecta, el intentar tener éxito. Un poco ya también la vanidad de las redes, el perfil de «tengo que ser esto para gustar, para que me quieran». Hacer el amor con esa parte de ti que tanta infelicidad te ha generado es muy difícil, requiere mucho amor y requiere dejarse caer. Y por eso se llama así el disco».
¿Y eso no estaba ya en el disco anterior?
Sandra: «No, está en este. En el disco anterior había algo de «¡he visto la luz, ya estoy curada, yuhu! Voy por la calle y me como el mundo». Pero me di cuenta de que no me comía el mundo. En ‘Cielo ardiendo’, por ejemplo, se ve que bien, bien, no estoy. Hablo de que me he anestesiado y no solo yo: a mi alrededor veo que todo el mundo está muy anestesiado, que no siente sus miedos y que se pasa la vida anestesiándose con redes sociales, mirando Netflix, quedando con gente cuando no lo necesita, solo por quedar con gente, llenando el tiempo, gastando energía, gastando tu ser, buscando tener dinero, buscando el reconocimiento, buscando que tu pareja jamás te abandone… Vivimos desesperados, es muy cansado todo… Escribo de ese dolor, y ‘Somos diablos’ igual: es que tengo un diablo dentro, es que no lo aguanto, no lo soporto. El ansia de tener una máscara: «dime cómo quieres que sea, que voy a ser así para gustarte y no honrarme nada». De ahí salió ‘Déjate caer’, cuando me di cuenta de todo esto».
Sergio: «‘Déjate caer’ es dejar de luchar contra las cosas que no te gustan de ti. Antes de Delaporte musicalmente me escondía detrás de una música mucho más tranquila. Hasta literalmente en los conciertos me escondo detrás de los cacharros porque los ratos que puedo ir delante a bailar, me cago (risas) Y eso lo he forzado. Creo que en La Riviera, esta última, ha sido el primer concierto de mi vida donde no me he forzado, donde no he hecho un papel. Antes hacía un papel, incluso la manera de moverme, la manera de bailar. Y no sé qué pasó el día de la última Riviera. Ese día, además me levanté un poco de bajón, pero hubo algo que hizo clic».
Sandra: «Jamás, nunca, jamás, Sergio había bailado tanto conmigo en un escenario. Jamás, nunca».
«‘Déjate caer’ es dejar de luchar contra las cosas que no te gustan de ti»
Una terapia psicológica normalmente son bastantes años. ¿En qué punto estáis? ¿Hacia dónde creéis que vais?
Sergio: «Hay muchos tipos de terapia y una cosa de que los dos nos hemos dado cuenta, es que no compartimos terapeuta, pero sí filosofía».
Sandra: «Compartimos una terapeuta durante varios años, Rosario».
¿No está contraindicado como pareja artística?
Sergio: «No, depende. Antes era un tipo de terapia muy cognitiva. Vas entendiendo las cosas pero luego bajarlas, como tú dices, lleva años. Tú puedes entender claramente qué te pasa con tu padre, pero dices «¿y ahora qué hago con eso?»
Sandra: «Te sigues sintiendo igual».
Sergio: «Ahora hago un tipo de terapia que es humanista, pero más allá de eso, luego hacemos sesiones que son mucho más con el cuerpo, no cognitivas. O técnicas para alterar tu estado de conciencia como de «breath work», meditación, toda una serie de cosas que traspasan la parte racional y que bajan directamente al cuerpo. Tu cuerpo lo sabe todo y cuando conectas con eso es como que te pasas 10 pantallas en una sesión».
Sandra: «Pero te tienes que dejar caer. Tienes que quitar toda la resistencia, tu mente intenta protegerte, pero te protege mal y te protege con maneras de vivir muy disfuncionales. Sientes miedo y te distraes.Yo he estado mucho tiempo con cognitiva. En cognitiva soy un cuadro: unas peleas, unos rollos mentales… lo de siempre, que si la exigencia, la perfección. Y me he dado cuenta de que el cerebro no funciona con lenguaje. Tú le puedes decir mil veces «tienes que pensar A», que no lo va a hacer. Solo funciona con experiencias, con las experiencias que se sienten emocionalmente. Si toda tu vida mantienes el miedo y haces conductas evitativas de ese miedo, vas a estar preso y metido en esa caja toda tu vida. Seguir con cognitivo, ahora mismo para mí, en el punto en el que estoy, es hacerme daño. Mi psicóloga me echó de su terapia, me dijo: «te echo porque estás utilizando todo lo que te digo para hacerte más daño. Así que no podemos seguir juntas, búscate otra terapia que te haga sentir, porque tienes miedo a sentir».
«Mi psicóloga me echó de su terapia, me dijo: «te echo porque estás utilizando todo lo que te digo para hacerte más daño»»
Qué fuerte.
Sandra: «Me echó. Me ha venido muy bien porque he empezado otro tipo de terapia del cuerpo, mucho más conectada con otros planos, con otras cosas, experiencias que no conocía, que mi mente muchas veces dice «esto no os va a servir de nada, te lo estás inventando, esto es una hierbada». Ojo, pues estoy conectando».
Sergio: «La mente llega después, es al revés. Con la conductual, lo de la mente lo tienes que bajar. En ese caso te salen emociones que no sabes ni de dónde vienen y luego la mente llega a la semana después y dice: «Ah, eso era, por eso me sentía así. Por eso me dolía el tobillo».
Sandra: «Yo estoy conociendo el amor incondicional. He podido ver cosas en mi familia que tenía muy tapadas, porque estar con ellos me reavivaba heridas. Toda mi vida sin mirar a los ojos a mi padre y poder comunicarle sin vergüenza que estoy asustada o que algo me hace sentir vulnerable o cosas así. Reexperimenté con «breath work», que también es un poco hipnosis, mi nacimiento, que ya esto es megahierbas, ¿vale? Yo no sé si esto lo vas a meter en la entrevista, pero experimenté cómo me miraba mi madre al nacer y el amor que había cuando no era nada, era un saco de carne, cuando no tenía que ser alguien, no tenía que justificar mi existencia. Encima nací bastante pocha, porque nací antes de tiempo, pesando muy poco… Toda mi vida he estado intentando justificar mi existencia, y de pronto he conectado, he experimentado algo diferente a eso».
Todo esto que me contáis está relacionado con el tipo de electrónica que hacéis, ¿verdad?
Sandra: «Total».
Hablamos de que hay cosas que llevan sus tiempos, pero el disco sí que tiene como una urgencia por llevar las cosas a una solución más rápida. ¿Hay una relación entre esta cantidad de beats y esa urgencia de alguna manera?
Sergio: «Nunca lo había visto».
Sandra: «Sí que es verdad, joder, eres la primera persona que lo dice. Ojo a tu sensibilidad porque hay urgencia y tienes toda la razón porque la necesito porque no estoy cómoda cuando siento miedo. Nadie lo está».
Sergio: «Habrá que hacer un disco que se llame «Déjate caer de verdad» (risas)».
Sandra: «También he descubierto la importancia de honrar las emociones que te vienen. Por ejemplo, si siento ira, coger algún palo y reventar algo o irme a bailar techno o ponerme techno fuerte e irme a correr a tope. Hay que sacarlo porque si no lo sacas se empieza a liar esa energía y empieza a haber ahí confusión y se lía. Esta música y el techno en general para mí es una vía para expresar esas emociones y a la vez es una vía rápida y urgente como un salvavidas. ¿No te pasa a ti que a veces no te aguantas?
Es complicado, es muy largo, ya te lo cuento otro día.
Sandra: «A mí me pasa a veces que no soporto, no lo puedo sostener, me sobrepasa. Y por ejemplo, escucho ‘La ternura es simple’ y de pronto lloro. Y cuando lloro es cuando me rindo. Y digo «me permito sentirme asustada» después de haber estado ahí sosteniéndolo en lucha tensa, tensa, tensa…»
¿Lloras bien o lloras mal? ¿Por qué dices que te rindes?
Sandra: «Lloro de compasión, de «joder, no he sabido abrazarme», o «qué mal me he portado conmigo». Pero me rindo».
Sergio: «Cuando te rindes, se va. Pero te tienes que rendir de verdad, no vale rendirte para que se vaya. Cuando estuvimos los dos con fiebre, hubo una noche que ya no podía más, y mi cuerpo quería rechazar el estar mal. Te pones todo tenso. Y hubo una noche que ya no podía más y entonces decidí, me senté y empecé a respirar y a pensar en todos los dolores que tenía. Me decía a mí mismo: «Bienvenido, dolor. Esa es tu casa, quédate todo lo que necesites». Lo repetí hasta que de verdad lo pensaba y cuando de verdad lo pensaba se iba. Pero luego lo intentaba hacer con otro dolor, pero claro, lo hacía para que se fuera y no se iba. Solo cuando de verdad me rendía, se iba».
Parte de la música electrónica de los 90 era muy espiritual. ¿Al final creéis que el techno cura? Por lo menos como Delaporte, como artistas, os ha renovado.
Sergio: «Creo que las dos cosas siempre van juntas».
Sandra: «Me estoy imaginando aquí como una major diciendo «tenemos que renovar la imagen». «Nos han dicho los influencers de 18 años que…» (risas) No, fue que a mí me pilló una época muy mala y era todo muy inconsciente, la verdad, sobre todo al principio. De hecho, fue una época en la que yo incluso pensé en dejar la música, porque lo que yo hago es sufrir respecto a las expectativas que tengo, al resultado que espero. Me sigue pasando: entonces era más inconsciente, ahora es más consciente. Nos pusimos enfermos justo cinco días después de sacar este disco. Cuando tuve que cancelar todas las entrevistas, en realidad estaba en una lucha de «estoy decepcionando». Lo asustada que estaba, la frustración que tenía. Que me quería forzar, no me podía levantar a hacer pis, ¿vale? Pero me quería forzar a ir a Sevilla. No podía decir que no».
Entonces no te ha curado el techno…
Sandra: «A ratos. El techno para mí es una manera de expresar emociones que me cuesta mucho expresar, en concreto la ira. La ira es algo que siempre me he reprimido mucho porque, por cómo soy, he aprendido a complacer mucho. Dime qué quieres que sea, qué lo voy a hacer. Con mis parejas, con la industria, haciendo canciones antes… Antes estaba muy pendiente del resultado de gustar o no. Antes de sacar ‘Aquí y ahora’, estaba muy cagada porque para mí era una locura sacar eso. Era muy distinto, era muy arriesgado, era muy violento y muy visceral. No sabía si a la gente le iba a cuadrar. Y estaba muy asustada. Encima todo esto vino con un momento vital en el que Sergio y yo estábamos un poco más en crisis porque estábamos en momentos distintos, yo estaba ya a tope con la espiritualidad y creativamente fue un boom. Empecé a abrazar la creatividad a través de las raves, a través de irme a bailar. Sentí ahí algo bullendo muy fuerte y me explotaba el corazón, lo tenía que sacar, pero él eso no lo estaba viviendo. Hubo un choque musical, de gustos, vital y todo era muy confuso, muy raro, pero necesitaba sacarlo. Y dije: «mira, me da igual lo que la gente piense, me da igual que sea violento, me da igual perder». En la oficina decían «es que esto no es nada pop, esto no va a funcionar». Pero era genuino al menos, y yo tenía que sacar esa tensión acumulada».
¿Has hablado de la ira como una cosa positiva, ¿puede ser?
Sergio: «Válida. La cuestión es no considerar emociones positivas y negativas. Las dos son válidas».
Para mí la ira es una cosa súper masculina para mal que me quiero quitar…
Sergio: «Pero para mí era ira reprimida. Siempre he tenido problemas de represión de ira. De hecho, a mí toda la gente que me conoce me dice: «tú eres tan tranquilo, nunca te he visto enfadado». Y para mí eso era una ventaja, porque yo tenía esa misma idea. Pero este año me he dado cuenta de que reprimir ira durante 42 años te crea problemas, empezando por el estómago. Siempre he tenido acidez de estómago y ahora por primera vez la estoy superando. Tengo que conectar con toda esa ira y sacarla. Claro, no la saco yendo a pegar una abuela en el callejón. La saco de una manera sana y lo curioso es que cuando la saco lo que me sale nada más haber vomitado esa ira es un montón de amor. Estuve haciendo en terapia un trabajo sobre la fuerza y la ternura. Yo me muevo mucho más en la ternura, es mi zona de confort, incluso con las parejas. De hecho, yo no me siento a gusto con mi parte masculina y solo lo he descubierto este año, pero me he dado cuenta realmente bajando al cuerpo y haciendo cosas solo con el cuerpo, que en el fondo no existe distinción entre fuerza y ternura, que incluso mi ternura sin la fuerza es una mentira, igual que la fuerza sin la ternura es una mentira. Solo cuando integras esas dos partes, sale el amor de verdad y sale algo genuino con lo que te sientes total, completo, te sientes uno. Pero para eso tienes que validar toda una serie de emociones que dependen de cada uno. Para mí son las emociones tipo ira y que son oscuras. Luego hay gente que al revés, que se escuda detrás de eso y no valida su vulnerabilidad, no valida el ser más tierno, no valida la otra parte.
Habéis mencionado dos veces ser un poco «hierbas».
Sandra: «Piensa, Sebas, que hacemos música, somos artistas. Y estamos hablando de nuestras emociones toda la entrevista. Que no hemos hablado de lo típico que hablan los artistas…»
Es porque habéis estado en nuestro podcast y ya os conozco, pero de verdad creo que habéis hecho marca, entre comillas, con todo esto.
Sandra: «Te estamos hablando de cosas que para mí son abrirme el pecho. Me he dado cuenta de que la única manera en la que puedo ser más genuina es abriéndome, hablando de lo que me entusiasma».
¿En vuestro entorno han entendido este viaje?
Sergio: «Yo siempre he tenido mucho valor sobre la amistad y siempre he pensado que además la amistad es algo que hace falta construir, que hace falta tiempo para tener amistades fuertes. Pero este año estoy conociendo gente que enseguida me siento conectado y como si fuéramos amigos de toda la vida. Tampoco he cambiado muchas amistades, pero sí que hay personas que naturalmente se dejan de ver».
Sandra: «Me está pasando al contrario. Yo toda la vida he sido hiperextrovertida, sociable, sociodependiente. Porque era mi manera de ser. «Baja a tomarte una pizza». «Sí, ahora mismo». Cuando vivía en Madrid tenía muchos amiguis, colegas, gente. Y ahora tengo menos amigos, los cuento con los dedos. Me gusta mucho mi soledad, porque vivo sola en el monte y elijo mucho con quién quedo, cuándo y por qué».
Habladme de la producción del disco, por ejemplo, el modulador vocal de ‘Techno rico’. ¿Habéis buscado que tenga unidad? ¿Os imagináis un disco entero más hyper pop?
Sandra: «El plugin se llama Little Alter Boy».
Sergio: «De Sound Toys. Nunca hemos trabajado pensando en el disco. En general ningún disco».
Sandra: «Ni siquiera en el género».
Sergio: «Siempre hemos trabajado pensando tema por tema. Y luego la coherencia la vemos al final. Hay veces que nos raya que no hay mucha coherencia entre ‘Techno rico’ y ‘Rendición’. Pero al final vemos que sí hay coherencia».
Sandra: «Sí, todo forma parte de lo mismo. Hay temas que han salido de ideas en casa, produciendo en un avión, ideas completas o a medias que le pasaba a Sergio. ‘Rendición’ era un tema que era para el proyecto de Bruno [NdE: proyecto paralelo de Sergio], pero de pronto le dije a Sergio: «Esto es Delaporte. Lo exijo».
Sergio, tú te bebiste un vaso de agua en nuestro podcast cuando Sandra se puso a explicar su proyecto en solitario, Alexandra.
Sergio: «No, lo de Alexandra fue casi una propuesta mía. Cuando vi que Sandra iba por un tipo de techno, le dije: «mira Sandra, yo me bajo de ese carro porque no es santo de mi devoción» y de hecho lo veo una cosa súper sana. Soy pareja abierta musical».
Sandra: «Practicamos el poliamor musical. Hay bastante producción mía y producción de él, como muy entera. Hay mucho de Sergio en algunos temas como en ‘Dopamina, golondrina’ o ‘Rendición’. Y mucho mío, como por ejemplo en ‘Cagarla’, que salió entera del tirón, ‘Happy Meal’ o ‘Cielo ardiendo’.
Sergio: «Y luego hay temas ping-pong».
«‘Rendición’ es haber hecho el amor realmente juntos»
¿Hay algo que pueda ser la piedra angular del siguiente disco?
Sandra: «‘Rendición'».
Sergio: «En ese tema hemos sentido una verdad».
Sandra: «Nos hemos conectado mucho más los dos, porque hemos estado un tiempo intentando encontrarnos estilísticamente y a nivel compositivo, porque yo he sido muy independiente y de alguna manera he empujado un poco a Sergio. Eso nos ha generado nuestras dificultades y ahora nuestros encuentros. Y yo creo que el camino compositivo de los siguientes discos va hacia ‘Rendición’. No digo que vaya hacia ese estilo, sino hacia el amor y la conexión. ‘Rendición’ es haber hecho el amor realmente juntos. Mientras que los otros son más ping pong, más «te lanzo una idea», «pum», «venga, más».
Pero ya habéis hecho el amor antes, ¿no?
Sandra: «Sí, pero esta es diferente».
Sergio: «Esto es como hacer el amor tántrico».
Sandra: «Lo otro igual era más mecánico. Sí. ¿Vale? Pim pam».
Sergio: «Sí, un polvo. Me parece maravilloso».
Sandra: «Y esto es el típico polvo que dura siete horas y que te estás ahí, la vida, y te entretienes en mirar cada detalle».
Sandra, he leído que has estado 40 horas sin dormir en una rave, sin beber, sin drogarte. No dormir es malísimo para el cuerpo también, ¿no? O sea, al final no coordinas.
Sandra: «Mira, yo acabé metida en el mar. Me quedé ahí flotando».
No sé si es muy buena idea…
Sandra: «Ya. No lo recomiendo, pero me lo pasé muy bien. Entras en otro estado de conciencia. El pedo del sueño: ojo con ese pedo, nadie habla del pedo del sueño, pero hay mucha gente que cree que va drogada y no es cierto: tiene sueño. Es malísimo, de verdad, sí. Estás más irascible y todo te molesta, totalmente de acuerdo. ¿Por qué lo he hecho? Pues, pues…»
Sergio: «No estoy de acuerdo. No descansar es malo, pero no dormir no es necesariamente no descansar. Hay estados de conciencia que normalmente no practicamos y que a lo mejor son los que Sandra consigue alcanzar cuando baila techno, en los que realmente aunque no duermes estás descansando. Y hay gente que lo ha investigado. ¿Sabes lo de las ondas en las que se queda el cerebro? Alfa, beta, gamma… Por ejemplo, el samadhi, que son estados de conciencia a los que llegan ciertos yoguis que se les ponen los ojos así, no están durmiendo, están muy activos, pero descansan más que durmiendo».
Sandra: «Es verdad que hay días que has dormido un montón y que estás fatigado como con el cerebro denso, confuso, y da igual lo que duermas, que no es suficiente, que tienes una fatiga vital, un cansancio existencial, por favor, qué sopor».
Sergio: «Cuando estás enamorado al principio de conocer a alguien, te enamoras muchísimo, te enchochas y ahí puedes estar sin dormir un montón de tiempo y te sientes bien, con energía».
Drake está a punto de conseguir un nuevo single número 1 en Estados Unidos gracias a ‘Nokia’, uno de los temas incluidos en su último mixtape con PARTYNEXTDOOR, ‘$ome $exy $ongs 4 U‘. ‘Nokia’ acaba de posicionarse en el puesto 2 del Billboard Hot 100, pero en el top 50 de Spotify de Estados Unidos ya se ha colocado en el primer puesto y superado las escuchas del que era el tema más escuchado, ‘luther‘ de Kendrick Lamar y SZA.
En la lista de Billboard Hot 100, el actual single número 1 es precisamente ‘luther’, que lleva ocho semanas en esa posición. Solo estos días se ha estrenado su videoclip.
El triunfo de Drake será evidentemente simbólico además de comercial, pues representará el contraataque de Drake a Kendrick Lamar a casi un año de su histórico beef. Se considera a Kendrick ganador de esa trifulca gracias al éxito de ‘Not Like Us’, que llevó hasta la Super Bowl, pero ahora es momento de que Drake se imponga.
Lo hará gracias a la que ya era la mejor canción de su último mixtape. Así la describía mi compañero Gabri Carey, que ya anticipaba el éxito de ‘Nokia’: «Los highlights del disco, y potenciales hits, son dos canciones que no tienen absolutamente nada que ver con el resto de temas. ‘NOKIA’ muestra a un Drake divertido y que no se toma en serio pasándoselo bien en un colorido beat. Esta sí podría levantar una fiesta. Y ‘DIE TRYING’ es una canción única en la carrera del canadiense». ‘Nokia’ y ‘Die Trying’ son exactamente las dos canciones más populares del álbum en plataformas.
‘Nokia’ será el 14º single número 1 de Drake en Estados Unidos, después de ‘One Dance’, ‘God’s Plan’, ‘Nice for What’, ‘In My Feelings’, ‘Toosie Slide’, ‘What’s Next’, ‘Way 2 Sexy’, ‘Wait for U’, ‘Jimmy Cooks’, ‘Slime You Out’ con SZA y ‘First Person Shooter’, a los que hay que sumar sus dos éxitos número 1 con Rihanna, ‘What’s My Name?’ y ‘Work’. Así quedan los 13 singles número 1 de Drake en el Billboard:
‘What’s My Name’ de Rihanna, con Drake (2010)
‘Work’ de Rihanna, con Drake (2016)
‘One Dance’ (2016)
‘God’s Plan’ (2018)
‘Nice for What’ (2018)
‘In My Feelings’ (2018)
‘Toosie Slide’ (2020)
‘What’s Next’ (2021)
‘Way 2 Sexy’ (2021)
‘Wait for U’ de Future, con Drake & Tems (2022)
‘Jimmy Cooks’ (2022)
‘Slime You Out’ con SZA (2023)
‘First Person Shooter’ con J. Cole (2023)
Lido Pimienta ha anunciado recientemente que su nuevo disco, ‘La Belleza’, se pone a la venta el 16 de mayo. En ‘La Belleza’, Pimienta se zambulle en el mundo de la música clásica y lo hace muy bien acompañada de Owen Pallett, que escribe los arreglos del disco. A ambos les une su nacionalidad canadiense y sus victorias en el premio Polaris, el prestigioso premio musical: Pallett lo ganó en 2006 por ‘He Poos Clouds‘ y Pimienta en 2016 por ‘La Papessa‘.
Pimienta ha reconocido que no cuenta con formación en música clásica, pero que su «curiosidad y tozudez» le han llevado a explorar este género, sobre todo a partir de que descubriera la banda sonora de la película ‘Valerie y su semana de las maravillas’ (1970) de Luboš Fišer.
Pimienta ha trabajado en ‘La Belleza’ también con el Coro La Belleza de Barranquilla y con la Orquesta Filarmónica de Medellín. Ambos intervienen en el primer adelanto, ‘Mango’, la Canción Del Día de hoy.
En ‘Mango,’ arreglos de arpa y vientos metales arropan la asombrosa actuación vocal de Pimienta, que apunta a la tradición. En ‘Mango’, Pimienta retrata un momento de felicidad cotidiana mientras le hinca el diente a un mango que le «chorrea en las tetas». El videoclip es poético en su sencillez.
No entraba en mis planes defender el viaje al espacio de Katy Perry, pero cada día tiene más razón Ethel Cain cuando denunciaba que el mundo vive una epidemia de la ironía y que ya nadie se toma nada en serio. Proliferan en internet los memes de Perry hablando de polvo de estrellas y besando el suelo después de llegar a la Tierra reduciendo su experiencia a «cuatro minutos» de viaje espacial, como si viajar al espacio no fuera una experiencia absolutamente brutal que requiere un inmenso coraje. Y dinero en el banco, también, eso no lo niega nadie. Pero no reduzcamos la experiencia de estas seis mujeres a la nada, porque viajar al espacio no es cualquier cosa.
Está claro que la idea de viajar al espacio es menos interesante que antes para el público general. ¿Alguien recuerda que Lady Gaga iba a actuar en el espacio en 2015? El día anterior al viaje de Perry y sus compañeras, la periodista y prometida de Jeff Bezos Lauren Sanchez, la presentadora Gayle King, la científica y activista Amanda Nguyen, la productora de cine Kerianne Flynn y la ingeniera espacial Aisha Bowe, comenté la noticia entre amigos y nadie la conocía. La mejor reacción retrataba a Katy Perry yéndose al espacio a buscar fans de ‘143‘ porque en la Tierra no los encontraba. Pero, en general, a nadie le había impresionado este hecho. Claro, Jesús Calleja ya había ido al espacio dos meses antes y tampoco su travesía importó a nadie, a pesar de que su vuelo, como el de Perry y compañía, también lo lanzó Blue Origin y duró 11 minutos.
Sin embargo, Katy Perry parece estar en el centro de la conversación sobre esta visita a la línea de Kármán. Claro, es una estrella del pop reconocida mundialmente y su papel era exactamente ese, atraer atención a un episodio de viaje espacial cortesía de Jeff Bezos. Su luz -la de su celebridad- ha iluminado al resto de pasajeras a las que probablemente tenías menos ubicadas, incluida Amanda Nguyen, que es una verdadera astronauta, y que tuvo que abandonar su sueño de viajar al espacio después de sufrir una violación. Nguyen ha invertido una década de su vida denunciando abusos y ha logrado cambiar leyes. Ella y Aisha Bowe merecían estar ahí más que nadie.
Sin embargo, el último lanzamiento de Jeff Bezos no es una cuestión de mérito. O no solo exclusivamente. Katy Perry ha merecido realizar este viaje lo mismo que Jesús Calleja. Depende de cómo se mire, probablemente ambos «merecieran» viajar al espacio más que tú y que yo. Perry, en concreto, ha escrito multitud de canciones que han brindado alegría al mundo y dedica su vida a entretener, inspirar, influenciar y aportar color en cada uno de sus conciertos. Su papel en este viaje ha sido demostrar al mundo que el turismo espacial ya es posible y que será una realidad para todos tarde o temprano. Que en unos años dejará de ser solo cosa de ricos, como también dejó de ser cosa de ricos conducir coches, volar en avión, poseer teléfonos móviles, inyectarse bótox o comprar por internet. ¿Se supone que nos tiene que dar igual que una persona de a pie -sea famosa o no- pueda volar al espacio? ¿En serio?
El objetivo de la misión de Blue Origin -una empresa que existe desde hace 25 años y que ha lanzado cientos de cohetes al espacio- es el de realizar una investigación científica. Como mínimo, algo a tener en cuenta. Tanto Gayle King como Asha Bowe han hablado de los beneficios y avances que la investigación espacial genera en la vida en la Tierra y que en la actualidad disfrutamos todos. Quizá -solo quizá- este trayecto a la frontera de la atmósfera tenga algún propósito científico -y lo tiene- por mucho que nos obsesione examinarlo desde el cinismo más absoluto. ¿Y alguien puede acusar a Amanda Nguyen, una persona que es astronauta y que no es rica, de intrusismo laboral y de intervenir en la «destrucción» del planeta?
Perry está siendo el blanco fácil desde todos los frentes. De la misma manera que ella se ha puesto el traje espacial azul, el resto del mundo ha decidido ponerse zapatillas para participar en las Olimpiadas del critiqueo. Perry está siendo objeto de mofas por hablar sin tener mucha idea durante una entrevista previa al viaje sobre teoría de cuerdas, Pitágoras y sobre «los cálculos y esas cosas». Pues bien por Katy Perry por hablar de manera honesta sobre un tema que le interesa pero que no entiende y al que habrá dedicado horas mientras se preparaba para abandonar la Tierra unos minutos. Yo lo habría explicado igual de mal o peor, pero yo no tengo los ovarios de meterme en una cápsula espacial.
Es verdad que el discurso mágico de Katy Perry -que arrastra desde hace años, no es de ahora- da pereza. Que cuando vuelves a la Tierra lo primero que se te ocurra decir es que te sientes «más conectada al amor que nunca», no es lo más inspirador. Pero también es cierto que no parecía la única que iba colocada después de haber -literalmente- viajado al espacio. Y solo Diosa sabe qué pasaría por su cabeza horas antes de despegar: ella se llevó consigo una margarita para tener a su hija Daisy presente por si no volvía. Por suerte, regresó junto a sus compañeras, aunque muchos estén deseando que se hubiera quedado ahí. Se me ocurren muchas personas a las que chutar al espacio antes que a Katy Perry, la verdad.
Es criticable para muchos la mera asociación de Katy Perry y sus compañeras con el multimillonario Jeff Bezos. Uno de los argumentos más utilizados -y más falaces- es que, mientras este viaje espacial ha costado millones de dólares, las personas de a pie siguen sin llegar a fin de mes. Otros acusan a Perry exageradamente de participar en la «destrucción del planeta». No voy a defender a Bezos ni su adulación a Trump ni Amazon. Pero sí voy a defender a Katy Perry porque la realidad es que por mucho que su vuelo al espacio haya costado millones de dólares -pagados por una empresa privada- la realidad es que ese dinero nunca iba a solucionar el hambre y las desigualdades en el mundo. El hambre, las desigualdades y el cambio climático seguirán existiendo aunque Jeff Bezos no mande un solo cohete más al espacio en toda su vida. Comentar los cientos de miles de aviones que salen fletados cada día contaminando el mundo, o la cifra de países que han reducido su pobreza en los últimos 10 o 15 años, lo dejamos para otro momento. Ojalá sigamos avanzando en ambas direcciones, en el del avance tecnológico y en el de eliminar el hambre en el mundo.
Ha habido un evidente problema de comunicación promocionando este viaje espacial como un asunto feminista, mientras muchas mujeres de la NASA están siendo despedidas por asuntos varios. Es gracioso que se diga que este ha sido el primer viaje al espacio realizado por un equipo exclusivamente femenino desde 1963, cuando en 1963 el viaje hecho exclusivamente por mujeres lo hizo una sola mujer, la rusa Valentina Tereshkova, hace 62 años. Por supuesto, ya habíamos entendido que el feminismo no pasa solo por que las mujeres igualen el éxito de los hombres en las carrera profesionales que ellos mayormente persiguen. Sin embargo, este viaje sí es un éxito de representación; quizá en el futuro veamos a muchas más mujeres profesionalizadas en la ciencia espacial en parte gracias a este pequeño pero gran momento mediático. Porque esto ha sido este viaje, una comidilla para los telediarios. Pues muy bien.
Me niego a pensar que ver a Katy Perry flotando en gravedad cero no ha sido un gran momento televisivo que recordaremos en el futuro. Si yo estuviera en su posición, me sentiría muy orgulloso. Y, la verdad, mientras en cuestión de semanas o meses se han encadenado en las noticias una tragedia humana tras otra absolutamente horribles -el incendio en una discoteca macedonia, el derrumbe del techo de una discoteca de Santo Domingo, la muerte de dos fotógrafos en un festival mexicano, la muerte de una familia catalana tras estrellarse su helicóptero en el río Hudson de Nueva York, la muerte de tres personas tras estrellarse su avioneta en Florida 24 horas después-, mientras los telediarios nos saturan cada día con imágenes de guerras y muerte, yo me voy a permitir el lujo de celebrar que al menos una cosa ha salido bien.
Me enamoré de Alba Morena cuando la vi de telonera de Kae Tempest, pero la artista aún tiene que entregarnos su segundo disco, varios años después. En esta entrevista justifica todo retraso: no solo está presentando el EP ‘Trámite’ que ha salido esta semana y no es ningún «trámite», tiene una perfecta razón de ser. También nos cuenta que ha estado escribiendo temas para los próximos álbumes de Ana Torroja o Luz Casal. Casi nada. Hablamos en un hotel de Madrid con la artista sobre su pasado, su presente y su futuro.
El futuro más inmediato incluye un teloneo a Camila Cabello en Madrid el próximo 25 de junio como parte de la programación de Alma Festival.
¿Por qué sacas ahora mismo un EP de cinco canciones? ¿Por qué un EP y no finalmente tu segundo disco?
A nivel sónico y en general estaba yo un poco perdida. Me mudé a Madrid, cuando yo venía de estar en Barcelona, haciendo mucha música. Sacamos aquel EP de ‘Yo te quiero pero’, que era música acumulada que tenía. Y de repente empecé a trabajar de productora para mucha gente y no sabía bien por dónde ir. Porque a mí me encanta el reguetón, pero yo no voy a hacer reguetón porque soy como el «anti-flow»: soy como el «Duolingo» del castellano, no tengo flow para hacer reguetón. Pero tampoco quería quedarme en tintes muy antiguos, muy de canción de raíz o folclóricos. En esa búsqueda encontré todo el concepto sónico de este EP; primero queríamos dar esta pincelada. Y luego ya voy a hacer el disco, que está en proceso.
¿Y la idea de este EP cuál es?
La música que escuchaba Alba con 14 años: Radiohead, Nirvana, MGMT, Gorillaz… Volver a la música que me movía cuando era adolescente y a la vez crear un personaje e historias desde ahí.
El personaje es como una femme fatale, un poco agresiva, ¿no? Está un poco loca…
Pero está loca porque la han vuelto loca. Es como reapropiarse de la histérica. Hay un tema que se llama ‘Una salida’, que es como «si te vinculas conmigo, no vas a salir. Estoy loca. Te voy a perseguir. Soy como un laberinto».
¿Qué ha supuesto para ti centrarte en esta música más de cuando eras adolescente?
Una liberación enorme, porque realmente estaba muy perdida y no sabía por dónde tirar, haciendo canciones para tanta gente. Entonces ha sido como un juego, es lo que a mí me resonaba de adolescente, y es por lo que mucha gente también empieza a hacer música, por sus referencias de adolescente.
La primera vez que escuché ‘Nirvana’ pensé en Alizzz, pero nunca has trabajado con él…
Para mí la referencia en ‘Nirvana’, aparte de Nirvana, fue Dillom, más que Alizzz, que me encanta, pero me fijé más en cómo Dillom trata a las bandas y las distorsiona.
La canción de llorar, ‘A la vez’, está en medio del EP y no al final, como suele ser habitual, ¿por qué?
Me obsesiona mucho el concepto interludio. Y de hacer piezas cortas muy intensas, como de viaje, de principio a fin, y ponerlas en medio, y que se las coma la peña (risas).
En esto de hablar de «desgarrarte el cuello», de persona violenta y tal, ¿también te has sentido liberada? ¿Tienes mucha rabia dentro o algo así?
No tanto rabia. Esa canción, ‘Otro chico +’, es un poco el storytelling de «Enemys to lovers» que dicen en las novelas o en las películas. Gente que se odia, pero luego que se ama mucho. Y fue más una liberación sexual, en el sentido de que yo nunca hablo de sexo en mis canciones. Y si lo hiciese sería de esta manera un poco más sutil o poética. Me gustaba el concepto de «me pones tanto que ya no solo quiero besarte, sino que te quiero arrancar el cuello». Un poco ya casi entre zombis, vampiros, ese mundo un poco más onírico…
Y la canción del final vuelve a ser rockera tipo Strokes y dices: «No tengo amigos que digan lo mala persona que eres».
Strokes también increíbles, pero en esta canción yo tenía de referencia a Radiohead. Quería sonar como Radiohead en el principio de ‘Jigsaw Falling Into Place’. Pensaba en el interludio de chillidos y de noise, es como que me imagino a todos ahí, a Johnny Greenwood (risas)… Nunca había creado una canción a partir de un riff de bajo y era ese experimento.
Tras mudarte de Barcelona a Madrid, ¿tienes una presión de Sonido Muchacho o Universal por hacer un disco?
No, no, no. Yo la verdad es que he sido muy feliz y estoy viviendo mi sueño desde hace mucho tiempo gracias a todo este equipo. A mí lo que me generó más conflicto es que nunca había conocido la industria tan de cerca. Yo siempre he estado en Barcelona sola produciendo, y de repente empiezas a trabajar para tantos artistas… De repente, toda esa creatividad que yo daba no la tenía para mí. No todas las sesiones vienen de discográficas, hay gente que me ha escrito por Instagram. Yo he aceptado todo porque también quería empaparme de todo y para mí ha sido un mundo nuevo. De repente me «despersonifiqué» un poco, me puse como en tintes más «superficiales». Y para mí hacer música es conectar muchísimo, bajar a tierra y estar muy conectado. He tardado mi añito en adaptarme a Madrid, la verdad.
«Ana Torroja ha venido a mi casa a componer: para mí fue uno de los «peaks» de mi vida. También he trabajado con Luz Casal»
¿Qué colaboración te parece más chula de las que has hecho con la gente?
Pues ahora estoy haciendo una EP para Marina Carmona, otra productora que me encanta. Lo que me encanta de producir a otra gente es que no me cierro a nada. De repente he hecho desde flamenco a movidas experimentales rollo Arca, a puro pop. Por eso también es algo que no he querido dejar de hacer ni quiero dejar de hacer, porque a mí me llena un montón. Pero luego también he compuesto para Ana Torroja, que eso para mí fue uno de los «peaks» de mi vida. Vino a mi casa Ana Torroja, a componer. Y también he estado trabajando con Luz Casal.
¿Esas cosas han salido ya?
No, Ana Torroja sale ahora en su próximo disco.
¿Y lo de Luz?
En principio para su próximo disco también, que sale en otoño.
Yo te he visto en directo y me parecía muy guay el concierto. ¿Te gusta más liderar tu proyecto o hacer este pedazo de colaboraciones que en realidad son tan top?
Me gusta todo. Me encanta el escenario, y ahora he montado un directo con amigos de toda la vida. Esto de volver a la adolescencia también ha sido coger músicos con los que he estudiado. Hemos vuelto al formato banda, pero con sus movidas electrónicas: Radiohead, ese concepto. Si tuviera que escoger, yo creo que me quedaría en crear para mí, pero es que no tengo que escoger. Creo que yo toda la vida voy a escribir para mucha gente: es muy liberador. Y ahora también me he empezado a meter un poco en el mundo bandas sonoras y eso me flipa.
«Escribir para otros es una liberación. La gente que solo es artista en solitario tiene una presión brutal: yo no podría»
Hace poco entrevistamos a Vega, que vino a un podcast nuestro, y nos contó que ella hace sus discos, que le encanta, por supuesto, tiene unos fans súper fieles, pero de lo que vive es de haber escrito canciones para David Bisbal…
Totalmente. Total: Benny Blanco. Ese concepto (risas) Es que me encantaría ser él de repente, haber hecho Maroon 5 (risas). Él vive de eso y luego te hace lo que él quiera. Yo creo que eso es una liberación también, el poder no estar siempre en ti, en ti, en ti… y poder crear para otros, meterte en el mundo de otros, de esos poder sacar dinero para vivir o lo que sea, y poder hacer tu proyecto como tú quieras, a tu ritmo… Yo siento que a veces, la gente que solo es artista y solo tiene eso, tiene una presión brutal. Como no gustes, como no consigas recuperarlo… No, no, no. Yo no podría.
Te veo súper tranquila y súper bien, y lo entiendo todo, pero en JENESAISPOP llevamos esperando tu segundo disco mucho tiempo. Yo soy súper conservador para eso, en plan «quiero el disco».
Sí, yo también. De hecho, ‘Trámite’ también lo llamé así porque es mi EP «Trámite» para poder hacer mi disco (risas)
¿Tienes el disco ideado?
En mayo ya entrego cosas. De hecho, va a ir bastante seguido. En principio, lo que queremos es sacar ya singles a partir de otoño y el disco a principios del año que viene.
Tampoco me hagas caso, ahora no hace falta sacar un disco…
Lo entiendo, a veces veo que artistas dicen que han estado tres años haciendo un disco. Yo no podría. Seguro que lo haré alguna vez, pero a mí me funciona mucho el decir «en mayo entrego 10 canciones». Yo trabajo así, bajo presión.
En El Sol presentaste una canción medio rapera sobre tus padres. ¿Estará en el disco? No sé si me gustó, es un poco «la amas» o «la odias»…
Puede ser, puede ser. ‘Mami papi’. Es que es rarísima. Tengo que decir que el disco no está yendo tanto a lo electrónico… Vuelven los 60 un poco.
Le vas a dar a todo literal.
Creo que va a ser un poco la línea de LP, a nivel de producción y demás, pero a nivel compositivo estoy tirando a canciones armónicamente Beatles. Luego a nivel producción, no. Ha sido como un dilema recuperar canciones del pasado o no, porque estoy en otro punto muy diferente. Pero ahí estamos, no sabemos…
Te vi teloneando a Kae Tempest y no sé si de ahí te vino lo de hacer un pequeño rap.
Creo que estoy creciendo y ahora puedo dar algo mucho más maduro y más claro y ya no bajarme de ahí y estar ahí bastante conscientemente. No sé si volveré a rapear…
¿Puede ser que en aquel concierto llevaras una camiseta de Lady Gaga?
Sí.
«Tengo un teloneo a Camila Cabello en Alma Festival y estoy cagadísima»
¿Y eso?
Pues no lo sé, la verdad, no me acuerdo. Pero yo adoro a Lady Gaga. Las divas pop me encantan, pero yo no soy diva pop, creo, para nada. Me da como vergüenza. Justo ahora tengo un teloneo a Camila Cabello en Alma Festival…
¿Y cómo lo ves?
Yo, cagadísima… Yo como que me veo la antidiva pop. ¿Tate McRae? Yo no sé bailar, yo no sé hacer nada. Sé cantar y ya está.
Tienes buena voz…
Claro, yo sé cantar y me vuelvo loca y ya está.
Puedes ser una diva pop de las que mueven así el bracito y ya está, como Mariah Carey. O Kylie.
O rollo Miley Cyrus ahora que está como más rockera y no se mueve mucho… Pero bueno.
Te propuse una vez para Benidorm Fest. ¿Te llamaron?
No, creo que no. Pero me suena que cuando fue mi amiga DeTeresa, como que me dijo: «Alba, que tú podrías haberte venido», como que les interesaba en cierta manera, creo. Pero no sé si hacerlo, la verdad, no lo sé.
Preséntate, yo te animo. A mí me encanta el formato y yo sé que tú cantas muy bien. Eso en Eurovisión cuenta mucho.
Sí, yo lo pensaba. Me lo dicen siempre mis padres, que siempre lo ven y votamos en casa y tal: «Alba, una canción Salvador Sobral muy bonita, y ya está». Si tengo alguna canción así buena, me lo voy a pensar, la verdad.
Te quería preguntar finalmente por la canción ‘A mi hermano’, que a mí me flipa esa canción y me parece que ha pasado desapercibida. Yo miro tus streams a veces y como que no entiendo nada… ¿Cuál es la historia de esta canción?
Pero envejecerá muy bien, ya verás. Pienso que mi música envejecerá guay. ‘A mi hermano’ sí es de mis canciones favoritas. La escribí el cumpleaños de mi hermano Rubén, que murió hace años, cuando yo tenía 17 y él tenía 26. Hace 7 años. Y fue cuando estaba yo a dos semanas de mudarme a Madrid. Estaba recogiendo mi casa, que vivía en una casa sola en Barcelona, muy pequeñita, en el Born, una casa que me la pasó un músico, el típico chollo que se pasa entre gente así pequeñito. Estaba recogiendo todo, era su cumpleaños, estaba muy triste y la hice como en una hora. Hice esta canción a mi hermano como regalo, para homenajearle.
Parte de la redacción evalúa ‘Year of the Snake’, el primer adelanto del nuevo álbum de Arcade Fire, ‘Pink Elephant‘:
«Con la misma rotundidad que afirmo que los cuatro primeros discos de Arcade Fire son cuatro obras maestras, afirmo que el bajón de calidad en los dos siguientes es considerable. ‘Everything Now‘ (2017) contiene algunas de sus mejores canciones, pero se ve lastrado por contener también algunas de las peores, y ‘WE‘ (2022) era más “regular” en ese sentido, pero no lograba alcanzar la excelencia de antaño… incluso, en lo que hasta ese momento la banda era infalible: lanzar tremendos lead singles.
En ese sentido, aunque mire al séptimo disco con cautela en cuanto a expectativas, ‘Year of the Snake’ es una muy buena señal: vuelve a ser un temazo. El punto épico que tan bien se les da no termina de llegar (hay edging al respecto, que diría Mike White), pero diría que parece intencionado teniendo en cuenta esa búsqueda de la calma que vemos entre la letra de la canción y, a tenor de lo que han revelado en notas de prensa, el contenido de este nuevo disco.
Win y Régine producen junto a Daniel Lanois (con quien trabajaron en ‘We Don’t Deserve Love’, una de las muy-buenas de ‘Everything Now’), y se estrenan en instrumentos (él en batería, ella en bajo) entregando otro de esos himnos generacionales marca de la casa, éste bastante más tranquilito pero igualmente efectivo: “It’s the season of change / and if you feel strange / it’s probably good”. Pablo Tocino
«El disco de Arcade Fire se titula ‘Pink Elephant’, una imagen que en el mundo anglo se asocia a las visiones alucinógenas. Es famosa la escena de los elefantes rosas de ‘Dumbo’, por ejemplo. Sin embargo, el primer adelanto, ‘Year of the Snake’, no es tan alucinógeno o surrealista, sino que promete un colocón que nunca llega a través de un loop de teclado más típico imposible. Hay más ideas psicodélicas en muchosdiscosafricanos completamente desconocidos que aquí.
‘Year of the Snake’ es una de las composiciones pretendidamente maduras de Arcade Fire. Sobre todo, desarrolla una épica de bajos vuelos, alimentando muy poco a poco el crescendo de ‘Year of the Snake’ con efectos -o efectismos- varios que no impresionan. Aunque la serpiente se vista de seda, serpiente se queda. Y a la serpiente le falta veneno.
La ironía de todo esto es que ‘Year of the Snake’ versa sobre el cambio y la transformación vital. La canción pretende ofrecer un mensaje inspirador, animando al oyente a hacer con su vida «lo que quiera, y no lo que deba». Sin embargo, frases como «si sientes algo raro, eso es bueno» suenan más tópicas que lúcidas y la producción es excesiva para tan poca canción. Durante cinco largos minutos, Arcade Fire estiran más el chicle que Dalí las patas de sus elefantes». Jordi Bardají
Hablando de artistas que merecen una actuación en La Revuelta, ha salido al fin el disco de SVSTO, el proyecto en solitario de una de Las Bistecs, Carla Parmenter. La crítica social que se detectaba en ciertas canciones del dúo -no sólo en su mayor hit, ‘Señoras bien’- pasa a primer plano en este disco que se titula ‘CRISIS’, porque nos habla de las «crisis económicas, sociales y existenciales en la Europa del siglo XXI».
El pelotazo urbanístico es el tema principal del single ‘Mil €’ y también de otras canciones como ‘Cemento’, es decir, si Biznaga fueron al programa de Broncano a alzar su voz sobre todo esto desde un prisma rock, también podrá hacerlo SVSTO desde un prisma electropop.
Recuerda SVSTO incluso más que las producciones de Las Bistecs a aquel electroclash del cambio de siglo que se regodeaba en el absurdo del mundo. Inspirada por el techno alemán, y acompañada del productor Alejandro Da Rocha, SVSTO cuestiona la deriva de Europa y sus contradicciones. Su mejor idea es usar los sonidos industriales para retratar las contradicciones de un mundo post-industrial. De hecho, hay un tema llamado ‘Industry’ que habla sobre «trabajar sin cobrar, hasta sangrar».
En ‘Cemento’, una colaboración con Erik Harley, la única del álbum, usan el sonido de una taladradora para hablar de la insostenible situación de la vivienda en Occidente. «Soy socialista y empresaria» dice la letra. Por su parte, ‘Mil €’, a todas luces la mejor canción de SVSTO, observa un terreno y concluye primero: «Antes todo esto era campo / Ahora es propiedad de los bancos». Y después: «Si vas a votar a la derecha, vaya hija de puta estás hecha».
Además de tan concreto cometido político, SVSTO se presenta en este trabajo como una «villana feminista», que podría pasar por «un personaje de Virginie Despentes en medio de una rave berlinesa». ‘Alfa’ la introduce entre referencias a Madonna, Juana de Arco y Grace Jones. «Somos arpías y somos santas (…) si me las tocas, me pongo violenta», desafía defendiendo a las mujeres. «En la pista soy terrorista» es el estribillo de ‘En la pista‘. Por su parte, ‘Venganzza’ nos habla de una «Kill Bill catalana» dispuesta a vengar ataques a mujeres y público LGTBIQ+. «Mi tacón hundido en tu frente es mi firma de delincuente, y que vaya pasando el siguiente», dedica a un «machirulo».
SVSTO integra castellano, inglés y catalán con naturalidad y desparpajo, logrando que ‘AP7’ sea una de las mejores canciones, definitivamente emparentándola con los tiempos de Miss Kittin o los de Ana Matronic. Luego coquetea con el folclore patrio en la melodía de ‘Pantalla’. Le ha faltado algún single más, pues el desenlace del álbum va sabiendo cada vez más a «filler» -‘La noche’ y ese «finale» recitado-, aunque ojo con los «growers»: ‘Technocastanyera’ es tanto una reivindicación del polígono como otro viaje a Berlín, que resume muy bien este disco. Una muy deseada continuación de lo que nos dieron Las Bistecs, bastante satisfactoria.
SVSTO actúa el 25 de abril en Barcelona (Sala Apolo) y el 26 de abril en Madrid (Ochoymedio, Sala Changó).
Thom Yorke y Mark Pritchard publican su disco conjunto, ‘Tall Tales’, el próximo 9 de mayo. ‘Tall Tales’ se ha presentado con los singles ‘Back in the Game’, ‘This Conversation is Missing Your Voice’ y, el pasado 9 de abril, ‘Gangsters’.
El lanzamiento de ‘Tall Tales’ se acompañará de una película dirigida por Jonathan Zawada que se estrenará en cines de todo el mundo. En España, la proyección podrá verse en exclusiva en el cine Phenomena Experience de Barcelona el mismo día 9 de mayo a partir de las 20 horas, gracias a la colaboración de Primavera Sound y MIRA Festival. Toda la info, aquí.
«Los asistentes a este evento único en Barcelona», explica la información oficial, «serán los primeros en sumergirse en esta fábula moderna ideada por este triunvirato creativo, un universo onírico donde los cálidos ecos de los sintetizadores de los 70 y los paisajes sonoros envolventes se funden con imágenes que transitan entre un futuro inquietante y una atemporalidad mágica. La narrativa cinematográfica de Tall Tales promete adentrarse en territorios inexplorados, desafiando las convenciones y expandiendo los límites de la experiencia audiovisual como tal».
‘Gangsters’ continúa la promesa de la influencia del kraut en ‘Tall Tales’ y la cruza con otra referencia citada en la nota de prensa, la de Joe Meek, a cuyo visionario ‘I Hear a New World’ de 1960 recuerda ‘Gangsters’ en elementos como la producción vocal y las atmósferas.
‘Tall Tales’ será otra reflexión de Thom Yorke sobre el mundo moderno acompañada de la producción futurista de Mark Pritchard. Recorriendo otros sonidos como el prog, el synth-pop o la Library music, Yorke y Pritchard examinarán la el impacto tecnología en la existencia humana. «Tall Tales se presenta como un cuento de hadas para la era contemporánea, una declaración artística que invita a la reflexión sobre el progreso y a redescubrir el poder trascendente del arte. La obra plantea una reflexión sobre la tecnología y su impacto en nuestra existencia, donde los ordenadores, inicialmente concebidos para la contabilidad, hoy intentan pintar nuestras imágenes y cantar nuestras canciones, gracias a la llegada de la inteligencia artificial. Una fábula tecnológica que, al igual que los mejores cuentos, equilibra la luz y la oscuridad, con los coros reverberantes de Thom Yorke entrelazándose con la brillante electrónica de Mark Pritchard y el imaginario especialmente creado por Jonathan Zawada».
Doja Cat sigue compartiendo el proceso de creación de su próximo álbum. El último movimiento de Doja Cat ha sido mostrar en redes un adelanto de un nuevo tema llamado ‘Jealous Type’ que suena al new jack swing que popularizó Janet Jackson en los 80. El pasado mes de marzo, Doja reveló el sonido de otros dos temas llamados ‘Acts of Service’ y ‘Lipstain’.
El próximo disco de Doja Cat lleva el título provisional de ‘Vie’, «vida» en francés, informa Billboard, y parece que su influencia francesa va más allá de su título. En las primeras imágenes promocionales de ‘Vie’, Doja posa con un vestuario y peinado parecidos al de Grace Jones, quien versionó ‘La vie en rose’ de Édith Piaf hace muchos años. La estética es elegante y sexy a partes iguales.
Sin embargo, las referencias musicales de ‘Vie’ pueden ir por otro lado. En su última publicación de Instagram, Doja sube la imagen de unos tacones rojos asomando por la ventana del coche, y acompaña la publicación con el sonido de ‘Saturday Love‘, el éxito de Cherrelle y Alexander O’Neal de 1985. O’Neal y Jackson tienen en común haber trabajado con los productores Jimmy Jam y Terry Lewis. Parece que la nueva música de Doja Cat tirará por una onda funk.
Los 80 parecen guiar la dirección de esta nueva era. En una publicación de Instagram anterior, Doja Cat posa con un estilismo que recuerda al de la cantante Vanity, y de fondo suena la canción principal de la película ‘Doble cuerpo’ (1984) compuesta por Pino Donaggio. En otro post, la canción elegida es la BSO principal de ‘El coche fantástico’ (1982). ¿Estará Doja Cat sampleando algo de esto, como sampleó ‘Walk on By‘ de Dionne Warwick en su macrohit ‘Paint the Town Red’?
‘Vie’ promete un regreso de Doja Cat al pop, en este caso al black pop de Janet Jackson, Alexander O’Neal, Grace Jones y Vanity 6. Sin duda, Doja tiene talento de sobra para hacer justicia a todas estas estrellas de la música estadounidense.
El tracklist provisional de ‘Vie’ compartido por Doja Cat -y que ha sufrido cambios respecto al listado revelado hace meses- y recogido por Billboard incluye ‘Turn the Lights On’, ‘Slide’, ‘One More Time’, ‘Make It Up’, ‘Kink’, ‘I Like You’, ‘Happy’, ‘Gorgeous’, ‘Couples Therapy’, ‘Come Back’, ‘Cards’, ‘Amen’ y ‘All Mine’, además de los mencionados ‘Acts of Service’ y ‘Lipstain’.
‘Vie’ ha de suceder a ‘Scarlet‘ (2023) dos años después de la publicación de este último trabajo de Doja Cat centrado en el rap. La reedición ‘Scarlet 2 CLAUDE’ vio la luz hace un año. La última novedad de Doja ha sido ‘Just Us‘, un tema con Jack Harlow.
Lil Nas X ha preocupado a sus seguidores después de publicar un vídeo de él en la cama de un hospital. El rapero ha sido hospitalizado después de sufrir un episodio de parálisis facial en el lado derecho de su cara. Incrédulo, pregunta «What the fuck?!»
«Este soy yo sonriendo totalmente. ¿Qué cojones?», denuncia Lil Nas X en un vídeo subido a su muro de Instagram, en el que muestra que el lado izquierdo de su cara se mueve, pero no el derecho. Lil Nas confirma que ha «perdido el control del lado derecho de mi cara».
Lil Nas X ha calmado a sus fans en una serie de publicaciones en Instagram, reafirmando que se encuentra bien y que se está tomando la situación con humor. Montero ha pedido a sus fans que, en lugar de estar tristes por él, «meneen el culo» mientras él no pueda. Y ha señalado «Puede que mi cara se vea rara por un breve tiempo, pero eso es todo».
Montero no es el único pop star que ha sufrido una parálisis facial en los últimos años. Su colega de profesión, Justin Bieber, padece el síndrome de Ramsey Hunt.
Lil Nas X se encuentra en plena promoción de su próximo mixtape, ‘Dreamboy’, del cual ha lanzado hasta ocho singles, el último de ellos, ‘Lean On My Body’. El mejor, ‘Hotbox‘.
Sonorama Ribera comunica el cierre de su cartel de 2025, que se celebra los días 6, 7, 8, 9 y 10 de agosto en Aranda de Duero. Carolina Durante, Judeline, La La Love You, Alizzz, Cala Vento, Hens o Walls se encuentran entre los artistas confirmados.
A Sonorama se suman también Carlos Sadness, Nil Moliner, Green Valley, Fernandocosta, Queralt Lahoz, Cupido, Dorian, Enol, Javiera Mena, Mr. Kilombo o Arizona Baby. Además, destaca el regreso a los escenarios de Fermín Muguruza.
Franz Ferdinand, Duncan Dhu o Amaia se encuentran entre los nombres anunciados por Sonorama Ribera a lo largo de las últimas semanas y meses, entre los cuales también figuran Zahara, Delaporte, Natalia Lacunza, Ginebras, Don Patricio, Chambao, Carlos Ares, La Zowi o Barry B. Más de 100 artistas construyen el programa de Sonorama Ribera 2025.
Como es habitual, Sonorama Ribera desplegará una programación matinal que tendrá lugar en la Plaza del Trigo, mientras que el recinto principal acogerá las actuaciones nocturnas. El 10 de agosto, el festival cerrará con una jornada gratuita con actividades repartidas por el pueblo.
Tanto los bonos generales (90€ + GG) y VIP (170€ + GG) ya están disponibles en este enlace. Este año el festival dispondrá de glamping y zona de acampada. Estando la zona de acampada en el Parque del General Gutiérrez, con mejoras en su espacio y un precio de 20€ + GG para todos los días del evento.
Aminé, el rapero estadounidense conocido por su hit de 2017 ‘Caroline’ y por su chulo Tiny Desk, ha anunciado que su nuevo disco sale a la venta el 16 de mayo bajo el título de ’13 Months of Sunshine’. El primer adelanto ha sido el colorido ‘Familiar’ y el segundo se puede escuchar desde este viernes.
En ‘Arc de Triomphe’, Aminé fanfarronea de talento, éxito y atractivo sampleando ‘Has it Come to This?’, el éxito de The Streets de 2002. La base de ambos temas es prácticamente la misma, pero la voz de Aminé sustituye a la de Mike Skinner.
‘Arc de Triomphe’ es la sobrada habitual de Aminé, que no desaprovecha la oportunidad de rapear sobre un vibrante beat de 2step británico. En algunas frases destacadas de la letra, Aminé declara que «Jesucristo llevaba rastas» (porque él las lleva), dice bailar la «Macarena» en «mocasines» o asegura que «no es un nepo baby».
’13 Months of Sunshine’ será el primer disco en solitario de Aminé en cuatro años, sucediendo a ‘TwoPointFive’ (2021). En 2023, Aminé publicó ‘Kaytraminé’, un disco colaborativo con KAYTRANADA.
En cuanto a The Streets, acaba de lanzar el single ‘You Think You’ve Been Buried’ y la colaboración ‘Hooligan’ con Jaykae.
La lista de Singles España no presenta novedades en su top 3 y sigue liderada por ‘La Plena‘ de W Sound, Beéle y Ovy on the Drums en el 1, seguida por ‘Flipa’ de JC Reyes en el 2 y ‘Still Luvin’ de Delaossa, Quevedo y Bigla the Kid en el 3.
Aunque Leiva lleva su disco ‘Gigante‘ al número 1 de la lista de álbumes, la de singles la toma completamente el reguetonero estadounidense Eladio Carrión, que coloca 11 de los 22 cortes de su álbum ‘DON KBRON’ en la tabla. La mayor entrada es para ‘Romeo y Julieta’ en el número 5. Su artista invitado, Quevedo, suma gracias a ‘Romeo y Julieta’ un nuevo single top 5 en España.
Además, ‘Vetements’ con Myke Towers entra en el 12, ‘El reggaeton del disco’ con Cris MJ en el 20, ‘H.I.M.’ en el 27, ‘Me muero’ con Lia Kali en el 51, ‘100 conmigo’ en el 56, ‘Ohtani’ en el 61, ‘Invencible’ en el 66, ‘Broly’ con Neutro Shorty en el 67, ‘Tiffany’ con Peso Pluma en el 77 y ‘Piedras en la ventana’ en el 90. ‘DON KBRON’ es top 3 en su correspondiente lista.
Leiva también disemina un puñado de temas de ‘Gigante’ en la tabla de singles. El mejor debut es para ‘El polvo de los días raros’, que abre en el puesto 46 tras su presentación en La Revuelta. Además, ‘Bajo presión’ entra en el 81, ‘Cuarenta mil’ en el 84 y ‘Gigante’ en el 91. De estos temas, el único que no había sido single es ‘Cuarenta Mil’. ‘Caída libre’ con Robe se mantiene en el 34 tras haber llegado al top 10, un raro logro para ser un tema de rock.
La lista deja un par de entradas más, la de ‘Nubes’ de De La Rose y Omar Courtz en el 17 y ‘Sexo Seguro’ de Franco «El Gorilla» y Yandel en el 59. ‘Sexo Seguro’ es una canción originalmente publicada en 2009 que estos días se ha vuelto viral.
Katy Perry ha vuelto a la Tierra tras haber pasado 10 minutos en el espacio, que han sido retransmitidos, en directo, para el mundo a este lado. Perry ha revelado el setlist de la gira de 143 flotando en el espacio, enseñando una hoja de papel con forma de mariposa. Puedes ver el setlist en el hilo de Katy Perry en nuestros foros.
Como informa Billboard, su vuelo «Blue Origin», compuesto solo por mujeres, iba a saltar al espacio hoy lunes 14 de abril a las 9.30am ET, esto es, a las 15.30 hora peninsular española. Se contemplaba que podía retrasarse dependiendo de las condiciones climatológicas, pero finalmente ha sido puntual.
El viaje espacial ha durado unos 11 minutos, llegando a volar 100 kilómetros sobre la Tierra. En Estados Unidos ha sido un acontecimiento que televisado desde la CBS y también desde Paramount+. Katy Perry ha compartido un vídeo en el que aparece conmovida por la coincidencia de que la nave tenga el contorno de una «pluma» y además se llame «Tortoise», pues su madre la llama «Feather» y «Tortoise».
La superestrella hace así realidad (más o menos) el videoclip de ‘E.T.’ con la ayuda del magnate Jeff Bezos. Por suerte, o por desgracia, Kanye West no forma parte del viaje.
La cantante ha ido acompañada de Lauren Sánchez, prometida de Bezos, y Gayle King, presentadora de televisión. Este es el undécimo viaje de la compañía de Bezos. La tripulación es completada por Amanda Nguyen, activista por los derechos civiles; Kerianne Flynn, productora de cine; y Aisha Bowe, exingeniera aeroespacial de la NASA.
El Lifetimes Tour comienza el próximo 23 de abril en México y termina en noviembre, pasando por España.
Katy Perry shares new video ahead of her voyage into space tomorrow.
She reveals that the capsule on which she’s traveling has an outline of a feather, and is named Tortoise — two nicknames her mom calls her. pic.twitter.com/5QVKSwugbp